Es un acolchado de tejido graso blando que cubre el hueso pelviano. Usualmente est� cubierto por un espeso desarrollo de vello despu�s del comienzo de la pubertad. Venus era el nombre dado a la diosa romana del amor. Por lo tanto, Monte de Venus viene a significar, Monte del Amor. Se lo llama as� porque el tejido graso que se encuentra aqu� es sensible al estr�geno, con la llegada de la pubertad aumentan los niveles de estr�geno dando forma a un monte distinguible. A menudo es muy visible cuando la mujer est� desnuda o usa ropa ajustada. Se piensa que suministra un acolchado entre los huesos pelvianos de la mujer y su pareja durante el coito, cuando la penetraci�n es desde el frente.
Son dos pliegues de piel, en algunos casos se parecen m�s a mont�culos que a pliegues, que definen a la hendidura vulvar, y cubren y protegen las estructuras m�s delicadas de la vulva. La porci�n anterior de cada labio mayor es usualmente m�s gruesa que la posterior, afin�ndose y fundi�ndose con el perineo.
Quiz�s la variaci�n m�s grande entre las vulvas de las mujeres ocurre en el tama�o y forma de sus Labios Menores. Los labios menores tambi�n se llaman Ninfas. A pesar de su nombre, en muchas mujeres, sus labios menores son grandes y prominentes. Mucho m�s grandes que la mayor�a de las referencias de sexualidad y anatom�as retratan o mencionan. Adem�s, los labios menores pueden no estar totalmente cubiertos por los labios mayores como tambi�n establecen las referencias. Muchas mujeres que han explorado su vulva han venido a creer su vulva est� de alg�n modo deformada, debido a la forma de sus labios menores. Las ilustraciones de Betty Dodson mostradas debajo revelan las variaciones normales en el tama�o y la forma de los labios. Hay mujeres que no tienen labios menores, o quienes s�lo tienen uno. Mientras que algunas mujeres tienen los labios en forma de coraz�n t�picamente mostrado en los libros de la anatom�a, muchas, si no la mayor�a, no.
Es la apertura de la uretra a trav�s de la cual la orina, la eyaculaci�n femenina, y los fluidos de las gl�ndulas parauretrales salen del cuerpo. El tama�o y forma de la apertura uretral var�an considerablemente de una mujer a otra. No puede ser tan grande y prominente como se muestra anteriormente, aunque a veces es m�s grande. El meato uretral o urinario puede ser muy sensible al est�mulo sexual, tan sensible de hecho que una mujer puede equivocar su apertura uretral por su cl�toris, si ella no examina su vulva visualmente, rigi�ndose solamente por la sensibilidad. Algunas mujeres se masturban dando masaje al meato uretral e insertando los objetos en el uretra. Estimular la uretra, a trav�s de la pared vaginal, puede resultar en la eyaculaci�n femenina y la descarga de fluidos de las gl�ndulas parauretrales.
Forma la boca de la vagina. Es incorrecto decir apertura vaginal porque al menos que haya algo insertado en la vagina, el pasaje vaginal est� cerrado. Un problema con algunas de las ilustraciones en esta p�gina, y en general en los libros de anatom�a, es que la entrada vaginal siempre se muestra como una �rea oscura, indicando un espacio vac�o oscuro, una especie de cueva. Las paredes de la vagina normalmente est�n en contacto entre si, la vagina es un espacio potencial, no una apertura como se muestra y representa normalmente. Como revelan las ilustraciones y discusi�n de arriba, su apariencia depende de varios factores. .
El �rea chata entre la hendidura vulvar y el ano es llamada Perineo. Algunas de las referencias dadas aqu� establecen que el perineo no tiene pelos, esto no es cierto para todas las mujeres. La piel del perineo est� poblada por numerosas terminaciones nerviosas por lo que algunas mujeres pueden disfrutar de tener esta �rea acariciada y masajeada durante el sexo. Las referencias sobre Anatom�a, en contraposici�n a las referencias sobre sexualidad, dicen que el perineo se extiende desde el ano hasta la uretra, por lo tanto hay algo de conflicto en lo que en realidad constituye el perineo.
Es la abertura hacia el recto y el intestino inferior a trav�s de la cual pasan las heces durante la defecaci�n. Los tejidos del ano son ricos en vasos sangu�neos y terminaciones nerviosas. Muchas mujeres encuentran que su ano es muy sensible a la estimulaci�n. La sensibilidad es el resultado de un mecanismo de protecci�n destinado a mantener afuera objetos extra�os, para prevenir heridas y enfermedades. Dos juegos de m�sculos rodean al ano debajo de la piel. La contracci�n involuntaria de estos m�sculos pueden hacer el coito y el sexo anal doloroso o imposible. Para muchas mujeres su ano es una parte importante de su anatom�a sexual, siendo a veces a�n m�s sensible que su cl�toris y vagina.
Es un �rgano muy complejo y especializado. Tiene s�lo un prop�sito, darles el placer sexual a las mujeres. Es tan importante a una mujer, como lo es un pene a un hombre. El cl�toris est� formado por los mismos tejidos que el pene, y en su mayor parte, funciona igual que un pene. La �nica diferencia importante entre los dos es que la uretra de la mujer no pasa a trav�s del cuerpo del cl�toris. El tejido que transporta la orina y eyacula a trav�s del pene est� sin embargo presente, en la forma de los labios menores. Mientras que el cl�toris promedio es m�s peque�o que un pene, algunos son tan grandes como un pene peque�o. Muchos cl�toris se ven muy parecidos a un pene, lo cual desgraciadamente hace a algunas personas sentirse inc�modas.
El glande del cl�toris tiene tantas terminaciones nerviosas como el glande del pene, pero en una �rea mucho m�s peque�a. Esto hace que el cl�toris sea sumamente sensible. El tama�o de un cl�toris no determina cu�n sensible es, al informarse siempre que el n�mero de terminaciones nerviosas es siempre el mismo sin tener en cuenta el tama�o. Muchas mujeres encuentran el est�mulo clitoridiano directo doloroso. Hay un porcentaje peque�o de mujeres que no pueden tolerar ninguna forma de est�mulo clitoridiano, ellas experimentan intenso dolor, no placer, cuando es tocado, aun indirectamente. El prepucio sirve proteger el glande del est�mulo directo, y el aceite natural presente reduce la fricci�n entre los dos. Esta es la raz�n probable por la cual las mujeres generalmente se masturban dando masaje al prepucio en lugar del glande clitoridiano. Mientras que el cl�toris normalmente es muy sensible, algunas mujeres informan que su cl�toris es insensible al est�mulo. La causa de esto es desconocida, pero puede ser el resultado de la disociaci�n con el propio cuerpo, afecciones o enfermedades que atacan el sistema nervioso, o falta de uso. La sensibilidad de cualquier �rgano sensorial var�a de una persona a otra, y el cl�toris no es diferente.
