En la torre de Tokyo 

               por Mikki-chan     

 

 

Epílogo Séptimo

“Buenos muchachos”

“Un día más, se llena de color,
y tú vendrás.. llenándolo de amor
ya no me preocupo al caminar, porque tú estas aquí (porque tu estás aqui)
y pierdo todo el miedo que me da porque tu crees en mí”

Fragmento canción: “Amor real”
Intérpretes: Sin bandera

Los zapatitos de tacón apenas si repicaron contra la superficie del pulido piso, la figurita femenina corría como una exhalación y casi sin tomar apenas un respiro. No sabía cómo, pero estaba segura que algo la estaba llamando.

“Alguien” quien le apremiaba a correr a toda prisa..

Pero ¿quién?..

Había alcanzado a ver una capa negra en lo alto de las escaleras.. y no importa cuanto hubiera corrido, no lograba alcanzar a su misterioso anfitrión. Sus pasos, agotados, seguían pese al cansancio su presentimiento, aunque no tenía la menor idea de la identidad de la persona que la precedía…

¡Pero sentía que debía hacerlo!.

- “¡Uf!” –suspiró tomando un segundo de descanso, ya perdida la esperanza- “creo..creo que le he perdido… pero ¿quién era?” –pensó en voz alta, aturdida y confusa, pero muy cansada- “¡uf!” –su mirada verde se paseó por el lugar, reconociéndolo- “pero si es… ¡la torre de Tokyo!”

Parpadeó… ¿era posible?

No había querido visitarla –después de esa horrible noche- nunca más.. ¿cómo es que había ido a parar allí?, ¡eso no tenía sentido!. Pero un fuerte viento le golpeó el rostro y apenas si pudo cubrirse con las manos, mucho menos continuar reflexionando.

Sin embargo, al abrir los ojos se encontró con una figura enfundada en una gran capa negra…

¡La persona que ella había seguido a través de las escaleras!

- “¿Quién.. eres?” –preguntó Sakura con una voz suave, tratando de vencer la peculiar reticencia que se adivinaba en el extraño personaje- “¿por qué me llamaste hasta aquí? ¿te conozco?”

La figura oscura –que estaba de espaldas a la joven mujer- no respondió una sola sílaba. Y Sakura juzgó oportuno adelantarse lentamente hacia su anfitrión silencioso, tratando de controlar los súbitos e inquietos latidos de su corazón. ¿A quien esperaba ver?, no lo sabía, pero sí estaba segura que esa persona había llamado su atención con algún propósito y…

La amplia capa osciló con el viento..

- “No.. ¡no te haré daño!… pero.. ¿quién eres?, ¿por qué me has llamado?”

El silencio de la noche fue sólo interrumpido por el nuevo aullido del viento. Pero Sakura aún espero unos segundos antes de dar otro paso..

- “Por favor… ¡¿quién eres?!, ¿qué es lo que quieres de mí?, ¡dímelo por favor!”

Como si respondiera con acciones a la pregunta de la antigua card captor, la pequeña figura giró lenta, casi milimétricamente.. y sólo una frase brotó de los labios de la esposa de Shaoran Li, quien se llevó las manos a la boca tratando de contener un grito de júbilo al reconocerle..

- “¡Kamui!”

La figura del ¿adolescente? le miró con algo parecido al dolor en su semblante.

- “Pe.. pero.. ¿eres tú Kamui?” –dudó Sakura, notando con asombro que la figura del muchacho no había sufrido el menor cambio, pese a los ocho años transcurridos- “te… te ves igual… a.. la última vez que te ví” –dudó pasmada- “¿eres realmente tú? ¿tú me has llamado hasta aquí? ¿por qué? ¿por qué?, ¿por qué tu aspecto no ha cambiado? ¿qué quieres decirme?”

Por única respuesta dos lágrimas brotaron del mudo rostro del chico… dos lágrimas amargas y llenas de tristeza. Reflejos de un profundo pesar…

- “¡¡¿Kamui?!!”

- “Lo… lo siento… lo siento mucho…”

- “¿Kamui?, ¿eres tú?, ¿por qué lloras?”

- “Lo siento mucho..”

- “¡Kamui ¿por qué?, ¿Qué quieres decir?, ¿Qué significa esto? ¿Kamui? ¡dímelo, dímelo!.. ¡DIMELO!”

Los ojos verdes se abrieron instantáneamente y la joven dama se encontró súbitamente sentada en su lecho conyugal. Era todavía de noche y la luna no brillaba; tampoco habían estrellas en el firmamento.. era una noche oscura..

Respiró con dificultad… inhalando varias veces como si se ahogara. La sensación era insólita, tenía aún grabada en la mente la terrible tristeza en el rostro de Kamui, pero no entendía nada. Y entonces se dio cuenta…

Estaba totalmente sola en su habitación.

- “¿Shaoran?” –llamó lentamente, poniéndose de pie y envolviéndose en una bata- “¿Shaoran?”

Salió de su habitación y caminó por el corredor en silencio. Aquel sueño le había dejado muy angustiada… casi asustada. Hacía mucho tiempo que no soñaba nada, y tenía una extraña sensación. Además que no estaba nada feliz por despertarse y no hallar a Shaoran a su lado. Se dijo a sí misma que pensaría en ese sueño después.. cuando no tuviera tanto miedo, pero suspiró en alivio cuando notó la luz encendida en la biblioteca particular de su esposo. No sabía por qué.. pero saber que él estaba allí, le proporcionaba un increíble alivio.

Ciertamente Shaoran llevaba varios días trabajando hasta muy tarde y levantándose antes que ella, pero saberlo cerca, tan seguro y confiable, le hicieron tomar en broma sus absurdos temores..

- “!Ni siquiera sé a qué tuve miedo!” –pensó con una sonrisa- “él está a mi lado, Hien en su camita y todo está bien ¡sí, todo lo está!”

Descendió veloz, pero silenciosamente. Eran casi las cinco de la mañana, y su querido Shaoran estaba trabajando otra vez hasta tan tarde. Iba a prepararle una taza de té en la cocina –o quizás mejor café- y a darle una sorpresa, pero antes asomó levemente su rostro a través de la puerta entreabierta mientras una sonrisa traviesa brillaba en sus labios..

Sonrisa que se heló en sus labios…

Shaoran estaba tendido en el amplio diván frente a su gabinete y se quejaba y sudaba copiosamente. Sus ojos estaban cerrados, su rostro muy pálido y parecía temblar inconteniblemente a la vez que murmuraba frases ininteligibles..

- “¡Oh Shaoran…!”

- “¡No… no…. no!, ¡no puedo, no puedo..!”

El joven se quejó débilmente, y el alma de Sakura pareció caer a sus pies. Por como estaba acomodado, no estaba teniendo una siesta furtiva o algo por el estilo.. no. Definitivamente era ya una rutina…

- “Tiene pesadillas.. y no quiere que yo las sepa” –pensó acongojada- “¿soñará lo mismo que yo?, ¡oh, pero que cosas pienso!, ¿cómo pudo pasar esto sin que yo lo notara?, ¿cómo pude ser tan descuidada?”

Dudó… cuando estaba por inclinarse ante él y despertarlo tiernamente, calmando su angustia. Sabía que Shaoran se sentiría terriblemente avergonzado de que ella le hubiera visto y no deseaba crear esa incomodidad en él. De modo que, con infinita ternura, limpió con un pañuelo el sudor de su rostro y su esposo pareció casi tranquilizarse ante su leve contacto. Al punto tal que cuando se alejó notó que ya su respiración era tranquila..

- “Le contaré de mi sueño ¡y esa será la excusa para no permitir que esto siga pasando!” –se prometió a sí misma- “¡¡no, no debo descuidarlo!!. No me extraña con toda la presión del Concilio. La situación entre los clanes de Mongolia y Siberia aún es muy inestable, y seguro que hay algo más que no me ha dicho por no inquietarme..”

Aún inquieta y en la oscuridad de su alcoba suspiró con preocupación pensando durante un buen rato en lo ocurrido. ¿Por qué había soñado con su joven amigo Kamui? ¿había tratado él de decirle algo en aquel sueño o fue producto de su imaginación porque había estado pensando mucho en el destino del infortunado jovencito?: no lo sabía, pero su mayor inquietud era ya Shaoran…

Su Shaoran..

Sonrió al sentir un leve ruido, matizado por las suaves pisadas de su esposo sobre la alfombra. Miro de reojo el reloj y notó que había pasado apenas media hora desde que descubriera sus pesadillas ¿había notado él su presencia?, no estaba segura, pero iba a tratar de no ponerlo sobre la pista..

- “Mi dulce Sakura…” –susurró él con ternura, apartando un mechón de cabello del rostro de ella- “duerme tranquila mi vida…”

- “¿Hmm?, ¿Shaoran?” –fingió tratando de ser convincente; pero recordando su plan, lo abrazó con fuerza ante el asombro de él- “¡Oh, que bueno que me despiertas, tuve un sueño muy extraño!”

Su joven esposo se hundió en su figura y pese a que ella temblaba de sólo recordar lo ocurrido en su sueño, logró sentir que él también estaba temblando. Pero disimuló y lo abrazó con fuerza relatándole lo que soñó esa noche, suplicándole muy suavecito que no la dejara durmiendo sola otra vez..

- “Si Sakura..” –suspiró él,  feliz de sentirla tan cálida y dulce, y tan cerca de su cuerpo- “yo también te necesito mucho..”

Y así –abrazados aún el uno al otro- se durmieron hasta que finalmente amaneció. 

*                      *                      *                      *                      *

La noche siguiente, Jeff O´Neill, agente de Scotland Yard e INTERPOL se encogió de hombros con peculiar solemnidad y Eriol le miró con interés.

- “¡Vaya!, de modo que ése es el motivo de tu visita a Japón” –dijo tranquilo- “escapas del acoso de una de tus “ex”; y aunque no me sorprende demasiado… me divierte. Debe ser una mujer muy constante”

- “Constante y celosa hasta un modo que me asusta” –admitió el irlandés- “¡en fin!, no pienso volver a Londres en un año al menos. Aunque el tiempo no es garantía que me olvide”

- “¡Que modesto!”

El agente suspiró levemente. Se sentía a gusto de contarle a Eriol lo ocurrido, especialmente porque cada vez que visitaba a Hiragizawa, el espectro de Tsu Chin se apartaba de él..

Y no quería escuchar el “te lo dije” de un muerto..

- “Definitivamente es demasiado” –dijo serio- “admito que hace algunos años estaba locamente interesado en ella pero súbitamente dejó de interesarme y en realidad ya no quiero nada”

- “Jeff, eso es algo que te pasa muy seguido.. según recuerdo” -rió el inglés.

- “¡No puedes darme lecciones Eriol, a ti te pasaba igual!” –el aludido se encogió de hombros- “¡en fin!. Supongo que retomar una relación luego de cuatro años no iba a acabar bien”

- “Si no te interesaba ¿porqué volviste con ella?”

- “Hace algunos años… me enamoré como loco, ya te digo. No era como lo que me pasó con Yok..” –Eriol esbozó una sonrisa y el agente tosió, incómodo- “bueno, ¡ya sabes!. Es curioso, pero tu esposa ha sido la única chica a la que le pedí matrimonio..”

- “Lo sé. Y eso no deja de parecerme divertido..” –observó el inglés, sin el menor asomo de incomodidad, pues la amistad entre el agente y él ya había salvado ese punto hacía mucho tiempo- “pero lo que sí me sorprende es que si te enamoraste tanto de esta chica que me comentas no se lo pidieras”

- “Sí. Yo mismo no me lo explico. El problema es que así como estuve loco por ella durante casi un año se me pasó de pronto y terminamos. Hace algunos meses volvimos a vernos y tratamos de intentarlo de nuevo, pero definitivamente sus celos asustan” –hizo una pausa pensativa- “Además que a Tsu Chin no le gusta nada ella y..”

Ahora sí que Eriol se rió con ganas..

- “¡¿Nuestro enemigo siamés es quien te aprueba o desaprueba las relaciones?!” –murmuró sorprendido- “¡vaya sorpresa!”

- “¡No te burles!... ya se nota que no eres tú quien tiene que cargar con ese tipo. ¡Si apenas le aguantas el día del aniversario de su muerte imagina lo que tengo que soportar yo, que tengo que aguantarlo el resto del año!”

Ambos amigos se echaron a reir..

Un leve toque en la puerta anunció la presencia de Yoko, quien invitó al agente a cenar. Pero fue durante la charla de sobremesa –cuando ya Miriel y Tao habían ido a dormir.. aunque el adolescente iba protestando por ser “tratado como bebé” una noche de sábado- que la reencarnación de Clow comentó algo con divertida ironía. Algo, que sorprendió al irlandés…

- “¿Tienes un evento para mañana?” –se sorprendió Jeff- “¡es domingo!, ¡amigo, yo pensaba pedirte que esta noche me llevaras a algunos clubs de solteros en esta ciudad..  y..!””

La mirada asombrada de Yoko detuvo en seco al pelirrojo. Mientras Eriol contenía una divertida sonrisita..

- “Eh… ¿a unos clubs de solteros dije?, ¡no, no, me refería a algún museo, un lugar cultural!” –balbuceó, sintiendo los enormes ojos grises de Yoko mirarle con asombro- “¡es que a mí me encantan los lugares culturales!.. ¿verdad Eriol?”

Eriol siguió riendo sin disimular.. y ante el asombro del pelirrojo irlandés Yoko esbozó también una sonrisa..

- “No te preocupes Jeff” –asintió la señora Hiragizawa- “no tengo ninguna objeción en que se diviertan” –se volvió hacia su esposo- “pero no olvides lo de mañana Eriol…”

La joven china hizo una leve reverencia y se despidió del agente, quien la miró con pasmado asombro..

- “¿Qué diablos?” –balbuceó, asombrado- “¿tan domesticada la tienes?”

- “Mi querido amigo… mi esposa no es algo que pueda ser calificado como “domesticable”” –le explicó el hijo de Hajime Hiragizawa, con divertida paciencia, antes de añadir, con un toque de malicia en su mirada azul- “aunque cuando estamos solos.. quizás yo sea el que no anda muy domesticado que se diga..”

- “¡No me refiero a eso!. Lo que te digo es que… bien, fui indiscreto, pero pensé que ella te tendría bien marcaditos los horarios y salidas y..” –hizo una pausa para ordenar sus ideas- “¿acaso no es celosa?”

- “Sí… admito que sí. Deliciosamente celosa” –rió el inglés con total malicia- “pero su desconfianza es para con las mujeres…. no para mí”

- “¿Perdón?”

- “Yoko me tiene total confianza. Ella sabe muy bien que no la traicionaría ni aunque me ofrecieran a diez chicas o más a la vez”

El agente parpadeó..

- “¡¡¡Diablos!, ¿es cierto lo que dices?!!!”

- “Por supuesto”

- “¡Pues que suerte tienes!, ya veo que pese al tiempo que lleva contigo sigue siendo tremendamente ingenua..” –Eriol negó con la cabeza y el agente le miró con perplejidad- “eh.. ¿por qué?.. ¿por qué niegas?..” –su boca se abrió en sorpresa, ante la idea- “¿acaso vas a decirme que tú nunca le has sido infiel en todo este tiempo?”

- “Si no quieres no te lo diré. Pero es totalmente cierto”

Ahora sí que Jeff O´Neill estaba mudo de estupor..

- “¡Las cosas que se ven en este mundo!” –dijo, pasados algunos segundos- “primero: te casas.. tú, el que juraba que nunca iba a hacerlo. Después: ¡trabajas!.. y bueno, nunca dijiste que no fueras a hacerlo pero parecía improbable. Y finalmente me sales con que luego de casi siete años de matrimonio le sigues siendo totalmente fiel a tu esposa..”

- “¿Sorprendido?”

- “Bueno.. debes admitir que ese tipo de comportamiento no es muy natural en ti” –sonrió comprensivamente- “aunque admito que es aceptable que Yoko te haya hecho cambiar tanto. Ella es un tipo raro de chica: inocente y confiada. Supongo que el tipo de los que hacen cambiar a sujetos como nosotros”

El inglés asintió.

- “¿Deseas todavía que te lleve a algunos clubs nocturnos en Tomoeda?”

- “¡No, no amigo!.. no te preocupes. Entiendo tu situación y te envidio aunque no lo creas. Sólo dime las direcciones e iré.. después de todo, mañana tienes un evento ¿no?” –añadió- “¿qué clase de evento?  ¿un paseo campestre, una pelea?”

- “Más o menos: ser árbitro en una reunión familiar” –negó antes que Jeff preguntara- “no, por supuesto que ni mi padre o Regina están aquí; además que ellos nunca discuten, ya sabes que eso no es muy educado.. como ellos dicen”

- “¿Entonces?”

- “Unos buenos amigos”

- “¿Por qué no contestas directamente las preguntas?” –suspiró O´Neill.

Eriol rió de nuevo, despidiéndose de su amigo, mientras en la casa de los Kinomoto, también habían preguntas..

- “Entonces.. ¿eso no es de la abuela Nadeshiko, abuelo?”

Ante la pregunta infantil Fujitaka sonrió con paciencia, encontrando dos pares de ojos muy inquisitivos. 

- “No Hien, Mamoru... esto no es de su abuela”

- “Pero siempre he visto que lo llevas a todos tus viajes. Nunca te separas de ese cofre abuelo” –murmuró Mamoru.

- “Es un recuerdo familiar pequeños. Eso es todo. El único recuerdo que tengo de mi propio abuelo. La persona que me educó..”

- “¡Ohhhhhhh!”

- “¿Por qué no lo habías dicho?, ¿es un secreto abuelo?”

- “No Hien, no lo es. ¿Por qué lo preguntas? ¿tienes tú un secreto?”

El niño pensó en el libro que tenía en su habitación.... en lo que significaba y en lo que quería probar… pero prefirió el silencio antes de decir algo sin sentido.

- “¡Ay abuelo, no le hagas caso!” –rió Mamoru, ante la carita contrita de su primo- “¿dices que esta caja es una herencia familiar entonces?”

- “¿Será el libro que tengo en mi habitación herencia de alguna familia?” –pensó Hien- “¿estaré haciendo lo correcto?. No sé. Yo sólo… sólo quiero probar… probar lo que valgo…”

- “Si Mamoru. Esta caja es herencia familiar” –respondió Fujitaka con inagotable paciencia.

- “¡Genial!, si tú se la das a papá, algún día él me la dará..” –replicó Mamoru, con complacencia.

Hien parpadeó sin comprender el interés de su primo por  lo que se veía como una simple caja de madera, pero pensó en lo importante que era para él el clan Li y comprendió. Tal vez a Mamoru le pasaba lo mismo que a él y deseaba probar algo, a sus padres o a sí mismo. Como quiera que fuese, ambos niños contemplaron el objeto con interés antes de que Tomoyo y Sakura –que estaba de visita junto a Hien- ingresaran para avisarles que iban a servir la cena..

- “Te ayudo mamá..” –se ofreció Mamoru- “no sea que mi hermana nos deje sin platos como el otro día..”

A Tomoyo le surgió una gotita sobre la cabeza, mientras Nadeshiko protestaba desde la cocina..

- “¡No seas malo Mamoru!”

- “Papá ¿puedo hablarte?” –pidió Sakura apenas Tomoyo y el niño salieron, murmurando a su vez cuando Fujitaka se acercó a la puerta - “por favor... no le digas a mi hermano lo de mañana. Quizá no iría si sabe que Shaoran vá a estar allí...”

- “De acuerdo hija.. pero no te preocupes. Estoy seguro que Touya y Shaoran ya se llevan mejor; quizá mañana las cosas no salgan tan mal como crees”

- “Sí, pero….” –suspiró- “Bueno, es que quisiéramos saber si todo lo que hemos intentado estos años dará resultado ¡y es una primera prueba!”

- “Tranquila hija… no seré indiscreto. Lo prometo. ¿Quieres decir que Shaoran tampoco sabe que tu hermano irá mañana?”

- “Ha estado muy ocupado… y temo que aún no se ha detenido a pensarlo. Su sobrina May May se quedará en nuestra casa mañana y eso lo tiene más tranquilo; por eso no le dije que Touya iría..” –sonrió- “temo que May May le pone nervioso y ya está aliviado por dejarla en casa. Si le digo que mi hermano estará allí…”

Fujitaka suspiró asintiendo. Pero notó una profunda inquietud en los ojos de su hija y le preguntó:

- “¿Está todo bien Sakura?. No creo que estés tan preocupada por eso…”

- “¡Oh papá, estoy muy preocupada por Shaoran!” –se fijó en que su hijo estuviera distraído y continuó muy bajo- “ha estado trabajando mucho… y tiene pesadillas. Lo descubrí anoche pero no se lo hice notar porque a él le incomodaría… aunque no sé como ayudarle. El Concilio es muy complicado y difícil, sé también que eso es labor de él como Jefe pero.. ¡necesito hacer algo!”

Fujitaka pareció pensativo..

- “Hiciste bien en no ponerlo en evidencia. No es bueno ofender su orgullo querida mía. Sin embargo quizá puedas charlar con él.. buscando una ocasión propicia, y le pongas claro que estás lista para tomar mayores responsabilidades de las que ya tienes.. que no son pocas ¿verdad?”

- “No, no lo son. Pero las de él son infinitamente mayores que las mías”

- “Entonces busca la ocasión… y tenle mucha paciencia. Shaoran es un chico muy responsable y estricto consigo mismo y es necesario que se relaje un poco..”

- “¿Crees que es mala idea lo de mañana?. Lo que pasa es que como es algo casi familiar pensé que le distraería de los asuntos de la oficina, además ya habíamos quedado contigo y Yukito.. pero si crees…”

- “No, no. Pero deja que las cosas sean naturales. No queremos presionarlo y Touya tampoco será fácil ¿de acuerdo?”

Hien miró a su madre y su abuelo planear algo y agudizó el oído. Seguro que tenía que ver con su papá y su tío. Suspiró. Ellos solían hablarse poco, pero mamá y tía Tomoyo deseaban que no sólo se cruzaran algunas palabras sinó que fueran amigos.

Realmente amigos. Y pese a ser tan pequeño él sabía que.. no era fácil. Quizá se respetaran.. pero de lejos. 

Y de allí a hacerse grandes amigos –como deseaban ardientemente su mamá y su tía- ya era otra cosa.

¿No sería que esperaban demasiado?

- “Que raras son las mamás” –pensó.

Contempló por última vez la cajita de su abuelo y la puso en su lugar, pero se sorprendió al ver algo y..  la dulce voz de Nadeshiko anunció la llegada de su tío y eso le distrajo, pues su madre y su abuelo salieron a recibir al médico. 

- “¡Hola papá!, ¡bienvenido!” –repuso la hermosa niña de ojos melados.

- “¡Hola hermano!” –escuchó saludar a su madre.

Los verdosos ojos de Hien se abrieron con mayor interés pero la voz de Fujitaka reclamó la presencia del niño, y aún algo apurado, el único hijo de Sakura y Shaoran corrió hacia la salita, justo para ver a su madre y su tío…

En lo mismo de siempre..

- “¡¿Monstruo?!” –la voz de Touya reflejaba sorpresa, y miró a su esposa y su hermana con suspicacia después de saludar a su padre, su sobrino y sus hijos- “¿qué haces aquí Sakura?, ¿traman algo ustedes dos?”

Tomoyo sonrió sin responder y se empinó para darle un beso, haciendo que el médico se pusiera rojo como un tomate…

- “¡Oh, me hubiera gustado filmarlo!” –protestó Nadeshiko.

Mamoru abrió los ojos como platos y Hien se sonrojó, mientras Sakura ahogaba una risita.

- “¿Cómo crees hermano?, sólo vine a ayudar a Tomoyo en la cocina... como están sin ayuda doméstica por ahora. ¡No quería interrumpir nada!”

- “¡Grr!” –gruñó el doctor, seguro ya que su esposa y su hermana tramaban algo, pero demasiado aturdido por el exceso de público ante el beso de Tomoyo- “¡ejem!” –tosió, olvidando sus sospechas, antes de volverse a molestar a su hermana para disimular su incomodidad- “¿Cocinaste tú Sakura?”

- “En parte.. ¿por qué?”

Tomoyo sonrió. Su pequeña treta había dado resultado y Touya parecía haber olvidado su desconfianza pues estaba demasiado ocupado con sus bromas hacia Sakura..

- “Ayudé a Tomoyo con la ensalada.. y picando algunas verduras. “

- “¿En serio?, que bueno que me lo dices pues así podré tomar un digestivo después. Digo, si es que se puede comer lo que preparaste.”

Fujitaka sonrió al igual que Tomoyo y los niños –que no entendían nada- mientras una venita aparecía sobre la cabeza de Sakura.

- “¡Oh, hermano eres odioso!” –protestó la esposa de Shaoran.

