En la torre de Tokyo 

               por Mikki-chan     

 

 

Capítulo XXI

Futuro Soñado

Amanece.

Estoy aquí, contemplando el cielo y el jardín y lo ocurrido hace casi ocho años pasa por mi mente en forma incesante. No puedo evitar el preguntarme a mí misma que hubiera ocurrido si hubiera muerto cuando mi hermano y Tomoyo llegaron... no lo sé; ahora entiendo que las cosas ocurren por alguna razón aunque muchas veces somos juguetes del destino y no podemos comprender lo que nos ocurre hasta examinarlo con serenidad, cuando el tiempo cicatriza nuestras heridas.

El tiempo, el pasado, el presente.... y el futuro.

Casi ocho años después todavía siento nostalgia y dolor al recordar lo que pasó en la torre de Tokyo aquella noche. Muchas cosas han pasado pero estoy aquí, de regreso por fin en Tomoeda después de tanto tiempo y es casi como si hubiera vuelto al principio, a casa.

Cada calle es un recuerdo y es como si pudiera vivirlo todo otra vez..

La distancia y el tiempo no existen cuando el amor es fuerte...

Si, pero gracias también a Kamui Shirou y los Dragones del Cielo.

Cumplimos con nuestra parte y ellos la suya, aunque antes de que su "día prometido" llegara pasaron por cosas terribles. Nosotros abandonamos Tokyo poco después de aquella horrible noche en la torre pero nos enteramos después de la muerte de aquel hombre, Seishirou Sakurazuka, a manos del señor Sumeragi y para Tomoyo y mi hermano resultó un gran alivio aunque fue el inicio de acontecimientos terribles para el alumno de Yukito y los demás Dragones del Cielo.

Pero lograron darnos un futuro y la mejor forma de agradecérselo es: vivir.

La última vez que ví a ese muchacho me dijo que no volveríamos a vernos nunca más y respeto la decisión que tomaron ya que si sobrevivían iban a empezar de nuevo aunque no niego que me alegraría saber si lograron además de ganar una oportunidad para la humanidad, vivir una vida plena.

Por eso siempre que pienso en los que sobrevivieron les deseo lo mejor donde quiera que estén.

 

 

El sol está empezando a salir y trato de espantar mi melancolía en mi solitaria habitación. Sé que nunca estaré sola pero aunque él no esté físicamente siempre está conmigo y aunque Kero ni Yue están tampoco así como Byakko y Tsuki, me alegra que mis queridos guardianes tengan una oportunidad de empezar de nuevo. Hay una hermosa brisa, el sol ya sale, y como me dijo una vez el mismo Clow cuando era niña y viajé al pasado a conocerlo, todo es un ciclo pero es nuevo a la vez. Y somos libres de construir nuestras vidas sin sombras de profecías... sólo con luz y esperanza... ¿no es así?

Creo que es tiempo de cerrar este diario. He vuelto a donde lo inicié hace tanto tiempo atrás pero.. ¡Oh Shaoran, como te extraño!"

 

Unos leves golpes en su puerta interrumpieron la escritura de la única ocupante de aquel aposento, que después de un leve suspiro murmuró con voz dulce y musical:

- "Adelante Wei, gracias por tu gentileza"

La puerta se abrió y justamente el mismo anciano que había educado a Shaoran saludó a la joven con respeto antes de marcharse...

- "No tiene nada que agradecerme señorita"

Sakura sonrió mientras suspiraba una vez más. Wei era siempre tan amable con ella y había insistido tanto en continuar a su servicio pese a sus años que la joven había tenido que acceder, si bien ciertamente el anciano era prácticamente el mayordomo principal de la casa además de amigo y consejero. Incluso la llamaba aún "señorita" pese a sus protestas...

Tal vez era porque le conocía desde niña.

Se puso de pie con un gesto resignado antes que la mañana empezara a complicarse y en algunos instantes después se encontraba ya en la cocina de la residencia, donde una joven china la saludó con toda propiedad...

