Compañeros:
Hoy los universitarios estamos en Huelga,
porque no estamos dispuestos a aceptar que la Universidad cierre sus puertas
a los hijos de los trabajadores.
Porque nos negamos a permitir que el gobierno
siga quitándole recursos a la educación de la población,
para subsidiar a los banqueros y a los grandes empresarios.
Porque defendemos el derecho de todos
a estudiar, y por lo tanto, que la educación pública sea
gratuita en todos sus niveles.
Por eso estamos en Huelga, y por eso exigimos
la solución inmediata a nuestra demandas:
En primer lugar, el
establecimiento definitivo de la gratuidad de la educación en la
Universidad, que ya no haya más cuotas y se eliminen todos los
cobros ilegales.
En segundo lugar, queremos
que desaparezcan las trabas y filtros burocráticos que van expulsando
de nuestra universidad a los estudiantes de escasos recursos; por eso exigimos
el restablecimiento del pase automático de bachillerato a facultad,
y la eliminación en el límite para la permanencia.
En tercer lugar, ante el
clima de intimidación policiaca, la proliferación
de amenazas, las golpizas que nuestros compañeros han sufrido a
mandos de los porros, grupos de choque y los guaruras de "vigilacia UNAM";
exigimos el desmantelamiento de todo este aparato represivo.
En cuarto lugar, porque queremos
una universidad al servicio del pueblo, con sus puertas abiertas a sus
hijos; una universidad donde se preparen profesionistas críticos,
que al egresar contribuyan a la tranformación que este país
necesita, y no a impulsar el sistema que padecemos; en fin, porque queremos
una universidad de todos y para todos, exigimos la realización
de una instancia resolutiva donde estudiantes, profesores y trabajadores,
transformemos la UNAM.
Por todo esto estamos en huelga, y más.
El gobierno se comprometió con los
banqueros para darle los fondos públicos a través del FOBAPROA,
y se puso a retirar esos recursos de las partidas de educación,
salud, etc. Ahora pretenen que el pueblo vuelva a poner esos recursos
cobrándonos por la educación. No lo vamos a permitir.
Los impuestos los pagan los trabajadores, los pagamos todos, y esos recursos
deben regresar al pueblo con educación y salud. Por eso exigimos,
al gobierno federal, que se aumente el presupuesto para educación,
al menos al 8% del PIB establecido por la UNESCO, y un 2% de él
para educación superior.
Por eso estamos en huelga, nunca como
ahora habíamos sentido tan nuestra a la UNAM. Hoy somos miles, hemos
ganado cada batalla en cada escuela, la fuerza de los argumentos, de la
razón y del diálogo entre universitarios se impuso a la torpeza
y el autoritarismo con el que el rector Barnés de Castro ha conducido
a nuestra universidad.
La cerrazón, la soberbia y el autoritarismo
del rector aumentaron la indignación entre los estudiantes.
El movimiento estudiantil, hoy organizado en el Consejo General de Huelga,
se ha generalizado, por lo que a partir de este día, todas las escuelas
y las instalaciones universitaria se encuentran del lado de nuestra lucha.
La Universidad está en calma, aunque
en efervescencia al mismo tiempo. El clima de intimidación,
violencia y represión que vivían muchas escuelas hoy fue
desterrado por la organización vertiginosa de los estudiantes.
Los "30 activistas por escuela" que predijo el rector, se han convertido
en miles que de manera libre se sumaron a la huelga, promoviendo la discusión
en las escuelas que faltaban de incorporarse, y saliendo a la calle, ahora,
para comunicar al pueblo entero las razones justas de nuestra rebeldía.
Desde ahora, nuestras demandas sustentadas
en la fuerza de la razón, tienen también el respaldo de la
fuerza de la Huelga. La Huelga, de ser el último recurso,
es ahora una etapa de esperanza y aprendizaje, de encuentro. Es la
algarabía de sabernos mayoría y dueños de nuestra
Universidad. Son las cocinas solidarias con quien por ellas pasa, son las
guardias nocturnas llenas de gente y canto, las noches cortitas, en las
que no alcanza el tiempo para discutir la Universidad, la Patria y el Futuro.
La Huelga es estallido de imaginación
y miles de jóvenes por toda la ciudad, nuestra palabra se multiplicará
en carteles, mantas y volantes, mismos que se reproducen gracias a la generosidad
de la gente en la calle.
No admitimos que se nos acuse de ser pagados
por partido o fracción política alguna, nuestras brigadas
se indignan ante tal afirmación. Quien no lo crea puede acercarse
a cualquiera de nuestros planteles en el momento en que se realiza el conteo
de los botes, y a los reportes de nuestras comisiones de finanzas.
No puede decirse lo mismo de la propaganda del rector, que está
consumiendo los escasos recursos de la UNAM. Todo esto le da autenticidad
y hace legítima nuestra revuelta.
La Huelga no sólo es un mecanismo
para dialogar con el pueblo entero. La autogestión que en
ella se origina es un cuestionamiento directo al poder y el autoritarismo
como formas de organizar a la sociedad. La huelga entonces es una
contribución a la transformación de la Patria toda.