*                                 *                                 *                                 *                      *

Eriol practicaba su sonrisa más inocente con la mayor desfachatez de este mundo pero Shaoran no dejó de fruncir el ceño ni un solo milímetro..

- “De modo que era esto” –masculló enojado- “¿por qué te prestas siempre para hacerme la vida difícil? A veces me pregunto si realmente eres mi amigo..”

- “¡Vamos, vamos!.. tómalo con calma” –le tranquilizó el inglés- “no veo porqué el motivo de enfado o incomodidad de tu parte. ¿Cuál es el problema?. Todos estamos trabajando juntos en un domingo…. ¿Cuál es el motivo de la irritación?”

- “El desplante que me acaba de soltar el sujeto éste. ¡Ya lo sabes y te estás riendo!” –bufó enojado, pues Eriol realmente contenía la risa- “no me vengas con que no te diste cuenta o que no lo sabías..” –suspiró- “¿por qué Sakura hace estas cosas?”

- “Sakura sólo quiere que tú y su hermano sean amigos. ¿Qué te es tan difícil de asimilar?”

- “Lo que ella debería entender es que ya es bastante que no nos insultemos” –replicó, cruzándose de brazos- “¡rayos Eriol!, no sé si lo entiendes, no es que yo me ponga necio, pero él y yo nunca seremos amigos. Digo, nos respetamos mutuamente y sé que hizo un buen trabajo cuidando de Sakura cuando era niña pero nunca podría llevarme tan bien con él como me llevo con Yukito.. o con Yamazaki o..”

- “¿Conmigo?”

- “Contigo nunca se sabe cómo vas a actuar. Y a veces me alteras casi tanto como ese sujeto..”

Eriol rió de nuevo.

- “Bien, aprecio esa honestidad de tu parte. Pero al menos ya nos tenemos cierta confianza ¿no crees?” –Shaoran soltó un suspiro exasperado- “bien, bien… sé que suelo sacarte de quicio pero somos amigos..”

- “Sí, de mi parte. Nunca sé qué pasa por tu cabeza..”

- “Y no quieras saberlo amigo” –una risa maliciosa asomó por los labios del inglés- “quizá te asustaría” –añadió tras una pausa- “Pero claro… como Yoko es ahora la guardiana de mi conciencia creo que puedes respirar tranquilo”

Shaoran suspiró de nuevo.

- “Como sea” –replicó el Jefe del Clan Li a la reencarnación de Clow- “suelo ser tu amigo hasta que empiezas a divertirte a costa mía” –el inglés rió y reconoció mentalmente que Shaoran hacía grandes progresos lanzando ironías- “Pero pese a todo, hablarte a ti o a cualquiera es más fácil que llevarme bien o tener una charla sin sarcasmos con ese sujeto”

- “¡Gracias!” –rió de nuevo Eriol, haciendo una burlona reverencia y finalmente Shaoran también se rió- “vamos amigo… relájate un poco. Tu problema de siempre es ése. Tomas todo muy en serio. Pero volviendo al punto… el doctor Kinomoto no es un mal sujeto; es tu cuñado, el hermano de tu querida Sakura..” –continuó Eriol con paciencia- “y ambos se han salvado la vida mutuamente más de una vez. Además es bueno llevar las cosas bien con los cuñados… te lo digo por experiencia propia: Tao es un aliado estupendo”

- “Lo sé, tú y ese atolondrado cuñado tuyo deben tener loca a Yoko” –sonrió Shaoran, más relajado ya- “pero es diferente a ser amigo de alguien como Kinomoto. A veces es más fácil pelear por una causa común que tener una gran amistad con alguien que nunca te ha simpatizado. Y tampoco él me quiere mucho” –continuó- “ya viste que las chicas nos asignaron a ver los últimos arreglos exteriores al Campus y se largó sin decir nada..”

- “Hmmm. Quizá el motivo de su desagrado fue mi presencia. Alguna vez tuvo celos de mí…” 

- ¡Ya te creo!” –ironizó el Jefe del Clan Li- “sabes bien que te ofreciste a trabajar en esto precisamente hoy, para ser juez de otra pelea entre nosotros..”

- “¡Vaya!, ¿realmente me estoy volviendo tan predecible?” –rió- “yo que pensé que quedaría muy bonito decir que ´quería ayudarles a llevar una conversación sin ironías´.. ¡te has vuelto muy perceptivo Shaoran!”

- “Mira cómo me divierto” –continuó ironizando el joven chino.

Eriol contempló los últimos planos de las modificaciones al Campus sin interés. Bien, ciertamente quería divertirse siendo juez de un reciente duelo verbal entre Shaoran y Touya Kinomoto –algo que siempre era estimulante para él- pero Sakura, Tomoyo y su propia esposa le habían pedido que influyera con Shaoran. Después de todo, Yukito estaba haciendo lo mismo con Kinomoto. 

Se encogió de hombros.

Además, era poco caballeroso no cumplir con un pedido de sus amigos. De modo que decidió usar una nueva estrategia..

- “¿Y no has pensado que los niños son un buen motivo para que ustedes empiecen a no sólo ´tolerarse´ sinó a realmente estimarse?” –Shaoran le miró interesado- “tu hijo y el pequeño Mamoru están reflejando algo del antagonismo que ven entre ustedes, y siendo ambos primos…” –hizo una pausa a propósito para que Shaoran pensara en su frase- “sería bueno que fueran amigos. No niego que tu hijo tiene muchos primos del lado de tu familia pero si van a quedarse en Japón sería bueno que él y Mamoru congeniaran”

Los sorprendidos ojos de Shaoran parecieron meditar largo rato. Lo que él ignoraba era que en la habitación de al lado –el despacho del Rector Universitario- Yukito Tsukishiro le decía lo mismo a su mejor amigo ante el aprobador silencio de Tomoyo, Sakura y el propio Fujitaka.

- “Los niños..” –pensaban Touya y Shaoran

¡Ay con los niños!

- “¿Eso es todo?” –decía Hien en ese momento.

- “¿Te parece?”

- “En realidad no es gran cosa. Creí que iba a ser más difícil...” 

- “Por supuesto.. para mi primo chino, todo es poca cosa” –dijo Mamoru, con burla- “tienes siete años ¿qué querías que fuera?”

- “¡No te burles de mí!” –protestó Hien- “en mi casa de Hong Kong las pruebas eran más difíciles y..”

- “Sé que tu padre es un gran guerrero. Pero no quieras convencerme que a ti te estaban entrenando para eso desde ahora” –bufó el hijo de Touya.

Hien frunció el ceño. ¡Nunca podía pasarse cinco minutos con Mamoru sin que le hiciera enfadar!..

- “No tengo que convencerte de nada. La dinastía Li no comparte sus secretos con nadie, y aunque seas mi primo no te contaré..”

- “No quiero que me cuentes” –le interrumpió Mamoru y Hien frunció el ceño más todavía- “Mi mamá me ha dicho que tu papá es un guerrero fuerte y eso está bien, pero si inventas excusas para no hacer la prueba.....”

Los verdes ojos del hijo de Sakura y Shaoran brillaron de enfado..

- “¿Cómo se te ocurre?, ¡voy a subir hasta allá ahora mismo y verás que es patéticamente fácil!”

- “Vamos, vamos.. ¿por qué no se calman?” –sonrió Miriel terciando la discusión y acercándose a ese par, pese a la advertencia de Nadeshiko- “¿qué estaban diciendo?”

- “Mamoru hablaba sobre la “prueba del valor”.. y no me pareció gran cosa” -replicó Hien, algo amoscado- “¿cuándo la hiciste tu?”

Los azules ojos de Miriel Hiragizawa tropezaron con la expresión preocupada de Mamoru  Kinomoto y la niña amplió su sonrisa inocente.. 

¿Prueba del valor?, eso se veía divertido.

- “Hace muy poco.. y tuve miedo” –dijo en un tono levemente confidencial- “pero logré realizarla porque todos fueron pacientes conmigo”

Los ojos verdes de Hien la miraron como interrogando por más información y Mamoru apenas pudo contener su sorpresa ¿por qué no había desenmascarado su broma aquella niña?, ella sabía muy bien que todo era sólo un juego que se le acababa de ocurrir para poner a Hien en apuros, entonces.. ¿por qué no dijo nada?..

Suspiró con incomodidad. 

Cuando esa niña sonreía así, él le tenía más desconfianza que nunca...

- “Si vas ha hacerlo será mejor que sea pronto. Digo.. si es que no te echas para atrás..”

Los ojos verdes de Hien casi fulminaron a su primo pero Mamoru le sostuvo la mirada con una risa burlona y el pequeño Li frunció las cejas, marchando hacia la torre del reloj con una expresión decidida en su semblante...

- “Parece que sí es capaz. ¿Te divierte molestarle no?”

- “Escucha Hiragizawa ¿qué te traes?” –le espetó Mamoru- “pudiste haber dicho que yo le estaba mintiendo pero no lo hiciste, ¿por qué?”

- “Es divertido ver a Li... cuando se cree los cuentos de Yamazaki” –rió la niña- “pero es aún más divertido verlo cuando se pone tan terco... y más con otro terco como tú” –los ojos azules de Miriel brillaron- “además que quieres probarle ¿verdad?. Por que es tu primo y deberías protegerle como proteges a tu hermana., aunque lo haces sutilmente ¡ya me dí cuenta!”

- “Yo sólo protejo a mi hermana ¡por que es mi hermana!” –protestó Mamoru- “no tengo obligación de proteger a nadie más. Y Hien se lo cree todo, ¡alguna vez tendrá que aprender a ser más astuto!”

Miriel amplió su sonrisa.

- “¡Vaya!, es como si fuera tu hermano menor.” –se rió bajito- “los hermanos mayores y menores siempre pelean pero los mayores en el fondo protegen a los menores...”

- “¿En serio?... no trates de ser demasiado lista” –bufó viendo a su primo a lo lejos, subiendo a la torre del reloj y pensando en voz alta- “además no puede lastimarse porque no es peligroso. He subido hasta allí mil veces y tocado la campana yo mismo..”

Miriel amplió su sonrisa.

- “Yo pienso lo mismo” –comentaba Fujitaka con una gran sonrisa, ajeno a lo que charlaban los niños, que jugaban algo apartados de los adultos- “¿no es acaso la forma en que tratabas a tu hermana, Touya?”

- “La torturabas mucho, pero todos sabíamos que lo hacías por protegerla..” –rió Yukito.

- “¡Oh, ya cállense!, ¡esto es ridículo!”

El médico de la familia se puso de pie, cansado de tanta tontería –y que le pusieran en evidencia- y salió del despacho de su padre sin hacer un comentario más, pero en el pasillo se tropezó con Shaoran y Eriol que charlaban aún sobre los últimos preparativos para el aniversario del Campus Clamp en Tomoeda.

Evento que sería realizado al día siguiente. 

- “Doctor Kinomoto... ¿podría brindarnos su opinión?” –sonrió Eriol, con paciencia- “personalmente creo que es digno de resaltar que pese a todos los años transcurridos la torre del reloj es lo único que no ha cambiado en la ciudad” –continuó- “por supuesto, Shaoran afirma que lugares tales como el templo Tsukimine y el parque Pingüino pueden ser igual de emblemáticos, pero yo creo que esta tarde podríamos acondicionar más la torre del reloj como parte importante del Campus Clamp en Tomoeda” 

- “¿Quieren mi opinión?”

- “Has vivido en esta ciudad mucho más tiempo que nosotros” –replicó Shaoran, encogiéndose de hombros.

Touya Kinomoto no dijo nada. Se limitó a contemplar los planes para las festividades del día siguiente con interés... y haciendo nota mental –muy a su pesar- que debía agradecerles a esos dos el haber venido a cooperar con la festividad. El tenía el deber de ayudar a su padre y a Yukito, su mejor amigo – Rector Universitario del Campus y Director escolar, respectivamente- pero esos dos estaban allí de buena voluntad...

- “La torre del reloj siempre fue importante para los habitantes de Tomoeda” –dijo sin inflexión alguna en la voz- “y pese a todos los cambios tecnológicos y la modernidad las personas dependen de sus campanadas en sus actividades diarias. Es casi una tradición aquí”

- “Bien, eso lo decide todo. ¿No crees Shaoran?”

- “Sí, creo que tienen razón”

Touya se cruzó de brazos. 

¡Oh, que difícil era!..

- “¿Por qué están ustedes aquí?” –espetó.

- “¿Por qué?” –repitió Shaoran- “¿te refieres a haber venido a ayudar aquí, esta tarde?” –la ruda pregunta hizo enfadarse un poco al Jefe del Clan Li- “¡Oye, ¿nos estás echando?!”

- “No” –contestó Touya- “pero quería saber..”

- “Mi hija estudia en esta escuela... al igual que el hijo de Shaoran. No hay ninguna sorpresa en que ayudemos” –replicó Eriol, calmando los ánimos- “Sakura también está aquí y Yoko, Tomoyo y varios de nuestros ex –compañeros” –amplió su sonrisa pues Takashi Yamazaki pasó ante ellos en ese mismo instante llevando varios programas de actividades- “¿qué tiene de especial?”

Touya bufó. Pero no dijo nada.

- “¿Crees que puedan trabajar juntos sin insultarse?” –cuchicheó Tomoyo  a su mejor amiga y cuñada, atisbando detrás de una puerta- “ji, ji... es la primera vez que lo hacen sin que les hayamos obligado..”

- “Espero que sí” –sonrió la esposa de Shaoran- “tal y como dijiste, era cosa de tiempo. Pero de todas maneras me alegro que Eriol esté allí para calmar los ánimos..”

- “Y ya que es cosa de tiempo, quizá sea mejor que empecemos” 

- “¡Empezar, empezar.. ¿es lo único que sabes decir?!” –protestó Hien- “¡ya son casi la hora del almuerzo y si he esperado tanto ha sido por culpa tuya!”

Mamoru se encogió de hombros.

- “Para realizar una prueba del valor debes hacerla bien. ¿Qué caso tiene hacerla sin que nadie lo sepa?”

Hien frunció el ceño de nuevo pero mentalmente estaba de acuerdo con su primo. Ya se habían reunido allí, sin embargo empezaba a ponerse nervioso...

- “Es mejor que no lo hagas.. puede ser peligroso..”

- “No me vá a pasar nada Nadeshiko, ¿cómo crees?” –dijo encogiéndose de hombros en un gesto de desdén- “esto es tan fácil que dá risa: subir las escaleras hasta llegar a lo alto de la torre del reloj y tocar su campana.. ¿realmente crees que esto es reto para mí?”

- “Bueno... me alegra tener material para filmarte” –dijo la niña, con una sonrisa- “pero no tienes por qué hacerle caso a Mamoru, lo hace por fastidiarte..”

- “Lo sé, y por eso quiero cerrarle la boca. Con eso va a dejar de tratarme como si por ser dos meses mayor que yo, tuviera la experiencia del mundo” –masculló irritado- “¡vas a ver como se calla cuando vea que esto es muy fácil para mí!” –añadió bajito- “es más.. lo voy a hacer con los ojos vendados”

- “¡No Hien, no!”

- “No te preocupes, además no me arruines la sorpresa. ¡En mi casa de Hong Kong he hecho cosas más difíciles...!”

- “¿Estás seguro?”

Hien asintió, mientras Nadeshiko miraba la alta torre del reloj.. no muy convencida. Por su parte, Kia Monouhi –hijo de Kaho y compañero de clase de Mamoru- trataba de disuadir a su amigo de llevar eso a cabo...

- “¡Eres tan terco!”

- “El terco eres tú. No hay posibilidad que se lastime, ¡no hagas drama!” –bufó Mamoru.

- “Si es tan fácil ¿por qué le dijiste que lo hiciera?”

- “Es un reto Kia. Los hombres deben estar listos para los retos.. además que yo sé que él puede. Mi mamá me dijo que entrena muy duro..”

- “¿Entonces por qué lo retaste si sabes que puede?”

- “No basta tener agallas. Es bueno que sus compañeros sepan que las tiene..” –rió burlón- “así quizá Yamazaki no le embrome con esas mentirotas..”

Kia abrió la boca sin poder disimular su asombro.

- “¡Quieres ayudarle!”

- “¡Cállate!” –Mamoru le cubrió la boca con su mano derecha- “no quiero que grites... además... bueno, sólo quiero que aprenda a defenderse bien. Después de todo él no tiene hermanos y le prometí a mamá que le ayudaría en lo que pudiera..”

- “¡Que rara forma de ayudar!” –rió el hijo de Kaho- “es como la vez que te burlaste de tu hermana toda la semana pero te aguantaste el dolor de estómago cuando ella tuvo su primera clase de cocina y nadie quería probar su experim..”

- “¡Ya cállate ¿quieres?!”. 

Kia Monouhi se desternilló de risa, pero no pudo dejar de observar que en los ojos de Misa Yamazaki y Otaru Terada había cierto nuevo respeto hacia Hien...

Las peculiares formas de hacer las cosas que tenía Mamoru Kinomoto..

- “Empecemos” –replicó el hijo de Sakura y Shaoran con una sonrisa, ingresando a toda carrera a la torre del reloj- “estaré de vuelta en un momento..”

Los ruidos de sus pasos rápidos se perdieron en cuestión de instantes. Los niños entonces volvieron su mirada hacia lo alto...

- “¡Vaya, realmente es rápido!” –dijo Misa Yamazaki a Nadeshiko, mirando hacia arriba, al igual que todos- “¡Ya llegó!”

- “¡Y con la cantidad de escaleras que tiene la torre!” –se sorprendió el pequeño Terada- “eh.. ¿qué hace?”

- “No sé...” –murmuró Miriel- “Pero eso parece un pañuelo..”

Nadeshiko apretó su minúsculo equipo de grabación y miró a Mamoru con preocupación, mientras el niño y su amigo Kia empezaban a inquietarse..

- “Pero.. ¿qué hace?, ¡Ya llegó a la cima, sólo tiene que tocar la campana y punto!”  -Mamoru estaba colérico y asustado- “¿por qué se está vendando los ojos?”

- “Dijo que quería probarte que es fácil” –balbuceó la niña de adorables ojos melados- “hermano... ¿por qué siempre lo estás molestando?”

- “¡Tonto, BAJA DE ALLI AHORA!” –gritó Mamoru tratando de correr a la torre, ya más asustado para detener a Hien, pero siendo detenido por Kia- “¿por qué no me dejas?”

- “No llegarás a tiempo.. ¡grítale que no tiene que arriesgarse y te hará caso, la idea del reto fue tuya!”

Mamoru palideció. Hien ya había terminado de colocarse una venda alrededor de los ojos y caminaba a tientas hasta tocar la campana del reloj. La distancia ciertamente no era grande, pero estando con los ojos vendados.. si daba tres o cuatro pasos más podía...

- “¡¡Ay, por un momento pareció que se iba a ir de costado!!”  -gritó Misa Yamazaki.

- “¡No sigas, son seis pasos solamente y de frente!” –gritó Miriel, ya muy nerviosa.

- “¡Hien, por favor!” –murmuró Nadeshiko.

- “¡Grandísimo tonto!” –gritó Mamoru con toda su fuerza- “¡quítate esa venda tonta y toca la campana!, ¡baja de una vez! ¿por qué siempre lo complicas todo?”

Hien no respondió. 

- “¡Tonto!”

- “¡Creo que iré por los superiores..!” –replicó Kia, ya asustado- “¡Allí vienen el superior Tsukishiro y el superior Hiu!, ¡Superiores, aquí!, ¡vengan rápido!”

- “Bien... es hora....” –pensó Hien mientras contaba seis pasos exactos de frente hacia la campana- “así que Hiragizawa también ha contado los pasos antes... yo lo hice antes de ponerme la venda. No es nada difícil comparado con el entrenamiento del Concilio o mis maestros de armas..  ¡pero debo hacerlo bien!”

Avanzó los pasos contados. Y llegó a la campana con una gran sonrisa. Tocó con sus manos la superficie y aún sonriendo se quitó la venda de los ojos, leyendo con suma satisfacción algo de respeto en la mirada de su primo..

Súbito alivio en los melados ojos de Nadeshiko..

Sorpresa en la mirada azul de Miriel Hiragizawa..

Furia y susto en las pupilas de su primo.

Respeto.. en la mirada de Kia y los otros niños.

Contempló todo desde lo alto.. recordando la última vez que estuvo en una situación así.  Había sido en Hong Kong.. y había sido...

Tic...

Tic...

El sonido como de gotas de agua al caer... fue lo que sintió. ¿Lo sintió?. Sí, apenas por un segundo... o quizá menos.

¿Cuánto tiempo fue?

Sólo supo que sentía aquellas gotas caer... y súbitamente perdió la noción de todo. Su cuerpo no se sentía como suyo.. era pesado.. y ajeno. Su mirada verde contempló por una fracción de segundos unas personas… una noche… 

En la torre de Tokyo..

Unas imágenes pasaron por sus ojos… antes que finalmente éstos se cerraran. Y ante el grito espantado de todos los niños, asimismo de Rei y Tao –quienes venían ya apurados por los gritos de Kia- todos vieron horrorizados como el pequeño cuerpo de Hien caía al vacío, exánime...

Cual si hubiera sido alcanzado por un rayo...

¿Qué es esto que veo?, ¿qué es este lugar?. Caigo de la torre del reloj.. escucho gritos. No puedo moverme..

¿Qué veo?

La torre de Tokyo... una gran luz, un gran poder emanando de poderes que conozco. Una chica sosteniendo a alguien bañado en sangre. Ella levanta una espada hacia lo alto.. y un gran poder surge de ella. El aura de él la rodea, acompañándola, y todo el lugar,  que temblaba, ha dejado de hacerlo..

Pero él está muriendo.. ha perdido demasiada sangre...

Ella llora.. y lo llama. Lo llama con desesperación mientras él muere.. por que está muriendo.. 

Dolor.. siento dolor... ¿Es que él morirá?.

Ël… ¿me dijo hijo?, ¿dijo que quiere conocerme pero no tiene fuerzas?.

Sé que ella morirá también si él se marcha.. lo sé. 

¡¡Duele!!!

Siento las heridas de ambos... en mí. Las siento. Siento el dolor de ella, el increíble pesar de él.. por no tener fuerzas para vivir. Y no quiero. ¡No quiero que él muera!, ¡no quiero que ella llore!, él no conoció a su padre… ella a su madre.. ¡pero yo quiero conocerles a ambos!, sus heridas son mías.. están en mí. ¡Me duele.. me lastima!... ¡¡¡me está haciendo daño!!!.. el dolor... siento rabia, rabia por que no quiero perderles. Mi dolor.. rabia... ¡siento las heridas de él y ella en mí y eso me pone furioso...!

Yo… yo….. ellos son papá y mamá.. ¡ya lo sé!

Los ojos..

No puedo mantenerlos abiertos…

El sueño…. Me llama.

Aunque no sé si despierte… o muera ahora.

- “¡¡¡Hiennnn!!!”

Sakura sintió aquel frío... y los gritos le hicieron volver el rostro hacia arriba. Hacia la torre del reloj. ¡Era una caída de más de cinco metros cuanto mínimo! y todo lo que pasó después le pareció increíblemente lento...

Su hijo… cayendo por los aires. Sus propias manos, su propio cuerpo, negándose a moverse.. sus propios movimientos eran lentos. Lentos como una retrospectiva, lentos como si todo el tiempo del mundo se concentrara en esos instantes, instantes terribles, sombríos... donde la muerte visitaba a las personas.

Muerte.

Sangre, oscuridad en el cielo, dolor, estrellas… destino…. ¿el bien y el mal?.. ¿Muerte?

No, no.. ¡los niños son vida, no muerte!

¡Vida, vida, vida!

Y gritó.

Con toda su alma, con todas sus fuerzas... como sólo había gritado la horrible noche de la pelea en la torre de Tokyo... 

Cuando creyó haber perdido a Shaoran.

Muchas cosas pasaron por su mente aquella fracción de segundo. Pero ninguna ordenada y clara. Mil sonrisas. Los tardíos despertares de su hijo.. sus preguntas sobre el clan Li, sus pequeños celos infantiles. La primera vez que lo tuvo en brazos... siendo un bebé. Sus ojitos verdes… límpidos, brillantes, inocentes y confiados. Contemplando por primera vez su propio rostro.

- “¡¡¡¡¡¡¡HIENNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNN!!!!!!!” 

- “¡¡¡HIENNNNN!!!” –gritó Shaoran, que estaba charlando con Eriol desde uno de los edificios y que súbitamente veía a su hijo caer desde lo alto- “¡¡¡HIENNNNNNNN!!!!”

- “Papá” –recordó Shaoran con milimétrica y pasmosa rapidez, casi como si un relámpago pasara ante él, mostrándole la vida de su hijo mientras éste moría- “¡Papá!”

- “¡Oh, Shaoran, ya aprendió a decir papá!, ¡y apenas ayer me llamó mamá! ¿Shaoran?”

