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AUTORIDADES INSTITUCIONALES
Representantes Legales:
Pbro. Juan Carlos Roldán / Lic. Dario Pulfer.
ESTRELLA DE BELEN:
Directora: Patricia Maritano.
Vicedirectora:
Alejandra Matano.
Secretaria:
Diana Koltun.
Coordinador Cateq.:
Martha Boretto de Lambrechts
COLEGIO SAN FERNANDO:
Director: Lic. Julián Moreno
Vicedirectoras:
Prof. Alicia Rodríguez / Prof. Mirta Pompozzi.
Secretaria:
Mirta Rebagliatti.
Coordinador Cateq.:
Martha Boretto de Lambrechts
INSTITUTO SAGRADO CORAZON:
Director: Lic. Fabián Triolo
Vicedirectores:
Silvia Ulrich / Miguel Coronel
Secretaria:
Cristina Riquelme.
Coordinador Cateq.:
Adrian Eslaimán

PRESENTACIÓN GENERAL
En el Documento que presentamos se sintetizan los ejes que constituyen el Ideario de nuestra propuesta educativa, nuestra misión esencial, las características y prioridades en las dimensiones pedagógica, pastoral, social y económica-financiera de la Institución así como la descripción sumaria de los servicios que ofrecemos desde el Nivel Inicial hasta el Nivel Terciario, así como los desafíos centrales para la próxima etapa.
No se trata de una declaración de principios sino de un instrumento de trabajo para todos los actores de la comunidad educativa. En el mismo encontraremos la orientación común que queremos concretar en los próximos años.

INTRODUCCIÓN
La Institución Educativa Sagrado Corazón de Jesús nació respondiendo a las necesidades de una comunidad constante en expansión. Desde mediados de la década del 50 con la creación del nivel primario, en los 60 con la constitución del nivel secundario, en los 70 con la apertura del nivel inicial anexado al primario y en forma independiente luego, hasta la creación del nivel terciario en 1987; Una comunidad que se iba haciendo numerosa, compleja y reconocida, una comunidad que pasó en estas décadas de barrio a ciudad y de delegación municipal dependiente de Morón a partido autónomo.

En estas décadas la Institución Educativa Sagrado Corazón de Jesús fue ampliando permanentemente su oferta educativa hasta consolidarse como una referencia significativa en la educación de Hurlingham.

En el principio estuvo la voluntad emprendedora de los P. Bazán y Cherasco para abrir los caminos de la escuela católica en Hurlingham. Junto a él muchos laicos comenzaron a asumir responsabilidades de dirección. Más tarde, los Padres E. Fernández, Farrel, Cencing, Angolani continuaron la huella y la profundizaron en un trabajo mancomunado con los laicos comprometidos en el mundo de la educación. Hoy queremos recuperar toda esa energía y disposición pastoral hacia la comunidad de Hurlingham para proyectarla hacia el nuevo siglo. En esa perspectiva hacemos presente el mandato de nuestro obispo Monseñor Laguna: “La base social más amplia posible y la excelencia académica”.

En la actualidad la Institución Educativa alberga un Nivel Inicial independiente -Estrella de Belén-, la Educación General Básica -San Fernando-, tres orientaciones del nivel Polimodal -Instituto Sagrado Corazón de Jesús- y cinco carreras de Nivel Terciario -Instituto Superior de Formación Docente de Grado Sagrado Corazón de Jesús- contando desde hace años con un significativo progreso en la matriculación.

Hoy queremos mejorar la calidad de la propuesta pedagógica que realizamos en todos los niveles ajustando la formación a los nuevos requerimientos que plantea la sociedad del Tercer Milenio.

La tarea de educar no se produce en forma individual ni azarosa sino que responde a contextos, a una organización que genera las condiciones necesarias para que los aprendizajes de los niños y jóvenes y al proceso sistemático e intencional de transmisión-apropiación de conocimientos, procedimientos y valores. Hoy queremos construir una escuela inspirada en el Evangelio, abierta al aprendizaje, en diálogo permanente con el conocimiento, la ciencia y las innovaciones científico-tecnológicas y enraizada en la cultura de la zona en la que nos toca desempeñarnos.

