1884 - 2003
A 119 años de la llegada del tren a Bahía
Blanca
|
El FCPacífico ( sección BBNO) y
la provisión de energía eléctrica
a la ciudad de Bahía Blanca
El alumbrado eléctrico público fue inaugurado
en nuestra ciudad el 20 de octubre de 1899. En febrero
de 1901 comenzó la prestación a los particulares.
El servicio eléctrico se efectuó con muchas
dificultades y con continuos requerimientos a la empresa
concesionaria, debido a la deficiente prestación
del mismo.
En el año 1902, la South American Light and Power
Company Limited (en criollo Compañía de
Luz y Fuerza) adquiere la concesión y empieza
a explotar el servicio. Pero, las dificultades en el
mismo continúan, y en abril de 1906, el FCPacífico
(BBNO), toma a su cargo la administración y explotación
de las instalaciones.
La usina empleada hasta el momento se encontraba en
calle Fitz Roy y Santa Fé. Estaba equipada con
3 generadores de 75, 150 y 240 KW, accionados por motores
de 125, 250 y 360 HP., respectivamente.
Tales equipos eran insuficientes para la prestación
y futura expansión del servicio.
En vista de ello la empresa del FCBAP resuelve construir
una nueva usina, ( obra contratada por José Rión
) que se levantó con frente a la calle Donado
y Brickman, en terrenos de la empresa ferroviaria.
En realidad el FCBAP ya estaba construyendo, antes de
la toma de la concesión del alumbrado eléctrico,
las instalaciones de la usina, dado que las ampliaciones
de los muelles de Puerto Galván, iniciadas por
esta empresa, requerían de energía eléctrica
para el funcionamiento de las distintas maquinarias,
y por supuesto, también para su infraestructura
ferroviaria.
Con respecto a esto el diario Bahía Blanca, del
29 de abril de 1906, decía que, el día
anterior, el administrador-gerente del FCBAP, sección
BBNO, ( W. B. Harding Green ) les había comunicado
los siguiente:
"
En este momento recibo órdenes telegráficas
de Londres de tomar posesión de la Usina de la
Cía de Luz y Fuerza de esta ciudad.
Nuestra empresa hará todo lo posible para dar
satisfacción, pero no hay que esperar mejoras
hasta que esté concluída la instalación
de la nueva usina que se está construyendo ahora
con todos los medios a su alcance, teniendo en ésta
ya la maquinaria competente.
En seis meses calculo que puede estar todo listo. Mientras
tanto tendremos que contentarnos con el mejor servicio
posible contando con la usina actual de la Empresa de
Luz y Fuerza y con las restricciones impuestas por la
Municipalidad, quien en defensa de la seguridad pública
ha tenido que disminuir el voltaje y exigir así
la suspensión de muchos focos de alumbrado público.
La empresa del Noroeste una vez en condiciones cumplirá
con este servicio como siempre a hecho con las demás
concesiones municipales."
Primera usina construída por el
FCBAP, fachada sobre calle Brickman, estado
actual. HFG.
|
|
En
enero de 1907 la empresa pone a prueba las maquinarias
correspondientes y en febrero comienza a dar energía
a los muelles de Puerto Galván. Para esta fecha
habían sido instalados en la ciudad, más
de 20 km. de cables subterráneos, y se continuaban
con estos trabajos en calles Donado, Chiclana, San Martín
y O' Higgins.
En marzo se inauguraba el alumbrado en la Plaza Rivadavia
y para la noche del 05 de abril se daba energía
a los focos del alumbrado público de la ciudad.
Los focos instalados eran unos 125 de un total de 200
determinados en la concesión. En meses posteriores
se completó el número mencionado.
Según las crónicas locales, una vez finalizada
la instalación del total de las luminarias en
la planta urbana, la intendencia destinaría las
lámparas de alcohol carburado, reemplazadas por
la nueva iluminación, a las villas suburbanas.
En un principio el alumbrado eléctrico público
cesaba a las 2,30 hs, pero al poco tiempo (quejas mediante),
a partir de la noche del 25 de mayo de 1907, el alumbrado
continuaba hasta el alba.
La usina del BAP fue equipada con 2 generadores Dick
Kerr y Cía. de 1000 KW, accionados por motores
Bellis y Morcom.
