1.- Presentación.
Lejos de falso
romanticismo y orgullo desviado, el conocimiento y recuerdo del pasado
familiar, de la historia de nuestros pueblos es condición previa para la
explicación del presente.
El examen de la
Historia nos proporciona el
engrandecimiento de la cortedad de nuestras vidas, proyectándonos hacia ese
ancho horizonte, hacia el futuro.
Quien no siente la
necesidad de saber cómo se llamó su bisabuelo o la inquietud de conocer los sucesos
pasados y los comportamientos ante ellos de las generaciones que les
precedieron, empequeñecen su vida resignándose a desconocer el por qué de la
mayor parte de las cosas.
Por eso, es meritoria la inquietud mostrada por Héctor Armando Amescua Draghi al encargarme
este trabajo. La distancia, la separación que nos impone el océano no impide el
acercamiento al pasado y su conocimiento, si bien, tan sólo se trata de unas pinceladas de la
historia familiar de los Améscua vasco-navarro-argentinos.
Desde que los Améscua
procedentes de Navarra se establecen en San Román de Campezo, Alava, en la
segunda mitad del siglo XVI, son una de las familias notables de la villa. No
aparezcan en Vds. ilusos sentimientos de vanagloria, cuando exprese la
condición de la familia Améscua como "Noble", o la de algún componente de ella, como
"Hijodalgo o Hidalgo", no trasladen sus
mentes a grandes castillos, palacios y títulos rimbombantes. Piensen, que en estas tierras los vecinos de
las ciudades, villas y lugares, con matizaciones, disponían de una especie de "hidalguía
colectiva", y que tenían un sistema de control, los Padrones o Lista de Nobles, para evitar el
establecimiento de personas procedentes de otras poblaciones sin esa condición de "hidalguía".
Estos condicionantes desaparecieron en el siglo XIX, con la implantación de
leyes de mayor "igualdad" entre las personas. Razón por la cual dejo
de emplear la terminología de "Noble" en la genealogía familiar,
desde Román de Améscua y Pagate, sin que por ello se pierda lo más mínimo la
categoría humana del linaje Améscua.
La ocupación de los
Améscua de San Román de Campezo, como la de la mayoría de sus vecinos, fue la
agricultura complementada con la cría de ganado, siendo estas las bases que
sustentaron su economía familiar. Ahora bien, algunos datos ponen de manifiesto
su buena posición económica, por ejemplo, como veréis en las partidas de
defunción, la gran cantidad de misas que se mandan se hagan por sus almas.
Igualmente, observareis la existencia de varios curas y maestro.
Por mi parte, espero
haber satisfecho sus deseos. Como argentinos que son, vivan totalmente
integrados los avatares de la sociedad argentina, pero nunca se olviden y mucho
menos renieguen del pueblo de sus antepasados del Pueblo Vasco, de EUSKALHERRIA. Agur eta beti arte
David Maruri Orrantia.