1. Vestiduras sagradas.

   Vestiduras sagradas son las prendas con que se revisten los ministros del culto en las funciones litúrgicas.
   Hasta el siglo v no usaron los sacerdotes vestidos diferentes a los de los seglares.
   Las vestiduras sagradas tienen su origen en el vestido ordinario de los romanos.
   Su fin es avivar la fe y la piedad en los ministros y en los fieles. Tienen un simbolismo litúrgico basado en las palabras que dice el ministro al revestirse el ornamento, que le recuerda las virtudes que le deben adornar.
   Deben estar bendecidas. 

2. Materia, color, origen y significación de las vestiduras sagradas.

A
SOBREPELIZ Y ESTOLA		SACERDOTE CON ORNAMENTOS DE MISA

3. Vestiduras secundarias.

   El roquete, vestidura de dignidad, propia de Obispos y Canónigos, especie de alba corta, con mangas estrechas y largas.

   La sobrepelliz, hábito coral y para administrar los Sacramentos, semejante a la anterior, pero con mangas anchas y cortas. Ambas son de lino y no se bendicen.

   El humeral o paño de hombros. El Sacerdote lo emplea para llevar el Santísimo; y el subdiácono, en la Misa.

   Planeta, especie de casulla que tiene la parte de delante cortada hasta la cintura. Se usa en Adviento, Cuaresma y Témporas.

   Estolón, estola bastante :más ancha y sin cruz. La usa el diácono en los días que están prescritas las planetas, desde el Evangelio hasta la Comunión.

   Bonete, prenda con que cubren su cabeza, los ministros en algunos momentos de la Misa y otras funciones, en señal de su dignidad. La forma española imita una corona condal.

4. Colores litúrgicos.

   Hasta el siglo XII nada determinó la Iglesia respecto al color de las vestiduras sagradas. Aun hoy la Iglesia oriental no tiene colores determinados. Sólo usa, como el Papa, el rojo y el blanco. Los colores litúrgicos admitidos por el Misal Romano son los siguientes morado, rosa, blanco, encarnado, verde, negro y azul.

   El morado denota penitencia y humillación y se usa en Adviento, Cuaresma y Témporas. 
   El rosa significa alegría atenuada y puede usarse el tercer domingo de Adviento y el cuarto de Cuaresma.
   El blanco denota alegría e inocencia y se usa en las fiestas del Señor, de la Virgen, y de los Santos no mártires.
   El encarnado, símbolo de la caridad, se emplea en las fiestas del Espíritu Santo, de la Cruz, de los Apóstoles y mártires.
   El verde simboliza esperanza y se manda para los domingos después de Epifanía y  después de Pentecostés.
   El negro significa luto y se emplea el Viernes Santo y en el Oficio de difuntos.
   El azul, símbolo de pureza, pueden usarlo, por especial privilegio, España, sus antiguas posesiones y la Orden Seráfica en la fiesta y Octava de la Inmaculada Concepción, por haberse distinguido en la defensa de este misterio. También en la festividad de la Medalla Milagrosa (27 de noviembre)  

5. Ornamentos pontificales.

   Además de los ornamentos sacerdotales, son propios:

• a) Del Obispo: el anillo, en señal del desposorio del Prelado con su Iglesia; el báculo, insignia de jurisdicción y poder; la mitra, tocado litúrgico de la cabeza dividido en dos partes que terminan en punta y con dos cintas col gantes, es insignia del magisterio episcopal; la cruz episcopal, recuerdo de la pasión del Señor; dos tunicelas, en señal de la plenitud de su orden sacerdotal y potestad eclesiástica; las sandalias y medias, que denotan la prontitud para ir a predicar el Evangelio; los guantes. que significan caridad, discreción en el obrar y limpieza de alma que ha de tener aquel a quien Dios escoge para tan elevados ministerios.
      Las tunicelas, sandalias, medias y  guantes deben ser del color litúrgico del día.

• b) Del Arzobispo: además de los indicados,. el palio, banda de lana blanca con seis cruces negras que rodea los hombros, colgando por delante y por detrás. Se fabrica con lana de corderillos y se bendice en la basílica Vaticana en la Misa de la festividad de los Apóstoles Pedro y Pablo. Es símbolo de la plenitud de la dignidad pontifical.

• c) Del Papa: todos los anteriores y, como exclusivos, la falda, de seda blanco-crema, tan larga que arrastra, más por detrás que por delante, por lo cual dos prelados han de alzarla al andar el Pontífice. Simboliza la grandeza y la caridad de los Papas; el subcíntorium es un manípulo más largo que el de los presbíteros, que lleva en su centro una cruz, y en sus extremos un agnus con el estandarte de la cruz y reposando sobre el libro de los siete sellos. Se coloca al lado derecho sujetado por dos cordones. Representa el lienzo con que Nuestro Señor Jesucristo secó los pies a sus discípulos, representando, por tanto, la humildad. El fanón es una doble esclavina, con rayas, de oro, blancas y moradas, significando a la Iglesia triunfante, militante y purgante, y con una cruz bordada en la parte del pecho. La tiara, es como una caperuza alta, más o menos cónica, que lleva tres coronas reales y está rematada por la cruz. Significa el triple carácter que posee el Papa de Sumo Sacerdote, Maestro y Rey.

INICIO