Buscamos contar con un proyecto compartido por todos los actores en el que refleje con claridad la comunidad educativa que queremos construir.

En el proyecto deberán sintetizarse lo que la comunidad vivamente desea, los propósitos y objetivos de la Institución y lo que es posible realizar. El mismo constituye un ordenador de las actividades de los diferentes actores (directivos, docentes, alumnos, padres) y es un instrumento para la acción. No es una declaración retórica, ni un documento escrito para cumplir una formalidad. Es una herramienta de trabajo para identificar los problemas, consensuar posibilidades de intervención y soluciones, y establecer mecanismos de comunicación, participación y evaluación.

EL PROCESO DE ELABORACIÓN DE UN NUEVO PROYECTO EDUCATIVO INSTITUCIONAL
Para definir el Proyecto Educativo Institucional hemos recorrido a lo largo de todo el año 1999 un camino para ir reconociendo las señas particulares de nuestra identidad y proyectando las acciones que pueden ayudar a mejorar nuestra propuesta.

En ese camino hemos tenido en cuenta algunos elementos y procesos.
Tomamos nuestra inspiración del vasto patrimonio doctrinal de la Iglesia Católica, especialmente desde el Concilio Vaticano II a la actualidad en su expresión universal, latinoamericana y argentina. Esta inspiración se expresa en los ejes doctrinales que constituyen desde hace más de una década nuestro Ideario, en la fundamentación del trabajo docente, en las modalidades de gestión que buscan asumirse y en la clara pertenencia de la Institución a la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús de Hurlingham y al Obispado de Morón.

Partimos de una situación relativamente consolidada, ya que contamos con:
* Un proyecto educativo acordado desde hace más de una década para los cuatro niveles de la Institución, con un Ideario común y un marco real compartido
* Un clima positivo y una disposición favorable a los cambios por parte de la mayoría,
* Instancias compartidas de conducción y administración
* Buen plantel profesional, con docentes responsables y comprometidos con la tarea,
* Un proceso de incorporación gradual de los nuevos contenidos curriculares,
* Un área de pastoral presente en el pensamiento institucional, con buenos equipos por nivel, que desarrolla iniciativas, garantiza una buena formación de niños y jóvenes, incorpora la presencia sacerdotal en los diferentes niveles y se vincula a la Parroquia y a la Diócesis,
* Un proceso de inversiones realizado en infraestructura, equipamiento y capacitación,
* Una perspectiva de futuro.

En el año 1999 los docentes y directivos de la Institución Educativa Sagrado Corazón de Jesús de Hurlingham hemos compartido diferentes instancias de trabajo para elaborar las bases del Documento del Proyecto Educativo Institucional que hoy presentamos a toda la comunidad. A tal fin se realizó una tarea de diagnóstico identificando fortalezas y debilidades, amenazas y desafíos en lo referido a las diferentes dimensiones constitutivas de la vida de la escuela. Distintas comisiones trabajaron sobre la misión de la Institución, la revisión del Ideario y las dimensiones pedagógica y pastoral.

En el Documento que hoy presentamos se encuentran plasmados los ejes que deben continuar inspirando nuestro trabajo, la visión de la escuela con la que soñamos, las definiciones principales en lo referido a lo pedagógico, pastoral, social y económico-financiero y los desafíos principales para la próxima etapa.

NUESTROS EJES INSPIRADORES
Desde hace más de una década están establecidos los cuatro ejes inspiradores de nuestra propuesta de educación: la fe que salva y humaniza, la opción preferencial por los pobres, la evangelización de la cultura, la comunión y la participación.

Consideramos que los mismos siguen teniendo validez para la próxima etapa y referimos al Documento de base en el que se encuentran desarrollados y en el que pueden consultarse las fuentes de su elaboración.

Ingresando al Tercer Milenio consideramos que los mismos se concretan insistiendo en los siguientes aspectos:

- La fe que salva y humaniza debe reflejarse en la formación integral de la persona que tenemos como propósito central, en las dimensiones personal, social y trascendente. Esto significa: la adhesión explícita a la persona de Jesucristo y su mensaje. Preparación en conocimientos técnicos y profesionales. Capacitación para el trabajo. Formar para la transformación de las estructuras injustas y una adecuada integración social. Educación democrática para el desempeño ciudadano. Estas constituyen las dimensiones que la tarea educadora debe tener siempre presente.