- “¡Mi hijo, mi hijo!” –sus brazos apretaron el cuerpecito de la balbuceante criatura, mientras luchaba por contener las lágrimas de emoción y Sakura lo miraba conmovida- “sí, sí… soy tu papá… ¡soy tu papá y estoy contigo!, ¡no te perderé nunca… y tú no me perderás jamás!. ¡aunque tenga que hacer lo que sea, lo que sea!,  ¡Mi hijo, mi hijo!”

- “¡Papá!” 

Los ojitos verdes le miraron radiantes de luz… ese día. ¡Su hijo!. Al que nunca se cansaría de estrechar en sus brazos… de mirar cada día. Aquel cuya existencia era su orgullo.

- “No conocí a mi padre. Nunca lo ví hasta aquella vez que casi muero, y ya era yo un adulto… cuando ví su espíritu. Tú eres mi hijo, y por ti y tu madre soy capaz de dar hasta la última gota de mi sangre o perder mi alma, antes que les pase algo malo”  

Nada malo para él… para su hijo, sea lo quisiera el destino o no.

¿Es que el destino podía hacerles daño?..

“Aquellos que hemos sido favorecidos por la magia tenemos responsabilidades hacia los demás..”

- “¡¡¡¡HIEEENNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNN!!!!” –sólo pudo decir en voz alta, con toda su fuerza.

Ante el grito de Shaoran, los pálidos ojos celestes de Rei Tsukishiro se dilataron de espanto por un instante… y algo como un “deja vú” pasó por su mente. .. Una caída.. un ángel blanco cayendo desde lo alto de un lugar…

La torre de Tokyo.

Pero apenas fue una milésima de segundo la que dudó. No lo pensó siquiera… y redobló su velocidad aún cuando sabía que nunca llegaría a tiempo. Los niños gritaban y por el aire viajaban dos gritos horribles y llenos de dolor que él podía sentir con una claridad espantosa..

Los padres del niño…

- “¡Tiempo!” –gritó Eriol apenas pudo pronunciar frase alguna, mientras Shaoran se arrojaba desde la ventana del séptimo piso donde estaban, casi flotando para después correr hacia el lugar donde yacía Hien- “¡cielo santo!” –contempló azorado cómo Sakura y Shaoran, no afectados por su conjuro volaban ya hacia el lugar del accidente, mientras los demás estaban inmóviles- “no creo haber hecho el conjuro a tiempo, ¡no veo el niño en el aire!”

Con un movimiento diestro Eriol apareció al lado de su esposa, quien le miró con horror ante lo ocurrido y ambos se miraron con inquietud. Antes que el inglés levantara el conjuro sobre Tomoyo y Touya, en compañía de los cuales siguieron a los Li.

- “¡Maldición!, ¿no pudo detener el tiempo segundos antes?” –gritó Touya.

- “Nadie pudo reaccionar a tiempo, fue muy sorpresivo” –gimió Tomoyo, mientras se acercaban- “¡oh por Dios!”

Eriol hizo un gesto y su conjuro se desvaneció. Las niños quedaron por un segundo aturdidos al notar la meteórica presencia de los adultos en el lugar, pero el pánico y la desesperación pronto hicieron olvidar aquel lapso de tiempo..

- “¡Hien, Hien, por Dios, respóndeme!” –sollozó Sakura, con los ojos arrasados en lágrimas, mientras Shaoran movía con delicadeza el cuerpecito frío de su hijo- “¡HIEN!”

- “¡Oh, oh!” –gritó Tomoyo.

Yukito, Tao y el resto de las personas adultas comprometidas en los últimos preparativos para el aniversario del Campus venían a toda carrera. Rei había llegado a tiempo apenas para recoger el desmayado cuerpecito de Nadeshiko y abrazar levemente a Miriel, que había caído de rodillas al piso y temblaba inconteniblemente, con las manos cubriendo su rostro, en forma casi compulsiva. Sakura apretaba entre sus manos las frías de su único hijo y sollozaba; Shaoran sólo miraba como Touya Kinomoto tocaba al niño con cautela y su rostro palidecía cada vez más…

- “No cayó al piso..” –murmuró Mamoru, con voz entrecortada, mientras su madre lo abrazaba- “no tocó el piso.. ¡¡yo.. yo!!”

- “¡Hien, mi niño.. ¡por favor, ¡por favor!, ¡POR FAVOR!” –sollozó Sakura- “¡por favor!, ¡Hien, Hien!”

Hubo un murmullo apenas perceptible cuando todos notaron que volvió a sentirse una lenta respiración. Touya asintió sintiéndose infinitamente aliviado y le sonrió a su hermana, a la vez que ponía una mano sobre el hombro de Shaoran..

- “Está bien. No sé cómo, pero lo está. Sin embargo, es mejor que..”

- “¡Ya viene una ambulancia en camino Touya!” –dijo Yukito, llegando casi sin aire.

- “Gracias Yuki”

La mirada azul de Eriol se cruzó con la de Yoko mientras todos suspiraban con profundo alivio –Rei aún tenía abrazada a Miriel, que no dejaba de temblar y Nadeshiko todavía estaba desmayada- pero Tomoyo seguía apretando entre sus brazos a Mamoru, que estaba muy pálido..

¿Qué es este lugar?

¿Es un sueño?.

Se siente música en el aire.. ¿qué es?, ¿de donde viene?. No lo sé.. pero la siento....

Mis pies se deslizan por la arena.. y el mar llega hasta mis tobillos. No entiendo. Noto el viento acariciando mi cara, pero hay un destello dorado sobre el horizonte.. ¿son dos medias lunas las que rasgaron el aire?

Y plumas blancas caen del cielo sin detenerse..

¿Por qué?..

Supongo que es por que estoy en un sueño.. ¿verdad?

Miro el horizonte.. se siente pena.. melancolía.. dolor en el aire. Pero.. ¿qué es esto?, no puedo seguir.. es como un muro de cristal en mi camino.. un muro que permite el paso de la marea, pero no me deja avanzar...

¿Quién está a lo lejos?

¡Una persona flota en el agua!, hay alguien más... alguien.. que habla con un niño que mira el cuerpo flotante. ¿qué le dice esa persona?, ¿qué?..

La persona que flota.. ¿está muerta?

Golpeo el cristal con fuerza, lo golpeo con rabia, ¡y no se rompe, nadie puede oírme!, ¡¿hay un muerto?, ¿y ese niño?, 

¡Va a ahogarse!!

¡QUE ALGUIEN HAGA ALGO!!

- “No. Yo quiero que muera.. yo mismo le dije que lo hiciera”

- “¿Quién eres?, ¿puedes verme?, ¡detén esa locura!”

- “Es sólo una criatura.. y es mejor que muera ahora. ¿Qué diferencia hay entre ahora mismo o en diez  a veinte años?. Si muere ahora se ahorrará mucho pesar..”

- “¡Idiota, no es para reírse!”

El bastardo me mira y sus ojos dorados reflejan una risa cruel. ¡Siento furia.. rabia, odio!, ¡detesto estar mirando mientras este se ríe de alguien que muere!..

¡Un momento, ahora no soy un niño!..

El muro de cristal me refleja... ¡no soy un niño!.

¡NO SOY YO!

¿Qué pasa aquí?

- “No seas impaciente... a su tiempo, también morirás... muchacho” –ríe nuevamente, mientras el viento revuelve sus cabellos negros, cubriendo su rostro, pero no su odiosa risa y sus diabólicos ojos dorados.

Pero.. sus ojos cambian... cambian a...

Cambian a...

- “¡BASTAAAAAAAAAAA!”

¡CRASHHH!

Un crujido, mil cristales.. dolor..  sangre. Mil fragmentos hechos trizas. ¡El muro de cristal a desaparecido!. Apenas si puedo cubrir mi cara antes que los cristales me hicieran daño, pero siento la sangre..

¿Dónde está ese miserable?

- “¿Quién eres?, ¿por qué estás aquí?”

Miro hacia delante... quizá aún pueda evitar que alguien muera.

¿A quien se le ocurre esto de las plumas?, ¡ahora son blancas y negras!

- “¿Quién eres?” –la pregunta se repitió ¿es una niña o un niño?.

- “No sigas adelante..” –respondo, sin saber por qué- “no sigas.. o morirás.”

- “Morir no es tan malo. Dijiste hace un ratito que era mejor..”

- “¡Yo no dije eso!”

- “Dijiste.. “ –el ruido de las olas casi evitaba que reconociera el sonido de la voz y  el sol lastima mis ojos al tratar de ver- “di.. dijiste...”

La voz se quebró y pese al agua que le empapaba.., supe que estaba llorando..

- “¡No, no, no dijo eso!, ¡yo no pude haberte dicho que era lo mejor..!”

- “Tengo miedo..” –escucho un hipo ¡está dudando! - “¡tengo mucho miedo!”

- “Eres ¿niño?, ¿niña?” –pregunto, seguro de que debo evitar que haga una estupidez- “Olvida esto de una vez, toma mi mano y vámonos de aquí, ¡de prisa, no puedes morir ahora!” –tengo algo en la mano y se lo doy, a modo de premio- “¡te lo obsequio, pero no  sigas con esto!”

- “No... nada le salvará. No puedes salvar a nadie, ni a ti mismo..” –¡ese miserable está aquí de nuevo e interfiere! - “nada te salvará.... jamás. ¿Escuchas el sonido de los sellos de la adivina?”

- “¿Qué?” 

Siento a alguien abrazándome en medio de la furiosa marea.. la música y las plumas blancas y negras siguen a nuestro alrededor.. 

- “¡¿Qué quisiste decir con los sellos de la adivina?!” – grito, teniendo miedo.

Las lunas cortantes rasgan el aire alejando a ese sujeto de aquí.. pero.. ¿qué escucho a lo lejos?

“.......  estrellas.... cielos... destino....
el bien... el mal... estrellas....
... cielo...”

¿Qué palabras son esas que trae el viento?

¿Quiénes son?

Ojos violetas en los que brilla el asombro.

Ojos dorados sonriendo en la oscuridad...

Ojos verdes llenos de dolor... y odio... 

¿ODIO? ¡¿Cómo puede ser qué..?

……………………………

- “¡.. me odio, me odio por esto Shaoran, no puedo evitarlo!” –los sollozos de Sakura fueron lo primero que Hien oyó al despertar de aquel ¿sueño? harto confuso- “¿cómo pudo pasarle esto?, ¡soy su madre y me descuidé!”

- “¡Sakura, esto no ha sido culpa tuya!”

- “¿Mamá? ¿papá?”

- “¡Hien!” –ambos padres casi saltaron al oírlo y corrieron a su lado- “¡Hien!”

- “¿Qué pasó?. ¿por qué estoy acostado?”

-  “Caíste de la torre del reloj” –sollozó Sakura, abrazándolo, sintiéndose feliz de tenerlo entre sus brazos- “¡¡oh mi niño, ¿por qué nos hiciste esto?!! ¿por qué?”

- “Pero mamá…”

- “Descansa ahora” –interrumpió Shaoran, acariciando la carita de su hijo suavemente- “tu madre se quedará a tu lado y yo también. Sólo iré a hablar con tu tío por un momento ¿de acuerdo?”

- “¡Es que estoy bien…!”

- “De todas maneras no debes levantarte” –le insistió Sakura- “hazme caso ¿si?”

- “Sí mamá” –parpadeó- “¿por qué dicen que me caí?, no me caí mamá. Mi cuerpo se puso muy pesado… y me fui para abajo, ¡no caí ni resbalé!.. además ví…”

- “Hien… duérmete…”

- “Mamá.. papá..” –el murmullo del niño detuvo a Shaoran, que ya salía de la habitación- “¿ustedes pelearon alguna vez en la torre de Tokyo?”

- “¿Por qué lo dices?”

- “Bueno papá.. es que, antes de dormir.. ¡y me dio mucho sueño!” –bostezó- “los ví… y me asusté. Tú estabas… estabas… con sangre por todos lados y mamá también tenía sangre… y lloraba…”

- “¡¿Nos viste?!” –se asombró Sakura.

- “Si mamá. ¡ajum!” –bostezó otra vez- “pero después me dormí y tuve un sueño… raro”

Sakura y Shaoran se miraron en silencio y la hermosa mujer de ojos verdes besó la frente del niño, antes de arroparlo..

- “Descansa Hien… después me dirás de ese sueño…”

Shaoran sonrió y salió en silencio. Dirigiéndose directamente hacia la salita de su casa, donde le esperaban Touya, Eriol, Kaho, Fujitaka y los Tsukishiro..

- “¿Y bien?” –preguntó al ingresar- “¿qué crees?”

- “No tiene ninguna herida. Ni interna ni externa” –replicó Touya, muy serio- “ninguna, en lo más mínimo. Es más, si yo mismo no lo hubiera visto caer desde esa altura no creería lo que le ha pasado. Pero Mamoru se ha roto el brazo y tiene una fractura en la pierna derecha, lo cual confirma el hecho que sí hubo caída e impacto… aún cuando Hien no tiene heridas”

- “Y ninguno de nosotros usó magia para evitar que se lastimara. Todo fue tan rápido que ni tiempo tuvimos.. eso está claro” –replicó Eriol.

- “Y ¿no es posible que ya que Mamoru amortiguó con su cuerpo el impacto, recibiendo el golpe en sí mismo..?  ¿es quizá por eso que Hien no está lastimado??” –murmuró Kaho- “Mi hijo Kia me ha dicho que la reacción de Mamoru fue porque se sintió culpable; por eso trató de recibir a Hien cuando éste cayó..”

Shaoran miró a Touya Kinomoto en busca de respuestas.

- “Aún en el supuesto que eso hubiera pasado.. lo cual es casi imposible… hay una cosa que sí me inquieta” –replicó el galeno- “no por unos instantes, cuando lo toqué… no tenía signos vitales. Quizá yo me confundí, o fue por el enorme susto.. no descarto nada”

- “¿No puede ser eso una consecuencia de la caída Touya?” –murmuró Yukito, mientras Ayame asentía- “tal vez… una especie de paro cardíaco… o algo así”

- “Como si su alma hubiera salido de su cuerpo, por unos momentos..” –murmuró Fujitaka.

Shaoran miró a Eriol y notó que el inglés estaba tan perplejo como él.

- “Necesito exámenes… datos. De momento sólo puedo especular, a lo mejor me equivoqué por la impresión” –suspiró el médico- “dime” –se volvió a Shaoran- “¿le ha pasado esto antes?, ¿alguna vez ha tenido problemas respiratorios o algo así?”

- “No. Pero acaba de decirme que antes de perder el sentido pudo “ver” la pelea que tuvimos en la torre de Tokyo, hace casi ocho años.”

- “¡Es imposible!” –murmuró Yukito- “¡aún no había nacido!”

- “Pero no olvides que estuvo allí..” –repuso Eriol, pensativamente- “él ya había sido concebido cuando Sakura llegó a ayudarnos, en el momento más crítico de la pelea” –sonrió- “tu hijo es muy especial Shaoran… desde antes de haber nacido ya había demostrado grandes dotes”

Shaoran asintió, mientras pensaba…

- “Casi juraría que él ha visto “ahora” el momento en que su propia fuerza vital y la de Sakura me permitieron aferrarme a la vida. Pero entonces esto significa que este desvanecimiento iba a ocurrirle en cualquier momento… sólo que tuvo mala suerte en que fuera justamente en medio de su juego” –se dijo- “pero entonces… este desvanecimiento.. ¿significa acaso…?”

*                                 *                                 *                                 *

- “No fue tu culpa Mamoru.. hiciste lo mejor que pudiste y afortunadamente nada pasó. Tu papá ya me llamó por teléfono y Hien está muy bien..” –sonrió Tomoyo, llevándose el plato de sopa que su hijo no había tocado- “no tienes que sentirte así..”

Mamoru no dijo nada.. sólo inclinó un poco la cabeza.

- “Salvaste la vida de Hien…” –la hermosa mujer de ojos azules revolvió el cabello de su hijo con cariño- “sólo duerme y…”

- “No mamá. No. No salvé a nadie” –suspiró el niño, mientras Nadeshiko asomaba a la puerta de su habitación- “todo fue mi culpa..”

- “Mamoru, eso no es cierto..”

- “¡Si lo es mamá, si lo es!” –replicó, enfadado- “yo hice que mi primo se subiera allí, ¡yo tuve la idea! ¡por mi culpa pudo morirse ahora y..!”

- “¡Eso no es cierto!” –interrumpió una dulce vocecita, con calor.

- “¡Nadeshiko…!”

Tomoyo y Mamoru miraron asombrados a la niña… 

- “No fue tu culpa hermano… tú no sabías que Hien iba a ponerse esa venda para no ver, ¡no fue culpa tuya!” 

- “Deja de decir mentiras, torpe” –le espetó antes de inclinar nuevamente la cabeza- “tú sabes bien que yo lo hice, ¡incluso tú no querías que Hien hiciera la estúpida prueba del valor que se me ocurrió!, ¡tú y Kia tuvieron razón todo el tiempo!”

- “Mamoru..” –murmuró Tomoyo.

- “Yo… lo hice” –aceptó- “pero… no quería que se hiciera daño mamá. Te lo juro. ¡No sé por qué pasó eso, si yo he subido allí mil veces, incluso de noche!” –el niño apretó los puños con rabia- “si… si…si mi primo hubiera muerto hubiera sido mi culpa, ¡todo mi culpa!”

- “¡No, yo debí evitar que Hien usara eso, o te lo hubiera dicho a ti a al superior Kia y..!” –protestó Nadeshiko- “pero no dije nada… ¡yo también tuve la culpa!”

- “¡Niños, por favor!” –la gentil voz de Tomoyo acarició los cabellos revueltos de su hijo mientras abrazaba a la niña- “fue un accidente… y ustedes lo saben. Lo saben muy bien” –suspiró- “afortunadamente no pasó nada grave pero no tienen por qué culparse” –le sonrió a su hija- “Nadeshiko: sabes muy bien que Hien no te iba a hacer caso con eso de la venda y Mamoru” –sus ojos azules miraron a su hijo con orgullo- “tú salvaste la vida de tu primo, ¿cómo puedes decir que fue tu culpa?”

- “Si no se hubiera subido allí no hubiera tenido que salvarle..”

- “Mi necio y terco niño: yo misma y tu tía Sakura, tu papá y creo que todos los habitantes de Tomoeda hemos subido a esa torre al menos una vez.. no era nada peligroso y lo sabes” –suspiró de nuevo- “lo que le ocurrió a Hien es algo extraño… tal vez se mareó al quitarse la venda. Porque me has dicho que ya se había quitado la venda ¿verdad Nadeshiko?”

- “Si mamá. Además Hien nos miró a todos desde lo alto, después que tocó la campana” –dudó- “¿crees que se haya mareado?..  creo que eso fue” -el rostro de la niña de ojos mieles se iluminó- “¡pero mi hermano le salvó!, ¡mi hermano fue muy valiente y..!”

- “Servirle de colchón para que cayera fue lo único que se me ocurrió..” –bufó Mamoru- “pero eso no quita mi culpa… ¡esa tonta prueba del valor fue idea mía y..!”

- “Sí, la idea de la prueba del valor fue tonta. Pero no tenía ningún peligro” –replicó Touya, ingresando a la habitación seguido de Kiku, la fantasma- “¿cómo estás?”

- “¡Pequeño hermanito que tiene ojos de chica que canta bonito no se ha quejado!, ¡Kiku lo sabe!”-murmuró la niña espectro- “¡es muy valiente! ¡hermano mayor debe estar contento!”

- “No es para tanto.. no me duele” –Mamoru miró a su padre y a su madre- “estoy en problemas ¿no?”

- “Quizá” –dijo el médico. Tomoyo iba a protestar pero un brillo en la mirada de Touya le hizo permanecer en silencio- “mereces un castigo por bromear a costa de tu primo y mentirle al inventar una prueba del valor sólo por molestarle.. eso sí. Sin embargo no tienes responsabilidad en el accidente de hoy. Es más, tu tío y tu tía están realmente agradecidos contigo…”

- “Lo siento. Todos se asustaron mucho por mi culpa”

- “No hiciste bien al hacerle a tu primo esa broma pesada” –sonrió Tomoyo- “pero salvaste su vida y estamos orgullosos de ti”

- “Así es”

Al decir estas palabras el galeno sonrió levemente. Efectivamente y llevado por el remordimiento Mamoru había recibido el impacto de la caída de Hien en su cuerpo y como consecuencia tenía una pierna rota y el hombro dislocado pero se había comportado como todo un hombrecito.. y Touya estaba orgulloso por eso. También estaba el hecho que aquel accidente había sido insólito –si se atenían a las explicaciones de testigos como la pequeña Hiragizawa, además de Rei y Tao- y por supuesto… sin contar que nadie, ni Sakura o el propio Shaoran habían culpado en lo más mínimo a Mamoru.

Touya era consciente especialmente de eso. También sabía que si los papeles hubieran sido otros –es decir si hubiera sido Mamoru quien sufriera algún accidente producto de una inocente broma de Hien- él posiblemente hubiera culpado a Hien sin escuchar razones ni sentido común; pero su hermana y su esposo no habían perdido la perspectiva en ningún momento y fuera de referirse fríamente a Mamoru, estaban muy inquietos por su salud y muy agradecidos con su hijo.

Súbitamente eso le hizo cobrar un nuevo respeto por el esposo de su hermana.

- “No importa lo que digan.. yo sé que mi primo pudo morir por mi broma” –dijo Mamoru, enfadado- “¡siquiera deben enfadarse!, ¡diciendo que no soy culpable no me hacen sentirme bien!”

- “¡No, todo fue mi culpa, me dio mucho sueño!” –la voz de Hien se hizo escuchar y Mamoru casi pegó un salto desde su cama cuando su padre le pasó su teléfono privado- “gracias por la ayuda.. pero fue mi culpa..”

- “¿Ya estás bien?” –preguntó su primo, cogiendo el teléfono con cuidado- “¿Qué te has roto tú?”

- “Nada. ¡Pero papá y mamá no me creen!. Lo peor es que van a venir a regañarme… ¿es verdad que te rompiste una pierna?”

- “Si” –asintió, y ya tranquilo por Hien, añadió furioso- “¡si me hubieras dicho que las alturas te mareaban no te hubiera hecho hacer la prueba!”

- “¡Las alturas no me marean, sólo que de repente me dio mucho sueño, ¡¡¡me dormí mientras ustedes dicen que caía!!!”

- “¿¿TE DORMISTE??!”

- “Bien, creo que es mejor que les dejemos charlando” –sonrió Tomoyo, llevándose a su esposo, para servirle algo de cenar- “¡pero no hablen demasiado niños!”

Kiku atravesó el muro, siguiendo a la pareja, pero Nadeshiko corrió a brincar sobre la cama de su hermano en cuanto sus padres se hubieron marchado, mientras le arrebataba el teléfono personal de su papá a Mamoru..

- “¡Hien!, ¿de verdad no te has hecho daño?”

- “¡Estoy bien!, ¡pero estoy en graves problemas!.. ¡tu papá dijo que debo estar en observación por una semana y mi papá y mi mamá van a castigarme por dormirme tan de prisa en cuanto salga de la cama!”

- “¡Oye!” –gritó Mamoru, quitándole el teléfono a su hermana con un gesto de dolor en su hombro lastimado- “¿y todavía te quejas? ¿cómo se te ocurre dormirte justo allí?”

- “¡No fue mi idea, sólo me dormí!”

- “¡Tonto!, ¡tu sueño me ha roto mi pierna y me duele mucho mi hombro!”

- “¿No dijiste que no te dolía nada hermano?”

- “¡No fue mi idea dormirme!” –protestó Hien desde el teléfono- “¡nunca me había dormido así! ¿crees que ando dormido todo el día o qué?”

- “¡No lo sé pero casi nos matas del susto!” –le increpó el hijo de Touya y Tomoyo- “y a ver si me haces caso ahora y..”

- “¡Oye!”

- “¡Soy mayor que tú y sé más!”

- “¡Sólo dos meses!, ¡no eres mi hermano mayor!”

- “¡Pues hazte a la idea que sí, tonto!” –le gritó el otro niño y Nadeshiko emitió una risa gozosa- “ahora me vas a pedir permiso lo mismo que Nadeshiko.. ¡ustedes son un par de despistados!. Mi hermana nunca vé donde camina y es torpe sin remedio ¡y tú te duermes donde menos conviene!, ¡¡de modo que ahora vas a hacerme caso!!”

- “¡No es justo!”

- “Pues a ver si me respetas, ¡te salvé la vida y no dejaré que lo olvides!”

Nadeshiko procuró contener la risa.. pero fracasó. ¡Y es que era demasiado divertido!, de ahora en adelante Mamoru iba a ser el “hermano mayor” de ella y de Hien…

¡Pobre Hien!

