GANADERÍA INDUSTRIAL Y ANTIBIÓTICOS
RIESGOS INFECCIOSOS PARA EL HOMBRE

¿A QUIÉN BENEFICIA EL USO INDISCRIMINADO DE ANTIBIÓTICOS Y VACUNAS EN LA GANADERÍA INDUSTRIAL? A LOS GRANDES LABORATORIOS QUE LOS FABRICAN...

LOS RIESGOS INFECCIOSOS que conllevan las ganaderías intensivas son debidos a las condiciones aberrantes de crianza y al uso sistemático de antibióticos1. Dos tipos de fenómenos, ya denunciados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su informe anual de 1.996 sobre el estado de la salud en el mundo, son favorecidos por esta forma de producción2. Por una parte, las bacterias se hacen cada vez más resistentes a los tratamientos antibióticos habituales3 (caso de las salmonellas en las tecnofactorías de pollos); según este informe, "las bacterias farmacorresistentes son transmitidas, a través de la cadena alimentaria, al consumidor, al que pueden provocar una enfermedad o una transferencia de no resistencia a agentes patógenos para el hombre (es decir, de inmunidad, por parte de estos agentes patógenos, al uso de fármacos), lo que, hoy en día, plantea un problema mayor para los servicios de salud pública en todo el mundo". Por otra parte, tanto en el ser humano como en el animal, aparecen nuevas enfermedades infecciosas calificadas de "emergentes". Son provocadas por nuevos gérmenes virulentos, bacterias y virus, que resultan de mutaciones genéticas generadas por las agresiones al medio ambiente y por el uso indiscriminado de antibióticos. Estas enfermedades "pillan" a los recursos sanitarios totalmente desprevenidos. Durante los últimos veinte años, ha aparecido una treintena de ellas. Las más conocidas son el sida, la fiebre hemorrágica ébola y la encefalopatía espongiforme bovina (EEB), responsable en el hombre de la nueva variante de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob.

FENÓMENOS INQUIETANTES
Estos dos fenómenos son juzgados particularmente inquietantes por la OMS, que constata tal recrudecimiento de las enfermedades infecciosas que "ningún país está verdaderamente a salvo, y ninguno puede ya ignorar esta amenaza"; la OMS habla de "fatal ilusión" a propósito de las enfermedades dominadas "a priori"...
Este informe denuncia claramente dos responsables: la medicina y la agricultura intensiva, en razón de "el uso incontrolado e inapropiado de antibióticos para el hombre y el animal". Cualquier moneda tiene su revés, cualquier principio activo -más aún si atenta contra los principios activos de la vida- puede tener efectos indeseables, sobre todo si el medicamento está mal usado (no adaptado a los gérmenes) o, peor, si es usado sistemáticamente sin discernimiento. Así, una especie de ley natural se ha instaurado, según la cual nuestro medio ambiente (constituido por ecosistemas geográficos y microbiológicos) reacciona contra las agresiones y los desequilibris persistentes que le son impuestos, lo que engendra catástrofes denominadas "naturales" y nuevos riesgos infecciosos.
Estamos rodeados de gérmenes; la gran mayoría busca nuestro bien y sin ellos la vida sería imposible. La tierra oculta una multitud de ellos, es la flor telúrica indispensable para el desarrollo de las plantas; igual que nuestra flora intestinal (que tiene un número de bacterias superior al número de células que constituyen nuestro cuerpo) es indispensable para una buena asimilación de la alimentación y para nuestra inmunidad.

GÉRMENES VIRULENTOS
Al maltratar en demasía los ecosistemas microbiológicos (los del suelo y los del intestino de los animales y de los hombre) no sólo se facilita la adquisición y la transferencia de resistencias a los antibióticos, sino que ciertos gérmenes, que hasta ahora coexistían pacíficamente con el hombre y con el animal, ganan en virulencia y pueden atravesar las barreras de las especies. Según el uso de los antibióticos, como con muchos otros principios activos, el beneficio esperado puede volverse contraproducente, pero es al obrero, mucho más que a la herramienta, al que hay que incriminar.
Los riesgos se manifiestan con una agudeza particular en las ganaderías intensivas en las cuales se puede hablar de verdadero "peligro viral". En diez años, dos enfermedades emergentes han aparecido en los cerdos, el síndrome distrófico respiratorio del cerdo, y la enfermedad del adelgazamiento del lechón (MAP), que diezman aproximadamente a un 20% de las ganaderías a las que afecta. En el conejo han aparecido las enterocolitis y en el pollo la enfermedad hemorrágica de Gunborow.
Está probado científicamente4, particularmente en los cerdos, que las condiciones de crianza son responsables de estas mutaciones virales... ¡En vez de ponerlas en duda, se las avala y se solicita investigación para poner a punto nuevas vacunas (contra las enfermedades emergentes del cerdo y del pollo), includo se ha trabajado y se trabaja en la creación de animales transgénicos resistentes a estos nuevos virus (tecnología planteada en su momento planteado para el conejo)!.

Lylian Le Goff

NOTAS:

1. Dedet, V. Un réseau du surveillance de l'antibiorésistance. Semaine Vétérinaire. Nº 936. 8 de mayo de 1.999.
2. OMS (1.996). Informe sobre la salud en el mundo.
3. Nau, Jean Yves (1.998). Las bacterias resisten cada vez más a los antibióticos. Le Monde, 13-14 de septiembre, p. 22.
4. MAP: Le virus fait peu, l'élévage fait tout. Porc MAgazine nº234, julio-agosto de 1.999. Les chercheurs cernent la MAP. Réussir Porcs nº 45. Diciembre de 1.998.

Artículo extraído de: The Ecologist (para España y Latinoamérica), nº 12, enero-febrero-marzo de 2.003.

LiberAcción

VOLVER

Hosted by www.Geocities.ws

1