- "Buen día Dama Sakura"

- "Buenos días" –saludó con una sonrisa viendo que la joven empezaba a preparar el desayuno- "no, no te molestes por favor, todavía hay muchas cosas que ordenar en la biblioteca y en las habitaciones de huéspedes. Te agradecería que le ayudes a Jin-qua con eso. Ya sabes que Wei desea que todo quede perfecto y quizá le haga mover los muebles y todos los libros dos o tres veces, además yo misma me ocuparé del desayuno desde hoy..."

La chica asintió y abandonó la cocina con un gesto animado. El señor Wei era muy estricto tanto con ella como con Jin-qua pero ciertamente era un honor para ambos haber sido seleccionados por el señor Hin Lu para formar el servicio doméstico de la Dama Sakura ahora que se establecía en Japón pero Sakura se dispuso a preparar el desayuno sola..

- "Los libros de la a biblioteca deben estar totalmente clasificados esta noche señorita Sakura" –replicó Wei momentos después con su amabilidad acostumbrada, ingresando mientras ella terminaba de preparar ya el desayuno y contemplando el reloj con preocupación- "¿no le parece que es un poco tarde y...?"

Un fuerte ruido se oyó entonces en el piso superior de la hermosa residencia y Sakura no pudo evitar que una gotita se formara sobre su cabeza...

- "¡Ahhhhhhhh!, ¡se me está haciendo tarde, se me está haciendo tarde!"

Sakura sonrió con resignación y Wei se encogió de hombros con paciencia porque era una voz infantil la que estaba armando ese alboroto..

Y justamente esa personita bajaba las escaleras a toda prisa...

- "¡Lo siento, lo siento mucho mamá!" –dijo mientras corría, inclinándose ante Wei con corrección- "buenos días Wei, buenos días mamá... por favor, disculpa la demora es que..."

- "Le dije que iba a necesitar un despertador joven Hien."

El niño sonrió nerviosamente y no dijo nada mientras acomodaba su mochila escolar en una de las butacas de la mesa del desayunador pero luego se volvió hacia una fotografía sobre un aparador. Una fotografía que mostraba a un hombre realmente joven y apuesto, de mirada brillante, decidida y con el cabello levemente agitado por el viento; un rostro varonil y atractivo que se diferenciaba de las facciones del niño por ser la imagen de un joven de aproximadamente 20 años, cuya figura masculina y gallarda lucía un traje chino que era clásico en el Jefe del Clan Li. La misma fotografía que Sakura contempló también con nostalgia y que obviamente pertenecía a los recuerdos..

- "Buenos días papá" –saludó correctamente el niño, mirando la fotografía con un brillo de orgullo en los ojos, sentándose finalmente a desayunar, aunque se veía nervioso- "mamá... de verdad, no tienes que ir"

La hermosa y joven dama de ojos verdosos suspiró, pero había una leve sonrisa en su rostro al replicar.

- "Es tu primer día de escuela Hien. Y no conoces Tomoeda, apenas hace dos días que llegamos, además has estado enfermo"

- "Tu misma dijiste que la escuela está cerca de casa, ¡puedo ir solo!"

Sakura contempló como el mismo ceño decidido de Shaoran se manifestaba en el rostro de su hijo y no pudo evitar una sonrisa...

¡Todos decían que Hien era el vivo retrato de Shaoran y tenían razón!

"Un pequeño Shaoran... tuyo y mío.. ¿no sería adorable?"

Cerró los ojos por un segundo... la tarde en que le confesó a él que Hien venía en camino se sentía tan lejana...

Pero su hijo requería su atención.

- "¿Porqué no quieres que vaya contigo?" –insistió divertida.

La mirada verde del niño bajó hacia su desayuno y no contestó.

- "Hien..."

- "Estoy bien mamá, puedo hacerlo solo" –murmuró frunciendo el ceño otra vez- "puedo ir solo, de verdad. Además ya me has dicho lo que tengo que hacer y todavía quedan muchas cosas pendientes para que terminemos la mudanza. Al fin y al cabo sólo tengo que presentarme con el Director de la escuela e ir a clases... puedes ir cuando quieras, no debe ser ahora..."

Sakura y Wei se miraron sorprendidos mientras el niño murmuraba varias excusas atropelladamente y la antigua card captor tuvo súbitamente una idea..

