Ciudad Universitaria, 15 de noviembre de 1999.

CONSEJO GENERAL DE HUELGA

BOLETÍN DE PRENSA

SOBRE LA ELECCIÓN DEL NUEVO RECTOR

Tal vez muchos piensen que el nuevo rector para la UNAM, se elija ahora bajo un mecanismo consistente en que las autoridades “auscultan” o consideran la opinión de las mismas autoridades, porque estamos en una “situación especial” con la huelga.

Pues lamentamos decirles que no es así. La estructura de gobierno en la Universidad Nacional, es algo digno de los señores feudales de la edad media. La Ley Orgánica establece: “son autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de México, 1. La Junta de Gobierno; 2. El Rector; 3. El Consejo Universitario; 4. Los Directores de escuelas y Facultades; 5. El Patronato; y, 6. Los Consejos Técnicos”. Estas autoridades se eligen unas a otras formando un círculo vicioso:

La Junta de Gobierno nombra al Rector, el rector nombra las ternas de donde la junta de gobierno designa a los directores, los directores son una fuerza fundamental del Consejo Universitario, y el Consejo Universitario nombra a la Junta de Gobierno, con lo que el círculo se cierra. Por si algo llegara a fallar en el Consejo Universitario, el rector tiene derecho a veto en él. En los Consejos Técnicos, los directores ocupan la presidencia, también con derecho a veto en ellos. El Patronato Universitario también es designado directamente por la Junta de Gobierno, sin estar obligados a que medie un teatro de “auscultación”.

Los procesos de “auscultación” para la elección de rector, se realizan a imagen y semejanza de las “auscultaciones” que realizó Barnés para imponernos los reglamentos que motivaron el estallamiento de la Huelga: preguntar la opinión de los Consejos Técnicos, del Colegio de Directores, y de los Consejos Académicos (otra instancia que se inventaron durante el Congreso de 1990, y en donde la voz de mando la llevan los directores); es decir, sólo consideran la opinión de las mismas autoridades.

Es francamente vergonzoso que, a unos días del año dos mil, ésta sea la caduca estructura de gobierno que prevalezca en la UNAM, la cual ha empezado ya a rechinar para que quince “notables” impongan al nuevo rector. Porque esta situación es inaceptable, el CGH exige la realización de un Congreso realmente democrático y que se acaten e instrumenten sus resoluciones, para que en él, entre otras muchas cosas, los universitarios no sólo discutamos, sino decidamos la necesaria y profunda transformación de las formas de gobierno, razón por la cual hemos planteado que un punto de la agenda del Congreso debe ser, necesaria e indispensablemente, la ley orgánica.

Nuevamente les decimos, sea quien sea el nuevo rector, es indispensable que tenga la voluntad política de solucionar los seis puntos de nuestro pliego petitorio mediante un diálogo público, abierto, directo y resolutivo, para lo cual reconozca al CGH como único interlocutor. Que de antemano sepa que sólo levantaremos la huelga con la solución a los seis puntos de nuestro pliego petitorio, y que repudiamos las negociaciones a espaldas del movimiento con sectores que pretenden adjudicarse una posible representatividad al interior del movimiento y que evidentemente no tienen: quien dirige este movimiento y al CGH son las asambleas, somos todos.

SOBRE EL DOCUMENTO APROBADO POR LA ANUIES.

Así que los rectores de las Universidades públicas del país, “ven la barba de su vecino cortar y no ponen la suya a remojar”.

Según lo publicado hoy por la prensa, el documento, aprobado por unanimidad, señala claramente “la necesidad de seleccionar en forma más rigurosa a los estudiantes que aspiren a ingresar a las Universidades”. En opinión del rector de la Universidad de Querétaro, no pueden “caer en el populismo” que “no se da en ninguna parte del mundo”; se requiere de un adecuado proceso de selección porque “no todos pueden ser buenos médicos, no todos tienen que estudiar una profesión. Todas las Universidades tienen que tratar de indagar las posibilidades de éxito en una carrera, necesitamos orientar la matrícula en otros campos del saber y evitar saturaciones que puedan ser motivo de frustración”.

