El doctor Novoa ha ocupado el elevado puesto de Presidente del Congreso en 1912 y el de Vicepresidente de aquel algo cuerpo en 1914. Ha sido, además, Ministro de Hacienda.

Es propietario el doctor Novoa de 5 haciendas de ganado y de una finca de café y caña de azúcar.

En esta capital tiene establecida la gran farmacia que lleva su nombre, situada en la esquina que forman la 8ª. Av. Norte y 8ª. Calle Oriente.

El fuerte capital del Dr. Novoa y los conocimientos que posee en el ramo de farmacia, son motivos suficientes para venir al convencimiento de que la Farmacia Novoa se destaca airosa entre los establecimientos de su genero, que son orgullo de esta progresista capital salvadoreña.

Libro Azul de la Asamblea Legislativa, página 256.

Fidel Antonio Novoa Meléndez nació en Sensuntepeque, el 24 de Abril de 1863; hijo de Don Adolfo Novoa y la virtuosa Doña Rosaura Meléndez, (ella murió en Junio 11 de 1891 y don Adolfo en 1912). Estudio Ciencias y Letras en el Liceo Salvadoreño, bajo la dirección del señor Adolfo Pérez y Aguilar. Entro a la Universidad de El Salvador en 1884 junto con Salvador Rodríguez-Gonzáles, Ramón Urquilla, Lisandro Blandón y otros. Y se graduó de doctor en Medicina y Cirugía en 1889 (en la ciencia de Hipócrates); con la tesis titulada “La influencia de la prostitución de los nacidos”.

Participo en la huelga estudiantil de la celebre navaja de Renson; junto con Nicolás Leiva, Lisandro Blandón, Abraham Chavarría, Macario Garay y otros.

En Marzo de 1885, fue uno de los primeros estudiantes que se presento en las galerías del Congreso Nacional pidiendo la declaración de guerra a Guatemala por su agresión. Encabezo una manifestación estudiantil que se presento ante el presidente Dr. Rafael Zaldívar.

En 1890 tomo activa participación en el movimiento estudiantil que protesto contra la presión sobre el gremio ejercida por el gobierno del General Menéndez (tío del Dr. Novoa Meléndez) y por tal motivo fue dado de alta en el cuartel de Artillería, con José Dolores Marenco, Abraham Chavarría, Nazario Salaverría; los cuales fueron llevados a pie a Cojutepeque de castigo.

Siendo todavía estudiante de medicina en Junio de 1891, atendió o asistió profesionalmente al Dr. Antonio Grimaldi, ilustre escritor y político salvadoreño y quien había sido desahuciado por los médicos que le atendían. El Dr. Novoa Meléndez le salvo la vida, que constituyo una admirable curación. Vivió largamente el Dr. Novoa Meléndez también en la coronada Villa de Madrid, España.

En 1897 contrajo matrimonio con la acaudalada señorita Inés Fuentes Najarro; hogar del cual nacieron Fidel Antonio, Constantino, María Lola y Maximiliano Guillermo.

Sirvió la cátedra de Clínica Medica y Terapéutica en la Universidad Nacional. Fue Jefe de uno de los servicios de medicina del hospital Rosales y medico del Hospicio de Huérfanos, hoy Casa del Niño.

En 1898 secundo el movimiento político que puso término a la República Mayor de Centro America, reivindicando la soberanía de El Salvador y colaboro con el gobierno del General don Tomas Regalado.

El Dr. Novoa Meléndez, fue Ministro de Hacienda y Crédito Público; luego de Guerra y Marina (ahora de Defensa) en la administración del General Regalado, participando en el golpe evolutivo de la noche del 13 de noviembre de 1896. Luego Ministro de Instrucción Pública y Fomento (Gobernación) en la administración de don Pedro José Escalón. Durante su gestión en la primera mencionada cartera publica, en un solo año se disminuyo la deuda pública del país en $ 2.0 Millones, y se aumento las rentas por medio millón de dólares.

Por salud dejo dichos cargos, y compro la finca de café “El Tesoro” en las afueras de San Salvador cerca de los mesones de su propiedad, en el cerro las Pavas para restablecerse de los bronquios (ahora contiguo al Parque Teleférico del cerro San Jacinto de los Bonilla). También fue Presidente del Congreso en 1912, como Vice-Presidente en 1914. Fue miembro del partido Nacional Demócrata en 1918 del Dr. Alfonso Quiñónez Molina.

Dueño de la Farmacia Novoa con dos sucursales: San Salvador y Cojutepeque; y de extensas propiedades agrícolas, ente ellas Cañafístulas en Cabañas, donde se fundo una villa en honor a su suegra, Villa Dolores.

Su fama alcanza el viejo continente en una publicación de fecha 2 de Julio de 1908, en la revista “Contemporáneos” de Madrid, España.

Fue a Paris, Francia; a curarse de una enfermedad de la vista y diabetes que venia padeciendo y a depositar a su hija en un internado. Fue asistido por los doctores Pierre Dubal y Francois Montier.

Falleció en Paris, Francia; el 13 de Noviembre de 1922; pero su hermano Joaquín estaba en Alemania. Los restos del Dr. Novoa Meléndez llegaron al Puerto de la Libertad el 1ro de Enero de 1923 en un vapor llamado “Salvador” procedentes de Panamá, en una gran caja envuelta con el pabellón de la patria; acompañados de su hija Lola, su hermano Joaquín. Don Constantino Hernández y Don Constantino Novoa se subieron al barco en el Puerto de La Unión. Allí en La Libertad, los recibió la familia y el señor Canónigo don Raimundo Lazo. Asistió su esposa Inés v. de Novoa, sus hijos Fidel Antonio, y Maximiliano Guillermo, todos Novoa Fuentes; al mismo que sus hermanos Laura, Fernando, Adolfo y Joaquín Novoa Meléndez. Sus restos fueron llevados a su casa en la 8ª Avenida Norte No 3; y sepultados el 2 de Enero de 1923 a las cuatro de la tarde.

Biografía por Francisco José Novoa López, 28 de agosto de 2008; en memoria de mi bisabuelo nacido exactamente 100 años antes; pero que cononci de primera fuente con el recuerdo, ejemplo e historietas de mi abuelo, y a traves de su albunes de recuerdos que ahora honro en poseer.

Anécdota: En 1922, durante un viaje a París, Francia, para ingresar a su hija María Lola a un internado, hizo una caminata a la Virgen de Lourdes; en pago de una deuda que tenia con las Santa Madre de Cristo. En la caminata, se le hizo una ampolla en el pie, y como era diabético, se le engangrenó la pierna. Así pues, murió en la ciudad Luz el 13 de Noviembre de 1922 a los 59 años, y sus restos yacen en el Mausoleo de la Familia que erigieron su esposa e hijos en su memoria, en el cementerio de San Salvador.