- La evangelización de la cultura implica un reconocimiento de los valores de religiosidad popular, solidaridad y participación que tiene nuestro pueblo. Desde ese reconocimiento debemos evangelizar recreando los valores de nuestra propia identidad cultural como nación en el marco latinoamericano y continental, en la afirmación del amor a lo propio, en el fortalecimiento de nuestra singularidad frente a otros países en los procesos de integración regional y mundialización que se están produciendo de modo vertiginoso, así como el conocimiento, la aceptación del otro y la apropiación crítica de los conocimientos, valores y comportamientos de otras sociedades y realidades geográficas que hoy se nos presentan en forma instantánea por el avance científico-tecnológico de las comunicaciones.

- La opción preferencial por los pobres en instituciones de las características que tiene la nuestra se expresa en una educación de calidad, en la formación para la solidaridad, en la atención a las familias que más necesitan de nuestra comunidad, en el desarrollo de gestos e iniciativas concretas de ayuda a comunidades con bajos recursos, en la generación de alternativas de inclusión de los sectores que más sufren en la situación actual a través de propuestas de formación y capacitación para el trabajo.

- La comunión y la participación constituyen un eje transversal a toda la comunidad educativa y a toda la tarea de educar. Constituye el estilo de construcción de la comunidad educativa que deseamos vivir en las instancias de dirección, entre docentes, en el trabajo de aula, en la relación con las familias, en la vinculación con la comunidad local.


LA ESCUELA QUE SOÑAMOS
Toda acción supone una visión de la realidad en la que nos toca actuar y de la realidad a la que se aspira llegar. Desde el trabajo realizado con la participación de los diferentes actores de la comunidad educativa proponemos los siguientes rasgos para la escuela que deseamos construir:

- Buscamos una escuela inspirada en el Evangelio de Jesús, colaborando en la tarea evangelizadora de la Iglesia y en particular de la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús-Hurlingham de la que formamos parte.

- Queremos construir una institución con identidad cristiana abierta a la comunidad: una propuesta diferenciada impregnada por los valores evangélicos de comunión, participación, solidaridad con los más pobres y en diálogo permanente con la diversidad religiosa y cultural.

- Anhelamos una institución abierta al conocimiento, a los avances de la ciencia y la tecnología, en la que los aprendizajes de los niños y jóvenes estén en el centro de la atención de docentes y directivos, plasmando un proyecto coherente y articulado entre los distintos niveles a partir de la transformación educativa.

- Queremos una escuela en la que la participación y el compromiso se exprese en todos los niveles: los directivos trabajando en equipo y participando en organismos colegiados de conducción, los docentes trabajando cooperativamente, familia y escuela colaborando corresponsablemente en la tarea de educar a niños y jóvenes.

- Aspiramos a la construcción de una escuela acogedora, en la que se den procesos crecientes de participación de alumnos, docentes y familias, fortaleciendo el compromiso de los padres en el proceso de maduración y crecimiento de los niños y jóvenes, generando espacios de encuentro y reflexión sobre diferentes problemáticas (violencia, droga, etc.).

- Queremos relacionarnos e integrarnos cada vez más a la comunidad local y vincularnos productivamente con todas las instituciones de la zona para contribuir desde nuestro lugar al crecimiento y transformación de la comunidad de Hurlingham.

- Buscamos una escuela que escuche, acompañe y contenga a los sectores sociales que hoy, atendemos, evitando a la vez el elitismo y la discriminación social, respondiendo a los objetivos, valores y principios institucionales.

- Aspiramos a una escuela solidaria con los que menos tienen y sensible a los llamados de justicia, comunicada y conectada con diferentes realidades para el desarrollo de iniciativas de promoción comunitaria y social, una institución que tienda permanentemente puentes de inclusión social a través de ofertas de formación “a lo largo de toda la vida” (formación profesional, formación técnica superior, capacitación laboral, ofertas flexibles y a término que respondan a la demanda productiva local y a las necesidades sociales de la zona.)


