Al decir que es una forma de tratamiento HOLISTICO nos referimos a que se busca alcanzar una visión global del paciente, una completa perspectiva de sus estados físicos, emocionales, mentales, así como también de su entorno y de su historia completa. De esta manera no sólo se tratan los síntomas sino que se trata a la persona como un todo. Esta forma de aproximación terapéutica tiene tres beneficios. Primero, puede ayudar a los pacientes, quizás por primera vez en años, a mirarse a sí mismos, sus estilos de vida, sus emociones y pensamientos, incluso actitudes frente a ellos mismos y a la vida, a las demandas físicas y mentales que estos requieren. Se le otorga a los pacientes la posibilidad de ver más allá de sus síntomas, incrementar su auto-conocimiento y proyectar caminos para mejorar su bienestar mental y físico, que finalmente desafiará al cuerpo para aumentar su habilidad para sanarse así mismo y combatir enfermedades futuras.