El Instituto Quintanarroense de la Cultura, a través
de la Casa de la Cultura de Cancún, dentro del ciclo dedicado a “La Cultura
Maya en Libros” se complace en presentar el comentario del texto “Una Selva de Reyes”
producto de las investigaciones de Linda Schele y David Freídle con fotografías
de Justin Keer y publicado por el Fondo de Cultura Económica en 1999.
Al editarse el Libro “Una Selva de Reyes” su coautora
Linda Schele escribió: “Recuerdo vívidamente la primera vez que recorrí el
camino de grava que conduce a las ruinas de Palenque. Rodeada de maleza, oculta
bajo las campanillas y llena de las voces de los niños que jugaban, del ladrido
de los perros y de los gritos guturales de los guajolotes, bajé por aquel
camino dejando atrás edificios en ruinas, a la sombra de los árboles envueltos
en las enredaderas hasta dar con la plaza cubierta de césped que se extiende
frente mal Templo de las inscripciones”.
“Era la primera vez que visitaba México, impulsaba por
la curiosidad de mi esposo arquitecto. Nunca antes había visto la rica urdimbre
de la vida en una selva tropical ni oído a las chicharras cantar su armonía
dodecafónica”.
“Mientras caminaba entre las ruinas pintadas por los
líquenes de aquel mágico lugar, sentía mi imaginación agitarse por cierto
sentimiento de tristeza ante un mundo perdido. Con su luz verde esmeralda y sus
descollantes árboles vestidos de un exuberante universo de orquídeas,
bromeliáceas, lianas, el encanto de la selva producía una suerte de belleza
exótica que yo jamás hubiera imaginado”.
“El misterio del agua saturada de cal, que baja a la
llanura tendida ante el acantilado de Palenque saltado entre las rocas para
encerrar piedras, hojas, ramas y templos ruinosos por igual, hablada a mi
pensamiento con metáforas de creación y destrucción”.
“Estamos allí totalmente por casualidad, pues habíamos
planeado que aquel diciembre de 1970 haríamos la consabida peregrinación
turística a Yucatán, para ver las famosas ruinas de Uxmal, Chichen Itzá y
Kabah. La visita a Palenque fue un viaje secundario de última hora. Según el
mapa, parecía cerca de la carretera principal y la Guía del Viajero de Sanborns
decía que bien valía por lo menos un par de horas de nuestro tiempo. Cuando nos
fuimos de allí 12 días después, el rumbo y la pasión de mi vida habían cambiado
para siempre”.
“Fueron necesarios tres años para responder a la
pregunta referente a que vi, cosas extrañas, el hallazgo de la respuesta
también fue por accidente”.
“La última tarde de la primera mesa redonda de
Palenque, celebrada en diciembre de 1973, Peter Mathews y yo escudriñamos los
textos de las ruinas del sitio, en busca de los nombres y las fechas de los
reyes. Al cabo de tres horas, habíamos logrado identificar cinco gobernantes y las
flechas de los principales sucesos de sus vidas. Aquella magia del
descubrimiento no menguó en los 15 años transcurridos”.
“He sido pasajera cautiva en un asombroso viaje al
pasado y participado en el redescubrimiento de algo muy especial: la historia
de un pueblo cuya trama se había perdido en las tinieblas de aquel pasado”,
concluye Linda Schele.
Linda Schele, conocida autoridad en escitura de los
mayas, ocupó la cátedra de arte John D.
Murchinson Regents de la Universidad de Texas, en Austin, hasta poco antes de
su fallecimiento.
David Freídle, experimentado mayólogo, enseña en la
Universidad Metodista del Sur de Dallas. De Schele y Friedel y la colaboración
de Joy Parker, el FCE publicó recientemente “El Cosmos de los Mayas”.