PARTIMOS DE UNA REALIDAD EN LA ZONA Y ...CONSTATAMOS QUE EXISTEN ELEMENTOS CRÍTICOS COMO
- Situaciones laborales difíciles: desempleo, precariedad de las situaciones laborales, bajas retribuciones salariales.
- Una crisis de valores en la que todo se pone en duda y se relativiza generando actitudes escépticas y no comprometidas, fomentando una visión desesperanzada de la vida.
- Situaciones sociales conflictivas: hechos de violencia, droga, alcoholismo, etc. que comprometen el futuro de los jóvenes.
- Actitudes ambivalentes en relación a la escuela y su función.

A LA VEZ QUE VEMOS:
- Un apoyo significativo de las familias del Instituto.
- Un esfuerzo de muchos para que los niños y jóvenes continúen estudiando aún en las difíciles situaciones socio-económicas.
- Valores como la religiosidad popular, la disposición a participar y expresiones y gestos solidarios.

A PARTIR DE ESTA REALIDAD ESTAMOS EN LA BÚSQUEDA DE UNA ESCUELA:
- En la que se viva cada vez más un clima evangélico y se generen permanentes diálogos entre la fe y la ciencia, la fe y la cultura y la fe y la vida.
- En la que se trabaje en forma explícita la articulación entre niveles para garantizar un estilo común y contenidos ordenados en grados de complejidad, así como acciones de capacitación conjunta.
- Abierta a la comunidad local y a sus necesidades.
- En la que se produzca la participación de las familias en la vida escolar y en la que la cooperación escuela-hogar sea el eje de la formación de los niños y jóvenes.
- En la que se ofrezcan oportunidades de evangelización, estudio y capacitación para los padres.
- Atenta y sensible ante los problemas sociales como las adicciones, enfermedades, etc.
- Solidaria con los que menos tienen a través del desarrollo de iniciativas y acciones regulares.
- Vinculada fuertemente a la Parroquia.
- Relacionada con otras instituciones educativas en redes de cooperación e intercambio.
- Con una infraestructura que resulta necesario seguir manteniendo y mejorando aún más, a fin de brindar un entorno adecuado para el trabajo escolar.
- Con una atención cordial y abierta a las demandas y necesidades de los que se acercan.

UNA ESCUELA EN LA QUE:
- Los directivos estén abiertos a las demandas y necesidades de los padres, docentes y alumnos; lleven una gestión democrática, constituyendo espacios de participación y toma de decisiones compartidas, manteniendo una comunicación abierta, franca y permanente.

- Los docentes sean idóneos, participativos, innovadores, dinámicos, creativos, originales, comprometidos con la comunidad.

- Los directivos y docentes se actualicen y perfeccionen en forma permanente tanto en el ámbito institucional como en otros espacios informativos.

- Se formen alumnos independientes en el pensamiento, críticos, creativos, abiertos y flexibles, autónomos en la toma de determinaciones y cooperativos a partir de un marco ético que responda a la formación de una persona que asuma un compromiso de defensa de la dignidad humana, formada en los valores de la solidaridad, el respeto en la aceptación de las diferencias entre las personas, la justicia, la honestidad, el compromiso con la verdad y la participación fortaleciendo su identidad cristiana a fin de permitirle una interpretación y acción en el mundo desde esa cosmovisión.

- La administración esté al servicio del desarrollo de la misión educadora, siendo transparente, desarrollando e informando sobre las inversiones prioritarias que deben realizarse en las áreas de infraestructura, equipamiento y capacitación. Una administración atenta a las realidades sociales y que acompaña las situaciones de las familias de la Institución.

NUESTRA MISIÓN ESENCIAL
Nuestro Instituto, centrando en la evangelización su misión específica:
- Promoverá una formación integral de la persona humana.
- Brindará una educación que sea competente desde el punto de vista técnico y profesional.
- Procurará que su acción educativa llegue a todos los sectores de la sociedad sin distinciones ni exclusivismos.

