LOS PIONEROS
EL AÑO 1.997, EL
FILÓLOGO D. JORGE MARÍA RIBERO-MENESES SANJOSÉ, PUBLICA UN
ESTUDIO SOBRE LOS ORÍGENES DEL CASTELLANO. PRESENTA RAZONAMIENTOS Y
PRUEBAS FILOLÓGICAS DE LAS QUE SE INFIERE QUE EL CASTELLANO NO DERIVA
DEL LATÍN.
No hemos sido los primeros en proponer que las hoy
denominadas "Lenguas Romances"
no derivan del Latín.
Cuando, en Diciembre de 2.002, decidimos crear
nuestra web para comunicar los resultados de nuestra
investigación, buscando páginas de Historia en Internet, nos
encontramos con una estupenda web:
http://usuarios.maptel.es/eirik/default.htm
En aquel entonces todavía se podía
leer en esa web que, en el año 1.997,
el filólogo D. Jorge
María Ribero-Meneses SanJosé
había publicado en el Nº 5 de
Aunque nuestro
análisis de los orígenes del Idioma Gallego difiere sustancialmente del suyo, tanto en el
proceso de investigación como en la
metodología empleada,
estamos de acuerdo con lo que dice acerca
del efecto de la dominación romana de
También nos
sentimos obligados a confesar aquí que, si no hubiésemos tropezado con la información que proporciona el manipulado Kritias de Platón, nunca se nos habría ocurrido negar la maternidad del Latín sobre las
“Lenguas Romances”.
Y, peor todavía: encenagados en la desinformación histórica inherente a
nuestros Franquistas estudios reglados, habríamos considerado como paranoico
a cualquiera que nos lo hubiera propuesto; incluso a D. Jorge María Ribero-Meneses SanJosé.
A comienzos del 2.003, D.
Jorge María Ribero-Meneses SanJosé
pidió al webmaster de
Disfruta viendo un buen ejemplo de cómo se usa
el Pensamiento Científico, querido amigo interesado en
EL CASTELLANO:
Por Jorge María Ribero-Meneses SanJosé.
Nº5 de
(Extracto)
El Castellano, en contra de la
opinión de todos aquellos que le pretenden hacer descender del
Latín, es una lengua autóctona de
La supuesta maternidad del Latín sobre
el Castellano y demás Lenguas Romances, constituye uno de los
mayores fraudes de
Bien es sabido que
¿Cómo hubiera podido conseguir un
puñado de legiones –integradas fundamentalmente por soldados
analfabetos de todas las naciones sojuzgadas por Roma y que no
debían tener ni la más remota idea de latín–
que en el decurso de tres siglos no quedara ni rastro de las hablas
ancestrales y milenarias de varios países europeos extraordinariamente
más antiguos que Roma?
Y por otra parte...
¿Resulta concebible que los romanos –en poco menos de tres siglos–
fueran capaces de dominarnos y de imponernos su lengua, cuando los godos en un
período similar, y
los árabes en ocho siglos,
apenas si lograron colarnos un puñado de palabras?
Cuando se produce la dominación
romana, la inmensa mayoría de los pobladores de Iberia, de las Galias, y de la propia Italia, siguieron viviendo y
expresándose de la misma forma que lo habían hecho desde tiempos
inmemoriales. Esa
lengua, que era común a todos ellos, era de estirpe céltica, y su única diferenciación la establecían las
variantes dialectales de rigor, impuestas por la dispersión
geográfica y por el aislamiento en que han vivido la mayoría de los
pueblos hasta bien entrado nuestro siglo.
Resulta harto significativo a este respecto, el hecho
de que exista constancia documental de que en
Aulo Gelo, refiriéndose a una determinada palabra, lanza,
afirma lo siguiente: "Varro
dice que lanza
no es una palabra latina, sino hispana". Para empezar y así a guisa de aperitivo, el propio nombre
del Lacio, la patria del pueblo latino, es un derivado de Lanzia. Y este Lanzia,
que es un topónimo inconmensurablemente ibérico (Bar-Lanza, Laziana, Lanzarote, Lanze,
Linzoain, Lanzón, Lanzuela, Lanjarón, Lanz, ...) no es sino una aféresis
de Balanzia, lo que explica el que fuera
justamente Balenzia
el primer nombre documentado de la ciudad de Roma, heredado, como vemos, de todas
No es ninguna casualidad que Balenzia haya producido valentía y que el significado griego de la
palabra Roma sea exactamente el mismo: valor. Lo que confirma ese cúmulo de refencias históricas el hecho de que fuera Balenzia=Valencia, el primer nombre de Roma. Nombre sagrado, por otra parte, que
los primitivos romanos tenían rigurosamente prohibido pronunciar.
Habiendo sido Balenzia el primer nombre de Roma,
¿Se atreverá alguien a contradecir a
todos los historiadores antiguos que documentan haber sido Italia=Itubalia poblada por los viejos Iberos o Tubalios?
Los mismos que también le prestaron a aquella
península otro de los antiguos nombres de España, Hesperia. Y claro está ... siendo Balenzia un nombre
ibérico,
¿Cómo no habría de serlo lanza,
que es un derivado suyo?
A pesar de lo cual,
Quinto Ennio, autor de unos Anales de
¡Si serían afines ambas lenguas, para
que alguien se vea en la necesidad de hacer esta precisión!
Y esto, mucho antes de que los romanos, en
nefasta hora, lleguen a nuestro territorio con el firme propósito de arrasar toda nuestra cultura y de robar absolutamente todo lo que se
les pusiera por delante. Incluida nuestra memoria histórica y nuestras creencias e instituciones
religiosas. El perpetrado por Roma en el norte de España, es el mayor atropello
que ha conocido la historia de
Tomás Tamayo de Vargas, historiador español que vive a caballo de los
siglos XVI y XVII, y que nos ha transmitido algunos retazos preciosos de un Cronicón perdido, escrito por el que
fuera obispo de Zaragoza, Marco Máximo:
"Fuera
de las lenguas Latina, Címbrica
i Góthica, avia en España la lengua Cantábrica
i la nativa española era más pulida, diferenciándose de
Para saber más sobre la extensa obra de
D. Jorge María Ribero-Meneses SanJosé, ver:
http://www.iberiacunadelahumanidad.net/
http://www.origenesdelahumanidad.com/