El
s�bado 28 de abril sobre Arequito brillaba el sol en todo su esplendor. Desde muy
temprano ilumin� con sus rayos el pueblo de ocho mil habitantes, situado a 90 kil�metros
de la ciudad de Rosario. Por primera vez en la historia de ese lugar, su gente aceler� su
andar un tanto cansino y dej� de lado su ‘pachorra’. La tradicional plaza
cambi� su fisonom�a habitual y un riguroso vallado anunci� que algo muy importante
estaba por suceder. La blanca fachada del templo bautizado, en 1904, como parroquia
Nuestra Se�ora del Rosario, fue surcada por reflectores con haces de luz en tono salm�n.
Cristian Fern�ndez, Nerina Pizzarotti y Silvia Cagnone, del Estudio Dark, la decoraron.
Blancos tules colgaban desde las columnas, ca�ones de luces y conos blancos sirvieron
para contener las flores. La alfombra roja, flanqueada por rom�nticos p�talos de rosas,
aguard� ansiosa la entrada triunfal de la novia. Segundos antes de las 19:35, la
Agrupaci�n Coral Arequito, dirigida por Luis Baetti, enton� una melod�a que anunciaba
la llegada de Jerem�as Audoglio (29) con sus padres Mar�a Esther Avaracci (51) y Carlos
Alberto Audoglio (51) y con Griselda Hayd�e Zachino (51), la mam� de Soledad. Sobre los
bancos de la iglesia, discretas tarjetas indicaban la ubicaci�n de los �ntimos
invitados, junto con bolsitas de tul que conten�an p�talos blancos para arrojarles a los
novios a la salida del templo.A las 19:40, Soledad Pastorutti (26) hizo su entrada triunfal a Nuestra Sra. del Rosario del brazo de su padre, Omar Alberto Pastorutti (52), precedida por un cortejo integrado por sobrinitos de “Jere” e hijos de primos, Mariano Zacchino, Santiago Ghione, Juli�n Calcaterra, Mateo Ratti, Renzo Sagioratto, Liza Lis Biga, Celina Raati y Alfonsina Juzefiszyn. En el altar la esperaban los sacerdotes Ariel Barbero, Jos� Lamas, Emanuel Caballero, Walter Luque y Jorge Nardi. Cada uno tuvo emotivas palabras hacia los novios, que conocen desde ni�os. En las primeras filas se ubicaron, pa�uelo en mano, Natalia Pastorutti (24) con su novio Andr�s Manini, las abuelas de “Sole”, Valeria Zacchino (70) y Elvira �Pastorutti (84) y la de “Jere”, Ida Bravi (85). Faltando cinco minutos para las 20:00, y en medio de un silencio absoluto, se impuso el seguro “S�, acepto” de cada uno de los novios que sellaron su amor ante Dios. Soledad y Jerem�as se fundieron en un largo beso que concluy� con un aplauso por toda la familia. Mientras los ojos de Sole se llenaban de l�grimas, su ex profesora de m�sica, interpret� el tradicional Ave Mar�a. En medio de una lluvia de p�talos, a las 20:05 cruzaron el portal de la iglesia, mientras el cielo se iluminaba con los fuegos artificiales de “FB”, de Eduardo Falvella y Fabi�n Baruti, como un brindis de explosiones y colores con los que Arequito homenaje� a su hija m�s querida. Sole elev� su mirada, y mientras las l�grimas rodaban por sus mejillas, volvi� a besarse con su marido. “Fue una ceremonia muy emotiva. Todo el tiempo tuve que estar conteniendo las l�grimas” -expres� Soledad-. Luego, abordaron su Volkswagen Passat rumbo a Rosario. Una gran caravana irrumpi� en la ruta que une ambas ciudades, ya que los invitados que no fueron en sus autom�viles, contaron con la posibilidad de ser trasladados en micros de la empresa Manuel Tienda Le�n. La gran fiesta estaba a punto de comenzar.