cap 35 2 parte.htm

   Esto de los palos a Sancho lo vivió Cervantes en Argel cuando fue castigado a que le administraran 2000 de ellos......castigo que no se cumplio afortunadamente, sino, no hubieramos disfrutado de su obra.

 

 A ti digo ¡oh varón, como se debe
por jamás alabado!, a ti, valiente
juntamente y discreto don Quijote,
de la Mancha esplendor, de España estrella,
que para recobrar su estado primo
la sin par Dulcinea del Toboso,
es menester que Sancho, tu escudero,
se dé tres mil azotes y trecientos
en ambas sus valientes posaderas,
al aire descubiertas, y de modo
que le escuezan, le amarguen y le enfaden.
CERVANTES

index               34              36