- "Está bien, pero mejor te das prisa en ir porque llegarás tarde.."

- "¿De verdad?" –casi saltó- "¡muy bien entonces...!"

- "Pasaré a recogerte cuando terminen las clases..." –sonrió Sakura dulce pero decididamente, mientras el niño estuvo a punto de golpearse con su propia mochila ante la sorpresa.

- "¡Mamá!"

El pequeño de siete años suspiró con resignación mientras su madre le acompañaba hasta la puerta principal y la dueña de casa contempló la pequeña e infantil figura de su único hijo marcharse rumbo a la escuela, comprendiendo lo que su padre había sentido cuando ella misma hacía lo mismo, años atrás.

Al paso de ocho años exactos desde la Batalla del Preámbulo en la Torre de Tokyo, Sakura se veía ciertamente más encantadora, hermosa y gentil. Había conservado el cabello largo y ciertamente su piel seguía siendo casi traslúcida y suave pero había un destello decidido en sus ojos verdes, como si al paso de aquel tiempo una serena comprensión de responsabilidades le hubiera otorgado una madurez reflexiva y digna que ciertamente sólo contribuía a resaltar aquel encanto tan peculiar que no le había abandonado desde niña y que parecía contrastar y realzar su juventud.

Su figura era delicada y fina, esbelta, tremendamente esbelta; a tal punto que difícilmente le adjudicaban más de veintitrés años, mismo detalle que incomodaba muchísimo al pequeño Hien ya que era notable para cualquiera que una muchacha joven fuera madre de aquel vivaz y decidido niño de siete años. Si bien su belleza y responsabilidad habían aumentado con el paso del tiempo, ciertamente su vivacidad era la misma. Por supuesto que había en ella una suave dignidad, pero aquella ternura, gentileza, suavidad y sencillez seguían siendo rasgos característicos en su personalidad y sólo contribuían a aumentar la admiración provocada por su presencia.. Admiración de la que ella ni siquiera notaba.

Pero ¿qué pasaba con su hijo esta mañana?.

Ciertamente Hien no iba a su vieja escuela sinó a una filial del Campus Clamp en Tomoeda pero Sakura aún no comprendía el motivo para que el niño prefiriera ir solo.

Apenas tenía siete años….

¡Que extraño!.

- "Sí, es una nueva vida.... tenemos el futuro ante nosotros" –pensó- "¿verdad que sí Shaoran?"

* * * * * * * * * * *

- "Es mejor que me dé prisa o se me hará tarde y siendo el Director no es muy ético que dé ese ejemplo.. ¡aunque el desayuno estaba realmente delicioso Aya!"

- "¡Pero sólo has comido tres tazas de arroz!"

- "Es que realmente se me está haciendo tarde, pero descuida, volveré a desayunar en la escuela" –pareció dubitativo- "... bueno, ¿sería difícil que me lo enviaras?, creo que me lo llevaré como bocadillo.. ¡todo lo que cocinas es delicioso querida mía!"

- "¡Ay Yukito, a ti te gusta comer, eso es lo que pasa!"

El Director del Campus Clamp –en Tomoeda- sonrió ampliamente y besó a su esposa con gentileza antes de tomar su portafolios y buscar las llaves de su automóvil para dirigirse hacia su trabajo, no sin antes dirigirse hacia la figura que estaba al lado de Ayame..

- "¿Estás seguro que lo llevarías por mí?"

- "Descuida, no es problema. Pasaré por Tao en cuanto termine de desayunar y lo llevaremos entre los dos."

- "Te lo agradezco hijo" –sonrió Yukito, con una gran ternura brillando en su mirada protegida por los anteojos- "eres muy gentil, no sé que haríamos tu madre y yo sin ti"

- "Sí querido, gracias" –Ayame también contemplaba con increíble afecto ¿maternal? a la juvenil persona a su lado- "Yo tengo que ir a presentar ese examen para especialización en una hora y me hubiera sido muy difícil estudiar sin tu ayuda... realmente somos muy afortunados por tu apoyo Rei"

El muchacho de aproximadamente catorce años, cabello plateado y ojos celestes pareció muy incómodo ante las expresiones afectuosas pero sólo probó un poco de agua antes de levantarse también de la mesa del desayuno.

