LOS ANIMALES EN PELIGRO DE EXTINCION

De las 8.300 razas de animales conocidas, el 8% están extintas y el 22% está en peligro de extinción. Estas cifras de las Naciones Unidas sitúan al planeta al borde de lo que algunos científicos han denominado como la sexta gran extinción. El impacto de la acción del ser humano en los ecosistemas está provocando que numerosas especies desaparezcan, lo que genera un daño irreversible tanto en la biodiversidad como en el medioambiente.

Quizá muchos no podían imaginar que su generación estaría siendo testigo del inicio de la desaparición definitiva de algunas especies animales y vegetales de la Tierra, hasta el punto de formar parte de la que apunta ser la extinción número 6 que se produzca en nuestro planeta. Según un estudio realizado por científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT por sus siglas en inglés), basado en las emisiones de carbono actuales, la próxima gran extinción podría producirse dentro de 80 años, por lo que se situaría alrededor del año 2100. ¿De qué depende? Del momento en el que el océano haya absorbido 310.000 millones de toneladas de carbono.

En la actualidad, el cambio climático es la causa directa de la desaparición de la biodiversidad (que desde 1.970 ha registrado una disminución del 68%), a lo que se une los cambios en el uso de la tierra y el mar; la explotación directa de organismos; la contaminación y las especies exóticas invasoras, como recoge el último informe de la Plataforma Intergubernamental de Ciencia y Política sobre Biodiversidad y Servicios de los Ecosistemas (IPBES).

La preservación de la biodiversidad emerge con fuerza y será clave en el debate sobre sostenibilidad, según el informe ‘La sostenibilidad a través de la lente del Big Data’ de BBVA Research.

Así se produjeron las primeras extinciones

Aunque cuando se habla de las extinciones del planeta hay que remontarse a millones de años, los datos ponen de manifiesto que los periodos entre unas y otras son cada vez más cortos y que la desaparición de especies avanza a un ritmo incesante. El Presidente de IPBES, Robert Watson, afirma que “la salud de los ecosistemas de los que dependemos nosotros y todas las demás especies se está deteriorando más rápidamente que nunca”.

La primera gran extinción, también conocida como del ‘Ordovícico-Silúrico’, ocurrió hace 443 millones de años y duró entre 500.000 y un millón de años, Durante ese periodo, el 86% de las especies que existían en aquel momento desaparecieron. Principalmente se trataba de especies marinas, y el motivo de la extinción provino del período glacial o la disminución de la cantidad de oxígeno disponible para la supervivencia de las especies.

Hace 367 millones de años se produjo la segunda gran extinción o del ‘Devónico-Carbonífero’. Perduró durante tres millones de años, tiempo en el que desaparecieron el 82%. La proliferación de algas a partir de la aparición de plantas terrestres que al remover la tierra liberaron nutrientes en el océano, está entre las causas de esta extinción. Las algas, al absorber el oxígeno del agua, provocaron la desaparición de gran parte de la vida animal.

Para hablar de la tercera gran extinción hay que remontarse 251 millones de años atrás. También conocida como la extinción del ‘Pérmico-Triásico», tuvo una duración de un millón de años y se saldó con la desaparición del 96% de las especies. ¿La causa? La actividad volcánica, la misma que, según apuntan los científicos, pudo contribuir a la desaparición del 76% de las especies del ‘Triásico-Jurásico’, la cuarta gran extinción. Un hecho que tuvo lugar hace 210 millones de años y que duró un millón de años.

La quinta gran extinción ocurrió hace 65 millones de años y con ella desaparecieron los dinosaurios y otros muchos organismos. Conocida también como la extinción masiva del ‘Cretácico-Paleógeno’, supuso la desaparición del 76% de las especies. El impacto de un gran asteroide que en la Península de Yucatán (México) puso fin a la era de los dinosaurios.

Animales en peligro de extinción

El Informe de Evaluación Global sobre Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos de 2019 de IPBES apunta que más de un millón de especies animales y plantas estarán en peligro de extinción durante las próximas décadas. En la actualidad, la ‘Lista Roja de Especies Amenazadas’ de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, indicador crítico de la salud de la biodiversidad mundial que se compone de la evaluación de numerosos grupos de especies, incluidos mamíferos, anfibios, aves, corales formadores de arrecifes y coníferas, recoge que de las casi 130.000 especies, más de 35.500 especies están en peligro de extinción. De esta cifra, el 40% son anfibios, el 34% coníferas, el 33% de los corales formadores de arrecifes, el 26% mamíferos y el 14% aves. Del total de las especies evaluadas e incorporadas a esta lista, 78.126 pertenecen al reino animal. En la actualidad, 5.278 animales están en peligro de extinción y 3.395 en peligro crítico.

La acción del ser humano está detrás de la posible extinción de estos animales motivada por la caza ilegal de animales como el tigre, el elefante o el rinoceronte, la captura de las tortugas, y la destrucción de hábitats donde residen especies como los chimpancés, los osos polares o los pandas por las consecuencias del cambio climático. Desde 1980, las emisiones de gases de efecto invernadero se han duplicado, elevando las temperaturas globales promedio en al menos 0,7 grados Celsius, lo que provoca que el cambio climático afecte a la naturaleza no solo a nivel de los ecosistemas, sino también en la parte de la genética de las especies. Para la Conferencia de las Partes del Convenio de Diversidad Biológica, que en 2021 deberá establecer las nuevas directrices para las próximas décadas, algunos expertos han sugerido fijar un objetivo de menos de 20 especies extinguidas al año.

A pesar de esto, el esfuerzo de conservación también se centra, paradójicamente, en reducir algunas especies invasoras por la amenaza que suponen para algunos ecosistemas.

Objetivo 15 de las Naciones Unidas: detener la pérdida de la biodiversidad

Entre los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) impulsados desde las Naciones Unidas está el vinculado a la vida de ecosistemas terrestres, cuyo fin es gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y para la pérdida de biodiversidad, y con el que BBVA también se ha comprometido con la puesta en marcha de acciones para la protección de los bosques.

¿Qué otras acciones se pueden hacer para mantener la vida de los ecosistemas? Son muchos los pequeños gestos con los que se pueden alcanzar grandes logros. El reciclaje, el consumo de productos locales y sostenibles evitando el desperdicio de comida, o la limitación del uso de energía mediante sistemas eficientes de calefacción y refrigeración, son algunas de las recomendaciones.

El ser respetuoso con la fauna y flora silvestres y participar solamente en actividades de ecoturismo que se organicen con ética y responsabilidad para no perturbar la vida silvestre es también esencial. Para ello es clave la buena gestión de las zonas protegidas, ya que contribuyen a tener ecosistemas saludables, y a su vez en la salud de las personas.

ANIMALES DE PELIGRO DE EXTINCION EN MEXICO
https://www.biologicaldiversity.org/programs/international/mexico/pdfs/Espanol-10-En-Peligro-Mexico.pdf

ANIMALES EN PELIGRO DE EXTINCION
https://www.nationalgeographic.com.es/naturaleza/grandes-reportajes/animales-peligro-extincion_12536/7#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6#slide-6

ZAVALA GARCIA ALEXIS URIEL