*                                 *                                 *                                 *

- “Sakura…”

- “Está dormido Shaoran” –sonrió la hermosa mujer de ojos verdes- “ha discutido durante casi una hora con Mamoru y ya se durmió..”

- “¿En serio?. ¿Está bien Mamoru?” –preguntó acariciando el cabello de su esposa y mirando a su hijo con ternura- “fue muy valiente de su parte salvar así a Hien… aunque no estoy seguro que realmente hubiera caído al piso aunque Mamoru no hubiera estado allí”

Sakura le miró, con inquietud..

- “¿Qué crees?”

- “Hien tuvo un sueño… como los que tú solías tener de niña. Tú tenías premoniciones del futuro.. y él recordó parte de su pasado antes de “dormirse”, como dijo. ¿No te has puesto a pensar en lo que significa?”

- “El no recordó su pasado Shaoran… vió nuestro pasado..”

- “Te recuerdo Sakura, que Hien ya había sido concebido y como tal, estuvo con nosotros en esa pelea.. en la torre de Tokyo" –le dijo repitiendo lo que Eriol había aclarado, y ella asintió aceptando eso- “tú y él me salvaron entonces… y eso.. creo, fue lo que él recordó antes de dormirse”

- “¿Crees que signifique algo?”

- “No lo sé. Pero lo que le ocurrió no fue ni común o accidental. Tu padre dijo algo inquietante: como si su alma abandonara su cuerpo por unos minutos, como si su espíritu viajara a algún lado o a su propio pasado, como quieras llamarlo; específicamente a aquel momento en que él manifestó su poder.. aún sin haber nacido”

- “Pero Shaoran.. tú y yo sabemos..”

- “Lo sé. Y ya que las cards han sido despertadas quiero suponer que es por eso que a él le ocurrió esto hoy, aunque pudo ser un día cualquiera…”

Sakura acarició el cabello sedoso de su hijo, mientras los brazos del hombre que amaba ceñían su figura.

- “¡Oh, Shaoran, si algo le hubiera pasado me hubiera muerto!”

- “Yo también Sakura… yo también. Pero lo que te digo es la única explicación que se me ocurre. Nuestro hijo está en capacidad de enfrentar a adultos con sus habilidades, pues pese a que aún es muy pequeño tiene una agilidad felina y lo sé por que tengo los reportes del entrenamiento y la disciplina de sus maestros en Hong Kong. Lo que pasó hoy es algo que tiene que ver con magia… eso es seguro”

Sakura sonrió.

- “Él es nuestro tesoro. Es lo más valioso para nosotros y no sabes el horror que sentí al creer que lo perderíamos” –él asintió- “¡fue como si viera desde el momento en que nació Shaoran!.. lo ví todo, ví su pequeña vida en un instante ¡desde el mismo momento en que abrió los ojitos por primera vez!… ¿lo recuerdas?”

- “¿Cómo olvidarlo?” –suspiró el jefe del Clan Li.

*                                 *                                 *                                 *                      *

- “Eh… hermano…”

El rostro ceñudo de Touya expresaba las emociones de alguien a punto de tener un ligero ataque de coraje, mientras su mirada suspicaz se paseaba entre las expresiones de su hermana y su esposa con creciente irritación..

- “¡Deben estar totalmente dementes!” –masculló enojado- “.. y no crean que jugarán conmigo como si fuera su títere ¿lo oyeron?” –miró a su esposa quien sólo sonrió y una vena apareció sobre la frente de Touya- “¡No lo tomes a la risa!.. no voy a desempacar ni una sola maleta y nos regresamos para Japón ahora mismo.. ¿no sabes que tengo problemas en mi trabajo?, ¿Qué les hace pensar que soy su médico itinerante según sus caprichos?”

Tomoyo sólo hizo una seña.

- “Despertarás al bebé..” –murmuró, ampliando la sonrisa.

El médico miró a su hijo -de un mes de nacido- y contuvo sus ganas de lanzar una imprecación a duras penas, mientras Sakura parecía sumamente apenada..

- “Sabes que Mamoru se pone muy gruñón cuando lo despiertan antes de tiempo…” –le susurró Tomoyo.

- “Pues debiste pensar en él antes de arrastrarme aquí con excusas ridículas” –bufó, ignorando a su hermana a propósito- “Mamoru tiene apenas un mes, y pudo enfermarse con este viaje apresurado..”

- “Tu hijo tiene tu misma buena salud” –le tranquilizó la muchacha de ojos azules- “y temo que también tu mal genio” –añadió acariciando la pelusa oscura que era el cabello del bebé- “pero no podíamos dejar de ayudar a Sakura..”

- “Lo siento mucho hermano..” –murmuró la antigua card captor, apenadísima- “¿te causaré problemas en tu trabajo?”

- “Con las cosas como están en Japón.. tendré suerte si aún tengo empleo al regresar” –bufó irritado, mientras su mirada se suavizaba notando el avanzado estado de gravidez en su hermana- “¿por qué demonios ese sujeto es tan obtuso?, ¡cómo si no fueran pocos los problemas que te ha dado viene a preocuparte cuando estás a días de dar a luz..!”

- “Falta un mes para que se cumplan los nueve meses de espera hermano” –sonrió Sakura, notando el interés de Touya, pese a su enfado- “además no es culpa de Shaoran y…”

- “¡No me vengas con eso…!” –se enfurruñó- “el sujeto se pasa todo el tiempo en coma mientras tú toleras el embarazo, y a un mes del nacimiento de tu bebé insiste en andar por allí como si estuviera bien, ¡está loco!”

- “Touya.. no te comprendo” –dudó Tomoyo, reflexivamente- “primero te quejas que Shaoran se pasara en coma mientras Sakura ha estado encinta.. y también te quejas porque ahora, que ya despertó, no quiere seguir en cama.. ¿Quién te comprende?”

El aludido lanzó una mirada furiosa, que tuvo la virtud de producir en Tomoyo… ningún efecto.

El doctor Kinomoto suspiró.

Definitivamente estaba perdiendo su toque.

- “Shaoran está muy frustrado por haber estado inconsciente durante casi todo mi estado..” –murmuró Sakura- “y ahora que al fin está despierto ¡no hay médico que pueda obligarlo a permanecer en cama e insiste en cuidarme y hacer cosas que aún no debería!”

- “Lo que el idiota de tu marido debería aprender es que un coma no es algo que se supere con sólo despertar.. ¡es cosa de tiempo, maldición!”

Tomoyo le lanzó una breve mirada reprobadora y Touya volvió a suspirar, notando que Sakura estaba realmente angustiada con sus palabras..

- “No pongas esa cara monstruo. Asustas” –replicó, motivando el renacer del espíritu combativo de su hermana- “pero.. ¿cómo puede ser que no haya aquí ningún médico que pueda controlar a ese idiota?”

- “¡Shaoran no es ningún idiota Touya!”

- “Pues no lo parece. No se cuida nunca.. y eso lo matará” –la palidez de Sakura se hizo notoria ante aquellas palabras y el médico continuó de prisa- “pero… supongo que cuando sea viejo.. digo yo” 

Sakura sonrió y Tomoyo se acomodó también al lado de su esposo y su mejor amiga, después de asegurarse que su bebé dormía profundamente…

- “Creo que el problema debe ser que lo están atendiendo médicos de su Clan .. ¿no Sakura?”

- “¡Oh Tomoyo, eso es exactamente lo que pasa!”

- “¿Y eso qué?” –Touya no entendía nada- “¿qué hay con eso?”

- “Hermano: los médicos del Clan y del Concilio obedecen las órdenes de Shaoran. No pueden evitarlo… y mucho menos hacer que él obedezca sus prescripciones. Él es el Jefe del Concilio ¿lo entiendes?”

- “¡Que estupidez!, ¡un médico es un médico!”

- “Lo sé, pero aquí… la jerarquía de los clanes está por sobre toda consideración. ¡No tienes idea!. A mí misma me cuesta trabajo entenderlo, pero papá dice que es muy natural pues los clanes mágicos mantienen la ancestral tradición china del respeto al superior, que data de  milenios y…”

- “¡Basta, basta!” –suspiró el doctor- “de modo que papá está enterado de este plan de ustedes dos..”

- “En realidad….el plan fue de papá” –sonrió Tomoyo.

Sólo la presencia del durmiente bebé Mamoru, hizo que Touya no lanzara un grito.

- “¡Toda mi familia está loca!, ¡hasta mi padre!” –susurró irritado, antes de hacer una pausa y añadir- “¿y donde está el mocoso inmaduro de tu marido Sakura?”

- “¡Shaoran no es ningún mocoso!”

- “¡Para mí siempre será un mocoso!”

- “¿Estás diciendo que estás viejo Touya?” –rió Tomoyo.

El médico tragó su enfado a duras penas..

- “Papá está charlando con él ahora” –continuó Sakura aprovechando que su hermano hacía supremos sacrificios para contener su coraje, ante la última frasecita de Tomoyo- “le pediré a alguien del servicio que les avise… esperen un minuto”

Apenas la antigua card captor hubo abandonado la lujosa habitación donde habían acomodado a su hermano, su esposa y el bebé –Tomoyo había insistido en no separarse de Mamoru- el médico se volvió hacia la muchacha de ojos azules..

- “¿Por qué siempre estás de su parte?” –protestó.

- “Por que Sakura necesita de nuestra ayuda. ¿No puedes entender que Shaoran está frustrado por no haber podido mimarla durante su embarazo?” –le dijo ella, dulcemente- “él no está haciendo un berrinche infantil al insistir en levantarse y hacer sus actividades de costumbre… sólo trata de darle a Sakura su apoyo ahora. Debe ser muy penoso para él saber que ha estado inconsciente todo este tiempo, que no ha podido mimarla, cuidarla.. ¡ni siquiera han podido casarse aún!” –Touya no dijo nada, pero sabía que Tomoyo estaba en lo cierto-  “él sólo trata de darle el lugar que le corresponde. Quizá Sakura no lo nota, pero su posición aquí es muy peculiar: ellos están casados para el clan pero legalmente no se han casado aún y ella espera a su hijo, pero él ha estado en coma todo este tiempo. ¡No ha tenido ocasión de tratarla como su esposa ante su familia!”

- “¿Cómo diablos sabes eso?”

- “Papá me lo dijo mientras examinabas a Sakura. Shaoran se lo confesó”

Touya suspiró de nuevo, sin argumentos con qué rebatir eso. ¡Menudo problema!. El sujeto chino había despertado hace menos de un mes.. justo a tiempo para la boda del muchacho inglés –Eriol se había casado hace unas semanas- y si bien él y Tomoyo habían venido a toda prisa para la boda y se habían regresado a Japón, no habían imaginado que el chico Li iba a negarse a obedecer a los médicos y a tratar de hacer todas sus actividades.. muy especialmente en lo que se refería a cuidar personalmente a Sakura y a planear su boda, algo a lo que su padre y la propia madre del chico se habían opuesto; y es que iba a ser algo chocante que Sakura se desposara en tan avanzado estado de gravidez.

Y era aquella situación la que le tenía allí, de vuelta en Hong Kong. Y es que Sakura y Tomoyo –y ahora sabía que también su padre- habían inventado una excusa para traerlo de vuelta: le habían dicho que Sakura tenía ciertos temores por la salud del bebé, que estaba nerviosa –bien, en eso no mintieron- y que le gustaría que él la revisara, pese a no ser su especialidad.

Por supuesto, que ni como médico ni como hermano mayor podía negarse a eso. Y allí estaba, enterándose que todo eso no fue más que una trampa para traerle allí y hacerle atender a quien sí requería de sus cuidados: el sujeto chino ése.

- “¡Con un demonio, si no me obedece juro que le daré un purgante!”

- “¡Touya!” –protestó Tomoyo.

Mamoru empezó a llorar.

- “¡Creo que esto se vá a poner muy interesante..” –sonrió la chica de ojos azules- “estoy segura que los días siguientes van a ser muy entretenidos..”

¿Entretenidos?.

En realidad la frase le había quedado algo… corta. Pues pasados casi siete días la situación empezaba a tomar cierto cariz alarmante.

- “¡YA BASTA!, ¿es que acaso estás loco?”

- “Te lo buscaste” –murmuró Touya con cierto brillo de satisfacción en su mirada, mientras Shaoran parecía tener rabia- “y si no te controlas con eso, realmente voy a anestesiarte hasta dejarte totalmente estúpido..” 

- “¡Sakura, sácalo de aquí!”

Sakura sonrió, con una gota inmensa sobre la cabeza. Shaoran estaba en su cama, aparentemente muy quietecito y descansando, pero bajo las cobijas estaba aún amarrado con esa camisa de fuerza que su hermano ordenó ponerle con cierta complacencia. Por supuesto que ella no justificaba las radicales ideas de Touya, pero Shaoran había insistido en ir –sólo ese día- a tres reuniones del Concilio, acompañarla a comprar cosas para el bebé y estaba planeando tener un encuentro con un maestro de armas para medir su condición atlética… ni qué decir que eso había dado la excusa perfecta para Touya, y Sakura –pensando en el bien de su futuro esposo- había aceptado.

Por eso le habían puesto un somnífero en la bebida.. y de allí a su estado actual. Lo problemático era que el Jefe del Clan Li estaba profundamente irritado…

Y eso no estaba ayudando.

Habían sido casi dos semanas de guerra. Si su hermano y su futuro esposo se llevaban antes mal.. ahora era peor. Tomoyo y su padre habían logrado que Shaoran redujera constantemente su actividad haciéndole ver lo mucho que a ella le preocupaba, pero Touya siempre se las arreglaba para discutir con el Jefe del Clan Li y finalmente se lanzaban rayos por los ojos..

Y Tomoyo y ella lo habían planeado esa semana.

Ese era el motivo de este breve viaje. Apenas un fin de semana nada más, pero iba a ser realmente especial. Definitivamente tenía que ser breve, puesto que en una semana su embarazo llegaría a término y no deseaba arriesgarse para nada, pero también deseaba compensar a Shaoran por lo ocurrido con Touya, y ya que el padre de su bebé estaba tan ofendido por no haber podido mimarla –y que ella no se lo permitiera en consideración a su salud- iban a pasar este fin de semana como una simple y común pareja de esposos..

Aunque todavía no lo fueran.

De solo pensarlo, Sakura se sonrojó. Nunca había planeado tener un bebé sin haberse casado, pero las cosas habían sido algo… insólitas. Y no había sido culpa de ella o Shaoran no poder casarse –legalmente- hasta ahora. Ciertamente todos en el clan Li la trataban como esposa, y el anillo de Shaoran jamás había abandonado su dedo, pero la muchacha se sentía levemente incómoda por la situación. Sabía que para los Li y los grandes clanes chinos ella era la esposa de Shaoran desde el momento en que él le puso el anillo, pero .. ¡ella no había sido educada en la tradición de los grandes clanes y quería una boda normal!.

Suspiró.

- “Me quejo demasiado..” –pensó, animándose- “Shaoran me ama y yo también.. y tendremos a nuestro hijo pronto,  además nos casaremos en cuanto el bebé nazca” –sonrió, al verlo a su lado- “sí, él está a mi lado y pronto tendremos a nuestro bebé”

- “Abrígate más Sakura” –murmuró Shaoran, aún algo irritado.

La muchacha sonrió nuevamente, mientras él añadía con inquietud.

- “¿Estás segura que estás bien?. Es decir… sé que aún faltan dos semanas, pero…” 

- “Has estado quejándote por que no te dejo cuidarme, y yo también quiero pasar un fin de semana como una familia normal” –añadió- “¿acaso ya no quieres?”

- “No es eso… sólo que… bueno, Sakura, es que en esta región de China ya empieza el invierno con todo y nieve y..”

- “¡Estoy tan arropada que podría ser la envidia de cualquier esquimal!. Además he llevado un embarazo estupendo..”

- “Considerando las circunstancias…”

- “¡Shaoran…!”

- “No tienes idea de la rabia que tengo contra mí mismo, por el hecho que tuvieras que pasar por toda esta situación” –apretó los puños con irritación- “sólo he sido un inútil todo este tiempo y si no hubiera sido por Wei y tu padre..”

- “¡Shaoran, tú no estabas de vacaciones ni me dejaste sola!, te recuerdo que estabas en coma y…”

- “Y sólo he sido una fuente de preocupación para ti.. un inútil, una carga. ¡Ni siquiera he podido casarme contigo como hubieras querido!”

- “¡Eso no es justo!” –le dijo ahogadamente acariciando su mejilla- “¡no quiero escucharte decir eso nunca más!. ¡¡Estuviste en coma, estuviste a punto de morir por salvarme, por salvarnos al bebé y a mí Shaoran!!” –le dijo con ternura- “¿crees que puedo olvidarlo?, peleaste y te desangraste hasta casi morir por protegernos.. ¡¡¡creí volverme loca de alegría cuando supe que te habías quedado con nosotros, que no te habíamos perdido!!!” –sollozó- “aún recuerdo esa espantosa noche en la torre y…”

- “¡Shhh!” –la abrazó- “olvídalo Sakura, por favor. Daría diez años de mi vida por evitarte recordar eso..”

- “¡Pero yo quiero recordarlo!, no tienes la culpa de haber estado tan mal… y fue por nosotros. ¿Cómo puedes decir que has sido inútil este tiempo si sólo estás sufriendo todavía lo de esa horrible noche?”

- “Sakura…”

- “Nos casaremos el otro mes ¿te parece?” –sonrió ella, con paciencia- “aunque quizá…” –se sonrojó- “tengamos que esperar un poco para..”

La cara de Shaoran se puso de un tono rojo encendido..

- “¡No lo dije por eso Sakura!” –protestó con calor, muerto de vergüenza- “yo…. Yo…” –dudó avergonzado.. y es que ellos no habían vuelto a tener intimidad desde la noche de la concepción de Hien y había sido hace ya tanto que de sólo pensarlo, ninguno sabía como reaccionar- “yo… realmente quiero estar contigo.. otra vez, como esa noche” –le dijo tiernamente, muy suavecito- “pero estar contigo es más que sólo una necesidad física o un deseo pasajero ¿lo entiendes?” –le dijo muy serio- “saber que tú te consideras ya mi esposa, es que tu sabes que te pertenezco tanto como yo sé que tú me perteneces” –suspiró- “¿crees que no sé que te sientes incómoda?. No estás acostumbrada a lidiar con las tradiciones de los clanes, y mucho menos en tu estado, además que no es justo..”

- “¿Tú ya me consideras tu esposa?”

- “Claro” –asintió con naturalidad- “las ceremonias no son importantes, el anillo es el signo de…”

- “¡¡¡Oh Shaoran!!!”

La muchacha abrazó al convaleciente chico con efusividad y a consecuencia de su… estado –bien, su abultado vientre- lo lanzó hacia el otro extremo de la habitación casi como si fuera un meteorito..

- “¡Shaoran!”

- “E… eestoy bien” –sonrió, aturdido, pues no había podido contener el peso de Sakura y había aterrizado con ella sobre su espalda de mala manera- “descuida…”

- “¡¿Están bien?!, ¡¿Qué pasó Sakura?!” –la puerta se había abierto con estrépito y una alta figura ingresó alarmada- “¿está todo bien?”

- “Lo estaba hasta que llegaste.. ¿no sabes tocar las puertas?” –protestó Shaoran, mirando el rostro de Touya con enfado- “¿o es que es pedir demasiado?”

- “Mocoso…”

- “Cretino..”

Tomoyo –que se asomó detrás de su esposo- esbozó una sonrisa.

- “¡Lo sentimos chicos…!”

Sakura sonrió, mientras una gotita se formaba sobre su cabeza, mientras Touya –a instancias de Tomoyo- cerraba la puerta y se marchaba con desgano.

- “¿Por qué tenía que venir?, ¿no se supone que estamos de vacaciones?”

- “Es tu médico Shaoran…”

- “¿Mi médico?, ¡pamplinas, es mi verdugo!” –bufó irritado, antes de dulcificar su semblante al contemplar el rostro de Sakura- “en fin… mientras se mantenga en su propia cabaña y no haga otra incursión como esta a nuestra privacía… quizá lo soporte”

La muchacha de ojos verdes sonrió. Y la sonrisa no abandonó su semblante bonito todo ese día mientras acomodaron sus pertenencias en la humilde cabaña, jugaron a arrojarse bolas de nieve –ella aprovechó su estado con descaro y le venció en una forma casi vergonzosa- y fueron de compras al pueblo más cercano..

- “Tengan cuidado..” –les dijo Touya mientras se marchaban- "¡y tú mocoso, no permitas que ella cargue los paquetes!”

- “¡¿Quien me crees?!”

- “¡Diviértanse chicos!” –sonrió Tomoyo.

Y con un gesto de saludo, ella y su esposo –Mamoru estaba bajo el cuidado de una niñera por las horas de su siesta- se marcharon a esquiar rumbo a lo alto de la montaña donde estaba una diminuta cabañita para esquiadores..

- “¡Cómo me gustaría ir con ellos!” –suspiró Sakura- “me veo tan gorda y fea…”

- “Nunca te verías fea.. aunque quisieras” –le interrumpió Shaoran, algo incómodo- “y tu estado…eh… bueno….” –se sonrojó- “te dá una belleza muy especial”

La muchacha le miró con asombro, mientras, tosiendo un poco por el frío, Shaoran se adelantó unos pasos, para disimular sus encendidas mejillas. Pero… estaba marchando muy tieso.

Sus piernas y brazos parecían de madera.

Sakura sonrió.

Pero... las cosas buenas –como la paz- no son eternas..

- “¡Cof, cof, cof!” –tosió Shaoran, mientras cenaban, esa noche- “¡cof, cof!”

- “Esa tos me dice que estás mal..” –saltó Touya, ansioso de molestar.

- “¿En serio?, ¿eres traductor o qué?”

Los ojos azules de Tomoyo intercambiaron miradas con Sakura, y las chicas se miraron con alarma. La cena había estado cargada de electricidad y tensión por parte de ambos hombres, pese a sus denodados esfuerzos, y el ultimo ataque de tos de Shaoran parecía ser ya el detonante de algo muy desagradable..

- “Shaoran, yo creo..” –empezó Sakura.

- “Escucha mocoso: me importa un bledo tu salud pero el hijo que mi hermana espera no vá a quedarse sin padre por el hecho que no tengas la madurez de cuidar de ti mismo y…”

- “No vengas a darme lecciones de madurez, ¿desde cuando eres tú el capacitado para eso?”

- “¡Touya por favor!” –suplicó Tomoyo.

- “¡No tendrías tantos problemas si hubieras pensado lo que hacías y no te hubieras propasado con mi hermana y..!”

- “¿Quién diablos te hizo juez de eso?, ¡no te atrevas a darme lecciones porque no tienes la moral para eso!”

- “¡Shaoran!” –se espantó Sakura ante la velada alusión a Mamoru.

- “¡¿Cómo te atreves?!” - saltó Touya con una vena casi reventándole- “¡no eres nadie para decirme...!”

- “No soy alguien que no se la pasa molestando a las personas.. ¡y haciéndoles la vida miserable!, ¡has disfrutado sacándome de quicio estas semanas aprovechándote de tu condición de médico!”

- “¡No sería necesario si fueras lo suficientemente listo para seguir las indicaciones más simples de tus propios médicos, mocoso!”

- “¡Deja de llamarme mocoso!”

- “¡Te llamo como me dá la gana, y si te pones pesado voy a amarrarte de nuevo y..!”

- “¡¿Crees que me voy a dejar?!”

Ambos hombres se pusieron de pie y se tomaron por la solapa del traje, cuando..

- “¡Oh, basta, basta, ¿alguna vez dejarán de pelear?!” –gimió Sakura entre sollozos- “¡ya estoy cansada, estoy realmente cansada de estar de juez entre ustedes dos todo el tiempo! ¿acaso no pueden estar un par de minutos sin querer golpearse o insultarse?!, ¡ya no puedo más, no puedo!”

Tomoyo abrazó a su amiga y cuñada, lanzando una mirada de reprobación sobre ambos hombres.

- “Sakura, tranquilízate.. por favor”

- “Todo el tiempo discuten… ¡parece que realmente se odian!” –sollozó Sakura- “¿acaso no pueden ver que me hace daño?, ¿por qué se comportan así? ¿por qué?, ¿qué les he hecho?”

Abandonando el pequeño restaurante –donde estaban a lo mucho tres o cuatro personas más- la joven mujer de ojos verdes se alejó a toda prisa, dejando a dos hombres con un gran sentimiento de culpa en el pecho..

- “Espero que estén satisfechos” –murmuró Tomoyo con pesar, y un rictus de reproche en su dulce voz- “quizá les sea difícil tolerarse, pero no lo han hecho nada sencillo para Sakura… ¡y en su estado!”

- “Pero…” –balbuceó Touya. 

- “Ella los ama a los dos… de forma diferente, pero a la vez muy especial, ¿no pueden comprenderlo?, ¿acaso les es tan difícil dejar de pelear?”