- "Es mejor que te des prisa padre... yo iré a buscarlo y todavía pasaré por casa de Tao, descuida"

Ayame acompañó a su esposo hasta fuera de la casa con una sonrisa y llevando su desayuno empaquetado en sus manos, pero fue hasta el momento en que Yukito estaba a punto de subir a su automóvil que le murmuró suavemente, con cariño...

- "¡Ay Yuki" –suspiró- "¿sabes?, Rei es realmente nuestro ángel y nuestro apoyo pero está empezando la edad difícil y me siento inquieta. Pese a todo, nunca ha pasado por eso antes.."

- "Bueno, supongo que el que pasó por eso fui yo y no él" –rió Yukito, con una gota sobre la cabeza- "pero Aya... tu sabes bien que Rei es..."

- "Sé bien que el espíritu que habita el cuerpo de Rei es Yue, y nunca dejaré de agradecerle a Sakura que haya salvado esa parte de ti en su báculo y todavía nos halla confiado su cuidado... más cuando mi sobrino ya había muerto y sólo era su corazón el que latía en ese cuerpecito vacío" –murmuró enternecida, segura de no ser escuchada y después de otro suspiro- "pero Yukito... ya no es sólo Yue, es Rei, es sólo una conciencia y no hay dualidad"

Yukito asintió abrazando a su querida esposa. Ella había recibido a este "Rei" con los brazos abiertos, lo había querido y cuidado como si realmente fuera no ya su propio sobrino sinó su hijo y ciertamente pese a que ambos eran personas normales estaban dispuestos a hacer todo, realmente todo, por proteger a su querido chiquillo de cualquier sufrimiento...

- "Sabes que como no hay dualidad ni doble personalidad en Rei, es muy serio y frío con todos Ayame; es el mismo Yue sin conciencia de su poder" –replicó Yukito sintiendo también preocupación, pues nadie mejor que él le conocía la personalidad que habitaba en el cuerpo del muchacho- "Sólo está siendo él mismo y tratando ya directamente con todo lo que lo rodea...."

- "Pero nosotros sabemos que pese a aquella frialdad que aparenta, Rei es muy gentil.." –protestó Aya.

El antiguo profesor de matemáticas sonrió dulcemente.

- "Cualquier persona que lo trate y lo conozca más allá de su hermoso aspecto se dará cuenta que bajo aquella frialdad hay alguien que es capaz de dar todo por los que ama" -continuó la señora Tsukishiro- "pero no puedo evitar preocuparme por él... pese a que es popular, le es tan difícil relacionarse con los demás...."

- "Nosotros lo conocemos porque somos sus padres" –el Director del Campus Clamp en Tomoeda besó nuevamente a su esposa para tranquilizarla- "y siempre cuidaremos de él. No tengas miedo... además es bueno que aprenda estas cosas por sí mismo... tranquila" -ahora sí que Yukito se marchaba - "que tengas suerte en tu examen... y ¿dónde está..?"

- "¡Papi!, ¡papá!"

- "¡Oh Rei, que amable, lo trajiste hasta aquí!" –sonrió Ayame.

La inexpresiva expresión en el hermoso rostro de Rei Tsukishiro no varió en lo más mínimo al salir de su casa y caminar hasta donde Yukito guardaba su vehículo, sin embargo los rostros de Ayame y su esposo miraron con adoración tanto al joven de catorce años como al pequeño de tres años de vida que Rei tenía en brazos y le arrugaba un poco el uniforme escolar con sus manitas...

Una diminuta réplica de Yukito, sus mismos ojos, cabello, sonrisa...

- "Que tengas un hermoso día de escuela pequeño Yuu" –le deseó su padre- "Rei te llevará y yo iré en el transcurso de la mañana.. ¿bien?"

- "Si, papi" –murmuró el niñito, feliz, asintiendo y sonriente- "¡si, si!"

