En entrevista publicada hoy por La Jornada, Enrique del Val, secretario general de la UNAM y hasta hace seis meses, funcionario de la Secretaría de Salud, niega que se considere a la UNAM como trampolín político; seguramente no comparten su opinión personajes como: Guillermo Soberón Acevedo de rector de la UNAM a Secretario de Salud; Jorge Carpizo Macgregor de rector aPresidente de la Suprema Corte de "Justicia", a Presidente de la CNDH, a Procurador de la República y a Secretario de Gobernación; Diego Valadéz de funcionario de la UNAM a Procurador de la República; Mario Ruiz Massieu de funcionario de la UNAM a Subprocurador de la República; Fernando Pérez Correa de funcionario de la UNAM a Subsecretario de Gobernación; Jorge Madrazo de funcionario de la UNAM a Presidente de la CNDH, a Procurador de la República; Francisco Barnés de Castro de director de la Facultad de Química a Director del IMP y a rector de la UNAM; Juan Ramón de la Fuente de director de la Facultad de Medicina a Secretario de Salud y a rector de la UNAM y tantos otros.
Asegura categórico Del Val que "...¡No hay ninguna injerencia del gobierno federal, ni del gobierno local en las decisiones que toman las autoridades de la UNAM!". Será porque las autoridades de la UNAM no están tomando ninguna de las decisiones importantes, sino que las toma directamente la Presidencia y Gobernación y eso es claro para todos. El propio Ignacio Burgoa Orihuela, que como todos saben no es propiamente un simpatizante del CGH, declara en entrevista publicada hoy en el Excelsior: “...el doctor Raúl Carrancá y Rivas y yo pensamos- y esto es una conjetura- que el rector Barnés recibió línea del presidente Ernesto Zedillo...”, “se supone fundamentalmente, no formalmente, que De la Fuente fue recomendado por Zedillo en las pláticas que me imagino hubo entre la Junta de Gobierno y el Presidente, o personas allegadas al presidente...”; de su frustrado intento por ser director de la Facultad de Derecho, narra que Fernando Ojesto, le dijo: “mira Nacho, yo voy a ser director de la Facultad, tú tienes más méritos que yo, pero yo voy a ser simplemente porque me lo prometió el presidente electo. Y así fue.”.
El señor Del Val reconoce: “efectivamente hoy estamos ante un México irritado porque no se ha logrado que la gran mayoría mejore, al revés, la gran mayoría empeora; la Universidad tiene que reflejar eso y todas las ideas políticas se pueden discutir dentro de la legislación y el marco universitario. Todo es válido menos acciones que interrumpan la normalidad” Es decir, se vale quejarse ante la injusticia, pero no se vale luchar por cambiarla y al que se atreva a luchar hay que aplicarle la ley (como la PFP); esa es la filosofía de Enrique del Val que desarrolló ampliamente en su artículo Blindaje Social, publicado el 20 de abril en el Universal, ahí afirma: “En este fin de sexenio, lo más grave será poder contender y contener, dentro de los cauces de la normalidad, esta situación de explosión social de miles de hombres y mujeres con una serie de demandas no resueltas, y en muchos casos imposibles de resolver, dentro del sistema económico mundial vigente...Si los partidos políticos y los gobiernos no procuran establecer eficientes muros de contención a estos ominosos embates, de nada servirá el blindaje económico, pues será aniquilado por millones de seres que quieren vivir mejor y no encuentran como ni quién les responda”. Genial, señor Del Val, ¡Castigo a los que luchan! ¿Cómo se les puede ocurrir a esos millones de seres, la peregrina idea de querer vivir mejor?.
II. A.A.A. Estudiantes de derecho de la UNAM. ¿les urge titularse?. La PGJDF les ofrece titulación express.
Estamos lucidos, ahora resulta que se van a impartir seminarios de titulación para estudiantes de derecho, por profesores de la UNAM, de la ENEP Acatlán, en el Instituto de Formación Profesional de la Procuraduría General de Justicia del DF. ¿Qué es lo que sigue?
