Cada quien su vida      (1959)
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PELICULAS
JULIO BRACHO
H�ctor L�pez Portillo y Kitty de Hoyos en Cada quien su vida
Producci�n: Isamel Rodr�guez.
Direcci�n: JULIO BRACHO.
Argumetno: sobre la pieza de Luis G. Basurto; adaptaci�n: JULIO BRACHO.
Fotograf�a: Jack Draper.
M�sica: Ra�l Lavista.
Sonido: Manuel Topete y Galdino Samperio.
Escenograf�a: Salvador Lozano Mena; mauillaje: Margarita Ortega.
Edici�n: Jorge Bustos.
Filmada: a aprtir del 8 de mayo de 1959 en los estudios Churubusco.
Estrenada: 2 de marzo de 1960 en los cines M�xico y Mariscala.

Int�rpretes: Ana Luisa Peluffo (Rosa, La Tac�n Dorado), Kitty de Hoyos (Dorita), Carlos Navarro (Bridge), Emma Fink (Mar�a de la Soledad Ord��ez viuda de Moncada, La Siempreviva), B�rbara Gil (Raquel, La Penas), Fernando Mendoza (diputado), Alicia Guti�rrez (La Pepsi-Cola), No� Murayama (El Ojitos), Enrique D�az Indiano (don Pepe), Luz Mar�a N��ez (La Jarocha), H�ctor L�pez Portillo (el profesor), Bruno M�rquez (Juan el gordo), H�ctor G�mez (Bobby), Elodia Hern�ndez (Concha, esposa del profesor), Linda Porto (Lilia Hern�ndez), Carmen Sagredo (la loca); intervenciones musicales: Kahl�a (bailarina),  Enrico Cabiati (pianista), Orquesta de Ram�n M�rquez.
Ana Luisa Peluffo  y Linda Porto en Cada quien su vida
Sinopsis:  En el cabaret El Para�so, a cargo del espa�ol don Pepe, el pianista Mundo, ya muy tomado, toca el piano. El lugar est� vac�o y s�lo lo escucha La Tac�n Dorado, quien se lo lleva a su cuarto. Se celebra el A�o Nuevo. Llega La Siempreviva, vieja cabaretera con delirios de grandeza, llega al cabaret y don Pepe le advierte que no quiere problemas con ella. Una diputado, que acompa�a al gordo Juan, causa un esc�ndalo al meterse con La Siempreviva, quien se aparta en un rinc�n para hacerle compa��a a Raquel, La Penas, quien parece estar muy triste, y a quien La Siempreviva le cuenta su historia. La Jarocha cuenta a La Pepsi-Cola sus problemas con su padrote El Ojitos. �ste platica con el Bridge, quien parece estar enamorado de Raquel. El diputado y Juan el gordo invitan a La Pepsi-Cola y a La Jarocha a tomar una copa. La Jarocha se niega pero El Ojitos la obliga. Llega El Profesor, un hombre muy t�mido, que asiste a�o con a�o al cabaret la noche de A�o Nuevo, para celebrarla con Dorita. La Tac�n Dorado viene de asistir a la muerte del pianista Mundo; calla a la orquesta y llora sobre el piano. En honor al pianista, La Siempreviva hace rezar a todas ante el silencio de los dem�s y va con La Jarocha a la funeraria. La Tac�n Dorado baila con el diputado. El Ojitos se burla del rico y amargado joven Bobby. El Bridge dice a La Penas que no cree en Dios sino en el amor, y ella piensa que tal vez "�l sea bueno". Ambos se declaran su amor.  Dorita lleva al profesor a un cuarto y llora con �l al recordar a su padrote, y �l llora a su vez por la triste vida que lleva con su esposa y sus nueve hijos, y por la timidez que lo aflige. Dorita hace que el profesor le quite las medias y le bese los pies, pero �l se siente impotente. La Tac�n Dorado insulta al Ojitos cuando �ste da celos a La Jarocha con una tal Lilia. La Jarocha pelea con su rival y acaba por desnudarla. El pleito se generaliza pero es interrumpido por una loca, vestida de negro, que dice un discurso amenazador y religioso. Un homosexual interrumpe el discurso de la loca. Todos celebran la llegada del A�o Nuevo. La Jarocha se reconcilia con El Ojitos y La Tac�n Dorado abraza a Lilia. La Siempreviva cuenta a La Penas una historia de su vida diferente a la que le cont� al principio de la noche y le dice que El Bridge ha ido a arreglar un asunto. El diputado impide que la polic�a detenga al muy borracho profesor, quien dice un discurso de pol�tica. El diputado sale del cabaret con Juan a las cinco de la ma�ana, dici�ndole que ahora entiende a todas esas mujeres.. La Tac�n Dorado atiende al golpeado Bobby, que le cuenta sus traumas y problemas familiares. �l sale desesperado a la calle y un cami�n lo atropella. La Penas baila con Bridge al son de un organillo. Despu�s, ella pretende suicidarse porque tiene un tumor en la cabeza. Bridge la besa y se la lleva. La Siempreviva les regala una valiosa joya. Concha, la esposa del profesor, llega en busca de su marido y platica ingenuamente con La Siempreviva. La Tac�n Dorado confiesa a �sta que est� esperando un hijo y no sabe de quien. La Siempreviva llora arrepentida porque seg�n  dice, mat� a su hijo. Convence a La Tac�n de que tenga al suyo y la manda a misa. Despu�s de "cobrarse" en la caja, La Siempreviva se va y encarga el cabaret a un ciego de barba blanca.
