REVISTA CRISTINA (FEBRERO DE 1998)
LA DISCIPLINA
DE
FERNANDO COLUNGA
"ALGUNAS MUJERES ME HAN DICHO COSAS QUE ME HAN DEJADO CON LA BOCA ABIERTA", RÍE FERNANDO COLUNGA, EL IRRESISTIBLE JOSÉ ARMANDO DE ESMERALDA Y, SEGÚN MUCHAS, EL CUERPO MASCULINO MÁS BELLO DE MÉXICO.
¿Comó hace para mantenerse en
espectacular forma? Fernando, que es deportista desde los 8 años (practicaba
karate y, más tarde, motociclismo), hace gimnasia y ejercicios aeróbicos dos
horas diarias, además de seguir un régimen alimenticio muy sano y
balanceado.
"No se trata de hacer dieta, sino de aprender nutrición.
Quiero hacer un libro de ejercicios que incluya la alimentación. Y lo enfocare a
las mujeres", dice jadeante, pesas en mano. ¿Por que quiere dirijirlo
justamente a las mujeres? "Porque cuando voy a la playa
veo pasar a las chicas y algunas son realmente preciosas, pero a los 15 y 16
años ya tienen problemas de sobrepeso y celulitis. Quiero que aprendan a
nutrirse correctamente y a cuidar su físico. Para mí, el cuerpo es más que mi
instrumento como actor; es un templo. Y hay que respetarlo". Juzgando a
simple vista, se ve que Colunga siente un enorme respeto por su
despampanante......templo.
Pero este actor adora el
tiempo que pasa en el gimnasio no soló por los resultados visibles, sino porque
"el ejercicio me enseño que puedo proponerme algo -no
fallar un soló día, dar el 100 por ciento- y cumplirlo a cabalidad. La
disciplina física y mental me ayuda no solo en mi carrera, sino tambien en lo
personal, como hombre.", además, ríe con picardía, "¡me gusta mucho
sudar!". Y ya en serio dice: "En el gimnasio
desahogo el estrés de una larga jornada de trabajo. Grabar una novela implica
dedicarle la mayor parte de tu vida; muchas veces ni siquiera tengo tiempo de
hacer otras cosas, como practicar algún deporte religiosamente". Y mientras se
ejercita en la máquina de pesas de resistencia, agrega: "Aquí es donde me
mantengo en forma"
.
En estos
momentos Fernando, que recientemente acabó de grabar ESMERALDA, actúa en teatro
en la comedia "EL PECADO NO ORIGINAL", junto a Chantal Andere y Nora Salinas, y
planea inaugurar un gimnasio propio, abierto al público, en algún sitio del
Distrito Federal. Además, supervisa su negocio de ventas de piezas de autos y,
en sus ratos libres, anda en motocicleta de salto en compañia de su
padre.
En el plano profesional, el éxito de Esmeralda lo ha consolidado como galán, aunque Fernando insiste en que "no me considero galán; creo que estoy convirtiendome en actor, pero de verdad. El papel de galán -bien hecho- conlleva una actuación. El personaje también tiene sus motivaciones sicológicas; hay que estudiarlo y saber trabajarlo. Si uno se especializa en galanes sólo puede hacer ese papel, mientras que el actor 'de verdad' puede hacer todo tipo de papeles, incluso el de galán". Fernando actualmente estudia dos interesantes ofertas para hacer su próximo estelar de telenovela. "Me han propuesto hace Lola la trailera, con Rosa Gloria Chagoyán", cuenta. "Y otro proyecto que prefiero reservarme hasta que estén más definidas las cosas".
Colunga es un deportista muy completo. "Juego squash y práctico la natación Tambien hago ejercicios aeróbicos, monto bicicleta, corro y troto. Es muy importante hacer este tipo de ejercicios para mantener la flexibilidad". Pero lo que más le gusta en estos momentos es el lenatamiento de pesas. "Tengo una rutina general que toca todos los puntos; el peso que levanto depende de la zona del cuerpo que quiero desarrollar, pues no todas lo hacen de la misma forma". Su entrenador, Miguel Rodríguez Pacheco, dice que más que desarrollar una gran masa muscular, el objetivo con Colunga es definirla. |
En lo que
respecta a su vida amorosa, Fernando asegura que, por el momento, no hay una
mujer especial en su vida. Pero si como un moderno Dr. Frankenstein pudiera
crear a su pareja ideal, ¿cómo sería? No lo piensa mucho. "Una mujer que combine la estatura de Nicole Kidman, la cara
preciosa de Sharon Stone y el cuerpecito de Demi Moore", sonríe. "Como ven, ¡no
pido nada!".
El actor-galán del momento regresa a sus pesas. Fernando Colunga cuida su templo...y es una experiencia religiosa.