ANDREA PALMA
Una sombra en mi destino  (1944)
Andrea Palma en Una sombra en mi destino
Producci�n: Producciones Rosas Pirego.
Direcci�n: Alberto Gout.
Argumento: sobre la pieza La sombra de Dario Nicodemi;.
Adaptaci�n: Alberto Gout, Juan Antontonio Vargas y Miguel Morayta.
Fotograf�a: Alex Phillips.
Escenograf�a: Jos� Rodr�guez Granada.
Edici�n: Alfredo Rosas Pirego.

Int�rpretes: Andrea Palma (Berta Giral), Jorge V�lez (Gerardo Rivera de la Pe�a), Carmen Guerrero (Luisa), Alejandro Cobo (Miguel Gazc�n), Carlos Mart�nez Baena (doctor Palafox), Prudencia Grifell (Laura, nana de Berta), Jorge Ancira (Antonio), Jos� Goula (padre de Gerardo), Alicia Rodr�guez (Lichita), Celia Manzano (Alicia), Jos� El�as Moreno (Pedro).
Jorge V�lez y Andrea Palma en el cartel publiciatario de  Una sombra en mi destino
Sinopsis: La prestigiada doctora Berta Giral impide por casualidad que se suicide el pintor Gerardo Rivera de la Pe�a a causa de una desilusi�n amorosa provocada por la interesada Alicia. Gerardo vive con Miguel, un amigo de la infancia que lucha para llegar a ser un compositor de fama. Gerardo observa admirado como Berta va curando a la ni�a paral�tica Lichita, hija del jardinero. Para complacer a Berta, Gerardo compra una bicicleta a Lichita. Muere el padre de Berta. Gerardo le regala el primer cuadro que pinta desde que ella impidi� su suicidio. Ambos se enamoran. Gerardo triunfa como pintor y decide casarse con Berta. Antes de la boda, una amiga de Berta, la fr�vola Luisa, confiesa a Gerardo que est� enamorada de �l, pero �l le dice que el amor de su vida es Berta y se casar� con ella. Luisa desaparece por un tiempo, llegando un d�a, ya casados Berta y Gerardo, con la noticia de que se ha casado con el rico comerciante Pedro. Berta est� embarazada, pero cae por una escalera, pierde al beb� y queda paral�tica. Gerardo, que sigue enamorado de su esposa, pese a la invalidez de �sta, se hace famoso r�pidamente como pintor. El doctor Palafox, maestro y entra�able amigo de Berta, hace inhumanos esfuerzos para curarla sin lograrlo; as� pasan seis a�os.
   Miguel, ahora compositor de moda, lleva una noche a Gerardo a un cabaret para escuchar una canci�n suya que se estrena aquel d�a. All� se encuentran con Luisa, quien confiesa a Gerardo que se ha divorciado de su esposo. Al cabo de alg�n tiempo, se hacen amantes.   Berta nota alguna mejor�a en su enfermedad y se lo dice al doctor Palafox, quien opina que lograr� recuperarse del todo. Berta le ruega que guarde el secreto de su recuperaci�n pues desea darle una sorpresa a Gerardo. El d�a que Berta logra caminar perfectamente va a ver a Gerardo a su estudio. �l le confiesa que tiene un hijo con otra mujer y que no ama a la madre, sin embargo, no puede separarse de su hijo. Berta, anonadada, se aleja del estudio con una terrible amargura. Luisito, el hijo de Gerardo, contrae apendicitis y debe ser operado. El doctor Palafox, que va a practicar la operaci�n, dice que quiere que sea Berta quien aplique la anestesia. Miguel va a verla a su casa y le explica lo ocurrido. Berta accede a intervenir en la operaci�n del ni�o. Va a la casa donde ahora vive Gerardo con su amante y descubre que ella es Luisa, su antigua amiga. Al salir Berta de la operaci�n, Gerardo le agradece la ayuda prestada y le ruega que lo perdone. Le reitera que no ama a Luisa; �sta que escucha la conversaci�n confiesa luego a Gerardo que el ni�o no es hijo de �l. Gerardo corre en busca de Berta. Es posible que se reconcilien pero ella va emprender un largo viaje

Referencias: Emilio Garc�a Riera, Historia documental del cine mexicano, tomo 3 pag. 206:
Eduardo de la Vega Alfaro: Alberto Gout (1907-1966) pag 26..
Alejandro Cobo  y Andrea Palma en  Una sombra en mi destino
Comentario (Emilio Garc�a Riera, Historia documental del cine mexicano): El arte (Jorge V�lez) y la ciencia (Andrea Palma) alcanzan el perfecto acuerdo amoroso que tanto facilita las cosas entre los esp�ritus superiores. Pero esos esp�ritus son a la vez muy fr�giles, seg�n el melodrama, y muy sensibles a los asaltos de toda suerte de microbios, incluidas las vampiresas (como Carmen Guerrero en la cinta) que emplean el sombrero y el cigarrillo para delatar su condici�n. Las elegantes langudeces de Andrea Palma y las intensidades de V�lez (un pintor que siempre lleva la inspiraci�n inyectada en sus penetrantes ojos) ahorran al director Gout la molestia de buscar matices en sos personajes que s�lo pueden vivir la felicidad como una tregua de la adversidad.�
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