CIRUGÍA LÁSER OCULAR Y OTROS PROCEDIMIENTOS COSMÉTICOS PROBADOS EN ANIMALES

Extraído del reportaje de la British Union Against Vivisection (BUAV) "Laser eye surgery and other cosmetic procedures tested on animals".

CIRUGÍA LÁSER OCULAR

INTRODUCCIÓN

La córnea es una ventana transparente al frente del ojo, que contribuye a enfocar la visión
Métodos de cirugía correctiva de córnea como el PRK y el método más popular, LASIK, se usan para tratar la miopía, hipermetropía o astigmatismo.
El PRK (Photo-Refractive Keratectomy) significa quitar las capas más superficiales de la córnea para que acceda el láser. La superficie de la córnea se cierra con láser. En pacientes humanos, se ponen lentes de contacto en el ojo para mejorar el confort, y gotas anti-inflamatorias y antibióticas para controlar la cura durante 6-12 semanas. Esto es un largo período de recuperación.
El LASIK (Laser In Situ Keratomileusis) consiste en que un instrumento corta una capa de la córnea para crear una solapa. Ésta se levanta y se usa el láser para quitar tejido corneal. Al finalizar, se recoloca la solapa. Tras el tratamiento, se usan gotas oculares en pacientes humanos durante la primera semana para ayudar a su curación y minimizar las molestias. Los pacientes llevan una máscara de noche durante la primera semana para prevenir que se rasquen los ojos mientras duermen.
Acaba de ser introducido un nuevo método en el Reino Unido, conocido como CK, que usa ondas de radio en lugar de láser para recolocar la córnea. Esto indudablemente significa más pruebas con animales.

SUFRIMIENTO ANIMAL
Miles de animales han estados sujetos a cirugía experimental para probar las técnicas usadas en cirugía láser y potenciales nuevos láser.
Los animales generalmente son anestesiados para la cirugía, para que no se muevan, pero tras el tratamiento, son matados bajo el anestésico o dejados recuperarse de la anestesia y estudiados desde unos minutos hasta un año entero.
Mientras que el cuidado ocular en humanos es integral para una buena cirugía ocular, normalmente esto se ignora cuando se refiere a los animales de laboratorio usados.

EXPERIMENTOS CON ANIMALES
Conejos
En un experimento publicado en el 2.001, se anestesiaron 30 conejos, y después sujetos al PRK. Tras un período de cuatro semanas, les ponían una gran variedad de químicos en los ojos cuatro veces al día. El experimento fue llevado a cabo para intentar mostrar si ciertas sustancias (inhibidores de colagenasa) reducen la visión nublada tras el PRK. Los conejos fueron examinados durante uno a tres meses antes de ser matados y sus ojos sacados para examinarlos. Los investigadores encontraron que ninguno de sus tratamientos mostró avances significantes en conejos, pero "parece ser determinado... que los inhibidores de colagenasa son un beneficio en humanos". A pesar de que fue hecho en EE.UU., este experimento fue financiado por una organización caritativa inglesa, la Iris Fund for Prevention of Blindness, y llevada a cabo por investigadores del hospital St. Thomas, Londres.
Otro terrible experimento conducido en EE.UU. durante el 2.003 incluía presionar los globos oculares de 25 conejos en sus órbitas, crear una solapa corneal en los ojos, como para el LASIK, sin anestesia. A los conejos entonces les pusieron collares [isabelinos] y una vez conscientes les echaron gotas en los ojos cuatro veces al día durante una semana. Tras un mes, los conejos fueron sedados, antes de ser sujetados a un asiento eyector de un avión-simulador y acelerados 60 pies en el aire a 9 veces la fuerza de la gravedad. Tras examinar los ojos, los conejos fueron matados. Este experimento fue hecho para determinar si la fuerza G experienciada por los pilotos de las Fuerzas Aéreas cuando usan los asientos eyectores pueden abrir las córneas.
Sin embargo, los propios investigadores afirman que las heridas de los conejos pueden sanar de forma diferente a las de los humanos. Después admitieron: "No sabemos si nuestros datos son aplicables a pacientes humanos". El estudio fue financiado por las Fuerzas Aéreas de EE.UU.