Aparentemente estos equipos no fueron confiables ya
que originaron reclamos, a la empresa proveedora, por
parte del FCBAP, debido a fallas en su funcionamiento.
Otro tanto ocurrió con el tendido subterráneo
de conductores de energía eléctrica, que
al tiempo de ser puestos en servicios comenzaron a tener
problemas de "pérdidas," por defectos
en su aislación, lo que originó a la empresa
los trabajos de sustitución correspondientes.
Debido a las deficiencias indicadas, el servicio eléctrico
que prestó el FCBAP estuvo sometido a periódicas
críticas de la prensa local.
El ingeniero electricista E. Harry Brian dirigió
las obras de alumbrado realizadas por el FCBAP dejando
conectadas las instalaciones de la nueva usina con el
servicio público y quedando entonces clausurada
la antigua usina adquirida a la Compañía
Sud Americana de Luz y Fuerza Limitada.
Debido al desarrollo de la ciudad, y de la misma empresa
ferroviaria, que tenía proyectado el servicio
del tranvía eléctrico, (ver nuestro boletín
Nro 12, Bahía Blanca y sus tranvías),
ésta decide la ampliación de la usina,
por lo que se eligen, a tal efecto, terrenos situados
próximos a Loma Paraguaya.
Para 1909 el FCBAP ya tenía en construcción
la nueva usina. Esta comprendía sala de calderas,
sala de máquinas, galería de cuadros de
gobierno y distribución, depósito de carbón
y almacén.
Usina construída por el FCBAP en
Loma Paraguaya. Imagen de época.
|
|
Poseía
desvíos ferroviarios, servidos a través
de la estación Loma Paraguaya, mediante los cuales
se hacía el acopio del carbón de piedra,
necesario para el funcionamiento de las calderas, cuyo
vapor ponía en movimiento a los equipos generadores.
La nueva usina constaba de 5 generadores trifásicos,
con una capacidad de producción de 5.000 kw,
y una tensión de 6.600 voltios.
Se preveía ampliar la capacidad a 20.000 kw,
dado que el edificio contaba con el lugar suficiente.
Para la distribución de la energía se
construyeron 5 subestaciones, en distintos puntos de
la ciudad, a saber: avenida Colón, calle Blandenguez,
19 de Mayo, General Paz, Donado y por último
una en el barrio Villa Mitre.
Los edificios de la nueva usina siguieron la línea
de las construcciones ferroviarias y/o industriales
de la época, es decir, paredes de ladrillo a
la vista , con estructura metálica y techos de
chapa galvanizada. Estos fueron demolidos, en gran parte,
cuando la usina dejó de funcionar.
Para supervisar las instalaciones de la nueva usina
de Loma Paraguaya, y construcción y electrificación
de las líneas para el tranvía, viajó
desde Londres el ingeniero Parkes.
A partir de la habilitación de ésta nueva
usina, comenzó a prestarse un servicio más
seguro y eficiente.
En el año 1924, el 01 de noviembre, el FCS toma
posesión del FCBBNO (de acuerdo al convenio de
compra-venta realizado con anterioridad) y de sus empresas
subsidiarias. Entre éstas, la empresa eléctrica.
En 1927, el FCS entabla negociaciones con una empresa
de Bs As, La Cía Italo-Argentina de Electricidad,
para la venta de la Compañía de Luz y
Fuerza.
Sobre este tema, y en referencia a una charla entre
el nombrado y representantes de La Italo, Arturo H.
Coleman decía:
"
Les expresé que, necesariamente, de comprar la
compañía de electricidad debían
hacer lo mismo con la de gas y de tranvías .......
les previne que sería inútil entrar a
tratar sobre la Compañía de Luz y Fuerza
si se excluía a las otras dos ........ Les indiqué
gráficamente, que si deseaban el perro vivo,
tendrían que cargar con los perros muertos al
mismo tiempo".
Obviamente
el FCS quería desprenderse de las compañías
de gas ( Compañía de Gas de Bahía
Blanca Limitada ) y de tranvías ( Tramways Bahía
Blanca ) ya que económicamente éstas no
resultaban rentables, y la mejor manera de hacerlo era
endosarlas al comprador, al realizar la venta de la
empresa eléctrica.
