REMEMBRANZAS
CUARESMALES
ra un lejano miércoles cuatro de febrero, cuando todos los guatemaltecos aún dormían apaciblemente. De pronto a eso de las 3:03 AM, se suscita un terremoto, que deja dolor y luto en Guatemala, afectando el altiplano, oriente y zona central del país incluyendo, a la Nueva Guatemala de la Asunción...muriendo mas de veinte mil compatriotas...El Templo Mercedario no fue ajeno, quedando seriamente dañado. La bóveda del Altar Mayor, donde se colocaba a la Consagrada Imagen, oscilaba suspendida de dos muros, pues los restantes se desplomaron hacia atrás del altar, destruyendo la casa de la Comunidad Jesuita.
ra imposible ingresar por la 5ta.Calle y se accedió por la casa que fue de la Cruz Roja en la 4ta.Calle. Atrás del altar estaba el "ropero de Jesús", el cual se destruyó, siendo necesario descentrarlo del ripio para rescatar las túnicas del Nazareno Mercedario, así como los Leones de Bronce de las andas.
las seis de la mañana, el Rev. Padre Jorge Toruño S.J., en compañía del Lic. Raúl Valdeavellano Pinot, Carlos Díaz del Cid y su hijo Carlos Manuel Díaz Maza, procedieron a bajar al Nazareno del Altar Mayor, mientras era trasladado a la biblioteca del Colegio Loyola Apto. 13. el padre Toruño dice: "ESTA ES LA PROCESIÓN MAS TRISTE DE JESÚS NAZARENO". Posteriormente se les unió el Padre Jesús Navascuez S.J.
l primer Domingo De Cuaresma 7 de Marzo, se realiza una ROGATIVA POR EL CESE DE TEMBLORES DEL TERROMOTO DE SAN GILBERTO, el Patrón Jurado recorre el barrio de su parroquia para recibir ruegos y súplicas de sus feligresía que lo lleva cargado en sencillas andas de 14 brazos. Las súplicas se interrumpen por un redoblante que marca el paso, pues no lleva banda. Por adorno, lleva un sencillo mantel blanco, las personas ofrecen flores y viste nuestro Nazareno, la túnica francesa, en ese entonces en su color original morado. Los cargadores se ordenaban en cada esquina, alternando una cuadra de caballeros y otra de Damas(siendo, una de las únicas veces que es llevado por mujeres). Saliendo del patio del Colegio Loyola, recorrió el Callejón Del Fino, 2da. Calle, 12 Avenida, Callejón del Judío, y al enfilar por la 17 Avenida, un temblor hace detener la procesión y aumentar los piadosos ruegos. Retornando por Matamoros. En lugar de alfombras bellamente elaboradas las calles, yacían cubiertas de ripio, polvo fino de adobe, que se levantaba en remolinos con los vientos de marzo, los vecinos espontáneamente regaban agua, la cual, era muy escasa.
