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Situado
en el número 40 de la calle de la Magdalena junto a la Plaza de Antón Martín, y
entre las calles Torrecilla del Leal y Ave María. Ocupaba el solar de un antiguo
juego de pelota, que se había construido en el año 1840. En 1842 el local se
destinó a Salón de baile y en 1843, gracias al rico hacendado de Alcalá de
Henares, D. José Arpa, se inauguró como teatro, aunque de pequeñas proporciones,
gracias
Fue
arrendado por la Sociedad Artística, y su dirección artística fue asumida por
el compositor Rafael Hernando. El día
6 de Julio de 1849, fue estrenada en su escenario la obra de Luis de Olona y música
del propio Rafael Hernando, “El Duende”.
En
1850, y siguiendo el proyecto del arquitecto Miguel García, fue transformado y
reconstruido, siendo dedicado principalmente a al la representación de
zarzuelas. A este teatro se trasladaron
los actores de El Recreo, que necesitaban uno de mayor tamaño, para sus
representaciones de teatro por horas.
Durante
esta época se estrenaron diversas zarzuelas, destacando por encima de las demás,
las de Francisco Asenso Barbieri “Gloria y Peluca”, con letra de José de la Villa, estrenada el
9 de Marzo de 1850 y sobre todo, “Los
Diamantes de la Corona”, con letra de Francisco Camprodón, estrenada
el 15 de Octubre de 1854.
A
finales de la década de los años 1860, y ante la grave crisis que afectaba al
teatro lírico, a los empresarios del teatro se les ocurrió, que para acabar
con la escasa asistencia de publico a los espectáculos, que en lugar de ofrecer
espectáculos de larga duración, hasta de cuatros horas, como entonces era
habitual, las representaciones reducirían su extensión a la cuarta parte, con
lo que el precio seria también más económico. Y en lugar de representar
zarzuelas de dos o tres actos, se comenzaron a representar cada día, cuatro
zarzuelas cortas, de poco menos de una hora de duración cada una. Así de esta
manera, surgió el denominado “teatro por horas”, siendo el Teatro
Variedades, el pionero en este tipo de representaciones. A partir de este tipo
de zarzuela corta surgiría el llamado “Género Chico”.
El
22 de Septiembre de 1866, se estrenó “El Joven Telémaco”,
primera zarzuela de los bufos de Francisco Arderius.
Aquí
estrenaron sus obras algunos de los principales compositores de zarzuelas, como
Arrieta, Barbieri, Chapí, Chueca, Caballero, Valverde o Oudrid, y entre las que
cosecharon éxitos importantes podemos destacar:
En
el año 1867, se estrenaron las zarzuelas “La Suegra del Diablo”,
de Emilio Arrieta con letra de Eusebio Blasco, y “Bazar de Novias” de
Cristóbal Oudrid, con letra de Mariano Pina Domínguez
En
1882, de Federico Chueca y Joaquín Valverde, se estrenaron “La
Fiesta Nacional” con letra con letra de Javier de Burgos, y “Luces
y sombras”, con letra de Ruesga, Lastra y Prieto.
En
1885. “Novillos
en Polvoranca”, de Francisco Asenjo Barbieri con letra de Ricardo de
la Vega
En
1887. “Château
Margaux”, con letra de Manuel Fernández Caballero y letra de José Jackson Veyan, y “El
Fantasma de los aires” de Ruperto Chapí y letra de Ruesga, Lastra y
Prieto.
El
teatro fue destruido por un incendio la noche del 26 de Enero de 1888,
precisamente se estaba representando la obra de Chapí, “El Fantasma de los aires”, en su escena final se produce un
incendio que destruye el aparato volador protagonista de la obra. El simulacro
del incendio se realizaba quemando listones y lienzos, quedaron algunas cenizas
sin apagar en el escenario. Al estarse celebrándose durante esos días los
bailes de carnaval, el personal abandonó el teatro tras finalizar la última
función, con mayor rapidez de lo habitual. Se prendieron los telones y
bastidores, propagándose el incendio con gran rapidez sin dar tiempo siquiera a
evitar la destrucción de vestuarios y material de los músicos. El actor Emilio
Mesejo, que se encontraba en las proximidades en un baile de mascaras, acudió rápidamente
intentado de forma infructuosa salvar su vestuario.
El
Teatro Variedades fue destruido por el incendio en su totalidad y no volvió a
abrir sus puertas.
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