Diferencias entre especies
Existen diferencias entre especies entre el ojo del conejo y el del humano, y las comparaciones entre especies cruzadas son redundantes. Por ejemplo, la fineza media de la córnea del ojo del conejo es de 0,37 milímetros, mientras que la del humano es de 0,51 mm. Además, la córnea del conejo abarca el 25% del área superficial del ojo, en comparación con el 7% en humanos. Y más, la membrana de Bowman (la membrana primordial para el área de operación para el PRK y LASIK) es completamente ausente en conejos. Todas estas diferencias altamente significantes entre los ojos de los conejos y los de los humanos hacen que la extrapolación de datos sea imposible.

Gatos
En 1.995 en el Eye and Ear Infirmary de New York, 21 gatos fueron usados para un PRK modificado para probar una nuevo láser. A los gatos no se les dio ninguna medicación antiinflamatoria. Entonces les examinaron los ojos en 4 intervalos regulares en un período de 6 meses.

Diferencias entre especies
Los autores de este informe admiten que las córneas de los gatos son más irregulares en su anatomía que las de los humanos y que esto es una fuente potencial de ineficacia. Usae el ojo del gato como modelo del ojo humano está también limitado por la membrana de Bowman, que es más fina en el humano que en el gato. Increíblemente, las pruebas clínicas de la técnica fueron hechas en voluntarios humanos al mismo tiempo, en otros laboratorios. Otro experimento con gatos publicado en el 2.000 comparaba el daño hecho por varios láser en los ojos de los gatos y en ojos de cadáveres humanos, forzando la pregunta de por qué los investigadores simplemente no usaron los ojos de cadáveres humanos para comparar los efectos de los láser. La razón fue que no, porque necesitaban que los ojos fuesen de un animal vivo, aunque los gatos fueron matados en menos de 10 minutos tras la cirugía y sus ojos tratados de forma similar de los ojos de los cadáveres.

Monos
También se han usado primates para experimentos de láser ocular. En el hospital John Hopkins de Baltimore, una investigación publicada en 1.996 mostraba que un mono fue anestesiado antes de que le abriesen la superficie de los ojos y rasgasen la superficie de la córnea. Entonces le hicieron cirugía ocular y tras recuperarse del anestésico, se hicieron observaciones en su ojo una semana después. El estudio incluía un nuevo sistema de calibración del láser, y una comparación de los resultados del mono con dos pacientes humanos, así que el por qué los investigadores sintieron necesario obtener datos de monos no se discute en este informe. Otro estudio publicado en 1.994 probó el PRK en 16 monos verdes africanos en la universidad State Louisiana en Nueva Orleans. A los monos se les hizo el PRK en ambos ojos, y fueron mantenidos entre 6 semanas y 18 meses, antes de ser matados y sus ojos quitados para estudiarlos. Esta investigación fue financiada por el Servicio Público de Salud estadounidense.

INVESTIGACIÓN SIN ANIMALES
Siendo esta cirugía un área tan delicada como importante, se demanda una técnica segura y bien investigada. Existen técnicas alternativas a los experimentos con animales, que son biológicamente más relevantes, más seguras y más humanas:

BLANQUEAMIENTO DE DIENTES

INTRODUCCIÓN

El peróxido de hidrógeno, empitido por el químico peróxido carbónico, se usa para abrillantar el color de los dientes. El blanqueamiento de dientes se está haciendo popular (particularmente entre famosos) para quitar la decoloración de los dientes por cosas como fumar, vino tinto, etc. Los productos blanqueadores se pueden aplicar en casa en forma de gel, puestos en la boca con un protector. El gel contiene un 10% de peróxido carbónico. También puede aplicarse usando bandas que contienen un 6% de peróxido de hidrógeno, que se ponen en los dientes delanteros. Opalescence es en nombre de un gel, fabricado por Ultradent Inc. y comercializado en el Reino Unido por Optident Ltd. En 1.993 la DTI avisó que Opalescence estaba regulado bajo la Directiva de Cosméticos de la CE, que no permite los productos que contengan peróxido de hidrógeno en concentraciones más altas del 0,1%. Opalescence contiene el 3% de peróxido de hidrógeno y no fue permitido para su venta en el Reino Unido. Los dentistas que usaban el producto fueron sujetos a multas de 5.000 libras o penas de prisión de 6 meses. En 1.995, Opalescence fue premiada como marca de la CE bajo la Directiva de Dispositivos Médicos (que permite concentraciones más altas de peróxido de hidrógeno que la Directiva de Cosméticos), pero los departamentos gubernamentales del Reino Unido lo volvieron a etiquetar como producto cosmético y lo prohibieron para su venta. Ultradent y Optident se querellaron contra la DTI y DoH en las Cortes en 1.998, afirmando que los departamentos del gobierno habían prevenido ilegalmente la comercialización de Opalescence en el Reino Unido. Las cortes encontraron que Opalescence es un dispositivo médico, no un producto cosmético y que la DTI y DoH no habían intentado prevenir su venta en el Reino Unido. La DoH y DTI apelaron contra la decisión y en 1.999 el juicio dio la vuelta, significando que Opalescence es ahora prohibido para la venra en el Reino Unido. Este producto es fácilmente disponible con una marca de la CE en otros países de la Unión Europea y en EE.UU.
En septiembre de 2.003, el Comité Científico de Cosméticos y Productos No Alimentarios (SCCNFP) de la UE publicó un informe reasegurando la seguridad de los productos blanqueadores para dienes. El informe concluyó que los agentes de blanqueamiento de dientes que contenían peróxido de hidrógeno en niveles superiores al 6% son seguros. Los expertos dicen que los miedos por Opalescence "fueron engendrados por pruebas animales no realísticas". Estos miedos hicieron que DTI y DoH se implicasen y se llevase el caso a los juzgados.

SUFRIMIENTO ANIMAL
Decenas de miles de animales han muerto durante muchas décadas en el testeo de productos y métodos blanqueantes para los dientes. El peróxido de hidrógeno ha sido probado en perros, ratones, ratas, conejillos de indias, hámsters y conejos desde los años 50. Muchos de estos experimentos eran de toxicidad (envenenamiento) que usaban grandes dosis de peróxido de hidrógeno y peróxido carbónico. Muchos estudios de publicidad incluyen dar dosis a los animales mediante toma estomacal. Esto incluye un período sin comer, tras el cual se pone un tubo a través de la garganta hasta el estómago, por el que pasarán los químicos a probar. Las normas de dosificación oral afirman que es el método más estresante de administración. Si se repite, puede causar inflamación o ulceración de la garganta o estómago (más por el tubo que por el químico), puede penetrar accidentalmente la garganta o el estómago y crear una infeccion interna y puede llegar al pulmón por error. Esto es por supuesto además de los efectos potencialmente tóxicos de la sustancia.
Los dentistas han estado blanqueando dientes descoloridos durante al menos 100 años, por lo que hay una gran cantidad de datos humanos disponibles sobre cómo el blanqueamiento de los dientes afecta a los humanos.

