Siendo que la codependencia es una enfermedad que como la adicción se caracteriza por una obsesión, una negación y una pérdida de control (el adicto pierde control de la droga o actividad que realiza, el codependiente pierde control de su vida por estar pendiente del adicto o la persona enferma), el tratamiento orientado hacia la recuperación, es en esencia, muy parecido al utilizado para los problemas de adicción.

Hay ciertos pasos que el codependiente debe tomar, para poder llegar a curarse.  Lo primero es, reconocer que existe este problema.  A veces los propios psiquíatras y psicólogos (sobre todo en Latinoamérica), no conocen los síntomas de esta enfermedad y no saben cómo tratarla... la persona va a consulta por un "simple" insomnio, ansiedad, inseguridad o depresión, lo que a veces es resuelto con fármacos o psicoterapia orientada a estos síntomas que no son más que la superficie de un iceberg... la codependencia sigue y seguirá causando estragos en el individuo, mientras tanto la persona no descubra que padece de ella.

Para el codependiente, el primer paso a tomar es comenzar a mirar hacia adentro.  Es decir, reconocer que está sintiendo un dolor interior, el cual probablemente es lo que le ha llevado a la codependencia.  Dicho dolor posiblemente provienen de daños emocionales y/o físicos que sufrió en su infancia o adolescencia.

El segundo paso es buscar ayuda profesional.  Puede acudir a un psiquiatra, psicólogo, sacerdote, pastor, etc.  Esta ayuda es muy importante para la recuperación, como también lo es, el unirse a un buen grupo de apoyo (los grupos de autoayuda para personas con problemas de emociones como neuróticos anónimos o emociones anónimas, al-anoon para adultos codependientes, alateen para adolescentes codependientes. etc.).

El asistir a un grupo de autoayuda lleva a la persona, a la práctica de los doce pasos y tradiciones, los cuales son indispensables para el proceso de recuperación.   El codependiente debe recibir consejería de ser posible todas las semanas, para poder trascender la adicción a personas, cosas o comportamientos indebidos.

El próximo paso que debe tomar el codependiente después de haber comenzado la consejería, es permitirse a sí mismo experimentar en toda su intensidad, el dolor que lleva adentro.  A continuación debe comenzar a examinar las causas.

"Limpiar el basurero", consiste en desechar aquellos sentimientos que mantienen atada a la persona a un pasado doloroso, y además, en el transcurso de este proceso, aparecen los defectos de carácter, que son identificados durante la práctica de los doce pasos y sobre ellos trabaja el individuo para fortalecer su espiritualidad y evitar caer nuevamente en el vacío de la codependencia o de la adicción (en el caso del adicto).

A veces es necesario romper con viejas amistades que perjudican o impiden la curación.
En el caso de un alcohólico o un adicto, esto es observado con mayor frecuencia.  La persona al principio sufre, pues considera que aquellas amistades con las que comparte su adicción o codependencia tienen muchísimo significado o representan gran parte de su círculo social, pero al reforzar su autoestima con ayuda de otras personas (que pueden ser las del grupo de autoayuda) y la fe en un Ser Supremo, estas ataduras son resueltas y grabadas en un pasado triste pero superado.
 
 

Recomiendo literatura acerca de este tema que servirá que gran utilidad para explicar este fenómeno, sus repercusiones y la importancia de recibir ayuda a tiempo: "Codependencia"  (Editorial Atlántida/Promexa)  "Codependencia Nunca Más" "El Lenguaje del Adios" :  Meditaciones diarias para la recuperación del codependiente. (Editorial Patria) Todos estos libros fueron escritos por Melody Beattie. (Terapeuta y codependiente recuperada).