Asumimos como sentido fundamental de nuestra misión educativa la siguiente afirmación del Papa Juan Pablo II:” Lo más urgente hoy es llevar a los hombres a descubrir su capacidad de conocer la verdad y su anhelo de un sentido último y definitivo de la existencia”(cita precisa).

DIMENSION PASTORAL
Concebimos nuestra dimensión pastoral como aporte a la misión evangelizadora de la Iglesia. De este modo, la Institución es evangelizada y evangelizadora al mismo tiempo.
Evangelizada hacia su interior y en todos los estamentos que conforman la comunidad educativa; evangelizadora en su servicio hacia la comunidad de Hurlingham. Como afirma Mons. J. O. Laguna: “La escuela católica es para evangelizar, sino no tiene sentido su existencia (CDMCE 3,1).

Y como “No hay evangelización verdadera, mientras no se anuncie el Nombre, la Doctrina, la Vida, las Promesas, el Reino, el Misterio de Jesús de Nazareth, Hijo de Dios”(E.N 22), es que procuramos los siguientes logros:

- Un ambiente favorable a la acción evangelizadora, donde se privilegie el diálogo, el encuentro, las celebraciones de la fe , la solidaridad y el trabajo cooperativo.
- Un proceso catequístico permanente en el que puedan participar padres, docentes, personal auxiliar, ex-alumnos y otras personas vinculadas a la comunidad educativa.
- Una comunidad educativa que, en comunión con la comunidad parroquial, suscite la pertenencia cordial de la Iglesia y promueva el servicio solidario a los más pobres.

Para la consecución de estos logros, vemos la necesidad de privilegiar, entre otros, los siguientes aspectos:
- Anunciar el Evangelio de Jesucristo, proponiendo el encuentro con Dios Padre y promoviendo la actitud del discipulado.
- Explicitar la concepción antropológica cristiana, teniendo en cuenta especialmente su integridad, la dimensión transcendente que la caracteriza y la perspectiva ética que esto supone.
- Favorecer la comprensión y asunción de nuestra cultura, de la ciencia, de la historia y de la vida desde una cosmovisión cristiana y según la Enseñanza Social de la Iglesia.
- Ofrecer cauces para el compromiso personal y comunitario en orden a una sociedad más justa y más fraterna, donde el espíritu de las bienaventuranzas se experimente como la “Verdad que nos hace libres”.


DIMENSIÓN PEDAGÓGICA
Buscamos una escuela abierta al conocimiento y los aprendizajes significativos. Asumimos una determinada concepción del aprendizaje: centrada en la construcción del conocimiento por parte del sujeto que aprende, comprendiendo el aprendizaje como un proceso dinámico destinado a adquirir y modificar hábitos de conducta social e individual, con un enfoque transformador y participativo, en el que se favorece la apropiación de los saberes de forma más indagatoria que explicativa. La construcción del aprendizaje constituye una realización interpersonal de forma que el saber se construye desde el intercambio social, trascendiendo el ámbito individual, movilizando y produciendo cambios en los sujetos.

Según nuestra concepción de la enseñanza-aprendizaje los principios orientadores son:

* Centrado en el desarrollo y formación de competencias.
* Con un rol protagónico del alumno durante todo el proceso.
* Con didácticas que favorezcan la participación, la confrontación de ideas, la construcción de conclusiones, etc.
* Favoreciendo el trabajo en equipo que tenga en cuenta la articulación y la interdisciplinariedad para comprender la realidad de manera abarcativa.
* La elaboración y construcción de proyectos que involucren a docentes-alumnos, docentes-docentes, alumnos-alumnos, escuela-familia.
* Orientando la construcción de síntesis abarcadoras donde se encuentre el conocimiento cotidiano con el conocimiento científico.
* Entendiendo a la evaluación como un proceso permanente que no se centra exclusivamente en los resultados sino que es punto de partida para nuevas iniciativas.

