Malaquias
significa en hebreo, mi mensajero. La aparición de estos mensajes debio
de tener lugar después que a partir del año 516 a.C. se reanudaran
regularmente las ceremonias del culto. En el templo de Jerusalén una
vez concluida su reconstrucción. Con el libro de Malaquias (=mal),
ultimo de los doce que forman el grupo de los llamados profetas menores,
concluye el bloque de la literatura profética de la Biblia y se pone
punto final a la ultima pagina de AT. El texto de Malaquias se
caracteriza por el tono polémico con que aborda los diferentes temas.
Objetivo inmediato de la reprobación
del profeta son los sacerdotes que con su negligencia permiten
que el pecado se instale en el templo. También
censura a los malvados, a los injustos, a los impíos, a los que
repudian su esposa para
unirse a una extranjera y a los que dejan de pagar sus diezmos
defraudando así al señor, o sea a todos los que no tienen temor de
Dios. Al cabo de varias décadas de la repatriación de los exiliados en
babilonia las dificultades materiales y el relajamiento de las
costumbres habían afectado el estado de animo
y la vida espiritual de la gente. por eso en medio del desencanto
y las dudas, Malaquias afirma con pasión que Dios ama a su pueblo y que
no dejara de cumplir sus promesas que le hizo. El día de Jehová viene
ardiente como un horno, pero a los que temen el nombre del señor les
nacerá el sol de justicia y en sus alas traerá salvación.
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1
Profecía. Palabra de Jehová contra Israel, por medio de Malaquias: “Yo os he
amado, dice Jehová. Pero vosotros dijisteis: “¿en que nos amaste?”. ¿ no
era esau hermano de Jacob?, dice Jehová; sin embargo, ame a Jacob y a esau
aborrecí; convertí sus montes en
desolación y abandone su heredad a los chacales del desierto. Edom dice: “Nos
hemos empobrecido, pero volveremos a edificar lo arruinado”; pero así a dicho
Jehová de los ejércitos: ellos edificaran y yo destruiré; los llamare
territorio de impiedad y pueblo contra el cual Jehová esta indignado para
siempre. Vuestros ojos lo verán, y diréis: “Sea Jehová engrandecido mas allá
de los limites de Israel”. “ El hijo honra al padre y el siervo a su señor.
Si, pues, yo soy padre, ¿ donde esta mi honra?;
y si soy señor, ¿ donde esta mi temor?. Dice Jehová de los ejércitos
a vosotros, sacerdotes, que menospreciáis mi nombre y decís: “¿ en que
hemos menospreciado tu nombre?”. En que ofrecéis sobre mi altar pan inmundo.
Y todavía decís: “¿en que te hemos deshonrado?”.
En que pensáis que la mesa de Jehová es despreciable. Cuando ofrecéis el
animal ciego para sacrificio, ¿ acaso no es malo? Asimismo, cuando ofrecéis el
cojo o el enfermo, ¿acaso no es malo? Preséntalo, pues, a tu príncipe; ¿
acaso le serás grato o te cogerá benévolo?, dice Jehová de los ejércitos”.
Ahora, pues, orad por el favor de
Dios, para que tenga piedad de nosotros. Pero “¿como podéis agradarle, si
hacéis estas cosas?, dice Jehová
de los ejércitos. ¿Quién hay entre
vosotros que cierre las puertas o alumbre de balde mi altar? Yo me complazco en
vosotros, dice Jehová de los ejércitos, ni
de vuestra mano aceptare ofrenda. Porque desde donde el sol nace hasta donde se
pone, es grande mi nombre entre las naciones, y en todo lugar se ofrece a mi
nombre incienso y ofrenda limpia. Grande es mi nombre entre las naciones,
dice Jehová de los ejércitos; pero vosotros lo profanáis cuando decís:
“inmunda es la mesa de Jehová”, y cuando decís que su alimento es
despreciable. Además, habéis dicho: “¡Que fastidio es esto!”,
y me despreciáis, dice Jehová de
los ejércitos. Trajisteis lo robado, o cojo, o enfermo, y me lo presentasteis
como ofrenda. ¿ aceptare yo eso de vuestras manos?, dice Jehová. Maldito el
que engaña, el que teniendo machos en su rebaño promete y sacrifica a Jehová
lo dañado. Porque yo soy gran rey, dice Jehová de los ejércitos, y mi nombre
es temible entre las naciones.
2
“ Ahora, pues, sacerdotes para vosotros es este mandamiento. Si no escucháis
y si no dicis de corazón dar gloria a mi nombre, ha dicho Jehová de los ejércitos,
enviare maldición sobre vosotros y maldeciré vuestras bendiciones; y ya las he
maldecido, porque no os habéis decidido de corazón. “Yo os dañare la
sementera, os echare al rostro el estiércol, el estiércol de vuestros animales
sacrificados, y seréis arrojados juntamente con el. Así sabréis que yo os envíe
este mandamiento para que permanezca mi pacto con levi, ha dicho Jehová de los
ejércitos. “Mi pacto con el fue de vida y de paz. Se las di para que me
temiera, y el tuvo temor de mi y ante mi nombre guardaba reverencia. La ley de
verdad estuvo en su boca, iniquidad no fue hallada en sus labios;
en paz y en justicia anduvo conmigo y a muchos hizo apartar de la maldad.
Porque los labios del sacerdote han de guardar la sabiduría, y de su boca
el pueblo buscara la ley; porque es mensajero de Jehová de los ejércitos.
“Mas vosotros os habéis apartado del camino; habéis hecho tropezar a muchos
en la ley; habéis corrompido el pacto de levi, dice Jehová de los ejércitos.