EXPERIMENTOS CON ANIMALES
Además de ser inmensamente crueles, uno de los principales problemas con este tipo de estudios de toxicidad animal es que los animales son alimentados a la fuerza con volúmenes surrealistas de una sustancia. Si una persona tuviese que usar cuatro bandas blanqueadoras al día, consumiría 0,84 mg por kilo de su peso corporal al día de blanqueador de dientes. E un estudio en EE.UU. en 1.993, a las ratas se les dieron más de 5.900 veces la media de consumo humano, dándoseles dosis de 5.000 mg por kilo vía estomacal. Las ratas sufrieron dificultades para respirar, inabilidad para darse la vuelta cuando se les pone de espaldas, cierre parcial de los ojos, sangre en la orina e incontinencia. Tres de los 22 animales murieron en menos de 48 horas de hemorragia gástrica.
La cantidad de peróxido de hidrógeno que actualmente está en contacto con tejidos particulares como los dientes es lo que es importante para asegurar la toxicidad del químico. Muchos estudios con roedores incluyen poner peróxido de hidrógeno en el agua de beber de los animales, que puede dar resultados totalmente diferentes que cuando el químico se libera a través de un gel o bandas aplicadas a los dientes. Los estudios con animales de investigadores en Japón en 1.992 añadían peróxido de hidrógeno al agua de beber de los ratones durante 100 semanas, resultando en tumores en sus estómagos. Dos de los testigos expertos del caso de Opalescence afirmaron en referencia a esto: "Claramente, la producción de... tumores en ratones expuestos continuamente al peróxido de hidrógeno en el agua de beber no es un modelo para asegurar los posibles riesgos... en el hombre". En un experimento publicado en 1.993, hamsters recibieron dosis de más de 2.800 veces más altas que la dosis diaria humana de peróxido carbonado. A los hamsters se les dieron dosis vía estomacal con dosis de más de 200mg/kg de peróxido carbonado. Las pruebas terminaron tras 15 semanas o 6 meses. Los humanos que usan blanqueadores de dientes se estima que consumen sólo 0,07mg/kg por día.
Un estudio de Dahl and Becher (1.995) incluía dosificar a las ratas con grandes cantidades de peróxido carbonado vía estomacal. Este estudio ha vuelto a ser criticado por los expertos: "Sus hallazgos son difíciles de interpretar en relación al uso de peróxido carbonado para blanquear dientes. El método de administración servía a una exposición maximizada... evitando la dilución vía saliva o comida". De hecho, todos estos estudios con animales parecen ser repetidos cuando consideramos que los humanos han estado teniendo sus dientes blanqueados durante más de 100 años. Seguramente los científicos pueden disponer de datos humanos biológicamente relevantes para diseñar nuevos estudios para voluntarios humanos, más que caer en experimentos con animales potencialmente engañosos y crueles. Además, usar animales pero particularmente roedores en tests de toxididad oral, es una metodología fundamentalmente desperfecta. Hay un significante número de diferencias entre especies a la hora de destoxificar órganos y sitios con acumulación de tóxicos, y la media de destoxificación, que podría llamar a la cuestió de la relevancia de cualquier resultado. Por ejemplo, los roedores no son capaces de vomitar. En humanos, el vómito es una manera muy importante y eficiente de eliminar toxinas rápidamente tras envenenarse y podría reducir drásticamente la exposición a la toxina. Para roedores usados en tests de toxicidad de dosis repetidas, la exposición a los químicos a probar es necesariamente incrementada artificialmente por su incapacidad de expeler la toxina.

REDUCCIÓN DE ARRUGAS

INTRODUCCIÓN
También conocida como reafirmación de la piel por láser. Un procedimiento cada vez más popular llevado a cabo por clínicas cosméticas privadas en el Reino Unido. La meta de la reafirmación de la piel por láser en humanos es darle a la piel una apariencia más joven, eliminando signos de edad y piel expuesta al sol.

SUFRIMIENTO ANIMAL
Este procedimiento es probado en cerdos, porque los investigadores creen que tienen una piel similar a la de los humanos. En un estudio en EE.UU., publicado en 2.001, 7 cerdos tuvieron un total de 154 áreas de su piel dañadas con láser bajo anestesia. Los cerdos ganaron consciencia y tuvieron que soportar biopsias tomadas de sus heridas inmediatamente, dos días después y 16 días después. El gran número de áreas que los investigadores dañan en cada animal y el tamaño de estas áreas siendo de unos 2 centímetros posiblemente haya causado a los cerdos sufrimiento. Los investigadores afirman que los cerdos sufrieron "daño terman aguso", como por ejemplo, daño intenso y corto a la piel, con enrojecimiento, con pérdida de las capas superficiales de la piel a las mayores intensidades del láser. Los cerdos también sufrieron reacciones inflamatorias en altas intensidades de láser.

