Mirando
en el agua al cielo celeste
lo
he visto llorar.
Sus
ojos de estrellas, su boca de luna
retrató
el estanque,
parece
que hablara y en mudo lenguaje
contara
sus penas,
al
agua que escucha, eterna y dormida
por
entre las piedras.
En
el agua mansa el cielo a su sueño
lo
extiende muy quedo,
mil
veces despierta llevado en las ondas
que
origina el viento,
mas
vuelve la calma y su amor celeste
lo
vierte gustoso,
a
pesar que nunca quedará en el agua
y
sufrirá su suerte.
En
silencio saben, callados comprenden
que
es un imposible
no
obstante sus almas están confundidas
de
noche y de día.
Mirando
en el agua al cielo celeste
yo
ya he comprendido
que
nuestros amores que siempre existieron
son
un imposible.
así
como el cielo que llora en el agua
yo
estaré llorando .
pensando
que nunca será aunque siempre
nos
estemos viendo.
Así
viendo al agua inspiróse mi alma
en
éstos, mis versos...
y
estos se trocaron como por encanto
en
ésta canción
que
ofrezco sincero, regalo de mi alma
que
se siente sola
guárdala
escondida entre las
tibiezas
de tu corazón.
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a Oscar Alfredo "Tato" Caballero