Ciudad Universitaria, 11 de noviembre de 1999.

CONSEJO GENERAL DE HUELGA

BOLETÍN DE PRENSA

I. Sobre los resolutivos del Consejo Universitario.

Ya ni la burla perdonan, y el señor Barnés todavía tiene los ánimos para reirse. El CU, supuestamente máximo órgano de gobierno de esta Universidad, muestra una vez más su total sometimiento a las decisiones del rector en turno; este organismo autoproclamado representativo, no representa sino al rector. ¿A quién han consultado señores consejeros? ¿A qué reuniones han convocado a la comunidad universitaria para conocer su opinión y con base en ella conducirse en el CU? ¿A nombre de quién hablan, a nombre de quién deciden?

A ya casi siete meses de huelga y después de dos meses de haber maniatado a sus comisiones para que analizaran el pliego petitorio del CGH, se reúnen para decidir que hay que seguirlas analizando, ¿Son acaso demasiado complicadas nuestras demandas para que ustedes las entiendan?, su lentitud es apabullante, sobre todo en comparación con su “eficacia” para imponer las reformas a los diferentes reglamentos que hoy son la causa del conflicto. Recordamos muy bien que sólo les tomó 3 minutos aprobar el Reglamento General de Pagos y unos cuantos minutos aprobar las modificaciones de los Reglamentos de Ingreso y Permanencia en 1997; con lo del CENEVAL, fueron tan eficientes que la comunidad universitaria ni se enteró pues ustedes tuvieron el descaro de aprobarlo instantáneamente como “cuestión administrativa” brincándose incluso la consulta a los Consejos Técnicos. Pensábamos que aunque para imponerlas fueron tan expeditos, se habrían tomado su tiempo para analizarlas con anterioridad de manera que ahora cuando lo único que tienen que hacer es echarlas atrás, es decir corregir, ya ustedes contarían con un profundo análisis de esas cuestiones, con cantidad de argumentos para defender sus imposiciones y con todos los datos necesarios para apoyar su argumentación. Pues resulta que no, y después de más de 6 meses de huelga tienen que mandatar a sus comisiones para “emitir en el plazo de una semana, argumentos, acuerdos y resolutivos sobre los 6 puntos del pliego petitorio del CGH” ¡Qué eficiencia! ¿Qué no era ese su resolutivo de hace dos meses? De manera que es por eso que se han negado a debatir públicamente con el CGH, porque no habían reunido los argumentos, los entendemos, hubieran hecho un “papelón”.

En su reunión de ayer han dejado bien claro, para los pocos que aún se negaban a reconocerlo, cuál es la propuesta de las autoridades universitarias y del gobierno, para “resolver” el conflicto en la UNAM: “hacer un llamado conjunto a las autoridades federales y locales para que, de inmediato, se proceda a desalojar, de la manera más apegada a derecho las instalaciones universitarias” (propuesta que pretenden aprobar en su próxima sesión). Ante esto les decimos una vez más que la represión al movimiento no va a terminar con la huelga; así como no han logrado terminar con la huelga su estrategia de alargarla para que se desgaste, sus intentos por dar la apariencia de que la UNAM sigue funcionando normalmente por medio de su “fraude extramuros”, sus campañas a través de los medios para desprestigiar a los huelguistas y para mostrar un CGH dividido, sus ridículos intentos por retomar las instalaciones y sus minúsculas acciones para mostrar su “fuerza” — evidenciando su debilidad, su aislamiento—, los actos represivos contra los participantes en la huelga, sus sanciones “universitarias” a través de un órgano ilegal —el Tribunal Universitario—, y sus negociaciones espurias a espaldas del CGH. Nada, que no sea la solución a nuestras demandas, va a terminar con esta huelga ¿Entienden?

El señor Barnés se define, a sí mismo y a su camarilla incrustada en el CU, de manera impecable: “la impunidad manifestada en el conflicto, así como la intolerancia y la intransigencia de algunos grupos han frenado la solución del paro”.

Por ultimo, señor Barnés, sus 64 consejeros incondicionales, que no representan a nadie más que a sí mismos, que no consultan a nadie, no quieren que usted renuncie, en cambio más de 70 000 universitarios (y casi 360 000 no universitarios) se manifestaron en la consulta del CGH, por exigir su renuncia, ¿no le resulta obvio qué procede?

II. Todos a marchar.

Convocamos a todos los universitarios y a toda la población a marchar:

Comisión de Prensa y Propaganda

CGH-UNAM

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