Cantante español nacido en la localidad guipuzcoana de Orío, el día 6 de Abril de 1892. De nombre  Celestino Aguirresarobe y Zataráin, como nombre artístico acortó su primer apellido. Cursó estudios de Bachiller en el colegio de los Padres Dominicos, y su finalización se traslado a Madrid, donde inició estudios Arquitectura en Madrid, carrera que abandonó poco después para iniciar los de medicina, carrera en la que se doctoró en Valladolid.

A la finalización de sus estudios universitario, decide estudiar canto, siendo alumno de Ignacio Tabuyo, para posteriormente trasladarse a Roma, donde perfecciona sus conocimientos con Mattia Batistini. Como cantante de ópera debutó en el año 1919, cantando en el Gran Teatro del Liceo de Barcelona, La Favorita, interpretando el papel del Rey, y junto con Aga Lahowska, Humberto Macnez y Angelo Masini-Pieralli. Ese mismo año cantó esta ópera en Milán, teniendo una actuación discreta. Pero un año más tarde  se tomo cumplida en esta ciudad italiana, cantando el papel de Germont de La Traviata. A partir de este triunfo, actuó en las más importantes ciudades del mundo, Milán, Génova, Nápoles, Viena, Praga, ciudad donde cantó Amaya y Las Golondrinas, Berlín, Leipzig, Budapest, Oslo, Estocolmo, Lisboa. El propio Toscanini, le escogió para la reposición que tuvo lugar en marzo de 1925, en el Teatro Regio, de Nerone, junto a Carena, Pertile, Bertana y Journet.

En 1922 protagonizó un memorable concierto en el Teatro Victoria Eugenia de San Sebastián junto al tenor Hipólito Lázaro y al bajo Gabriel Olaizola, y en 1923 cantó El Barbero de Sevilla en el Liceo de Barcelona, teniendo como compañeros de reparto a Elvira de Hidalgo y Charles Hackett.

En el Teatro Real de Madrid en enero de 1924 intervino en una Aida completamente española con Campiña, Lafuente, Buades y Vela, repitiendo el mismo título un par de meses después junto a Ofelia Nieto, Miguel Fleta y Aurora Buades, y cantando Rigoletto con Fleta y la soprano Albertina Cassani.

En los años treinta relanzó su carrera como cantante de concierto, estrenando obras de múltiples autores, entre ellos Max Reger, Guridi, Ruy Coello y Pahissa. Uno de los mayores acontecimientos de la carrera de Sarobe como cantante de concierto lo cosechó el día 8 de Enero de 1935, en la Sala de la Sociedad Filarmónica de Bilbao, interpretando las Canciones de Don Quijote a Dulcinea, de Ravel, acompañado por la Orquesta Sinfónica de Bilbao y Jesús Arámbarri. Repitió dos veces la “Chanson á boire” y la ovación fue apoteósica. También las salas Pleyel de París y Phillarmonie de Berlín, contemplaron algunos de sus grandes éxitos.

También se dedico a la docencia, siendo profesor de cantó en el Conservatorio de el Gran Teatro del Liceo de Barcelona, entre sus alumnos tuvo a la mezzosoprano Rosario Gómez, y a los barítonos Esteban Astarloa y Conrado Sopena.

Celestino Sarobe, falleció en Zarauz el día 25 de mayo de 1952.