En
el departamento de El Paraíso, situado
en la zona sur este de Honduras, se localizan
poblaciones dignas de ser visitadas, como
Yuscarán, Danlí y Güinope,
las cuales poseen rasgos folklóricos
muy arraigados, reflejo de una cultura rica
en tradiciones, belleza e historia. La ruta
comienza en la carretera hacia Danlí
desde Tegucigalpa, pasando por las pintorescas
comunidades de Tatumbla, El Zamorano (sede
de la prestigiosa Escuela Agrícola
Panamericana) y otras.
Yuscarán.
Esta ciudad con sabor añejo se localiza
a 65 kilómetros de Tegucigalpa, y
es la cabecera de El Paraíso. Su
aspecto está ligado con la actividad
minera que desarrollaron primero los conquistadores
españoles, y posteriormente compañías
norteamericanas. El casco histórico
de Yuscarán contiene más de
200 casa de tipo colonial, por lo que fue
declarada Monumento Nacional desde 1979.
Tal es el caso de la antigua Casa Fortín,
actual sede del Museo Regional.
Al recorrer sus serpentadas calles empedradas,
resulta interesante visitar la pequeña
Iglesia Parroquial, que con arquitectura
sencilla alberga mobiliario, joyería
y pinturas que recuerdan una época
de prosperidad. La huella de la explosión
de metales permanece intacta en las bocaminas
e instalaciones mineras abandonadas, alrededor
de las cuales se tejen un sinnúmero
de misteriosas leyendas.
Bordeando el lado sudoeste de Yuscarán,
se levanta el cerro Montserrat, donde se
ha delimitado la Reserva Biológica
del mismo nombre. Además, en las
localidades cercanas a Orealí y Oropolí,
se hallan unos petroglificos de la época
precolombina.
Yuscarán es conocido por producir
el famoso guaro o Aguardiente Yuscarán,
una fuerte bebida alcohólica hecha
a base de caña de azucar.
En el mes de junio este poblado experimenta
especial movimiento al realizarse la Feria
del Mango.
Danlí.
A unos 92 kilómetros de Tegucigalpa,
se levanta la próspera cuidad de
Danlí, responsable de la mayor parte
de la producción nacional de maíz.
Por estar rodeada de cerros cargados de
verde pinar, se le ha denominado la Ciudad
de las Colinas.
Danlí ha logrado una gran aceptación
internacional gracias a la celebración
del tan esperado Festival del Maíz,
en el mes de agosto. El evento incluye ventas
de artesanías, desfiles de carrozas,
concursos de arte, rodeos, competencias
deportivas y carnavales, que convierten
al lugar en una gigantesca fiesta típica.