Alcohol, en justa medida |
La ingesta moderada de
alcohol puede matar bacterias indeseables en el estómago.
Más del 80% de las úlceras de
estómago y menos del 90% de las úlceras duodenales, tienen su causa
en una bacteria, el Helicobacter pilori. Mucha gente se encuentra
infectada por esta bacteria sin síntomas alguno. En otros casos
debilita la pared del estómago o de la parte superior del intestino,
permitiendo a los ácidos estomacales erosionar los tejidos
subyacentes. Los antibióticos son los únicos que pueden tratar de
forma efectiva las infecciones bacterianas que causan las úlceras.
Estudios previos demostraron
que el consumo moderado de alcohol puede acabar con la vida de
gérmenes recién nacidos, patógenos, como la Escherichia Coli y la
Salmonella.
Pero si el consumo moderado
de alcohol tiene esos buenos efectos, mucho alcohol aumenta el riesgo
de cáncer de boca, faringe, esófago y parte superior del estómago; y
una dosis de 10 g de alcohol diarias, puede aumentar el riesgo de
cáncer de mama en algunas mujeres.
Pero además el estudio
demuestra que la ingesta de mucho alcohol puede producir efectos
contrarios al aumentar las posibilidades de infección bacteriana, es
decir, de asentarse en nuestro estómago otras bacterias
perjudiciales.