DEPILACIÓN

INTRODUCCIÓN
La depilación tiene el potencial de ser usado para injertos de piel tras cirugía o accidentes, pero ahora se está incrementando su uso para fines cosméticos, para quitar exceso de pelo o pelo indeseado.
La depilación se puede hacer usando un láser, en los siguientes experimentos se usó un láser llamado láser de rubí de modo normal. Los experimentos con animales incluyen aplicarles placas calientes a más de 47ºC a la piel de ratones.

SUFRIMIENTO ANIMAL
En el 2.001, se hicieron experimentos en el Hospital Mount Vernon en North London conducidos para probar el uso de aplicaciones calientes como un precusor al tratamiento láser de depilación. 18 ratones fueron anestesiados, entonces les pusieron placas de metal calientes a más de 47ºC aplicadas directamente a su piel durante 15 minutos. Cinco horas después, se les tomaron biopsias de piel de las heridas. Durante este intervalo de cinco horas, los ratones ganaron consciencia y sufrieron las consecuencias de la aplicación del calor. Los investigadores del Mount Vermon también hicieron más experimentos en otros 12 ratones, exponiéndoles a placas de calor de 45ºC, de nuevo durante 15 minutos. Tras las cinco horas de reposo, los ratones fueron anestesiados de nuevo y les aplicaron radiación láser a ambas partes de la piel, las dañadas y las no dañadas. El láser fue puesto a un nivel diseñado para causar daños cutáneos y pérdida del pelo en ratones. Cuatro de los ratones fueron matados y los ocho que quedaron pudieron recuperarse y fueron observados a diario durante 8 semanas para ver el daño cutáneo y el crecimiento del pelo. El láser usado en este experimento fue puesto a este nivel deliberadamente para causar daños de piel. Los investigadores usaron un sistema de registro para clasificar las heridas de la piel de los ratones en una escala de: uno=enrojecimiento, dos=herida, tres-cinco=sangrado en grandes áreas, y 6=ulceración. Los investigadores no especificaron cuales de estas categorías se aplicaron a los ratones durante el experimento, pero había el potencial de que hubiesen ocurrido todos estos tipos de daños.

Diferencias entre especies
Los autores admiten que sus resultados no son aplicables a la piel humana, por diferencias entre especies: "La piel del ratón difiere de la humana porque la epidermis del ratón sólo tiene dos células de espesor, mientras que la humana contiene un número mucho más grande dependiendo del sitio".

INVESTIGACIÓN SIN ANIMALES
Los mismos investigadores que condujeron estos experimentos con animales también hicieron experimentos de depilación sin animales usando el láser de rubí de modo normal en piel extraída de gente que estaba renovando la piel. Esto les permitió probar los efectos del calor y ver el daño causado por el láser, sin causar ningún sufrimiento a los animales. Los mismos investigadores de nuevo, también testaron el láser de rubí en 346 pacientes a los que estaban depilando. Esto no es sólo más humano, también permitió a los investigadores asegurar efectos relevantes del láser de acuerdo a la piel humana y tipos de piel específicos.
Hay más alternativas humanas para estudiar el pretratamiento de la piel disponibles para los investigadores. El concepto de usar calor antes del tratamiento con láser ha sido estudiado desde 1.987 con técnicas in vitro, usando células humanas. La BUAV está extremadamente preocupada de que el reciente aumento en el número de gente que escoge la cirugía cosmética inevitablemente causará un incremento en procedimientos con animales crueles e inútiles. Mientras que las pruebas de cosméticos e ingredientes en animales no va a estar permitido en el Reino Unido, los procedimientos que son usados con propósitos cosméticos pueden, en teoría, seguir siendo probados. La BUAV hace un llamamiento al gobierno del Reino Unido para prohibir los experimentos con animales para procedimientos cométicos.

BUAV, Agosto 2.003

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Artículo traducido de:
http://www.buav.org

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