Raipur, India, poco después del término de la 2da. Guerra Mundial. El Comandante Ricardo Strong y los Tenientes Alfonso Babley y Gonzalo Crupp estaban de juerga en la ciudad y son atraídos por los bailes cadenciosos de Marama, una bailarina hija de un Encantador de Serpientes que se gana su existencia en el lugar. Los tres oficiale, ante la negativa de la muchacha de hacerles una función particular, deciden raptarla y posteriormente, en un momento de furia, asesinarla de un tiro. Herida de muerte, la joven fallece en los brazos de su progenitor. Después de juramentarse no hablar jamás de ello, los tres asesinos deciden olvidar el incidente, sin imaginarse que una venganza de ultratumba se cernirá sobre sus cabezas. El padre de Marama comienza un rito que desatará un poder sobrenatural, con la apariencia de una bestia sangrienta, que buscará hacer justicia ante el cobarde asesinato. El Monje Loco, como es su costumbre, nos relata el hecho tomando distancia de la situación pero resolviéndola con su habitual habilidad.