- "Se te está haciendo tarde padre"

Yukito asintió y después de besar nuevamente a su esposa –instantes que motivaron que el joven Rei mirara con incomodidad el lado opuesto de la calle- se marchó apresuradamente mientras el chiquillo murmuraba tan seria y formalmente como de costumbre..

- "Madre.. creo que será mejor que cambies de chaqueta a Yuu antes que lo lleve a la escuela. Aún debo pasar por casa de Tao... "

Ayame dejó de contemplar el automóvil de Yukito perderse en la calle y contempló a su "hijo mayor" con un orgullo que no podía disimular..

- "Si, por supuesto. Es mejor que lo haga deprisa.. ¡pero no te preocupes, no llegarás tarde!" –agregó contenta- "además dudo que tu amigo Tao esté durmiendo todavía ¿o sí?"

Rei se limitó a no contestar y seguir a Ayame y Yuu a su casa antes de pensar en lo incómodo que se iba a sentir antes de llegar al colegio...

Realmente su madre no conocía bien a Tao.

- "Suba por favor joven Rei..." –indicaba una uniformada doncella casi diez minutos más tarde, mientras el joven Tsukishiro estaba de pie en una amplia y alfombrada escalinata con su maletín escolar en una mano y su hermanito sobre el otro brazo- "¿prefiere que le muestre el camino?"

- "Gracias, lo conozco"

La uniformada chica del servicio contempló con admiración la hermosa figura del joven de catorce años ahogando un suspiro -¿porqué no tenía catorce en lugar de los veinticinco años de vida?, ¡era un chico tan apuesto!- y sin hacer el más mínimo comentario el estudiante ascendió calmadamente por la elegante y alfombrada escalinata mientras Yuu miraba todo muy divertido y con el pulgar en su boca infantil. Después de recorrer la hermosa planta superior de aquella parte de la mansión y algunos pasillos decorados con el más delicado estilo occidental Rei abrió una puerta con familiaridad para detenerse flemáticamente ante una amplia cama de donde provenían sonoros ronquidos...

- "Despierta de una vez Tao... llegaremos tarde" –murmuró inexpresivamente con el maletín y su hermano en brazos.

El pequeño Yuu rió gozosamente y Rei repitió la misma frase tan inexpresivamente como de costumbre pero los ronquidos siguieron tan estentóreos como siempre, de modo que después de tres o cuatro nuevos e inexpresivos intentos, el escolar dejó a su pequeño hermano sobre el alfombrado antes de decirle:

- "No toques nada"

Yuu asintió en silencio y miró divertido la enorme y lujosa habitación, que sin embargo se encontraba tan ordenada como una zona de desastre. Su papá casi siempre lo llevaba a la escuela pero no era la primera vez que ingresaba a ese lugar. Los libros y aparatos musicales estaban revueltos con la ropa y también había restos de bocadillos del día anterior en combinación desafortunada con el teléfono –abandonado en el piso- y dos televisores de pantalla gigante, mientras las paredes estaban empapeladas con los afiches de equipos de fútbol y retratos de chicas hermosas...

Rei hizo un gesto de fastidio en su hermoso rostro y se dirigió al baño privado. Entre el desorden imperante también allí se encontraba una enorme jarra llena de agua que tenía rotulada en letra infantil "Para despertar a Tao", la tomó sin dudar y volvió a la habitación donde todavía se escuchaban los sonoros ronquidos junto con el balbuceo de Yuu. Se detuvo frente al ocupante del lecho y sin duda ni expresión particular arrojó el líquido sobre la persona que roncaba...

- "¡Ayyyy!, ¿qué rayos está pasando aquí?, ¡yo no puedo morir en una inundación!, ¡no puedo!"

- "No es inundación, pero llegaremos tarde si no te apuras.."

El chico despertado bruscamente –de la misma edad que Rei- lo miró confundido..

- "¿Es día de escuela?" –dijo con pesar, sin importarle que el otro le hubiera despertado de esa forma- "¡diablos!, debería haberlo sabido cuando el agua me cayó encima.. y aún nos queda todo el año escolar de esto.."