Las Universidades y muy particularmente las públicas, señores gerentes—perdón, rectores— de la ANUIES, no son para que estudien “los mejores”, sino para proveer educación superior a la mayor cantidad posible de jóvenes; “los mejores”, los excepcionales, pueden incluso prescindir de las escuelas y aprender por iniciativa propia. Las escuelas surgen para cubrir las necesidades del estudiante medio al que aprender le requiere un esfuerzo que debe ser apoyado por toda una infraestructura y una propuesta pedagógica que lo vaya conduciendo en el proceso de aprendizaje. Y es en función de las necesidades de la mayoría de esos estudiantes comunes y corrientes, que las escuelas deben diseñar sus planes y programas de estudio, y es para que el mayor número posible de los jóvenes aspirantes a la educación la reciban y se formen bien, que las Universidades públicas existen y a lo que deben empeñar sus esfuerzos.

Se la quieren poner muy fácil, señores rectores, encargarse de la educación de los que ya son “los mejores”; el reto de las Universidades públicas es otro completamente y si el puesto les queda grande, bien harían, en renunciar de una vez antes de que los obliguen a hacerlo los movimientos estudiantiles que seguramente generarán con sus miopes intenciones de imponer restricciones al ingreso de los estudiantes que tienen dificultades para sostener el ritmo de estudios que a consideración de ustedes es el de “los mejores”, es decir, restricciones para impedir el ingreso a las Universidades públicas del sector pobre de los estudiantes. ¿Es que acaso el conflicto en la UNAM, no les ha dejado ninguna enseñanza? ¿Es que acaso están pensando en lanzarse a la misma aventura que Barnés? ¿Cometerán ustedes la imperdonable torpeza de intentar dejar fuera de toda posibilidad de recibir educación superior al sector estudiantil de menores recursos económicos? Ojalá no lo intenten, porque estamos seguros que nuestros compañeros universitarios de todo el país levantarán una lucha en defensa de las Universidades públicas, tal como lo hemos hecho nosotros.

Respecto a esa “nueva” legislación nacional para instituciones públicas de educación superior planteada por la ANUIES, se trata de una violación a la autonomía de las distintas universidades, quienes como parte del libre ejercicio de su autonomía pueden decidir sobre cómo asignar su presupuesto, los criterios de evaluación de sus alumnos, las contrataciones de personal académico, las relaciones laborales, entre otros. Las fuentes externas para el financiamiento de la educación superior niegan la obligación del Estado de financiar la educación en su totalidad y garantizar así su gratuidad, plasmada en la Constitución. Al existir fuentes externas de financiamiento, serán éstas las que determinarán la orientación que debe darse a la educación de acuerdo a sus intereses. Esto viola la libertad de cátedra, como sucede con los exámenes único de ingreso al bachillerato y el general de egreso de licenciatura del Ceneval, que obligan a reformular los planes de estudio para convertirlos en meras guías de estudio para tales exámenes.

Esta iniciativa es, nada más y nada menos, que el plan Barnés llevado a escala nacional. Es la manera de obligar a todas las instituciones de educación superior a supeditarse al proyecto neoliberal para la educación al hacer valer los compromisos firmados con organismos internacionales como el BM, FMI y OCDE. Alertamos a toda la población y todos los estudiantes de todos los niveles a este respecto, pues estas medidas van enfocadas a cerrar toda posibilidad de ingreso y permanencia de los estudiantes de menores recursos a la educación superior.

OTRA VEZ LA CAMPAÑA DE DIFAMACIONES CONTRA EL CGH

Otro sucio intento de mentira y difamación contra el CGH por parte del gobierno y sus voceros entre las autoridades universitarias y medios de comunicación, como parte de la estrategia para confundir a la opinión pública y preparar el terreno para una represión si no aceptamos levantar la huelga aun sin la solución de nuestras demandas.