- “Yo…” –dudó Shaoran- “no volvería a insultarte si no te metes conmigo, pero sólo por Sakura..”

- “Es mi hermana, ¿crees que no soy capaz de hacer lo que tú haces por ella?”

- “Chicos… ¿lo estoy imaginando o quedaron en no volver a agredirse directamente?” –sonrió Tomoyo.

Ambos iban a decir algo –posiblemente a negarlo- cuando el dueño del restaurante les avisó de algo..

- “La señora que salió hace un momento… se fue con el auto montaña arriba..”

- “¡¿¿QUÉ??!” –gritó Shaoran con espanto, antes de salir corriendo.

- “¡Sakura!, ¡esa loca!” –protestó Touya- “vamos.. hay que seguirlos y..”

Tomoyo retuvo la mano de su esposo.

- “¿Qué pasa?”

- “Déjalos Touya. Necesitan estar solos..” –sonrió- “además tú y yo sabemos que no los has dejado en paz desde que llegamos..”

- “Los dejé en paz casi toda la tarde.. ¡es más de lo que ese mocoso merece y!”

- “Suenas como mi madre…”

El rostro del médico palideció y la miró con enfado, pero Tomoyo no se inmutó.

- “¡Demonios!” –suspiró, sentándose al lado de la chica de ojos azules- “¡que horrible analogía usaste!, ¡mira que compararme con tu madre!” –añadió tras un momento de reflexión- “bueno… quizá tengas razón. Además que arriba está la vieja cabaña para esquiadores, supongo que pueden pasar la noche allí sin problemas. Está bien abastecida”

- “Es muy amable de tu parte tener esa consideración”

- “No” –murmuró pensativo y arrepentido ya de esa idea- “…les daré unos minutos y después les obligaré a bajar, el sujeto ése tiene una tos algo seria y…”

Los ojos azules de Tomoyo parecieron dudar por un instante, pero luego una dulce y leve sonrisa apareció en su semblante..

- “Si, si. Así debe ser. Mandaré al tipo a dormir en el hotel.. es mucho más cálido que las cabañas, es buen pretexto..”

- “¡Touya… no sería justo!”

- “No me importa” –insistió, terco- “él dormirá en el hotel y…”

- “Y tú en otra habitación del hotel” –sonrió Tomoyo.

- “Sí, yo en… ¿qué?” –parpadeó- “¿de que hablas?, tenemos una cabaña muy cómoda y...” –tosió un poco, disimulando el brillo apasionado en su mirada mientras tocaba las manos de su joven esposa- “pequeña… Mamoru  tiene ya casi dos meses y nos han dado una niñera..” –su mirada oscura brillaba, llena de anhelos contenidos- “¡es la primera vez que estaríamos solos desde antes que Mamoru naciera!”

Tomoyo se sonrojó y por un instante dudó. Amaba a Touya y no había nada que la llenara de tan dulce calor como los recuerdos de las noches pasadas a su lado antes que su embarazo lo evitara. Y ciertamente Mamoru iba a permitirles pasar una velada especial esa noche -¡milagro, pues el bebé tenía sólo dos meses!- pero el sólo pensar en la tristeza de Sakura y los planes de su amado esposo, le hizo ser inflexible con él…

- “Si haces que Shaoran duerma en el hotel, lejos de Sakura, tendrás que hacerle compañía..” –murmuró.

- “¡No es justo!” –protestó él.

- “Tú tampoco eres justo” –susurró la chica.

Touya miró por la ventana. Shaoran se había llevado el otro auto –el que les asignaron a ellos- siguiendo a Sakura montaña arriba.

Y luego contempló los ojos azules de su esposa.

- “Haces de mí lo que quieres… y lo sabes ¿verdad?” –dijo roncamente- “y todo por que sabes que te he extrañado como loco y no puedo vivir sin ti..”

Tomoyo se sonrojó, pero le sonrió. Lo amaba, y por eso entendía que Sakura y Shaoran también necesitaban tranquilidad.

Tranquilidad. Calma. Afecto.

Finalmente.

Sakura estaba rodeada por los cálidos brazos del padre del hijo que esperaba y ambos contemplaban la ventana, muy felices del silencio y de la mutua compañía.

- “Hace tanto tiempo que no estábamos solos… sin nadie que nos moleste” –sonrió la muchacha, hundiendo su rostro en la gruesa chaqueta de él.

- “Sí. Lo sé. A mí también me parece mentira” –suspiró- “creo que es la primera vez desde que desperté del coma que estamos solos, a gusto y en silencio durante más de una hora…”

- “Llevamos casi tres horas aquí Shaoran”

- “Lo sé” –sonrió divertido- “Y que bueno que había comida, porque esa subida te dio hambre..”

- “¡Conducir me despertó el apetito!” –se defendió ella con una sonrisa.

- “Sí, pero ya habíamos cenado..”

Ambos se miraron en silencio y empezaron a reír..

- “Estoy seguro que tenemos que agradecerle a Tomoyo estos momentos” –añadió él- “aunque tu hermano y yo acordamos no insultarnos…. directamente, otra vez”

- “Lo sé, lo dijiste al llegar. Y eso me hace muy feliz” –murmuró soñadora- “quizá, con el tiempo, él y tú puedan ser buenos amigos..”

- “Sakura… no sueñes”

- “¿No puedo?”

Shaoran se encogió de hombros y notó que estaba nevando fuertemente allá afuera.

- “¿Sabes?, quisiera que no fueras jefe del Clan Li… ni del Concilio…. Seríamos sólo tú, yo y el bebé.. siempre”

- “Lo sé. A veces yo mismo odio el Concilio y mis responsabilidades”

- “No digas eso” –le animó, cambiando el tema- “¿sabes?, estuve discutiendo con Wei y papá algunos nombres para el bebé y…”

- “¿Estás segura que será “él”?”- le preguntó sorprendido- “después de todo, pedimos que no nos informaran el sexo del bebé… podría ser niña”

- “¿Quisieras una niña?”

- “Quiero al bebé.. sea niño o niña” –replicó- “pero tú pareces muy segura que será “él”.. ¿por qué?”

- “No lo sé, aunque también me gustaría tener una niña..”

- “¿Sólo una?”

Sakura sonrió.

- “Bueno, ¿Qué nombres has pensado?”

- “Papá y yo pensamos que sería mejor elegir algún nombre chino. Algo que se relacione con tu dinastía…”

- “¿En serio? ¿fue idea de tu padre?” –se asombró- “pero quizá él preferiría…”

- “Papá está contento. ¡Incluso decidimos llamarlo en una forma que a tu abuela le hubiera gustado!”

- “Sakura” –a Shaoran le surgió una gotita- “El nombre “May May” suele usarse para mujeres, bueno… no siempre, pero a mí me suena mucho a chica, incluso tengo una sobrina llamada así… creo”

- “¡No voy a ponerle May May!” –rió- “he decidido, que si nace varoncito.. como yo creo, se llamará “Hien” como tu padre”

El joven la quedó mirando con ojos sorprendidos, mientras la nieve seguía cayendo con mayor fuerza.. hasta ser ya una tormenta.

Que bueno que ellos estaban totalmente a salvo en la cabaña.

- “¡Sakura!”

- “Papá dice que es justo, ya que así el espíritu de tu padre siempre se reflejará sobre nuestro bebé, aunque yo lo decidí por que me gusta mucho el significado del nombre.. ¿recuerdas que tu abuela nos lo dijo una vez?, Hien significa “fuego verde” y…”

- “Sakura… la abuela no era buena en eso del significado de los nombres, en realidad Hien no significa fuego verde”

- “¿No te gusta la idea?”

- “Me encanta” –sonrió feliz- “y admito que me parece insólito llamar a mi hijo como el padre al que no conocí”

- “¡Oh, está decidido entonces!”

- “Bueno..” –dudó Shaoran- “pero si es niña deja que la llamemos Nadeshiko, en honor a tu madre”

- “¡Que gran idea!” –se alborozó, pero repentinamente hizo una mueca-  “pero creo… que será … niño..”

- “Pareces muy segura”

- “No…..” –hizo otra mueca- “ouch… ¿no lo crees tú?”

- “Yo también creo que será niño… pero..” –miró con inquietud las muecas de dolor que contraían el rostro de la muchacha- “¿Estás bien?”

- “Eh… si. Sólo que … se movió y me pateó”

El muchacho sonrió.

- “Mira, está empezando una tormenta. Es mejor que nos recostemos a dormir” –le dijo- “mañana seguramente nos espera un horripilante regaño de parte de tu hermano..”

Algunas horas después, la nieve caía más y más fuertemente, extendiendo su manto por todo el lugar mientras Tomoyo abandonaba los brazos de su marido para asegurarse que Mamoru estuviera bien dormido.

- “Es una buena niñera esa chica” –sonrió Touya rodeando el talle de su esposa, mientras ella acariciaba el rostro del bebé- “¿qué te inquieta?”

- “Nada. Sólo es que … me desperté y ví la tormenta por la ventana. Está muy fuerte”

- “¿Temes por Sakura?”

- “Hay una buena calefacción allá arriba ¿verdad?”

- “Sí, descuida. Lo único malo es que mañana la cabaña estará casi totalmente cubierta por la nieve y el mocoso tendrá que apilar la nieve con aquella tos mañana por la mañana” –Tomoyo le miró- “bien...  le ayudaré ha hacerlo, pero deja que Sakura me lo pida ¿si?”

- “Eres muy amable”

- “Lo hago por mi hermana y no por él” –sonrió al notar que Mamoru dormía como un bendito- “ven, volvamos a la cama o lo despertaremos y allí sí que no hay quien le calle”

La muchacha asintió. Después de todo, era de madrugada..

Y la noche avanzaba..

Sakura se movió con cuidado mientras la horrible sensación de dolor la golpeaba con más fuerza a cada instante, y ella apenas podía contener sus deseos de llorar. ¿Qué estaba pasando?, ¿por qué ese dolor aumentaba a cada segundo?. Llevaba horas soportando eso –al menos eso le parecía a ella- pero Shaoran se veía tan tranquilo durmiendo a su lado, bien arropadito, que no había querido despertarle..

Pero ya no podía soportar más..

Se sentó en el lecho con dificultad, tratando de alejar las cobijas de su cuerpo sin inquietarlo a él y sólo entonces notó algo que la dejó helada..

¡Las cobijas estaban húmedas!

- “¡Dios mío, Dios mío!” –pensó horrorizada y llena de pánico- “…estoy… estoy toda empapada…”

Eso sólo podía significar que…

- “¡Shaoran, Shaoran por favor!” –le dijo zarandeándolo para despertarlo- “¡Shaoran, ayúdame!”

- “¿Qué.. qué pasa Sakura?” –añadió algo aturdido y aún soñoliento- “¿qué sucede?” –sus manos tocaron las cobijas que estaban más cercas a la muchacha y notó la humedad- “¿derramaste algo?”

- “Sha… Shao… ¡Shaoran, se.. se… se rompió!”

- “Oh, que pena” –dijo mecánicamente y aún dormido- “cambiaremos de cobijas y.. mañana limpiamos lo roto..”

- “¡No, no! ¡ayyyy!” –gritó ante la fuerte contracción- “¡Oh, duele, duele!” 

- “¿Sakura?” –ahora sí que él se despertó- “¿qué.. qué pasa?, ¿Qué tienes?”

- “¡Shaoran, se rompíó la fuente!” –él la miró con cara de no entender nada- “¿no comprendes?, ¡el bebé ya viene, ya viene!”

- “¡¿Viene?!”

- “¡Sí, ahora, el bebé viene YA!”

- “¡¡¡¡¡¡¡¡¡¿¿¿QUEEEEEEEEEEEEEEEE???!!!!!!!!”

*                                 *                                 *                                 *

- “¿Crees que podrás dormir?, estabas temblando Miriel”

- “Me asusté mucho mamá. Realmente me asusté..” –la niña de ojos azules sonrió- “pero estoy bien, ¿ya volvió papá?”

- “Está en camino. Y con grandes noticias: tu amiguito está bien. Tuvo mucha suerte en que el pequeño Mamoru amortiguara su caída y eso le salvó… está ileso”

- “¡Genial!.  Seguro que Kinomoto debió pensar que era su culpa, aunque no fue así porque fue como si Hien se mareara allá arriba… al vernos, luego que llegó” –la niña miró a su madre- “mamá: ¿puede alguien no moverse pese a que sientes que mueres?”

- “Sí. Cuando estás muy sorprendido.. o asustado. A veces la sorpresa, el asombro o el miedo pueden paralizarnos en los momentos más inoportunos. Puede pasar cuando no medimos el peligro…”

Miriel asintió, con un gesto pensativo en su carita.

- “¿Y Tao?”

- “Está despidiendo a Rei. Ya sabes que ellos estuvieron ayudando con ustedes…” –Yoko besó la frente de su hija- “¿seguro que quieres ir mañana a la escuela?. Será la fiesta del Campus… y estabas temblando…”

- “¡Ya estoy bien…!” 

Ajeno a la charla de su hija y su esposa, Eriol venía conduciendo su automóvil último modelo con un pensamiento fijo en la mente…

- “Esto ya se puso muy raro. El aviso del Sabio que nos llegó a Shaoran y a mí, el despertar de las cards… y este peculiar susto del hijo de Sakura y mi amigo. ¿Qué significa?. Sakura solía tener premoniciones bajo la forma de sueños y el niño dice que se durmió. Además siento que hay algo que Shaoran oculta. Algo, algo que le preocupa, y estoy seguro que Sakura, que le conoce como nadie, lo siente también” –súbitamente sus pensamientos se distrajeron al notar una alta figura cruzar la calle, con paso inseguro- “¡uf, buen freno!, ¡transeúnte distraído!  a poco y lo atropello como a la madre de Yoko hace años..” –su mirada azul quedó atónita al reconocer ese perfil- “¿qué?, ¡ES IMPOSIBLE!.”-asomó la cabeza por la ventana de su auto y murmuró asombrado- “¿¡Kamui?!, ¡¿¿eres el Kamui..?!!, ¡¡¡KAMUI!!!”

Parpadeó confundido, tratando de sentir el poder que -recordaba- emanaba de los dragones.. pero la persona que casi arrolló se había perdido en el gentío de la calle y no estaba seguro de nada..

- “¡¿Es que realmente dejamos algo pendiente en la torre de Tokyo?!, ¡no es posible!”

*                      *                      *                      *                      *                      *

- “¡Maldita sea, maldita sea!” –murmuraba Shaoran, mientras su frente estaba empapada de sudor y apenas si había conseguido mover algo de la puerta, pese a haberla golpeado con toda su fuerza- “¡la nieve nos ha dejado aquí atrapados!, ¿por qué?, ¿por qué AHORA?”

Un agudo grito fue la única respuesta..

- “¡ARGHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!!”

- “¡Ay, ay!” –pensó aterrado- “¡eso suena espantoso!, ¡oh dioses y ancestros!, ¡juro que no la tocaré de nuevo si le quitan el dolor ahora!”

- “¡AAAAAAARGHRRRRRHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!!”

- “¿Por qué vinimos aquí?” –gimió mentalmente, lleno de angustia, mirando con pánico la puerta de la habitación donde Sakura gritaba- “¡yo no sé nada sobre cómo traer a un niño al mundo!, ¡mucho menos a mi hijo!”  

- “¡¡AAAAAAAAAAAAUUUUUUUUUUUUUGGGGGGGGGGGGHHHHHHHHH!!”

- “Sa... Saku.. Sakura” –sin poder contenerse más, ingresó corriendo a la habitación donde ella se quejaba- “¿qué... qué pasó?”

- “¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Me dueleeeeeeeeeeeeeeee!!!!!!!!”

- “¡Oh, oh!... sí, claro..” –gimió asustado, notando que la pobre muchacha retorcía las sábanas que el acaba de cambiar hasta casi romperlas- “eh.... eh.... ¡tú tranquila!, ¡tranquila!; ¡tranquilízate y respira!”

- “¡DEJA DE HABLAR TANTO Y ABRE LA PUERTAAAAAAAAAAAAAAAAAA!” –gritó la chica, sin poder controlar más el dolor que la atacaba- “¡HAZLOOOOO!!”

- “¡¡¡¡¡Sííiiiiiiiii!!!!!”

El muchacho cerró la puerta con su cuerpo, incapaz de seguir viendo el terrible dolor que embargaba a Sakura mientras su corazón parecía salir de su pecho y sudaba a mares. Estaba aterrado. ¡¡¡Llevaba casi media hora tratando de abrir la puerta y la tormenta no cesaba!!!..

Lo sabía bien, porque todas las ventanas del cálido refugio estaban ya totalmente cubiertas por nieve...

- “No puedo ponerme a lamentarme, ¡Sakura me necesita y ambos necesitamos ayuda!” –pensó con rapidez- “ciertamente mi magia está aún débil por mi condición física pero no puedo pensar en eso ahora...”

El joven hizo un movimiento con sus manos y súbitamente la nieve que cubría la puerta principal se esfumó..

- “¡Al fin!” –suspiró sintiéndose cansado, pero corrió hacia fuera y miró con horror como la tormenta arreciaba- “¡demonios!”

Cerró la puerta nuevamente y corrió en busca de Sakura, pero cuando la contempló de nuevo su alma cayó al piso...

La muchacha estaba en el lecho, bañada en sudor y su rostro se contraía en un desesperado intento por contener los gritos, sin embargo el dolor era casi palpable en el aire. Sus bellos ojos estaban cerrados pero estaba despierta, sus nudillos estaban blancos por el esfuerzo y las cobijas a las que ella se aferraba eran ya jirones. Lágrimas incontenibles desbordaban sus mejillas mientras su palidez era casi marmórea..

Ante esto, el chico cayó de rodillas..

Estaba más horrorizado que nunca en su vida. Ni siquiera esa horrible noche en la torre, cuando aquella sombra casi lo asesinó había estado tan aterrado...

- “El.... el.. dolor... bajó... un poquito” –murmuró agitada y casi con un hilo de voz, abriendo los ojos y notando el absoluto terror del chico- “ya... ¿ya podemos salir?”

- “No... no... no puedes salir Sakura” –murmuró espantado- “¡podrías morir o dar a luz en plena nieve!”

- “Es... estaré bien”

- “¡No, no!” –sollozó, acercándose y tomando su mano, la que de inmediato lo apretó hasta dolerle- “¡oh lo siento Sakura, lo siento!”

La chica le miró con una leve sonrisa, pese al dolor.. ¡pobrecito!. Había sido un poco brusca con él antes, pero es que cuando esas horribles contracciones la desgarraban no podía más que gritar...

Pero, ahora, al verlo... sintió pena.

- “No... no es tu culpa..”

- “Sí lo es. Todo lo que estás pasando es... es.... mi culpa. ¡Preferiría que me doliera a mí y no a ti!”

- “No... no sabes... lo que dices” –sonrió la chica, casi en una mueca- “pero.. yo quise.... hacerlo...igual que tú”

El joven asintió, mientras sentía que una mano helada le estrujaba el corazón dentro del pecho....

Todo era su culpa. ¡el dolor la estaba matando y era todo su culpa!..

- “¡Uhhh, uhhhh!!” –gimió la muchacha, apretando su mano hasta que él también casi gritó de dolor y tirando con su otra mano de la cobija más cercana, hasta romperla- “¡oh Shaoran, empieza de nuevo!, ¡empieza otra vez!, ¡oh, oh, oh!.. ¡¡ARGHHHHHHHHHHHHHHH!!, ¡¡AAAAAAAAAAAUUUUUUUUUUGGGGGGGGGGGGGGHHHHHHHHH!!” –sollozó- “¡no me sueltes Shaoran, por favor, no me sueltes, me estoy rompiendo por dentro!” –lloró- “¡oh, oh, oh, oh!, ¡ME ESTOY PARTIENDO POR LA MITADDDDDD! ¡¡ARGHHHHHHHHHHHHHHH!!”

Shaoran estaba aterrado. Su mano estaba posiblemente rota, pero no lo sentía. De hecho sólo sentía cada grito de Sakura como si fuera un puñal en su pecho y a la vez su sentido común le decía que sólo había algo por hacer..

- “¡Sakura... debo irme, debo buscar ayuda!” –le dijo, mientras la chica gritaba a todo pulmón- “¡no puedo bajar de la montaña contigo ahora, pero sí puedo traer a tu hermano hasta aquí y lo haré!, ¡vendré en unos minutos y..!”

- “¡¡ARGHHHHHHHHHHHHHHH!!, ¡NO ME DEJES SOLA!” –aulló la chica, ya histérica y entre sollozos- “¡no me dejes, no te vayas! ¡¡ARGHHHHHHHHHHHHHHH!!”

- “¡Sakura, entiende!, ¡NO SÉ COMO AYUDARTE!” –aceptó él, entre lágrimas- “¡no sé qué hacer!, ¡tu magia no funciona porque ya estás casi dando a luz y la mía está muy débil por mi salud!, ¡no puedo aparecerme en la base de la montaña y traer a tu hermano con magia!” –se desesperó- “¡pero TE JURO QUE LO TRAERÉ!”

- “¡NO ME DEJES SOLA!, ¡TENGO MUCHO MIEDO!” –sollozó, en pánico- “¡¿y si algo le pasa al bebé?, ¡NO QUIERO ESTAR SOLA!, ¡¡¡NO TE VAYAAAAAAASSSS!!”

- “¡Por favor, por favor, por favor!” –imploró- “¡tienes que resistir, ¡TE JURO QUE TRAERÉ A TU HERMANO COMO SEA!”

- “¡No quiero... no quiero.... estar sola!” –sollozó, mientras el dolor se ensañaba con ella- “¡NO QUIERO TRAER AL MUNDO AL BEBÉ ESTANDO SOLA!”

- “¡Te juro, te juro que no será así!, ¡TE LO JURO!” –él también lloraba- “¡pero tienes que dejar que me vaya, TENGO QUE TRAER AYUDA PARA TI Y EL BEBÉ!”

La muchacha enfocó su mirada en el rostro pálido de él. Pese al horrible dolor –que de momento le daba una levísima tregua- pudo notar que Shaoran estaba muy sudado, temblaba y estaba totalmente aterrorizado...

Estaba muy pálido, pero sus manos estaban muy calientes.. ¿tendría fiebre?.

- “Shao.. Shaoran....”

- “Te juro que traeré a tu hermano... ¡tienes que resistir y esperarnos Sakura!” –dijo decidido- “¡por favor!”

La chica hubiera querido retenerle, pero también tenía miedo. Ella no había tenido un hijo antes y no estaba segura de lo que debía hacer... ¡necesitaba ayuda! pero Shaoran tenía fiebre y había una espantosa y fría tormenta de nieve afuera...

Pero... ¿y el bebé?...

Con un gesto mudo, la muchacha soltó la mano de él y se aferró con fuerza a los trozos de sábanas, tratando de contener los gritos...

- “Ya podré gritar cuando él salga” –pensó entre quejidos, antes de verlo correr fuera de la habitación- “¡¡AAUUGHH!!”

Con aquel grito de Sakura taladrando sus oídos Shaoran empujó la puerta principal del refugio de una patada y salió a toda prisa, hundiéndose hasta la cintura en aquel frío manto invernal; pero pese al frío viento él lograba escuchar los gritos de la muchacha y con aquel estímulo logró avanzar hasta llegar donde había dejado el vehículo...

- “¡Demonios, está totalmente sepultado!”- pensó empujando la nieve con su cuerpo- “ahora.. ¿cómo?..” –miró hacia todas direcciones, viendo sólo nieve- “¡bien, sólo queda algo!”

Cerró los ojos y se concentró, tratando de usar sus debilitados poderes con la escasa fuerza que le quedaba. ¡Maldita sea su suerte!, ¡había salido tan apurado del refugio que ni siquiera se había puesto los guantes de nieve y sus manos estaban casi azules!

Pero no podía pensar en eso ahora...

Trató de pensar en “flotar” a toda prisa hacia la base de la montaña –donde estaban las cabañas, los Kinomoto y el hotel- pero sólo pudo pensar en Sakura sollozando y súbitamente un fuerte acceso de tos le hizo caer en medio de la nieve...

- “¡Sakura y el mocoso!” –murmuró Touya, saltando hacia la ventana- “¡Diablos!”

- “¡Oh, entonces me das finalmente la razón!” –murmuró Tomoyo, que ya se paseaba inquieta- “¿irás a buscarlos?, ¿qué te hizo decidirte?”

- “Escuché a mi hermana gritar... y me pareció ver al mocoso cayendo en la nieve” –aceptó, envolviéndose en un fuerte abrigo- “fue como un relámpago..”

Tomoyo Kinomoto se asustó.

- “Desde que empezó la tormenta, no he estado tranquila.. ¡vé por ellos de prisa por favor!” –suplicó- “¡no podemos quedarnos sin hacer nada!”