- "Y me lo dices a mí" –replicó Rei sin expresión alguna antes de añadir- "escucha Tao, me iré a la escuela en diez minutos" –contempló su reloj personal- "contigo o sin ti"

El dubitativo chico sobre la cama, de revuelto cabello oscuro y vivaces ojos grises pareció despertar ante aquella frase...

- "¡Ayy, no puedes hacerme esto viejo!, ¡no puedes dejar abandonado a tu mejor y único amigo!"

Rei no respondió y se limitó a mirar su reloj mientras vigilaba también a su pequeño hermano. Tao Hiu por su parte, empezó a correr frenéticamente de un lado a otro, casi tropezándose con los objetos revueltos en su propia habitación y realmente fue un milagro que pudiera entrar y salir del baño a velocidad alarmante, ponerse el uniforme, tomar su mochila escolar y respirar antes que Rei pudiera decir calmadamente: "ocho".

- "¡Aún debo desayunar, ten piedad!" -gritó espantado, olvidando peinar su alborotado cabello mientras su amigo salía pausadamente y con los brazos cruzados de la habitación, seguido de Yuu- "¡dame un minuto más!"

Rei no respondió y Tao corrió apuradamente casi estrellándose con Yuu antes de bajar la amplia escalera y por no bajarle a su velocidad el dormilón cargó al pequeño a la vez que bajaba las escaleras a toda máquina aún dejando a su pausado y flemático amigo atrás, pero en su apuro resbaló un par de peldaños y el niño escapó por los aires ante su mirada asustada sólo para que Yuu cayera en brazos de su hermano mayor, que no había movido un músculo de su rostro si bien un leve movimiento en su cabello plateado revelaba apenas que había hecho un movimiento para atrapar al gozoso niñito en el aire...

- "¡Uf!, lo siento.." –Tao suspiró aliviado, se puso de pie y arregló un poco su uniforme- "¡no me mires con esa cara viejo!, no fue a propósito que ya sabes que Yuu me cae bien y hasta yo me he lastimado, ¡vaya!, pero es que el apuro....." –suspiró aliviado- "que bueno que me crees.." –finalmente se volvió a una joven del servicio doméstico que miraba la escena, divertida- "dime Jenny, preciosa.. ¿está listo mi desayuno?"

- "Listo y a punto joven Tao"

- "¿Y la gente?, ¿Dónde anda Eriol esta mañana?"

- "El señor salió hace como media hora.. ya sabe que hoy es.."

Toda la febril alegría de Tao pareció congelarse por un instante, mientras sus ojos grises se tornaban serios y pensativos...

- "Casi lo olvido.. si son ya ocho años" –murmuró mientras se sentaba en el amplio comedor y suspiraba- "claro, este día es siempre difícil para él.."

Rei Tsukishiro dejó que su amigo quedara pensativo por unos instantes antes de levantarse de la mesa –de la que sólo había bebido agua, pese a los manjares que le habían ofrecido- y apartar a Yuu de los tres o cuatro platillos que comía..

Pese a la melancolía que se había apoderado de Tao al notar la fecha, el chico Hiu no pudo evitar una sonrisa ante la infantil figurita que comía incesantemente...

- "Tu hermanito tiene el mismo buen apetito de tu papá, es capaz de comer siete u ocho veces al día. Con lo terco que eres, no me asombra que tu madre tenga que perseguirte para que comas algo y no te mueras de inanición, aunque claro, tomas agua como los camellos del desierto" –Rei no respondió y se puso de pie- "¡hey, espérame!" –Tao se levantó metiéndose una enorme hamburguesa en la boca mientras salía junto con su amigo- "¡llegar tarde una vez no te matará!.. ¿porqué siempre eres tan responsable?, ¡es el primer día!"

- "¿No deberíamos ver a ...?"

Rei dejó la pregunta –hecha con el mismo tono impersonal de costumbre- en el aire pero Tao negó con la cabeza...

- "No, al menos hoy no. Es un día especial, ya te lo explico en el camino...."

El joven Tsukishiro no respondió y tomando nuevamente su maletín escolar y a su hermano pequeño dejó el amplio comedor a paso mesurado pero decidido, hasta abandonar la lujosa residencia...