Como fuere, la operación se lleva a cabo y el
FCS entrega las tres empresas mencionadas el 01 de diciembre
de 1927, éstas son agrupadas bajo el nombre de
Empresas Eléctricas de Bahía Blanca.
Esta
empresa es la que construye, a principio de los años
treinta, una nueva usina en ingeniero White, lindante
con los elevadores del FCS, hoy desafectada como tal,
(y en manos de la Municipalidad de Bahía Blanca)
conocida como La Usina del Castillo (declarada Monumento
Histórico Nacional ).
Los activos de Empresas Eléctricas de Bahía
Blanca, pasan a manos de la provincia el 15 de noviembre
de 1948, dentro de la política de estatización,
y es el ingeniero Raúl Mercante, ministro de
Obras Públicas de la Provincia, quien recibe
los bienes adquiridos en el local de calle Moreno 80
( edificio no hace mucho tiempo demolido), donde funcionaban
las oficinas de Empresas Eléctricas de Bahía
Blanca ( y antes las de Luz y Fuerza ).
Tres variantes sobre un mismo tema
También
podíamos haber titulado :
Los
ferrocarriles que supimos destruir
Las
tres imágenes corresponden a la estación
General Daniel Cerri ( antes Cuatreros ), en el Partido
de Bahía Blanca y que se encuentra sobre la vía
a Neuquén. Originaria de la línea, fue inaugurada
en el mes de octubre de 1897.
La foto superior está fechada en el año
1985, cuando la estación se encontraba operativa
y era mantenida en buenas condiciones.
En la imagen central, tomada después de las privatizaciones,
la estación clausurada fue víctima del vandalismo
y los saqueos. Podemos observar que falta la cubierta
del techo, de tejas, y su estructura de madera, careciendo
ya de las aberturas, los pisos de madera, etc., tambien
falta el alero sobre el andén.
En la imagen inferior, tomada desde un ángulo similar
al de la imagen central, vemos el estado actual de la
estación Cerri, ya no quedan ni las paredes.
Estas son escenas que, lamentablemente, se repiten en
las estaciones e instalaciones ferroviarias que fueron
clausuradas y abandonadas a su suerte.
Imágenes, superior e inferior, HFG,
central Gabriel Cabrera.
Crónicas Tranviarias
(2)
El tranvía terrible
En épocas lejanas, el armatoste que recorre algunas
de nuestras calles, dejando marcas indelebles de su
paso en los edificios, que ensucia con su humo negro
y pegajoso, y en el ambiente que atruena con su silbato
y vicia con su olor de máquina vieja y sucia,
se caracterizaba tan solo por su fealdad. El era como
una verruga aparecida en una faz hermosa, servía
para que nos compadecieran los extraños y rabiáramos
los que teníamos que sufrirlo todo el año.
Ahora la cosa a cambiado de carácter, de fastidioso
y molesto se a convertido en terrible. En una semana
tres accidentes sangrientos se han producido por su
causa y a este paso nadie se animará a transitar
por una calle por donde el malhadado armatoste haga
su aparición de bestia fatídica.
Indudablemente este adefesio que con la denominación
de tranvía recorre nuestras calles al solo y
exclusivo objeto de que la Empresa del Pacífico
no pierda su derecho a la concesión leonina que
nuestras autoridades comunales le han concedido, debe
ser único en su género en toda la República
y hasta creemos que en el mundo entero.
Pero no se trata ya de su repugnante fealdad. El caso
es más grave y debe ser remediado antes de que
de lugar a una catástrofe.
Sabemos ya el modo de como se eluden responsabilidades,
sabemos ya que siempre el causante del accidente es
la propia víctima que lo provocó con su
imprudencia.
Pero la realidad de la cuestión es otra. En efecto
no se concibe que una locomotora recorra las calles
de una ciudad de tanto tránsito como la nuestra
sin provocar a su paso numerosos accidentes.
No pasa un día sin que la crónica policial
no nos informe que destrozó un vehículo,
mató un caballo, o lo que es mucho peor, causó
desgracias personales más o menos graves.