Touya asintió, y abandonó la cabaña.

Shaoran sentía la cabeza muy pesada, pero hizo un esfuerzo para no quedar enterrado en la nieve y logró ponerse de pie y quitarse los copos que casi le habían sepultado. Miró alrededor y escuchó un grito de Sakura embozado por el frío aullido del viento y la tormenta..

- “No pude... flotar hasta la base de la montaña” –se dijo, temblando- “pero tengo que hacer  algo.. ¡YA!”

Se concentró de nuevo –a duras penas- y la nieve más cercana a él desapareció, permitiendo ver el auto, inmediatamente se subió al vehículo lo más de prisa que pudo y pisó el acelerador a fondo...

- “¡Resiste Sakura, resiste!”

El dolor...

El dolor era espantoso..

Un cuchillo ardiendo atravesándola por la mitad... así era lo que sentía. Como si lenguas de fuego vivo consumieran sus entrañas y la rompieran desde adentro..

Quemando su cuerpo y carne en pedazos...

Ya no quedaban jirones de cobijas o nada medianamente usable. Había llorado tanto que no sentía ya ni las lágrimas y su pelo estaba empapado y húmedo, pegándose a su rostro..

Estaba casi afónica de tanto gritar...

Y el dolor aumentaba más y más..

- “Me estoy partiendo en dos.... y hay fuego desgarrando mis entrañas..” –pensó- “¡Shaoran, hermano, ayúdenme!”

Y volvió a gritar con toda su fuerza.

- “¡Esto es.... absurdo!” –murmuró Shaoran, totalmente exhausto- “¡no puede ser!”

Sus ojos apenas podían creer lo que veían: la nieve ya no le abría paso. 

Había agotado su magia. 

- “¡No puede pasarme esto ahora!” –gritó, indignado- “¡oh Sakura!, ¡Sakura!”

Hizo un último esfuerzo, saliendo del auto y tratando de invocar el hechizo... pero sus fuerzas le fallaron, su vista se nubló y cayó inconsciente, mientras su cuerpo convulsionaba de fiebre y sus manos eran dos bloques de hielo...

- “¡Sakura!” –gimió entre sus convulsiones, tratando de volver hacia el refugio, convencido ya de la imposibilidad de bajar lo que le quedaba de montaña- “¡No estarás sola Sakura, lo juro!, ¡LO JURO!”

Y repitiendo eso, ya en susurros, se arrastró entre la nieve y la tormenta.. de vuelta.

- “¡Maldición!, ¿y eso que fue?” –Touya trató de escuchar mejor, pero el débil eco en la tormenta apenas si le dejó escuchar aquel juramento- “¿fue cerca?, ¿fue lejos?... ¡maldito eco, no sé nada!, ¡malditos todos!”

El médico maldijo también la cobardía de los agentes del hotel por enésima vez, pero no se sintió mejor. Hacía un frío espantoso, la nieve no dejaba de caer, estaba subiendo la cuesta de la montaña a pie y totalmente solo. Afortunadamente se había traído el equipo más moderno, y su buena condición física le había hecho avanzar aprisa, al punto de estar seguro de estar casi en mitad de la montaña. Desgraciadamente la máquina que le abría paso entre la nieve quedó atorada pasos atrás y ahora sí que tenía que hacerlo solo.

Menudo lío. 

Quizá no podía culpar a los empleados del hotel por negarse a ayudarle o acompañarlo. Nunca habían tenido registros de una tormenta tan grave en aquel lugar, era aún de noche, y subir hasta la cima de la montaña sólo por una corazonada les había parecido absurdo, además de un riesgo innecesario. Después de todo, si la tormenta seguía hasta el amanecer ya irían a buscar a la pareja arriba de la montaña..

¿Por qué correr a buscarles en plena noche si el refugio estaba bien abastecido?

- “¡Sakura podría estar dando a luz!” –pensó enfadado- “¡y en medio de esta tormenta!” –suspiró, poniéndose otro par de guantes para el frío- “¡se nota que ese bebé es hijo de ese mocoso por que es igual de necio y testarudo que el sujeto chino!... ¡aún faltaba una semana para que se cumpliera su tiempo!...” –dudó- “aunque podría equivocarme y haber imaginado todo.. espero que no, o esta subida sería muy absurda”

- “Fue... absurdo... no debí.... dejarla sola” –murmuró Shaoran, subiendo la cuesta a duras penas- “¿dónde está el refugio?.. ¿dónde?”

Se detuvo para tomar aire... no podía dejar de temblar. Sus manos estaban ya totalmente azules...

- “Tengo que volver, ¡tengo que volver!”

- “¡Oh, oh... Shaoran!” –sollozó la muchacha, verdaderamente exhausta y llena de miedo, entre espasmos de dolor- “no.... no... puedo..... ¡no puedo hacerlo sola!, ¡¡AAAAUUUUGGGGGHH!!, ¡oh por favor, que esto termine!, ¡QUE TERMINE DE UNA VEZ!, ¡SHAORAAAANNN!”

- “¡Sakura!” –gimió el chico.

Grande fue su asombro cuando notó que súbitamente “estaba” frente al refugio. ¿Cómo era posible?, a él no le quedaba fuerzas para un conjuro y...

- “¡Fue Sakura!” –dijo avanzando a pasos inseguros, de vuelta hacia el refugio- “¡Me necesita, aunque yo no sepa que debo hacer!”

Avanzó... y con sus manos azules escarbó entre la nieve que obstruía la entrada, al punto que sus manos se llenaron de sangre en instantes. Empujó la puerta sin notarlo siquiera y corrió todo lo de prisa que pudo hasta llegar a la habitación..

- “¡Sakura!” 

- “¡SHAORAN, TRAE AGUA CALIENTE Y SABANAS LIMPIAS Y TOALLAS!, ¡PRONTO!” –gritó la chica, aliviada de verlo, pero ya histérica- “¡AYUDAME!, ¡YA NO PUEDO ESPERAR MAS!”

- “Si..”

La mente de Sakura estaba nublada por el dolor. Parte de ella quería abrazar a Shaoran, decirle que apreciaba que estuviera con ella, que hubiera llegado como sea a cumplir su promesa... pero aquel horripilante dolor parecía haberse apoderado de ella, convirtiéndola en alguien que no era ella misma...

- “¡TE ODIO, TE ODIO, TE JURO QUE TE ABORREZCO!” –gritó entre lágrimas y dolor- “¡ODIO, ODIO, ODIO TODO, ODIO TODOOOOOOOOOO! ¡AAUUGGGHH!,  ¡¡¡TODOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!”

El joven se movía a su alrededor, como sonámbulo, pero estaba aterrado... los minutos pasaban y sólo veía sus propias manos ensangrentadas y la sangre de Sakura...

- “Por... favor.... no volverás a pasar por esto.... lo juro... por mis ancestros..”

- “¡TE ODIO, TE ABORREZCO!, ¡ODIO, TODO, TODOOOOOOOOOO! ¡AAUUGGGHH!”

- “Un esfuerzo más... Sakura....” –murmuró entre aterrado y nublado por su propia fiebre- “sólo un esfuerzo..... ¡más!”

- “¡AAAAAAAAAAAAUUUUUUUUGGGGGGGGGGHHHHHHHHHHHHHHHH!”

La muchacha lanzó un aullido capaz de hacer llorar a las piedras y los nublados ojos afiebrados de Shaoran lograron vislumbrar al bebé, que casi parecía surgir entre el fuego; el joven padre temblaba inconteniblemente y sabía que estaba alucinando –condenada fiebre, ¡le hacía ver fuego por todos lados!- pero reunió sus fuerzas para recoger al cálido bebé y...

- “¡Tranquilos los dos, ya lo tengo!, ¡es un bebé sano y es un niño!”

Shaoran asintió débilmente, notando que el niño tenía los más maravillosos ojos verdes de Sakura, pero sin comprender de donde había salido Kinomoto. Touya tomó al bebé de manos del joven chino –que se quedó parado, mirando todo con ojos de fiebre- y procedió a atender a Sakura y al bebé, asegurándose de tomar todas las medidas necesarias para evitar cualquier problema y verificando que no hubiera ocurrido algo malo..

- “Tuvimos suerte.... eres una persona sana y todo está bien” –añadió mirando al niño, que lloraba a todo pulmón- “él también esta muy bien, y está muy sano..”

- “¡Déjame tenerlo!” –pidió Sakura, con una sonrisa, mirando sólo al bebé, y mirando entonces a Shaoran- “¡oh, míralo, es un niño y es hermoso!”

- “Sí.... lo es... y tiene tus ojos...” –dijo solamente antes de desplomarse todavía convulsionando, mientras Kinomoto corría a atenderle.

Sakura miró aterrada la figura del padre de su hijo, mientras sostenía a su bebé en su regazo.

- “¿Está bien?”

- “No” –la voz de Touya era muy seria y cargó con Shaoran como si fuera un niño- “pero mejorará, no te preocupes. Juraría que tiene pulmonía, pero me ocuparé de bajarle esa fiebre ahora mismo con agua helada” –la miró- “dame unos minutos ¿si?, además tu estás bien...”

Casi media hora después, Shaoran abrió débilmente los ojos, encontrándose descansando junto con la madre de su hijo, y el bebé entre ellos..

- “¿Sakura?” 

- “Hola.... y gracias” –le saludó la joven madre- “¿estás bien?”

- “Sí. Siento como si un camión me hubiera atropellado, pero estoy bien. ¿Qué pasó?”

- “Te desmayaste. Luego de ayudarme a tener el bebé” –acarició el rostro de él con ternura- “lo siento mucho Shaoran” –dudó avergonzada- “yo.... yo ¡no quise decir que te odiaba, no sé por qué lo dije y..!”

- “Está bien, olvídalo” –sonrió, tratando de acariciarla, pero notando que sus manos estaban tan vendadas que parecían las de una momia- “¿qué pasó?”

- “Mi hermano te puso algo... para las heridas, y para la hipotermia: tus manos estaban entre congeladas y llenas de sangre” –dijo con pena- “también te bajó la fiebre con agua helada y un par de inyecciones, pero está buscando ropa para que nos cambiemos y bajar de la montaña... y esta vez le harás caso porque tienes pulmonía..”

- “¡Oh!..” –añadió con sorpresa- “bueno, supongo que no es raro porque ya estaba alucinando, y de forma grave” –añadió- “aunque finalmente tu hermano se comporta como persona...”

- “Shaoran..”

- “En fin, pero me sorprende que llegara en ese preciso momento” –sonrió- “¿está bien el bebé? , ¿está bien?, ¡mira que yo sólo te obedecía mecánicamente y...!”

- “Cálmate. Hien está muy bien” –sonrió- “es un niño muy sano y fuerte... y yo estoy muy bien también. Mi hermano es muy intuitivo ¿sabes?, incluso me dijo que le pareció escucharte gritar en medio de la montaña ”

- “Grité” –se asombró-“ ¿estaba tan cerca?” –suspiró- “¡de haberlo sabido!... pero en fin, lo que sí quiero saber es: ¿me transportaste aquí de vuelta verdad?, ¡por qué yo no podía subir la montaña de nuevo!”

- “Creo que... sí” –dudó- “no sé como. Sólo estaba asustada, grité tu nombre y en un par de minutos estabas entrando aquí”

- “Me “moviste” hasta la entrada del refugio”

La chica se sonrojó.

- “Bueno.... ¡me dolía mucho!” –sonrió avergonzadísima- “lo siento mucho, no quise ser tan brusca contigo”

- “¿En serio?, ¡creí que ibas a matarme con lo que gritabas!” –rió, pero acarició con sus manos vendadas el rostro de la madre de su hijo- “fue una suerte que supieras que hacer, yo no tenía ni idea...”

- “Si te refieres a.... lo del parto, bueno... ¡yo tampoco tenía idea!, pero justamente, ayer por la noche Tomoyo me contó sobre el nacimiento de Mamoru y recordé eso .. ¡pero también temía que todo saliera mal!”

- “Bien, no te preocupes más porque no volverás a pasar por eso otra vez”

- “¿Por qué lo dices?”

- “Eh... juré por mis antepasados que no ibas a volver a sufrir así...”

La chica le miró... sin comprender. Pero Hien abrió sus enormes y bellos ojitos verdes, los miró a ambos y rompió a llorar..

- “¡Oh, pobrecito, ni siquiera tenemos aquí su canastilla!”

- “Es casi gracioso” –pensó Shaoran- “el heredero del clan Li, y no tiene ni qué ponerse. Al menos por un rato, por que este niño heredará mucha responsabilidad, poder y magia”

- “Le presento a su hijo señor Li” –rió Sakura

- “Nuestro hijo...” –murmuró Shaoran, contemplando el rostro del niño dormir y saliendo de la habitación infantil junto con su esposa, dejando de lado los recuerdos- “¡que cerca estuvimos hoy de perderlo Sakura!” 

- “Ni lo digas” –le pidió ella, añadiendo, con optimismo- “además... ¡quien dice que lo de hoy no es señal que algo bueno viene?, ¡oh Shaoran, debemos tener fé y confianza!, soñar y creer que así como soñamos que nos casaríamos y esa creencia nos sostuvo en la torre, esa noche... ahora debemos creer que algo bueno viene y como familia podremos afrontarlo..”

- “Es lo diario ¿no?. Nunca sabemos que nos traerá el nuevo día, pero le hacemos frente” –miró la habitación de Hien- “sí... nuestro sueño vive, y es el símbolo de lo que somos, más que cualquier magia o incertidumbre que nos traiga el mañana” –pensó- “bien, si me quedaba una duda... ya no la hay. Debo ver al Sabio YO MISMO. Tarde lo que me tarde en verle, sea prohibido o no... debo hacerlo y preguntarle directamente qué está pasando...”

*                      *                      *                      *                      *                      *

La pequeña personita se puso de pie con dificultad, las luces de su habitación estaban apagadas y ya sólo reinaba el silencio. 

Afortunadamente todos pesaban que dormía. 

Fue en ese momento que una diminuta figura alada se acercó con cautela..

- “Oye.. ¿estás bien?”

- “Sí. Tuve suerte que no te descubrieran esta noche. Pero… ¿qué crees que fue lo que pasó hoy?”

- “Bueno, yo sabía que las cards pueden provocar desastres pero esto está fuera de proporción..”

- “¿Fue por cards que pasó lo de hoy?”

- “No sé. Pero una cosa es segura: ¡esta aventura no ha terminado, sólo acaba de comenzar!”

            *                                 *                                 *                                 *

La alta figura sonrió mientras ultimaba detalles...

- “Entonces... ¿iremos hasta allá?, ¿estás seguro?”

- “Sí” –respondió a su interlocutor- “pronto... muy pronto. Sólo el Concilio de Hechiceros de Oriente, tú, yo y algunos privilegiados y poderosos hechiceros sabemos que las ruedas del destino se mueven de nuevo... y esta vez, actuaremos”

- “Pero tú ya has sentido el poder de esa mujer... imagino que el Jefe actual del Concilio será muy fuerte en magia también”

- “Sí. Lo supongo. Y ciertamente esa mujer es parte importante y uno de los motivos que me han decidido a viajar hasta allí” –hubo una leve sonrisa- “quiero confrontar el poder de la famosa Sakura y no sólo cruzarme con ella en la calle. También conocer al Jefe del Concilio, su esposo... quien es Jefe del Clan Li”

- “Hay mucha gente poderosa alrededor”

- “Lo sé. Gente como esa siempre se rodea de gente con poder... el poder atrae el poder, la magia atrae magia, lo sé bien, pero es la única forma que tenemos de controlar lo que viene... esta vez no miraremos como lo hicimos en la batalla entre los “Kamui”. Esta vez, actuaremos y todo será como debió ser”

- “Espero no recibamos sorpresas desagradables. ¿Cuándo estaremos allí?”

- “Pronto. La primera señal se dio hace ya algunos días. Tenemos que prepararlo con cuidado”

- “¿Vas a llamarlas?” –preguntó.

- “Ellas (1) ya están en movimiento.. y odian en forma muy particular al Concilio de Hechiceros de Oriente...”

- “¿Crees que se aliarían a la pequeña Sakura?”

- “No. Odian al Concilio, y el niño Li es el Jefe Actual ¿no?” –otra sonrisa- “lo destruirán, y a ella con él...”

- “A menos que...”

- “¡Oh, no bromees!.... ya no hacen eso” –canturreó de nuevo- “silencio en la noche, ya todo está en calma.. el músculo duerme, la ambición trabaja.. (2)”

- “La nuestra”

*                      *                      *                      *                                 *

Aquellos días había recibido muchas visitas y lo había olvidado.

- “Eso es más o menos lo que recuerdo del sueño abuelo” –dijo aburrido, frunciendo el ceño- “¿por qué no me dejan levantarme?, ¡ya estoy bien!” –refunfuñó- “además ¡me perdí el aniversario del Campus!”

- “Sabes bien que mañana volverás a la escuela Hien. Ten paciencia.  Tu tío estaba muy contento con tus resultados, eso es lo que importa..”

- “Yo podía haberle dicho que estaba bien abuelo. ¡Se lo dije!” –suspiró- “pero tío no me hizo caso”

- “Es su trabajo. Además tu papá y mamá querían estar seguros que realmente estabas bien. ¿Estás aburrido?.. quizá sea mejor que te cuente una historia y..”

- “¡Oh abuelo, no soy un bebé!”

- “Las buenas historias no son para bebés Hien. Además, tú mismo me dijiste que estabas cansado de tus juegos de video..”

- “No soy bueno” –bufó.

- “Bien entonces..” –Fujitaka asomó a la puerta por unos instantes, ante un leve toque de Wei y volvió para anunciarle al niño- “tienes visitas Hien..”

- “¿Quién..?”

No pudo terminar su pregunta. La puerta se abrió y estaba ante la linda y gentil faz de Nadeshiko, la mirada curiosa de Miriel Hiragizawa y.. ¿Mamoru?

El ceño fruncido de su primo estaba más pronunciado. Además estaba usando muletas..

- “¡Que bueno verte Hien!” –saludó su primita, brincando hacia él con mucha alegría.. para caer estrepitosamente- “¡¡Ayyy!!”

Una gotita surgió sobre las cabezas de los presentes..

- “Hay cosas que no cambian” –pensó Hien, divertido, mientras Miriel ayudaba a su amiga a ponerse de pie- “gracias por la visita chicos..”

- “Bueno, Otaru y Misa nos contaron que estuvieron aquí ayer, y no íbamos a ser menos” –anunció Miriel con una sonrisa- “¿cómo has estado? ¿es cierto que vuelves a la escuela mañana?”

- “¡Al fin!” –resopló- “y… ¿cómo has estado Mamoru?” –Hien tenía una leve gotita al ver a su primo- “no debiste venir si estabas…”

- “Estoy bien.. ¡no necesito de tantos cuidados como tú por que soy muy fuerte y..!”

- “Papá dijo que hoy podía levantarse.. ¡Mamoru también ha estado en cama!”

- “¡Cállate torpe!”

Miriel contuvo la risa y Fujitaka acarició la cabeza de su nieto de ojos azules, mientras Mamoru se notaba evidentemente incómodo..

Pero Nadeshiko se instaló al lado de Hien.

- “Todos sabemos que eres un niño muy bueno Mamoru..”

- “….”

- “Bueno niños… estaba a punto de contarle a Hien una historia” –sonrió el arqueólogo- “quizá quieran oírla y..”

- “¡¿Aún te cuentan cuentos?!” –casi gritó Mamoru.

- “¡No, no es verdad yo..!”

- “Te recuerdo Mamoru, que te conté uno hace un par de días..”

El niño de ojos azules se quedó súbitamente mudo, mientras Miriel Hiragizawa sonreía de esa manera casi inocente..

- “¡A ver si no lo cuenta en la escuela… !” –pensó enojado Mamoru.

Después de algunos momentos, varios niños acomodados alrededor de la camita de Hien y más de una ida y venida en busca de provisiones hacia la cocina, los pequeños parecían interesados en la historia de Fujitaka..

- “Y ¿usted inventa sus propias historias señor Kinomoto?” –preguntó Miriel, con una encantadora sonrisa y con mucha cortesía- “¿lo hace?”

- “Bueno pequeña: las historias que les cuento a mis nietos a veces son mías, a veces son leyendas o relatos de antiguas civilizaciones.. algo modificadas, por supuesto..”

- “¡Oh, eso es realmente lindo!, ¡debe saber muchísimas!”

- “Algunas nada más” –dijo con modestia- “¿te gustan mucho las historias?”

- “Mucho” –sonrió la hija de Eriol- “mi papá me ha contado muchos cuentos ingleses y mi mamá es muy buena contándome cuentos chinos, ¡pero usted debe saber de todo el mundo!”

- “Estoy seguro que a tus padres les agrada que tengas esas aficiones..”

- “Ya te había dicho que mi abuelito es muy bueno y listo..” –asintió Nadeshiko.

- “¡Ay, ya cállense!... esto no es charla de niñas..” –bufó Mamoru.

- “Sí, lo mismo digo”

- “¡Hasta que al fin se pusieron de acuerdo en algo!” –festejó Nadeshiko, ante la aprobación de Miriel, el asentimiento de Fujitaka y la mirada apenada de ambos niños- “¡eso es genial!”

- “Muy dulce de su parte chicos..” –comentó Miriel.

- “¡Niñas!” –pensaron Mamoru y Hien al unísono.

- “Mejor repartamos los bocadillos ¿de acuerdo?” –todos asintieron y Fujitaka empezó con paciencia- “bien.. en realidad no sé si a todos ustedes les guste esta historia, pero empieza así: hace algún tiempo, una niña llamada… Cherry. Sí, la llamaremos Cherry* encontró en su casa un misterioso… juego. Una especie de.. rompecabezas. Sí, era así. Bueno, la pequeña Cherry era una niña normal, común y corriente y…”

- “¡Abuelo, estando Hien y yo no nos vas a contar una historia de niñas!” –protestó Mamoru- “¿Dónde están los malvados?, ¿el peligro y la acción?”

- “¡Oh, mi historia tiene mucho de ello pequeño!… y no es sólo para niñas. Bueno, seguiré diciendo que Cherry tenía ciertos talentos para la magia, aunque ella misma no lo sabía. Y no era la única en su familia: tenía un… primo. Sí, un primo que vivía con ella y su padre, que también tenía magia.. pero él podía ver fantasmas..” 

- “¡Genial, al fin se puso interesante!” –se interesó Mamoru.

- “Pero.. ¿Qué poder tenía Cherry abuelito?”

- “Cherry no lo sabía: pero tenía magia. Encontró la caja del rompecabezas, pues este sólo se abría con personas con magia y cometió el error que lo hizo sin precaución, y como tal, las piezas huyeron en diferentes direcciones”

- “¿Las piezas del rompecabezas?” –preguntó Hien- “¿cómo lo hicieron abuelo?”

- “Estaban hechizadas pequeño. Las piezas del rompecabezas estaban hechizadas, y era labor de Cherry buscarlas, porque las había dispersado..”

- “¡Oh!” –se asombró Miriel.

- “¿Y cómo sabía que debía buscar esas piezas abuelo?” –inquirió Nadeshiko.

- “Bueno… el rompecabezas tenía un guardián, sólo que .. se distrajo tanto cuando la caja fue abierta que no pudo advertir a Cherry de lo que iba a pasar” –la voz del arqueólogo se hizo confidencial- “y es que si las piezas del rompecabezas hechizado no eran encontradas terribles desgracias iban a aparecer en el mundo..”

- “¡Asombroso!” –murmuró Hien, con los ojos verdes más abiertos que nunca.

- “El guardián era… era..” –Fujitaka dudó y sonrió- “un águila mágica. Bueno, pero al perder las piezas del rompecabezas hechizado el águila se debilitó mucho y por eso necesitaba la ayuda de Cherry para buscarlos, pues estaba en forma de… canario” –dudó, con una gotita sobre su cabeza- “y entonces Cherry empezó la captura de las problemáticas piezas del rompecabezas..”

- “¿Era difícil?” –quiso saber Miriel.

- “Bastante” –siguió Fujitaka- “cada pieza tenía una magia especial.. y para recuperarla tenía que pasar por numerosos peligros, pero aumentaba sus poderes al tener más y más. Por ejemplo, una de las aventuras más difíciles que Cherry tuvo que enfrentar en un principio fue combatir con un terrible … Pegaso, y tuvo que luchar mucho. Lo bueno fue que una vez que lo hizo pudo volar por los aires gracias al poder del Pegaso”

- “No está mal” –murmuró Mamoru, exigente, mientras Hien y Miriel estaban interesadísimos y Nadeshiko pensaba en lo difícil de montar un corcel alado- “¡pero es una niña abuelo!”

- “Bueno sí. Cherry era una niña. Pero ¿quién te dice que no tenía competencia?” 

- “¿Competencia?” –ahora sí que el niño lucía interesado.

