MURAL DE CACAXTLA

Parte del estudio de los deportes prehispánicos, es sin duda alguna la “práctica guerrera”; ya que al igual que hoy, los ejércitos de nuestros antepasados, también entrenaban y practicaban, a fin de mejorar su técnicas y tácticas de guerra. Por lo anterior, es que es imposible, hablar sobre la pintura mural prehispánica, relativa a los deportes prehispánicos, y no mencionar, el Mural de Cacaxtla. Estos murales, son fundamentales, a la hora de querer recrear de alguna manera, la vida cultural del sitio; cualquier observador puede percatarse de su riqueza en cuanto al uso del color. Sorprende el número de colores aplicados sobre la capa de estuco: azul, amarillo, rojo y, desde luego, blanco; en las jambas se aprecia el verde claro y las figuras casi siempre están delimitadas por una línea negra. La belleza estética de los personajes representados; los recursos utilizados por los artistas en el diseño y la representación han permitido a los expertos especular acerca del origen y la filiación de los personajes y su entorno. Resulta muy interesante el personaje del Mural Norte o Mural de la Batalla, que en opinión de los expertos, por sus rasgos faciales podrían ser identificados como personajes mayas; contrastando con ello, en el relieve se encuentra un personaje que los arqueólogos consideran de filiación zapoteca. De igual forma en el Mural Sur ocurrirá lo mismo: el observador irá a la búsqueda de las imágenes y la sorpresa será considerable, ya que el personaje central presenta rasgos de origen maya, y no hay duda de que eso le hará pensar en las influencias externas perfectamente posibles en un mundo que ya por aquellos días estaba intercomunicado. Hosted by www.Geocities.ws