Y que no se diga que los responsables de éstos
accidentes son las propias víctimas, porque quien
ocupa el tranvía local, en la inmensa mayoría,
cree que realmente es un tranvía no una máquina
infernal cuyo fin es matar gente al par que mantener
concesiones ruinosas para el vecindario.
Al paso que vamos, llegará el día en que
se diga "ahí viene el tranvía"
como pudiera decirse "ahí viene el tigre".
Y el grito tendrá el mismo significado que el
de "sálvese el que pueda"
Textual del diario Bahía Blanca, del martes 10
de agosto de 1909.
No deja de ser curioso que la crónica periodística
hablara (se ensañara) de tal forma, de un medio
de transporte urbano como el tranvía, ya que
si bien el sistema no era el mejor, no había
hasta ese momento otra manera para que la gente se movilizara
dentro de la ciudad, salvo los vehículos particulares
que no todo el mundo poseía, o los de alquiler
al que no todos podían acceder, por lo que aquel,
resultaba el medio ideal para el desplazamiento de la
mayoría de las personas.
Las estaciones del Partido de Tornquist
En números anteriores de este boletín mencionamos
las estaciones de Tornquist que se encuentran sobre la vía
Lamadrid y Pringles.
En este número trataremos las que pertenecieron al
FCBBNO y FCP (sección BBNO).
Sobre la línea construída por el BBNO, entre
nuestra ciudad y Bernasconi (primer tramo inaugurado en
el año 1891) encontramos las estaciones de Nueva
Roma, Choiqué y Berraondo. El tramo entre Nueva Roma
y Villa Iris, en el que están las estaciones de Choiqué
y Berraondo, fue clausurado en el año 1961.
Cuando el Noroeste pasa a manos del Pacífico, en
Nueva Roma, se construye un empalme para el ramal que se
dirige a Catriló. En este tramo encontramos a Chasicó
y Pelicurá.
Estación Nueva Roma. HFG 2003.
|
|
Estación
Nueva Roma: En su origen fue una colonia agrícola
militar que fundó a orillas del arroyo Sauce Chico
el coronel italiano Silvino Olivieri en 1856, asesinado
al año siguiente por sus subalternos.
El edificio de la estación construído en
ladrillo a la vista con techo de chapa galvanizada, es
de importantes dimensiones, y se encuentra en regular
estado de conservación.
Está a 39 km. de BBNO y su cota de riel es de 174,85
m. Todavía conserva los grandes galpones de chapa,
se observa además un enorme depósito de
agua construído en mampostería de ladrillos
y hormigón.
Estación Choiqué.
|
|
Estación
Choiqué: este nombre significa avestruz en
araucano.
El edificio está construído en chapa y madera
y está ocupado.
Se encuentra a 49 km de BBNO, su cota de riel es de 141,60
m..
Estación Berraondo, HFG 2003.
|
|
Estación
Berraondo: Cota de riel 138,37, está a 62 km.
de BBNO. Recibe el nombre por el donante de los terrenos
para la estación, Martín Berraondo.
El edificio está ocupado y fue construído
en ladrillo a la vista con el techo de tejas tipo francesa.
Se puede observar dos depósitos de agua construídos
en acero.
Estación Chasico: Así se llama una laguna
y un arroyo cercanos a la estación, este nombre
araucano se traduce, en castellano, como agua mala.
El edificio se encuentra en buen estado de conservación,
fue habilitado por el FCP en el mes de octubre de 1906.
Este sitio está a 63 km. de BBNO, su cota de riel
es de 171,45 m.
Estación Chasicó, HFG 2003.
|
|
Estación
Pelicurá: A 84 km de BB, su cota de riel es
de 189,70 m. (comparar con la cota de Chasicó).
Pelicurá es un vocablo araucano que significa piedra
y barro.
El edificio de la estación, abandonado y vandalizado,
es similar al de la estación Chasicó, paredes
de ladrillo visto y techos de chapa.
Las
estaciones del Partido de Tornquist fueron recorridas
y fotografiadas, por nosotros, para la realización
de los artículos sobre las mismas.
Una vez más destacamos las estaciones de Sierra
de La Ventana, y Saldungaray por la preocupación
que se observa en el mantenimiento de las mismas.
|