- “Así es. Poco después de la prueba de atrapar la pieza que correspondía al pegaso se presentó en la escuela de Cherry un niño. Pero no era un niño común, este niño era un hechicero que venía para reunir todas las piezas del rompecabezas hechizado, pues antiguamente éste había pertenecido a su familia..”

- “¡Genial!, pero.. ¿y el primo que veía fantasmas no hizo nada por ayudar a Cherry?”

- “Paciencia Mamoru. Todo a su tiempo: el niño hechicero y Cherry trabaron una competencia para recuperar las piezas, las cuales eran cada vez más difíciles de reunir. Y es que cada una tenía un guardián..” –una gotita surgió otra vez sobre su cabeza- “y eran difíciles de enfrentar, ¡pero Cherry tenía una varita de poder y el niño hechicero tenía una lanza..!”

- “¡¿Entonces hubo batallas abuelo?!”

- “Si Hien, las hubo. Lo importante era que ellos no estaban solos: verás: Cherry tenía una.. hermana, una hermana de su misma edad y aunque ella no tenía magia..”

- “¿Eran gemelas abuelo?”

- “No Nadeshiko. Eran… mellizas”

- “¡Ohhh!” –se asombraron todos.

- “Fue la ayuda de la pequeña… Madison**, quien significó mucho para Cherry. Ella le ayudaba acompañándola y arengándola cuando estaba en peligro, además que Madison y el águila mágica se llevaban muy bien..” 

- “Dijo que era canario señor Kinomoto”

- “Si pequeña Miriel. Pero él les decía que cuando recuperara su forma original sería un águila. ¡No le gustaba que le dijeran canario!. Se llamaba.. Fobos*** y si bien no podía pelear le decía a Cherry cómo pelear y eso le ayudaba mucho..”

- “Siguen habiendo muchas niñas..” –protestó Mamoru, otra vez.

- “Calma.. ya le llega el turno a los niños…” 

- “¿Y cómo se llamaban los niños abuelo?”-quiso saber Hien- “digo, el niño hechicero y el primo que podía ver fantasmas..”

- “Se llamaban.. Sha… Shane****.. y Tory… respectivamente..” –dudó Fujitaka con una gota inmensa sobre la cabeza.

- “¿Quién es Shane y quien Tory*****?”-quiso saber Nadeshiko.

- “Shane era el niño hechicero. Y Tory… el primo que podía ver fantasmas..”

- “¡Ohh!”

- “¿Y ayudaron mucho?”

- “¿Qué mas pasó?”

- “¡Sigue abuelo!”

- “Paciencia mis niños: Shane era un hechicero brillante y manejaba su lanza como nadie en este mundo; por su parte Tory era un niño muy hábil y sabía muy bien cómo comunicarse con fantasmas…”

- “Pero.. los fantasmas no pueden hacer mucho contra los guardianes de las piezas del rompecabezas..” –murmuró Miriel.

- “¡Oye, estoy seguro que Tory era bueno en las peleas!” –protestó Mamoru- “¿verdad que era así abuelo?”

- “Sí.. pero Tory prefería ayudar sin que sus primas lo supieran. A veces enviaba espíritus para ayudarles sin decirles, y es que él decía que era cosa de hombres hacerlo y…”

- “¡Genial, lo sabía!”

- “¿Y fue todo muy difícil abuelo?, ¿Cuántos enemigos enfrentaron?”

- “Muchos mi pequeña Nadeshiko. Muchos.. sombras terribles, dragones, lobos gigantes… por eso cada vez que tenían que enfrentarlos Cherry y Shane tuvieron que aprender a trabajar en equipo, claro, la pieza hechizada del rompecabezas mágico la obtenía quien mostraba más valor en la batalla...”

- “¡Absolutamente estupendo!” –se asombró Miriel, muy ilusionada- “¡Qué gran historia!”

- “¿Qué más pasó?” –quiso saber Hien.

- “Pues…” 

Unos leves golpecitos en la puerta interrumpieron la historia, ante el desencanto de los pequeños. Pero grande fue la sorpresa de todos los presentes cuando se anunció la visita de los superiores Rei Tsukishiro y Tao Hiu, que venían con el pequeño Yuu a saludar a Hien..

- “Buenas tardes” –saludó Rei con perfecta pero gélida cortesía- “esperamos no interrumpir…”

- “Adelante chicos… es un gusto verles” –saludó Fujitaka- “les contaba una historia a los pequeños, aunque quizá prefieran charlar y…”

- “¡No, sígale!!” –murmuró Tao, pensado- “!que bueno!.. no iba a saber de qué charlar con tanto enano..”

- “Bien, sigo entonces” –los adolescentes se acomodaron también y Rei sentó a su hermano en su regazo, para que oyera la historia aunque Yuu era algo pequeño para entender del todo- “pues .. ¿en qué me quedé?”

- “¡Habían peleado con dragones, lobos gigantes y sombras malvadas!” –se interesó Hien, muy atento al relato.

- “Sí, Cherry era muy lista..”

- “Tienes razón Miriel, pero yo creo que Shane también era genial.. y la ayuda de Madison…”

- “¡Vamos Nadeshiko, que mucho mejor eran Tory y Shane!” 

- “¡Hermano, tú estás a favor de ellos porque eran chicos!”

- “¡Vaya!, es un éxito contando cuentos señor Kinomoto” –rió Tao- “dragones.. lobos gigantes… ¡ja!, lo bueno de los personajes de las historias es que nunca tienen que hacer algo tan prosaico como ir a la escuela..”

- “En eso te equivocas joven Hiu. Todos ellos tenían que ir a la escuela cada mañana..”

- “¿Y cómo hacían para que no descubrieran sus ´actividades extracurriculares´?, ¿tenían un horario o qué?”

- “Las piezas del rompecabezas aparecían en cualquier lado Tao..”

- “¿Piezas de rompecabezas?”- se sorprendió Hiu.

- “¡Sí, tenían que reunirlas, superior!” –le informó Hien, entusiasmado.

- “Así es. Y podían aparecer en cualquier sitio, pero los chicos usaban su magia para evitar que la gente fuera lastimada o quedara involucrada en los problemas..”

- “¡Fiu!, ¿y hacían tarea además?, ¡mis héroes!” –se rió Tao- “ a ver si entendí. Eran dos niñas y dos niños con magia, y de la misma edad todos… ¿no hay nadie normal por allí?”

- Sí, de hecho en la escuela había gente sin magia. Además que Tory tenía a su mejor amigo, quien también apreciaba mucho a Shane.” –dudó mirando la expresión flemática de Rei- “él…. Se llamaba Julian, Julian Starr******”

- “El amigo de los chicos..” –confirmó Miriel.

- “Así es”

- “¿Y Julian sabía lo de las chicas y los chicos..?” –preguntó Hien.

- “Eh…” –Fujitaka dudó- “bueno, Julian sabía… algo. Sabía que Tory y Shane tenían magia, pero no sabía que estaban buscando las piezas del rompecabezas hechizado..”

- “Entonces…”-insistió Hien- “¿no le dijeron a su amigo?, ¿por qué?”

- “Querían protegerle de los problemas” –la carita de Hien se torno seria mientras Fujitaka respondía- “por eso no le dijeron todo.. ¿crees que debieron hacerlo?”

- “No.. lo sé” –dudó el pequeño Li.

- “¿No decir a la gente lo que pasa les protege?”-quiso saber Miriel.

- “Los chicos pensaban que sí. Pero según iban reuniendo piezas, Shane y Cherry se hacían más poderosos y..”

- “¿No eran 4 niños?” –dudó Tao.

- “Sí joven Hiu. Pero de ellos sólo dos reunían las piezas del rompecabezas: Madison, la hermana melliza de Cherry, y Tory, su primo, no reunían eso. Ellos sólo le ayudaban a reunirlos, cada uno en su propio estilo”

- “Pues esa niña tenía mucha ayuda.. en cambio el otro niño estaba en desventaja”

- “No lo creas. A él le llegó a visitar su … hermana, y le ayudó también. Ciertamente la pequeña M.. Mary-Lou******* no se llevaba bien al principio con Cherry y Madison, pero después, ella aprendió que eran buenas y aunque luego tuvo que irse, siguieron siendo amigas. Aunque eso no es la idea: ¿Quién dice que Shane necesitaba ayuda?, Cherry era una niña lista pero no sabía usar su magia, a diferencia de Shane, quien como hechicero era más que brillante, ¡nadie podía enfrentarle cuando manejaba esa lanza suya!”

Hien y Mamoru se sintieron orgullosos que el niño de la historia fuera “brillante” y Yuu se creyó en la obligación de aplaudir entre grititos de júbilo.

Rei seguía tomando agua, con su rostro inexpresivo de siempre..

- “Y Tory también hacía su parte… con cuidado, pues no quería que le descubrieran. Le gustaba ayudar sin que la gente se entere…” 

- “Simpático pasatiempo” –rió Tao.

- “¿Qué pasó cuando reunieron todas las piezas del rompecabezas abuelo?” –quiso saber Hien- “¿cómo fue eso?”

- “¡Allí vino el problema!. Cuando todas las piezas estaban en su poder ellos notaron que no podían armarlo pues ambos tenían piezas y como tal sólo uno podía armarlos..”

- “¡Genial, ¡y hubo un gran combate!” –se alegró Mamoru.

- “Un combate realmente épico: pero no entre Cherry y Shane”

- “¿Cómo?”

- “¿Por qué?”

- “¿Qué pasó?”

- “¿Pues con quien pelearon?”

- “¡Allí está el dilema!. Cuando las piezas fueron recuperadas, el guardián.. Fobos…”

- “El canario..” –sonrió Nadeshiko.

- “Eh.. sí”-Fujitaka se sintió incómodo por Rei, pero siguió- “Fobos se volvió un águila y… y…”

- “¿Y qué?”

- “¡Sigue abuelo!”

- “¡Por favor siga!”

- “Sí abuelo ¿Qué pasó?”

- “¡¡SÍ, QUE ME MATA LA ANGUSTIA Y NO ME DIGA QUE VA A DEJAR LA HISTORIA A MEDIAS…!!”-la entusiasmada exclamación de Tao sorprendió a todos, hasta Rei levantó una ceja, mientras el adolescente aludido se rascó la cabeza, disimulando su incomodidad- “eh… bueno… no lo decía por mí… a los niños….” –protestó irritado- “¡ay, no me miren así!”

- “Bueno…. lo que ocurrió después fue que…” –La mente de Fujitaka trabajaba de prisa, tratando de “disfrazar” los hechos que servían de base a su historia (aún más) por la presencia de Rei- “¡ya lo recordé!.. Fobos se transformó en …. en….”

- “¿Aguila?, ¡ya lo dijiste abuelo, eso ya lo sabíamos!” –inquirió Mamoru, deseando saber más- “¿Qué pasa?”

- “No, de águila se transformó en… en… “

- “¡Un águila de dos cabezas!”

- “Una sirena!”

- “¡No, un tritón!.. ¡era un águila macho!”

- “¡Un troll!”

- “¿Un cantante de Rock?” –dudó Tao- “o una mujer desnud..”

La mirada fría de Rei –más que de costumbre- y una gotita sobre la cabeza de Fujitaka detuvieron a Tao y su explosión de imaginación adolescente. Mientras los niños y niñas –además de Yuu- le miraban con signos de interrogación sobre sus cabezas..

- “¡Bueno!... ya dígalo… y no me miren tan feo”

- “Se convirtió en … un joven príncipe..” –las niñas se miraron con ilusión y aplaudieron, mientras Mamoru y Hien parecían sorprendidos- “¡pero un príncipe guerrero con una brillante armadura blanca!”

¡Ahora sí los niños unieron su aprobación a las niñas!, pero surgieron las preguntas..

- “¿Y que clase de armas tenía?”

- “¿Era muy guapo?”

- “¿Tenía una gran capa?”

- “¡Una gran espada!”

- “¿Era amable?”

- “¡Era muy valiente!”

- “¡Sigue abuelo!”

- “Mejor hubiera sido un cantante.. o una chica..” –dijo Tao, el único desencantado del asunto.

- “Es una historia para niños” –le replicó Rei en voz baja, con calma- “ … no una película “de adultos” de ésas que tu hermana no sabe que tienes..”

- “¡Aguafiestas!… a ver si te animas y te paso una..”

Rei no dijo nada, mientras que su respeto hacia la inteligencia del Rector de la Universidad Clamp crecía. Él sabía muchas historias –Yukito y Ayame se las habían contado cuando niño pese a que él jamás pidió, ni dio muestras de interés en ninguna- pero se reconocía incapaz de poder improvisar una totalmente inédita y ante la misma audiencia, tal y como había hecho Fujitaka.

Ciertamente algunas cosas le habían parecido levemente familiares, pero –se encogió de hombros- eran elementos de cuentos..

- “Los mismos elementos de siempre: hechiceros, águilas encantadas, príncipes.. sólo eso de unas piezas de un rompecabezas es algo inesperado.. aunque me suena algo egipcio. Pero definitivamente la habilidad del señor Rector es insuperable al unir elementos clásicos de mitología como el Pegaso con algunos nuevos e inventar una historia así..”- pensó el hijo de Yukito Tsukishiro.

- “¿Y que pasó cuando Fobos se hizo príncipe?” –quiso saber Nadeshiko.

- “Eh….” –Fujitaka dudó, pero suspiró y continuó- “les dijo que él tenía un hechizo especial y que iba a tener que combatir con Cherry y Shane. Quien fuera capaz de vencerle en un leal combate sería el que se quedara con todas las piezas del rompecabezas..”

- “¡Ja, ja, ja!” –rió Mamoru- “¡allí si que cayó Cherry!, ¡una niña no iba a poder contra un príncipe guerrero!”

- “¡No digas eso hermano!” –protestó Nadeshiko.

- “No fue así ¿verdad?” –se preocupó Miriel.

- “¡Bueno, debes admitir que Shane era un gran guerrero, ¡mucho mejor que Cherry!”- dijo Hien.

- “Pero…”

- “Pero… no era sólo un combate de armas.. sinó de magia… y caballerosidad” –sonrió Fujitaka, tratando de crear la idea de un combate medieval, para no provocar en Rei el efecto “deja vú”- “ése fué precisamente el asunto. El combate entre el príncipe y Shane fue muy parejo, pero finalmente el príncipe pudo derrotar al bravo niño de la lanza, pero cuando le tocó a Cherry…”

- “¿Qué pasó? ¿acaso no peleó con ella por que era niña?” –bufó Mamoru.

- “¿Pelearías tú con una niña?”

- “¡Yo nunca pelearía con una niña!” –saltó Hien- “sería horrible y muy malo para un chico pelear con una niña, ¡mucho menos golpearla, aunque sea con golpes de espada!”

- “Sí.. temo que el príncipe pensó lo mismo que tú. No pudo tener con Cherry  un combate porque era todo un caballero, pero sí le pidió que cumpliera varios retos. El problema era que ya que Shane había perdido, si Cherry perdía también, el rompecabezas…” –dudó buscando ideas- “el rompecabezas se dividiría de nuevo..”

- “¿Qué clase de retos eran?”

- “Pruebas de fuerza de voluntad… y valor” –Hien se sonrojó y Mamoru le miró burlón- “vencer a su propia sombra, enfrentar lo que más temía… decir la verdad. Como ven niños, no era fácil. Shane, por su parte hizo lo mejor que pudo para ayudarla, animándola a no rendirse cuando ya Cherry creía que se le acababan las fuerzas. Madison rezaba porque a su hermana le fuera bien y Tory…”

- “¿Qué hizo Tory?”

- “Temo mi pequeña Nadeshiko, que Tory tuvo que hacer algo difícil: no ayudar más a su prima y confiar en ella”

- “¡Uy!, ¡que bueno que Cherry no se llamaba Nadeshiko!”

Hien disimuló una sonrisa ante el sarcasmo de Mamoru, pero su interés en el relato no cejó.

- “¿Qué más? ¿lo logró?”

- “Sí. Lo logró. Cumplió los retos y el príncipe le dio a ella todas las piezas.. y ella las unió. Entonces el príncipe…” –Fujitaka trataba de pensar en algo que tuviera que ver con un cuento clásico- “entonces él desapareció y Fobos volvió como águila..”

- “¿Y el príncipe?”

- “Antes de desaparecer, el príncipe dijo que todos tenían lo que habían ganado. Cherry se había convertido ya en hechicera.. ciertamente con ayuda de su hermana y su primo, pero más que hechicera.. había demostrado que no sólo era una niña buena y bonita, sinó que tenía la belleza de una princesa y el encanto de una hechicera. Shane, que había sido siempre muy honesto, había olvidado su propia tristeza por haber sido vencido por el príncipe, y había animado a Cherry a que siguiera adelante.. sin ningún egoísmo. El príncipe dijo entonces que Cherry tendría la magia, pero su esencia, la del príncipe, iba a pasar a Shane, quien con todo derecho se había convertido en príncipe y aliado de Cherry… la princesa”

- “¡Ohhhhhhhhhhh!”

- “Como les digo.. Fobos volvió como águila, y Madison se puso feliz al notar que Cherry y Shane eran príncipe y princesa” –miró a los niños- “ella había vencido su inseguridad con todas estas pruebas y él había vencido lo que es más difícil que pelear con mil enemigos: había vencido a su propio orgullo y había sido desinteresado y valiente.. como es un verdadero y noble guerrero” –Hien y Mamoru hicieron un gesto de convencido asentimiento mientras les brillaban los ojos. Incluso Rei hizo un leve gesto casi imperceptible de aprobación- “después tuvieron que pasar una prueba tremenda cuando el … hermano del príncipe vino a probar su valor..”

- “¿El hermano?” –se asombraron.

- “Sí. Era un niño que había recibido el poder del príncipe hermano del príncipe blanco. El tenía el poder y su espíritu, y para probarles los sometió a diversas pruebas, pero con la ayuda ya conocida de Tory ellos pudieron superar..”

- “¿Descubrió Cherry que Tory le ayudaba?”

- “Sí pequeña Miriel” –sonrió haciendo un nuevo y peculiar añadido a su historia- “pero no lo hacía por Cherry. Lo hacía porque no hubiera podido soportar que Madison se lastimara..” 

- “¡Oh, que lindo!” –se emocionaron las niñas.

- “¿Y las pruebas fueron difíciles?” –quiso saber Mamoru.

- “Mucho más que las primeras: les envió a mundos encantados, los hizo combatir contra las fuerzas de la naturaleza e incluso logró hacerlos pelear entre sí mediante hechizos mágicos.. pero como lograron Cherry y Shane vencer todos sus retos, el hermano del principe..”

- “¿Cómo se llamaba?” –quiso saber Miriel.

- “Eh…. Pues… E.. ¡Scott******!”-dijo sin pensar y suspiró- “bueno, cuando sus pruebas acabaron, Scott les felicitó y finalmente confesó que ya que ellos habían logrado vencerle, era que iban a ser poderosos en el futuro… pero poderosos juntos. Por la dulzura de Cherry y el valor de Shane” –sonrió- “Con el tiempo Cherry y Shane se casaron..”

- “¡Claro!, ¡ellos eran el príncipe y la princesa!” –alborotaron las niñas.

- “Y también se casaron Madison y Tory” –sonrió Fujitaka, sudando aliviado.

- “¡Pero no fue justo que Madison no tuviera nada de magia abuelo..!”

- “¿Lo crees Nadeshiko?” –le sonrió- “Madison tenía ya su propia magia… su magia era su afecto sincero, su apoyo indesmayable, la calidez de su corazón que siempre estaba al servicio de los que quería.. ¿no es eso suficiente?”

- “¡Tienes razón abuelo!, además ¡Tory la quería!”

- “Y mucho… la adoraba realmente pequeña Nadeshiko. El príncipe Scott se casó también… trató de someter a esas pruebas suyas a una jovencita (cuando él ya era mayor) y esta vez ella fue más lista que él. Se enamoraron y pese a algunos problemitas y malos entendidos, se casaron..”

- “¡Que dulce!” –murmuró Miriel.

- “¿Y que hay de Julián, el amigo?” –quiso saber Tao.

- “Pues.. Julián también se casó. Se enteró de lo de sus amigos, y ayudó mucho a que ellos se casaran cuando fueron mayores”

- “¡Estupendo!” –asintieron las niñas.

- “¿Porqué siempre los cuentos terminan con una boda?” –bufó Tao- “o en todo caso ¿por qué un tipo tiene que casarse en los cuentos sólo con una chica? ¿no pueden ser más de una?.. quizá tres o cuatro..”

- “Tao..” –murmuró Rei.

- “¡De acuerdo, de acuerdo!.. ya sé que está tu hermano y hay niños ¡pero no entienden!”

La puerta de la habitación de Hien se abrió suavemente y Fujitaka se encontró de pronto con el rostro sonrojado de Sakura, Shaoran, Touya, Tomoyo, Yoko y Eriol.. que estaban allí atisbando hacía buen rato..

Y una gota MUY grande se formó sobre la cabeza del Rector de la Universidad Clamp…

- “¡Mamá, el abuelito nos acaba de contar una historia realmente preciosa!” –se entusiasmó Nadeshiko, mientras sus padres parecían incómodos- “¡que pena que no la oyeran!”

- “¡Ha sido una gran historia!” –comentó Hien

- “¿De verdad?” –dudó Sakura, con una gotita sobre la cabeza.

Shaoran estaba mudo.

- “No estuvo mal” –murmuró Mamoru.

Rei Tsukishiro asintió en silencio mientras Sakura, Tomoyo, Shaoran, Touya y Eriol suspiraban aliviados interiormente pues el adolescente parecía no haber notado nada.

¡Que alivio!

Por otro lado, Tao pellizcaba la nariz de el pequeño Yuu aprovechando que Rei también saludaba a los adultos recién llegados con propiedad y eso le distraía.

- “A mí me gustó mucho” –sonrió Miriel Hirazgizawa.

- “¡A mí me encantó!” –insistió Nadeshiko- “¿quieres que te la cuente papá?”

- “Ah.... la conocemos... algo” –dudó Touya - “más o menos”

- “Y sí, en realidad son eventos interesantes para una historia” –murmuró Eriol, recuperando su aplomo, mientras Yoko evitaba sonreír pues sabía muy bien lo que aquel simple “cuento” disimulaba- “.. por eso me agradan los cuentos”

Shaoran le lanzó una mirada incómoda.

- “¿Cómo puede decirlo con tanto descaro?” –pensó con una gota sobre la cabeza.

- “Veo... veo que todos han sido tan gentiles en visitar a Hien” –sonrió Sakura, tratando de cambiar el tema- “gracias.. y... ¿quieren que les sirva un pastel delicioso que acabo de comprar?”

Tao y los pequeños secundaron la proposición con entusiasmo y todos corrieron hacia la cocina –a excepción de Mamoru, que iba lentamente con su muleta, y Rei, que llevaba a Yuu en brazos y les seguía sólo por su hermanito pues él no comía cosas dulces-, y fue entonces cuando Hien insistió:

- “Mamá... papá, ¡por favor, déjenme ir a la cocina con los demás!, ¡estoy muy bien y no quiero seguir en cama!” –ante la mudo gesto de asentimiento de sus padres el niño quedó sorprendido y añadió- “¿DE VERDAD?”

- “Sí..”

El pequeño tiró sus cobijas al piso y corrió siguiendo a los otros, mientras Sakura y los demás permanecían aún en la habitación.

- “Lo... lo siento mucho muchachos” –replicó Fujitaka, muy apenado- “yo pensé que... bueno, sería agradable que los niños tuvieran ciertas nociones de lo que pasó, nunca creí que el joven Rei llegaría en ese preciso momento” –suspiró- “lo menos que deseo es ponerlo en peligro”

Un leve silencio.

Súbitamente Sakura, Shaoran, y las otras dos parejas restantes sonrieron.

- “Es... algo embarazoso ser personaje de un cuento, pero le estoy muy agradecido” –Shaoran estaba verdaderamente satisfecho y su amplia sonrisa lo revelaba sin reparos- “jamás me hubiera visualizado a mí mismo de esa forma, ¡ni en un millón de años!”

- “Gracias papá” –sonrió Sakura Li, tomando las manos del autor de sus días entre las suyas- “no tienes idea de los dulces recuerdos que pasaron por mi mente al escucharte.. ¡fue como vivirlo todo de nuevo!”

- “Contemplar el interés en el rostro de los pequeños fue más de lo que hubiera imaginado” –comentó Eriol- “creo que todos los presentes e incluidos en su... “cuento” no podemos menos que sentirnos halagados y agradecidos señor Kinomoto” 

- “Fue muy dulce de tu parte papá” –asintió Tomoyo.

Fujitaka sonrió, mucho más tranquilo.

- “Bueno, no estuvo mal... por algo eres mi padre” –replicó Touya, cerrando la charla y murmurando, mientras tiraba del brazo de su esposa- “a ver si es que esos niños no acabaron con tu cocina Sakura...”