Así es la lectura que hacemos de la carta que aparece firmada por funcionarios de la Escuela Nacional de Trabajo Social, en El Universal del día 13 de noviembre, en donde se levantan una serie de calumnias contra estudiantes de dicha escuela, y se clama por la represión a los compañeros. Así es también la lectura que hacemos de los artículos aparecidos en el periódico El Financiero a nombre de Eva Jimenez los días 13 y 15 de noviembre. En el primero, regresa a intentar mostrar a los estudiantes en huelga como una horda de desquiciados, como lo hiciera en su momento la revista proceso, cuando inició la más feroz campaña del gobierno en contra de la Huelga buscando preparar el terreno para la represión. En el artículo del 15 de noviembre, se intenta despresigiar a compañeros que son parte del movimiento y han apoyado la huelga, inventándoles negociaciones con funcionarios, buscando generar una desconfianza dentro del movimiento.

¿Es el inicio de la nueva embestida contra el CGH? Pierden su tiempo señores. Tenemos suficiente fuerza y calidad moral para desmentir todo lo que inventen. Finalmente la verdad se impondrá como terminó imponiéndose en julio pasado, después de todas las calumnias de las que fuimos objeto a través de todos los medios de comunicación.

Responsabilizamos de esta campaña de difamaciones al gobierno federal, a las autoridades universitarias, y en particular a Gerardo Dorantes, jefe de la dirección general de información (difamación) Universitaira, y de la policía política en la UNAM, “Protección Universitaria”, al cargo de Brígido Navarrete.

UNA ACLARACIÓN

En la nota sobre las declaraciones del CGH del día de ayer, 14 de noviembre, de El Universal, hay dos terribles errores.

Uno, que todo el tiempo se habla de declaraciones de dos grupos, los “radicales” y los “moderados”. Por ejemplo, se mencionan cosas como “ambas corrientes, moderados y radicales...”, “en rondas de prensa ofrecidas por separado, radicales y moderados...”, o “para el CGH, en su ala radical...”. Queremos dejar claro que lo que dice la comisión de Prensa y Propaganda del CGH, no es la expresión de una posición “radical” del movimiento; particularmente lo expresado en el boletín del día 13 de nov., al que se hace referencia; éste fue elaborado con una participación mucho mayor a la habitual en la Comisión, compañeros de distintas tendencias y posiciones dentro del CGH estuvieron en la discusión, definición del contenido del Boletín y en su redacción, para lo que se formaron varios equipos de trabajo. El segundo error, es que en el artículo se menciona que “en un pronunciamiento conjunto hecho por ambas corrientes...”. Aclaramos que nunca existió ningún pronunciamiento conjunto.
Agradeceríamos a los compañeros responsables de la nota hacer las aclaraciones correspondientes.

TODOS A LA MARCHA EL 16 DE NOVIEMBRE

El CGH demanda al gobierno federal y a la cámara de diputados que entregue a la educación un subsidio mayor que permita que ésta cumpla con las necesidades sociales de calidad académica, sin tener que hacer a un lado la exigencia que la misma constitución establece de que debe ser gratuita y estar al alcance de toda la población.

Ésta es una obligación que ustedes (gobierno y diputados) tienen que atender, pues están para servir a la población y no para servirse de ella.

Sin embargo, sus compromisos adquiridos con organismos internacionales, que violentan la soberanía nacional, han ocasionado que se dé prefrerencia a renglones tan criminales como lo son el rescate bancario, la milicia, los rescates de los grandes empresarios carreteros o azucareros; y, en cambio, jamás se rescata la salud, la educación, la vivienda o los salarios de los trabajadores, ni las tierras o cosechas de los campesinos.

Intentan distraer a la población con otro tipo de problemas, como las campañas por la presidencia, para contrarrestar la atención de sus fraudes que se reflejan en la forma de asignar el presupuesto. Estamos exigiendo el 12 por ciento del PIB para el presupuesto a educación, porque queremos que haya recursos para construir escuelas para todos los niños y que haya salario digno para todos los maestros. Por eso convocamos a todos los maestros, a todos los estudiantes y a toda la población a la marcha que realizaremos junto con los maestros democráticos de la CNTE, mañana martes 16, a las 4 de la tarde, del Monumento a la Revolución al Palacio Legislativo.

Comisión de Prensa y Propaganda

CGH-UNAM