Referencia:
Historia Documental del Cine Mexicano; Emilio Garc�a Riera
Emma Fink y Carlos Navarro  en Cada quien su vida
Comentario:  Esto fue lo que Luis G. Basurto, autor de la obra de teatro, Cada quien su vida, dijo para la rvista Z�calo sobre la versi�n cinmetatogr�fica que Julio Bracho hizo de su obra: "La cinta me parece mmaravillosa. Es la primera vez que una obra de teatro se respeta �ntegramente al llevarse al cine. Mi obra ha sido trasplantada como debe ser, solamentge d�ndole los �ngulos cinematogr�ficos muy inteligentemente, con la calidad de Julio Bracho, porque me han p�recido excelentes esas escenas de la azotea y los desplazamientos de c�mara por las calles de la ciudad".

Comentario: (Jes�s Ibarra): El cabaret �El Para�so� durante las �ltimas horas de un 31 de diciembre y las primeras horas del 1 de enero, un grupo de prostitutas y un grupo de clientes desahogan sus penas y frustraciones mientras muere el a�o. Un t�mido profesor (H�ctor L�pez Portillo) revela a su admirada Dorita, una prostituta, su timidez y su frustraci�n por un matrimonio infeliz, con  nueve hijos. El prototipo del hombre mediocre de clase media, que busca desfogar sus excesos en el ambiente nocturno; una timidez que desemboca en la impotencia y que se oculta tras el alcohol, cuando el profesor, alcoholizado lanza un discurso, que en sus cinco sentidos no ser�a capaz de pronunciar. Dorita es la sensual rubia Kitty de Hoyos, quien logra con L�pez Portillo y bajo la batuta de Julio Bracho, una escena de antolog�a, cuando el t�mido y sufrido profesor, deposita un ligero beso en el pie derecho de Dorita, habi�ndole quitado antes la media, con un estilo magn�fico. Dorita trata de desinhibir al profesor, pero ella tambi�n desahoga sus penas, su frustraci�n de estar enamorada y no ser correspondida.
   Raquel La Penas  (una hermosa B�rbara Gil), sufre por la enfermedad que le aqueja y teme corresponder al amor que le ofrece El Bridge. Un sobrio y elocuente Carlos Navarro interpreta a Bridge, un hombre, que a pesar de su innoble oficio, tiene buenos sentimientos. La Penas y Bridge representan el amor surgido entre el fango.
   La Siempreviva, en una extraordinaria actuaci�n de Emma Fink, es la prostituta vieja y decadente, a�orante de su pasado, quiere redimirse y redimir a los dem�s apeg�ndose  a la religi�n; Encuentra tambi�n la redenci�n al dar a Bridge, que a renunciado a sus negocios sucios por amor a Raquel, un collar de perlas para que obtengan algo de dinero y disfruten su amor. su propio apodo, Siempreviva es la esencia del personaje, que se encarga de cerrar la cinta cuando despu�s de �cobrarse� en la caja del cabaret, deja el lugar.
   La Tac�n Dorado (Ana Luisa Peluffo) es la esencia melodram�tica del argumento; una madre abnegada en potencia; despliega su sentido maternal desde que lleva al tomado Mundo a su cuarto y luego acude a su funeral. Despu�s atiende y escucha las penas del golpeado Bobby (H�ctor G�mez). El melodrama maternal se perpetuar� cuando La Tac�n confiesa a la Siempreviva que est� encinta.
   . Cada quien su vida es la redenci�n de una sociedad pecadora, una impactante pel�cula de Julio Bracho que logr� plasmar �ntegra en la pantalla  la esencia de la obra de Luis G. Basurto.
Actor, Alicia Guti�rrez y Luz Mar�a N��ez en Cada quien su vida
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