Constituye una unidad íntegra e independiente, donde encontrará todos los elementos y herramientas aplicables a la mediación y negociación que contribuirán con el éxito de su gestión.

Otorga todos los elementos indispensables a fin de que el Administrador de Consorcios pueda actuar como un operador o facilitador en la resolución de conflictos dentro de su propia organización, sin prescindir de la necesaria y apropiada intervención de un mediador cuando por efecto de las circunstancias lo requieran.

Fomenta una conciencia educativa que se traslada a la comunidad de individuos que forman parte de un nexo interactivo emergente de la convivencia y el trato constante con los vecinos, y de aquellas relaciones surgidas, en sus más variadas combinaciones, con otros sujetos que intervienen en el quehacer práctico y profesional del Administrador.