El movimiento estudiantil es hecho por
universitarios que se organizan desde sus diferentes escuelas, en asambleas
o representaciones, coordinadas por el Consejo General de Huelga.
No hay aquí ninguna mano extraña
que manipule desde el exterior. No hay injerencia de agentes extraños
ni de organizaciones ni de partidos políticos. Este movimiento
estudiantil es autónomo, no hay líderes mesiánicos
ni caudillos. Somos una única voz.
No permitiremos que los rumores de represión,
los ataques a compañeros y señalamientos policiacos, las
amenazas de la intervención de la fuerza pública, nos amedrenten
o nos disuadan a abandonar esta lucha justa y pacífica.
Al contrario, denunciaremos cualquier
agresión a un miembro del Consejo General de Huelga o a cualquier
universitario, lo defenderemos como uno solo. Nos pronunciamos
en contra de la campaña de desinformación que las televisoras
principales de esta país han montado en contra del movimiento estudiantil
haciendo uso tendencioso de su deber de informar verazmente.
Les hacemos un llamado desde el corazón
de México para que transmitan la verdad, lo que han filmado en nuestro
Consejo General de Huelga, la verdad de lo que han recogido en las diferentes
escuelas, que lleven a la televisión el ambiente de libertad, de
cultura, de debate, de crítica de nuestro movimiento en huelga.
¿Cuáles son las salidas al
conflicto? El movimiento estudiantil se ha cansado de repetirlo, es inadmisible
el quebramiento de un principio ético y social como lo es el derecho
a la educación. Pero hemos ido mucho más allá,
mientras el rector se quedó para siempre discutiendo los dichosos
veinte centavos, los estudiantes estamos discutiendo la transformación
de nuestra Universidad. Si el rector no es capaz ya de solucionar
el conflicto, acudiremos a la sociedad entera, pues es a ella a quien se
debe nuestra UNAM y son los mexicanos todos los que deben pronunciarse
respecto a la elevada misión de esta casa de estudios.
Compañeros, no estamos luchando
por nosotros, no sólo por nuestros hermanos que ahora cursan la
primaria y la secundaria, no sólo por las futuras generaciones.
Estamos defendiendo la gratuidad de la educación en todo el país.
Como decía José Martí, "un pueblo culto, es un
pueblo libre", y queremos un pueblo libre.
Esta es una lucha de todos, no sólo
de los universitarios. Escuchen todos. Además de la solidaridad
y el apoyo que puedan brindarnos a la historia como espectadores, o como
activos participantes de la defensa de la nación.
Esto es lo que está en el fondo
de la lucha que libramos. Queremos que se sumen activamente a ella,
que todos junto arrebatemos más presupuesto para ella, que todos
juntos expulsemos a los porros de todas las escuelas. Que todos juntos
acabemos con la ingerencia de organismo privados, como el CENEVAL, en la
educación pública. Que todos juntos hagamos realidad
el derecho a la educación.
Por todo esto, los convocamos a reunirse
de inmediato en sus Asambleas, a discutir en ellas el plan de lucha que
impulsarán desde cada universidad, desde cada centro de trabajo,
desde cada colonia.
Nosotros no vamos a ceder, no vamos
a dar marcha atrás, hemos iniciado esta batalla y nada nos detendrá.
Los esperamos.
Hacer un llamado a luchar hombro con hombro
con los trabajadores, los estudiantes, los campesinos, a revelarse y resistir
la embestida privatizadora que el gobierno ha desencadenado bajo la máscara
de la rectoría o de los patrones, de la política económica
general, es caminar juntos, defenderla juntos, eso significa corear y pelear
todos, cerrando filas en defensa del pueblo contra la privatización,
pelear con y por el compañero de al lado, el vecino, con el obrero
y el estudiante, con el electricista y con el profesor, y hasta con aquel
que no conocemos su rostro.
Porque defender la educación
hoy, es garantizar que en el futuro pueda seguir exitiendo con la consigna
de ser la mejor educación para el mayor número, es decir,
para todos, incluso para los que hoy no vemos.
Porque ser estudiante también significa defender un proyecto de
nación en el que todos aquellos que han sido obligados a guardar
silencio hablen a una sola voz con todos, con el pueblo. Porque,
como lo diría Salvador Allende, "ser estudiante y no ser revolucionario
es igual a no ser nada".
Por ello hoy decimos que es tiempo de
mostrar que el derecho universal al que tiene todo ser humano de estudiar,
trabajar, vivir dignamente, no puede ser callado por los poderosos y que
nuestro grito de lucha va por las amas de casa reprimidas, por los obreros
pisoteados, por la defensa de la educación pública, gratuita
y para el pueblo, por la defensa de la soberanía nacional, por los
indígenas, por los niños de la calle, por los campesinos
sin tierra, por los presos políticos, por los maestros de este país,
que son encarcelados o corridos de su trabajo, por este país que
todavía se hace llamar México.
Este movimiento lo vamos a ganar con
todos.
En defensa de la gratuidad de la educación.
Por aumento al presupesto para la educación.
Consejo General de Huelga