Una escuela en la que la evaluación es concebida en forma dinámica como un instrumento de relevamiento de la información educativa cuyos resultados deben ser tomados en cuenta a la hora de la toma de decisiones: con transparencia en sus formas de medición y valoración de resultados. La evaluación constituye una acción transformadora del hecho educativo ya que permite la modificación, la adecuación de los procesos de enseñanza y aprendizaje y de todas las acciones que intervienen en el quehacer educativo. La promoción de los alumnos debe ser el resultado de un proceso de maduración, superación y aprendizaje significativo.

Necesitamos un seguimiento personalizado de los alumnos con un departamento psicopedagógico que acompañe y oriente ante los problemas reales que se presentan en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Según nuestra concepción de la enseñanza-aprendizaje los principios orientadores son:

* Centrado en el desarrollo y formación de competencias.
* Con un rol protagónico del alumno durante todo el proceso.
* Con didácticas que favorezcan la participación, la confrontación de ideas, la construcción de conclusiones, etc.
* Favoreciendo el trabajo en equipo que tenga en cuenta la articulación y la interdisciplinariedad para comprender la realidad de manera abarcativa.
* La elaboración y construcción de proyectos que involucren a docentes-alumnos, docentes-docentes, alumnos-alumnos, escuela-familia.
* Orientando la construcción de síntesis abarcadoras donde se encuentre el conocimiento cotidiano con el conocimiento científico.
* Entendiendo a la evaluación como un proceso permanente que no se centra exclusivamente en los resultados sino que es punto de partida para nuevas iniciativas.

Una escuela en la que la evaluación es concebida en forma dinámica como un instrumento de relevamiento de la información educativa cuyos resultados deben ser tomados en cuenta a la hora de la toma de decisiones: con transparencia en sus formas de medición y valoración de resultados. La evaluación constituye una acción transformadora del hecho educativo ya que permite la modificación, la adecuación de los procesos de enseñanza y aprendizaje y de todas las acciones que intervienen en el quehacer educativo. La promoción de los alumnos debe ser el resultado de un proceso de maduración, superación y aprendizaje significativo.

Necesitamos un seguimiento personalizado de los alumnos con un departamento psicopedagógico que acompañe y oriente ante los problemas reales que se presentan en el proceso de enseñanza-aprendizaje.

ORGANIZACIÓN ESCOLAR Y SERVICIOS
La Institución cuenta con un Consejo Académico integrado por los directivos de cada nivel, coordinadores de Catequesis, el Representante Legal y el Párroco, un Consejo de Administración (Párroco, Representante Legal y Directores de cada nivel).

El Instituto cuenta con:
Gabinete de Computación.
Salas de video y proyecciones.
Centro Deportivo y recreativo para actividades especiales.
En los niveles de EGB y Polimodal existen las siguientes actividades:
Coro, Danzas y Deportes.

DESAFÍOS Y PROYECCIONES:
Tenemos frente a nosotros una serie de desafíos que se constituyen en líneas de intervención prioritarias:
* Mejorar la calidad de la propuesta pedagógica, formando niños y jóvenes competentes, con el manejo del lenguaje y la capacidad crítica. A tal fin se propone la actualización permanente de los docentes, continuar con la incorporación de los nuevos contenidos curriculares y el aumento de la exigencia en los estudios de los niños y jóvenes.
* Superar la fragmentación de las disciplinas y áreas tendiendo a una formación integral e integrada, basado en un trabajo de articulación horizontal y vertical en el diseño curricular.
* Desarrollar una pastoral de conjunto, integrada cada vez más a la Parroquia y articulada entre los diferentes niveles.
* Lograr una capacitación adecuada para el futuro de los alumnos que les permita el ingreso al mundo del trabajo y a la universidad.
* Consolidar un estilo de gestión participativa.
* Continuar con el cuidado y mantenimiento de los bienes actuales, la mejora de la infraestructura y el equipamiento del establecimiento a través de un sostenido proceso de inversiones.
* Vincularnos efectivamente a la comunidad local, abriendo la escuela a diferentes necesidades formativas y sociales.


ORGANIZACIÓN ESCOLAR Y SERVICIOS
La Institución cuenta con un Consejo Académico integrado por los directivos de cada nivel, coordinadores de Catequesis, el Representante Legal y el Párroco, un Consejo de Administración (Párroco, Representante Legal y Directores de cada nivel).

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