Eriol y Yoko les siguieron con una sonrisa y en silencio, mientras Fujitaka partía en busca de sus oyentes y Shaoran retenía a Sakura por unos instantes..

Fragmento de la canción : “Amor real”
Intérpretes: Sin bandera

“Un día más, se llena de color,
y tú vendrás.. llenándolo de amor
ya no me preocupo al caminar, porque tú estas aquí (por que tú estás aquí)

y pierdo todo el miedo que me da porque tu crees en mí”

- “Tienes toda la razón” –le dijo- “escuchar a tu padre contar eso, fue casi como revivir lo que ocurrió.. al menos desde que te conocí la primera vez” –añadió- “no puedo menos que mirar asombrado el intenso camino recorrido desde la captura de las cartas Clow hasta ahora” 

- “¿Te sorprende?”

- “No Sakura. Pero me llena de optimismo... por primera vez en mucho tiempo” –hizo una leve pausa para tomar aire- “y es mejor que te lo diga de una vez: voy a irme de viaje”

- “¡¡¿QUÉ?!!, ¿por qué?, ¿qué pasa? ¿qué no me has dicho Shaoran?”

- “No te alarmes” –confesó- “debo admitir que te he estado ocultando muchas cosas.. pero no por mi gusto o voluntad, y los últimos acontecimientos me han decidido a no quedarme con las dudas ..”

- “¿Vas a decirme?”

- “Hice un juramento a Kamui Shirou, y hay algo sobre los dragones del cielo y la tierra que no puedo revelar a nadie, mientras viva” –suspiró- “lo juré por ti y por la cabecita de Hien... y por eso no te lo puedo decir; pero no es lo peor: hemos tenido problemas serios en el Concilio: problemas que te he estado ocultando y que me han provocado pesadillas. La policía secreta del Concilio está dando muchos problemas y tenerlos a ellos en contra es peligroso.. pero no es nada que no pueda manejar” –parte de él quiso callar, pero se decidió finalmente- “y en el viaje a Siberia....”

- “Kagastán trató de matarte.. ¿verdad?”

- “¡¿Cómo lo sabes?!” –casi gritó pegando un brinco.

“Tú me enseñaste a disfrutar mi vida mucho más
Dejando el sufrimiento atrás, dándome
¡un amor real, siempre tan natural, lleno de libertad, lleno de dar!”

.. eres tú quien sabe que es lo que es “amar””

La mujer de ojos verdes asintió, tratando de evitar sonreír ante la expresión de niño pillado en falta de su esposo.. pero después su hermosa mirada se nubló por un instante..

- “Sé muchas cosas... y no por que alguien me las contara, sinó por ti: por ti mismo, tus silencios, tu cansancio y hasta tus pesadillas” –le dijo, mientras acariciaba su mejilla con su mano- “no quería ofenderte ni asfixiarte con preguntas, esperaba que me lo dijeras y así lo hiciste. Quizá no es muy ético para mí, siendo periodista, pero antes que todo soy tu esposa y madre de Hien. Sabía muy bien que los problemas en Siberia fueron mucho más graves de lo que dijiste, también he tenido sospechas sobre lo de Kagastán y también sobre lo de los Dragones, pero comprendo y respeto ese juramento tuyo.. como creo y respeto tu palabra. No espero que me cuentes todo Shaoran, pero sí compartir tus angustias: no olvides que somos uno”

- “¡Oh por los dioses, Sakura, claro que sí!” –susurró Shaoran algo apasionado.

La hermosa mujer de ojos verdes sonrió mientras sus labios hacían contacto con los de su esposo..

“Un día más, de mi pasión por ti,
Y tú vendrás, para hacerme sentir,
que el límite de la felicidad, no llegará jamás

que cada nuevo amanecer traerá una sorpresa más”

- “Entonces.. cómo te sorprende que lo sepa todo?” –susurró.

- “Lo sé.. pero no quería inquietarte” –suspiró- “¿cómo supiste lo de Kagastán?”

- “Lo sospechaba.... por tu forma de negarlo” –lo abrazó- “¡Oh Shaoran, he estado tan inquieta!, tú tan mal... y luego lo de Hien... ¡ni siquiera la pesadilla con Kamui que tuve el otro día me había tenido tan nerviosa!”

- “Tranquila... nada pasó”

- “No, ¡pero ahora me dices que viajas de nuevo!, ¿vas a ver a ese tipo?, ¿por qué?”

- “No es eso. Eso puedo manejarlo también.. descuida. Lo que sí quiero es visitar al Sabio del Concilio... me envió hace poco un aviso y quiero detalles..”

- “¿Un aviso?..” –dudó- “pero... fue el Sabio quién nos informó antes que fue el Druida Negro quien hizo la profecía de los Kamui... él nos lo confirmó por medio de tu madre, ¡creí que nunca recibía a nadie!”

- “Lo sé: la “Llave viva de la Sabiduría de Oriente” no recibe a nadie pero debo verlo.. AHORA. Lo entiendes ¿verdad?”

- “Iré contigo, ¡No quiero que corras peligro y..!”

- “No, debes quedarte con Hien. Aquí, a salvo” –le sonrió antes de añadir- “sé que no será fácil con mi sobrina aquí en casa pero..”

- “Shaoran, no seas así, May May es muy buena...”

- “Para provocarme un infarto.. sí” –dijo- “pero eso no es lo que te digo: no sé cuanto demore, pero es preciso que yo vea al Sabio y así nos tranquilicemos”

- “Pero ¡no me gusta!. Algunas veces has viajado por una semana a lo sumo y la última vez que te demoraste tanto... ese Kagastán. ¡Oh, si fuera contigo!”

- “Tranquila Sakura... no será problema que nosotros: los dos, no podamos manejar. Regresaré lo antes que pueda y totalmente sano y salvo.. además de mucho más tranquilo, espero”

- “Pero...”

El Jefe del Clan Li le sonrió nuevamente y Sakura cedió casi con pesar..

- “¿Lo prometes?, ¿volveremos a vernos verdad?”

- “Me dijiste lo mismo la primera vez que nos despedimos cuando éramos niños y yo me fui a Hong Kong...”

- “Pero ¿tú lo prometes?, ¿te cuidarás? ¿volveremos a vernos verdad?”

- “Te lo juro. Quiero volver a verte...a estar a tu lado”

Al día siguiente al anochecer, Sakura se encontraba en el aeropuerto. Eriol y Yoko, Yukito y Ayame, Tomoyo y Touya –quien estaba furioso, pues la firma de un importante acuerdo comercial traía a Sonomi de vuelta al país y esta vez por un tiempo prolongado- y hasta Mei Ling –desde Hong Kong esta última- habían llamado para desearle suerte a Shaoran en este nuevo “viaje de negocios”.

Y ahora estaban allí... ella despidiéndose de él, mientras Hin Lu –que había llegado de Hong Kong en un hace apenas horas con el motivo expreso de acompañaría a su señor- terminaba de revisar todas y cada una de las cosas que llevaba el avión.

- “Hin Lu está totalmente paranoico” –sonrió Shaoran mientras veía el rostro dormido de Hien, sentadito en una silla cercana- “cuídalo mucho Sakura”

- “Si” –dijo la joven, con los ojos verdes más brillantes que nunca mirando con amor a su hijo y luego el rostro de su esposo.

“Tú me enseñaste a disfrutar, mi vida mucho más
Dejando el sufrimiento atrás, dándome ¡un amor real, siempre tan natural,
lleno de libertad, lleno de dar!.. eres tú quien sabe bien lo que es amar..

Vivir, disfrutar, Reír, cantar
¡y dar sin preguntar!...”

- “¡Es hora Shaoran!” –avisó Hin Lu, llevando su valija- “nos vemos Sakura...”

- “Espero verlo pronto señorito..” –se despidió el fiel y anciano Wei, que acompañaba a Hien en una banqueta cercana- “cuídese mucho”

El joven asintió. Y su mirada se encontró con la de su esposa.. ambos se adelantaron unos pasos hasta fundirse en un abrazo y un beso cálido, en medio del cual el hijo de Ieran Li susurró:

- “Tranquila.. volveré pronto”

- “Sí... ya te extraño”

“Un amor real, siempre tan natural, lleno de libertad, lleno de dar,
Eres tú quien sabe bien que es lo que es.
Un amor real, siempre tan natural, lleno de libertad, lleno de dar!,

eres tú quien sabe bien que es lo que es…. Amar”

Fragmento de la canción : “Amor real”
Intérpretes: Sin bandera

Con un gran esfuerzo, él se soltó y corrió a depositar una caricia en el rostro dormido de su hijo antes de partir a toda prisa hacia el avión pese a que quería quedarse y no irse. Mientras la mujer de ojos verdes se quedó allí.. todavía minutos después que el avión privado del Concilio hubo partido. Finalmente el gentil Wei se acercó:

 - “Es mejor volver a casa señorita Sakura. El señorito volverá pronto, tal y como prometió”

Ella asintió en silencio mientras su mente repetía la misma pregunta que se hiciera de niña.. años atrás:

- “Volveremos a vernos ¿verdad?”

- “Sí Sakura...” –pareció decirle el viento, que traía los pensamientos de Shaoran desde el avión- “nada ni nadie me impedirá volver siempre a ti y a nuestro hijo. Lo que ocurrió en la torre de Tokyo debe quedar en el pasado y enfrentaremos lo que traiga el futuro.. juntos, con Hien”

FIN

 

Si. Este es el fin de “en la torre de Tokyo”.... ¡FINALMENTE!.... ¡pero lee mis notas de autora por favor, es MUY, MUY, MUYY... “REALMENTE”... ¡¡¡IMPORTANTE!!!!”

Vocabulario:

* Cherry: Así como “Sakura” significa literalmente “cereza” en japonés, “Cherry” significa también “cereza”.. pero en inglés.

** Madison: EH… bueno, no apoyo los cambios de los nombres hechos por Nelvana (la empresa que licenció Sakura para USA) pero ese es el nombre que le dieron a Tomoyo y lo usé. (ji, ji) 

*** Fobos: Nombre de uno de los hijos del dios Marte, en la mitología griega. Ya que “Cerberos”  (el nombre original de Kero-chan) proviene del guardián del infierno griego (el perro de Hades) usé otro nombre griego para este.. “cuento”.

**** Shane: Uno de los escasos nombres que tienen la primera sílaba igual a la “Shaoran”.. como que fue improvisación de Fujitaka y mía ^^´.

*****Tory: El nombre de Touya en la versión americana, para que los que la vieron así no tengan dudas de a quien se refiere.

***** Julian Star: El nombre de Yukito Tsukishiro en la versión de Nelvana (USA).

******* Scott:  Nombre inglés que usó Fujitaka para designar a Eriol en el cuento. ¿Por qué “Scott”?, bueno, por que es el nombre de uno de los autores clásicos más reconocidos del habla inglesa: Sir Walter Scott (autor de obras de tipo medieval como “Ivanhoe” y “Robin Hood”).

Nota:  Me gustan más los nombres originales pero quería que no hubiera duda sobre quien era quien en el cuento de Fujitaka ¬¬´. 

(2) Otra vez la referencia a este tango, y es que en vista de la ambiguedad  de estos “personajes” esta referencia será la única identificación.. ^_^´´ 

Otra nota: La canción usada en este epílogo fue: “Amor real” del dúo “Sin Bandera”, que creo describe perfectamente la relación de nuestra pareja protagonista favorita ^___^, ¿no lo creen ustedes?: creo que es algo que Shaoran podría decir a la persona que tiene al lado –Sakura- por todo lo que le ha dado. ^__________^. 

Notas finales de la autora: ¡Hola amigos! , finalmente terminamos!!, ¡¡¡¡¡SIIIIII!!!, ^______^ bien este es el fin de “En la torre de Tokyo” y  a quienes les pareció muy abierto y les recordó el final de la serie de Tv... es que ¡ESA ERA LA IDEA EXACTA, UN HOMENAJE A LA OBRA MAS ENCANTADORA DE CLAMP Y A SU FINAL DE TV!. Quizá les parezca algo raro el final (muy ambiguo) pero es que ¿acaso la vida es llegar a un punto y de allí es todo felicidad?, ¡No!, siempre hay sorpresas y acontecimientos nuevos cada momento y eso es lo emocionante de cada día... creo yo. Finalmente me queda agradecerles su apoyo, mails y demás demostraciones de afecto. ¡Son todos ustedes increíbles! y miren que el fic no ha sido cortito. Bueno, todos los personajes de Card Captor Sakura pertenecen –ya lo saben- al estudio Clamp, la revista Asuka y asociados, este es sólo un fic y sólo algo salido de la imaginación de una fan de Card Captor Sakura y de las Clamp en general. Los personajes originales de este fic sí son mi creación y si quieres usarlos para un fanfic o algo, ¡por favor, pídeme permiso!. Y ahora me permito hacerles un pedido muy especial... ¡ES MUY MALO PIRATEAR HISTORIAS Y HACERLAS PASAR CUANDO NO LO SON!. ¿A que viene esto?, bueno, hace algunos días me doy una vuelta por la página de Fanfiction.net –a los tiempos!- ¿qué pasa allí?, bueno, Ishtary está publicando “El último card captor” con mi permiso y yo, que estaba depurando el fic “en la torre de Tokyo” a texto solamente para remitirlo a esa page COMPLETO, gracias a la afectuosa invitación de RUBIAX (Mil gracias por tu gentileza, lamento la demora en contestar!!!) pero como a las 4:00 am caigo por la red y por fanfiction –normal para mí estar despierta a esa hora- para ver como le iba a Yshtary y descubro que alguien llamado DINASMON ¡que publica “en la torre de Tokyo” hasta el cuarto epílogo!, OoO´. ¿TE CONOZCO?, no lo sé pero por favor, SI DESEAS PUBLICAR MI HISTORIA ESPECIFICA QUE NO ERES AUTOR PORQUE ME SIENTO MUY TRISTE CUANDO SE CREAN ESTOS CONFLICTOS T_T. YO NO CAMBIO DE NICK, A VECES AUTORIZO A AMIGOS A PUBLICAR LA HISTORIA PERO NO CAMBIO DE NICK!... 

Sé que  muchos lectores han tratado de contactarme y creen que no me interesa escribirles porque no he podido contestarles, pero trabajo ocho horas diarias y asisto a clase 6 horas después, luego hago tareas... como ven, prácticamente no tengo minutos libres y los escasos que tengo son contados –cuando falta un profesor, me enfermo o algo así-. Sé que a ustedes no tiene por qué importarles mi vida, pero como ven yo REALMENTE LE ROBO TIEMPO AL SUEÑO y AL CANSANCIO para escribir y preparar el FANART CON TODO CARIÑO, AL IGUAL QUE LAS FICHAS DE PERSONAJES. Eso no es fácil, ni tampoco algo que suelan hacer los escritores de fics, pero lo hago por que me gusta hacerlo, porque me gusta engreír a mis lectores y también por el apoyo que me brindan con sus mails –los leo, aunque no siempre pueda contestarlos, pero escribir y hacerles esos “regalitos” es mi forma de agradecerles- pero cuando me piratean la historia –me ha pasado, me ocurrió en el foro de animekai hace más de un año- PUBLICÁNDOLA COMO SI FUERA SUYA, DICIENDO QUE SON AUTORES me hacen mucho daño, y por favor, ¡TAMPOCO TE PIRATEES MI FANART!, ¡eso es malo y me quitas las ganas de hacer algo!, si quieres hacer gráficos, ¡HAZLOS POR TI MISMO, ES MUY DIVERTIDO!, PERO POR FAVOR, NO PIRATEES Y MENOS AUN PUBLIQUES LO DE OTRO COMO SI FUERA TUYO.. ES REALMENTE HORRIBLE!!

Gracias mil por su apoyo!, ¡¡¡¡¡Otra vez gracias y adiós!!!!!!!..

Ji, ji, ji, ¡Gomen, gomen! (lo siento, en japonés) bueno, ya sé que estos epílogos han quedado muy abiertos... y.................. ¡ALERTA DE SECUELA!

Si. Este final de “en la torre de Tokyo” no es la última aventura de Sakura y sus amigos escrita por su humilde servidora (yo  ^____^) YA ME HE COMPROMETIDO CON UN GRUPO DE LECTORES –muy lindos ellos, del foro de Asuka Heaven y no les puedo fallar- y presento mi última secuela de historias cuyo protagonismo recae en personajes de “Card Captor Sakura”. Pero para prevenir futuros problemas en el index de la última secuela voy a poner los links de las páginas autorizadas a publicar TODOS MIS FICS (a los webmasters interesados, me avisan por mail indicando “PUBLICACIÓN DE FICS DE MIKKI” de subject ¡por favor!). Seguiré publicando con nuestra querida amiga ASUKA pero yo entiendo mejor que nadie que ella tiene tiempo limitado –¡yo lo sé bien, hay días que casi no duermo! T_T, además supongo que updatear toda una pagina es mucho trabajo y más con un fic tan pesado como el mío- y no quisiera crearle más presión de la que ya tiene, es por eso que me aseguro con otras páginas, pues hay webmasters muy amables que me ofrecen también su apoyo.

¿Saben?, tenía muchos proyectos al terminar esta historia además de la secuela. (Si, se dirán ¿con que tiempo?, no lo sé, pero si he podido terminar esta historia creo que no era tan descabellado tener proyectos fuertes ¿no?): hacer una página web personal que contenga abundante información de anime, magia y música además de mis fics, gráficos que no he podido poner en esta historia, publicar mi fanart de cada una de las PROTECTION Y LOIRE CARDS, un fic de “Shaman King”, otro de “Fruits Basket”, uno de “Slayers” (un gran saludo para la gran autora Karoru-chan) un par de historias originales, un fic de “Inuyasha” –aunque adoro los fics de Misao CG, la recomiendo ampliamente, está en la página de fanfiction.net, en fics de Inuyasha, autores en español- y otro de “DNAngel” –esta serie y fruits basket casi no tienen fics en español, a pesar que me gustan mucho- pero creo que es mejor dejarlo así.  Ya me piratean fanart, fic y a lo mejor me piratean hasta la página o otros fics, de modo que... ni modo. 

Bueno, vamos terminando los detalles sobre “En la torre de Tokyo”, ya que hay ciertas cositas que flotan: ¿Cómo SE LLAMA LA SECUELA?.. ¿QUIERES SABERLO?.. ¡SIGUE LEYENDO PUES! (un poquito de paciencia, que esto ya se acaba)

¿Quién es la persona que desea confrontar –y no sólo cruzarse por la calle- con Sakura?, ¿Qué pasó en realidad con Kamui y los Dragones del Cielo y la tierra? ¿realmente murieron todos?, ¿Lograrán realmente Touya y Shaoran ser amigos algún día?, ¿Cuál de todos los guardianes es quien ha despertado? ¿qué libro ha sido y quien es el/la dueño/a? (ji, ji.. ¡ENIGMA ABIERTO!), ¿Quién está detrás de los atentados contra Shaoran?, ¿Logrará Eriol que Tao no lo meta en problemas con su esposa?, ¿Qué significa en realidad el aviso que han recibido Shaoran y Eriol?, ¿Qué pasará con Rei, May May y Megumi?, ¿Qué clase de problemas es el que tiene Shaoran con la “policía secreta” del Concilio?, ¿Quiénes son “ellas” (2)?, ¿Qué significa la visión de Hien? ¿algo, nada?, ¿aquel raro sueño significa algo?

Como ven he sido muy mala (y lo admito), pero ha sido gracias a su apoyo y pedidos de secuela que estas “preguntitas” no se han contestado en los epílogos mismos, además que ya me estaban quedando muy largos ji, ji. ¡Eso sí! Les aviso a todos ustedes que la historia siguiente trae más sorpresas, misterios y más crossovers con historias clamp; por supuesto, además de contar con fanart original como ilustración, lyrics de canciones de anime que amablemente me están pasando algunos amigos y colaboradores para la historia siguiente -¡vivan los amigos y ya los conocerán en los créditos!- tener también las fichas de personajes (para la nueva historia) explicaciones diversas, vocabulario y hasta algún acceso a midis o la tonada de las canciones (si pudiera pondría los links a canciones cantadas en mp3 pero no hay servidor que aguante.. aunque si se puede lo hago.  También informo (y cumplo con eso) que en la siguiente secuela suelto el SPOLIER COMPLETO Y DETALLADO de la serie “X” de clamp... ya están advertidos y no se quejen que por qué la conté.  

¡GRACIAS MIL POR SU APOYO! (Mikki se inclina ante los lectores) ¡NOS VEMOS MUY PRONTO EN LA ULTIMA HISTORIA SOBRE CARD CAPTOR SAKURA QUE ESTA AUTORA DE FICS VA A ESCRIBIR!... ¿EL TITULO DE LA SECUELA?.. bueno, es el fin de “en la torre de Tokyo” así que, amable lector, por una vez te pido leas los agradecimientos y luego te digo el título..

Agradecimientos: Un saludo muy especial a amigos especiales, sin cuyo apoyo nunca hubiera logrado llegar al fin de esta secuela: mi imouto Lime-Chan, mi estupendo amigo y gran escritor de fics Shougo Amakusa (AMIGO, ERES BRILLANTE!, por ti no escribo fics de Kenshin... difícil superar los tuyos y no creo poder), Nodoka (amiga, TU FANART sobre mi historia, ES BELLOOOO!!, gracias!), Maybeth (la amiga más amable y sensible del mundo!), Omar (¡quiero saber de ti amigo, extraño tus noticias!), T-chan (la persona que me animó hace tiempo, cuando no conocía a nadie en la red y NECESITABA APOYO, ¡Nunca te olvido!) , Carlos (ya te vuelvo a llamar amigo!), Marisol (la única chica que conozco que es capaz de leer tanto como yo), Carla-chan, Brenda (holaaa!!) , Sofía (hola a ti tambien Sofía card captors!), Sonia Cristina (yo también nunca te olvido amiga!) , Pedro Miguel, Irene (tenemos que escribirnos amiga, lamento los problemas en los que te he metido), Shaoran 17 (¡ya no te enfades tanto!, con el talento que tienes es mejor controlar ese carácter), Silvana (¿qué es de ti amiga?, ¡vives tan cerca y no sé de ti!), Lalo (amigo perdido! ¿donde andas?) Rei Kinomoto (gran escritora), Natalia Pérez (tus fics de Harry Potter son GENIALES!), Eriol (el culpable de la secuela, él la propuso ^__^), Pimpollitas (amiga y amable distribuidora de mis fics, ¡ME AHORRAS TANTO TRABAJO, que linda!), Paty Dimas (gracias por tus mails, ADORO LEERLOS!), Bahamut (amigo y futuro colaborador), Paty Coronel (una GRAN amiga!), mi SUPER ESPECIAL amigo Miguel Haro  (¡GRACIAS POR TU OBSEQUIO, LA GARGANTILLA LA USO CADA VEZ QUE ESCRIBO!!, ¡ME ENVIASTE INPIRACION!), A TODA LA GENTE DEL FORO DE ASUKA!!! (ellos son casi tan culpables como Eriol de la secuela de esta historia!!)  y por último (pero no menos importante) mi amiga (ella tiene una vida casi tan complicada como la mía) Sakura Wen.. ¡FELICIDADES POR TU GRADUACIÓN AMIGA!!. Y un gran recuerdo para mi amiga Chris Villar, que está en España y a quien se le extraña mucho en Perú.

Y por supuesto, MI MEJOR AMIGA y casi hermana Chibineko. 

Asimismo para nuevos amigos y lectores como Falcon (chico con TALENTO, en mayúsculas y compatriota peruano), Miki O (tan linda, TUS GRAFICOS SON BELLOS y es un  gusto comunicarme contigo) y otros más... ¡lamento tener que dejar aquí los agradecimientos pero el epílogo se hace inmenso!...

¡GRACIAS Y HASTA MUY PRONTO!

Oh, casi lo olvido: la última secuela de mis historias de Card Captor Sakura que se titula (¡gracias por ayudarme a decidir el título Bahamut!) “EL VERDADERO LEGADO”...

¡¡¡Nos vemos en “El verdadero legado” muy pronto!! (de aquí a quince días ya sale el index)

Aviso: Ando buscando “beta” (alguien que me ayude a corregir y a veces distribuya el fic con mi autorización a las paginas que publican) ¿alguien quiere ayudarme?, ¡¡POR FAVOR!. Por supuesto, al “beta” siempre le llega la información antes que a todos..... ^__^.

Cualquier comentario, tomatazo (necesito ensaladas), florecita perdida, mails bomba, petardos, solidaridad  y virus o preguntas a [email protected] y [email protected]  

Este epílogo se terminó de escribir el 31 de Marzo del 2004 y fue terminado –con todo y gráficos y otros- el día 8 de abril del 2004.

 

 

<<Menú

Hosted by www.Geocities.ws

1