Por eso yo os he hecho despreciables, viles ante todo el pueblo, porque no habéis
guardado mis caminos y hacéis acepción de personas al aplicar la ley”. ¿Acaso
no tenemos todos un mismo padre? ¿no nos ha creado un mismo Dios? ¿ porque,
pues, somos desleales los unos con
los otros, profanando el pacto de nuestros padres? Prevarico juda; en Israel y
en Jerusalén se ha cometido abominación, porque juda ha profanado el santuario
de Jehová, el que amo, al casarse con la hija de un dios extraño. Jehová
arrancara de las tiendas de jacob al hombre que haga esto, al que vela, al que
responde y al que ofrece ofrenda a Jehová de los ejércitos. Pero aun hacéis
mas: Cubrir el altar de Jehová de lagrimas, de llanto y de clamor;
así que no mirare mas la ofrenda, ni la aceptare con gusto de vuestras
manos. Mas diréis: “ ¿por qué?”. Porque Jehová es testigo entre ti y la
mujer de tu juventud, con la cual has sido desleal, aunque ella era tu compañera
y la mujer de tu pacto. ¿no hizo el un solo ser, en el cual hay abundancia de
espíritu? ¿y por que uno? Porque buscaba una descendencia para Dios. Guardaos,
pues, en vuestro espíritu y no seáis
desleales para con la mujer de vuestra juventud. Porque dice Jehová, Dios de
Israel, que el aborrece el repudio y al que mancha de maldad su vestido, dijo
Jehová de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro espíritu y no seáis
desleales. Habéis hecho cansar a Jehová con vuestras palabras. Y preguntáis:
“¿en que lo hemos cansado?” en que decís: “Cualquiera que hace mal,
agrada a Jehová; en los tales se complace”;
o si no: “¿dónde esta el
Dios de justicia?”.
3
“Yo envíe mi mensajero para que prepare el camino delante de mi. Y vendrá súbitamente
a su templo el señor a quien vosotros buscáis; y el ángel del pacto, a quien
deseáis vosotros, ya viene”, ha
dicho Jehová de los ejércitos. ¿Por quien
podrá soportar el tiempo de
su venida? O ¿quién podrá estar en pie cuando el se manifieste? Porque
el es como fuego purificador y como jabón de lavadores. El se sentara
para afinar y limpiar la plata: limpiara a los hijos de levi, los afinara como a
oro y como a plata y traerán a Jehová ofrenda en justicia. Entonces será
grata a Jehová la ofrenda de juda y de Jerusalén, como en los días pasados,
como en los años antiguos. “Vendré a vosotros para juicio, y testificare sin
vacilar contra los hechiceros y adúlteros, contra los que juran falsamente;
contra los que defraudan en su salario al jornalero, a la viudad y al huérfano,
contra los que hacen injusticia al extranjero, sin tener temor de mi”, dice
Jehová de los ejércitos. “porque yo, Jehová , no cambio; por esto, hijos de
jacob, no habéis sido consumidos. Desde los días de vuestros padres os apartéis
de mis leyes y no las guardáis. ¡volveos a mi y yo me volveré a vosotros!,
ha dicho Jehová de los ejércitos. Pero vosotros decís: “¿en que
hemos de volvernos?”. ¿Robara el nombre de Dios? Pues vosotros me habéis
robado. Y aun preguntáis: “¿en que te hemos robado?”. En vuestros diezmos
y ofrendas. Malditos sois con maldición, porque vosotros, la nación toda, me
habéis robado. Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa:
probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, a ver si no os abro las
ventanas de los cielos y derramo sobre vosotros bendición hasta que
sobreabunde. Reprenderé también por vosotros al devorador,
y no os destruirá el fruto de la tierra, ni vuestra vid en el campo será
estéril, dice Jehová de los ejércitos. Todas las naciones os dirán
bienaventurados, porque seréis
tierra deseable, dice Jehová de los ejércitos. “Vuestras palabras contra mi
han sido violentas, dice Jehová. Y todavía preguntáis: “¿Qué hemos
hablado contra ti?”. Habéis dicho: “por demás es servir a Dios. ¿qué
aprovecha que guardemos su ley y que andemos afligidos en presencia de Jehová
de los ejércitos?. Hemos visto que los soberbios son felices que los que hacen
impiedad no solo prosperan, sino que tientan a Dios y no les pasa nada”.
Entonces los que temían a Jehová hablaron entre si. Jehová escucho y oyó y
fue escrito ante el un memorial de los que temen a Jehová y honran su nombre.
“Serán para mi especial tesoro, dice Jehová de los ejércitos, en el día
que yo actúe. Los perdonare como un hombre perdona al hijo que lo sirve.
Entonces os volveréis y discerniréis la diferencia entre el justo y el malo,
entre el que sirve a Dios y el que no le sirve”.
4
“Ciertamente viene el día, ardiente como un horno, y todos los soberbios y
todos los que hacen maldad serán estopa. Aquel día que vendrá, los abrasara,
dice Jehová de los ejércitos, y nos les dejara ni raíz ni rama. Mas para
vosotros, los que teméis mi nombre, nacerá el sol de justicia y en sus alas
traerá salvación. Saldréis y saltareis como becerros de la manada.
Pisoteareis a los malos, los cuales serán ceniza bajo las plantas de vuestros
pies en el día que yo actúe, dice Jehová de los ejércitos. “Acordaos de la
ley de moisés, mi siervo, al cual encargue, en horeb, ordenanzas y leyes para
todo Israel. “ Yo os envío al profeta Elías antes que venga el día de Jehová,
grande y terrible. El hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y
el corazón de los hijos hacia los
padres, no sea que yo venga y castigue la tierra con maldición”.