Bien, no era precisamente una residencia...

Los guardaespaldas de la Embajada Inglesa en Japón se inclinaron con cortesía al paso apurado de Tao, pero el joven Hiu no pudo evitar una mirada de envidia a uno de los cinco rolls royce* que tenía la embajada..

- "No sé que de bueno le ves a eso.." –repuso Rei, muy digno, mientras su amigo veía embobado los vehículos, como todas las mañanas- "tu mismo comentaste que son autos viejos el otro día.."

- "Yo a todo le digo viejo, y nunca me lo tomas en serio" –suspiró Tao- " ¿acaso no lo sabes?, sólo quedan nueve ejemplares de ese modelo de automóviles en el mundo.. ¡hablo del mundo!" –el muchacho se entusiasmó y ante la mirada divertida de los guardianes no pudo evitar correr hacia el rolls royce plateado, contemplándolo con gigantescas estrellas en sus ojos, mientras lo acariciaba y casi babeaba de felicidad ante la mirada incómoda de su amigo- "¡Ay que belleza!, estos autos ya no los hacen desde que la producción masiva de automóviles solares se apoderó del mercado... ¡que desperdicio!, ¡mira que líneas, que carrocería, que elegancia!, ¿sabes en cuanto los valoran?, ¡si funcionan con derivados de petróleo y no con energía solar, es genial! ¿acaso no te das cuenta de lo que eso significa?"

- "Sí, que antes los automóviles contaminaban mucho el medio ambiente"

Tao suspiró nuevamente. Rei no entendía nada...

- "No sé como no te arde la sangre con este modelo de auto..." –miró al joven Tsukishiro que lo contemplaba sin expresión alguna en su bello rostro- "¡Ay es que tu eres un caso perdido!, ¿sabes cuanto yo daría por llegar a la escuela en este auto?"

- "Sí. La última vez ofreciste no pedir dinero por un mes.... pero..."

- "¡Pero Eriol no quiso!" –una vena apareció en la frente de Tao mientras movía los brazos frenéticamente- "¡que egoísta, que egoísta!, ¡con lo que hubiera impresionado a todos con esa entrada en un transporte de colección, de lujo, de historia y clase!. ¡Y seguro que cuando él era niño lo llevaban a la escuela en un Concorde**!"

- "Te recuerdo que pediste eso también, pero ese modelo de avión ya no es lo último ni más moderno. Y si no te apuras ni siquiera tu transporte servirá"

Sin decir nada más y después de verificar que su hermanito viajara con protección, el joven Tsukishiro se acomodó en su ¿bicicleta?, para marchar a la escuela...

Por supuesto que Tao miró desdeñosamente su propio vehículo..

- "¡Bah!, esto de la moda "retro" a veces me fastidia.... ciertamente en los autos de colección no, pero si bien la bicicleta es cómoda, a veces me pregunto si tu propio padre no la usaba para ir a la escuela... o quizá hasta mi abuelo.."

Rei no supo porqué, pero parpadeó. Efectivamente, desde que había empezado a utilizar la bicicleta para transportarse tenía una curiosa sensación de "deja vú" cada mañana. Y aquello le incomodó. De modo que se volvió a apurar a Tao pero el joven Hiu miraba pensativamente no a la aristocrática sede de la embajada Británica en Japón sinó la amplia colina que se fundía con los inmensos jardines de la residencia...

Era como si los ojos grises quisieran ver mucho más allá...

La cima de la colina...

Una blanca tumba.

- "Hay cosas que nunca entenderé, aunque los años pasen" –habló en voz muy baja, casi para sí mismo, otra vez tomando las cosas en serio- "no, nunca, creo que nunca lo entenderé.... pero se debe mirar al futuro, y vivir, para que un sacrificio no sea en vano ¿no?"

- "¿Decías?"

El joven Hiu negó con la cabeza pero Rei no se sorprendió. Aquel era el único día del año en que aquellos chispazos de reflexión parecían tocar a Tao y después de todo, aún tenían tiempo para llegar a la escuela...

- "Pobre Eriol.. será un día largo para él"

Finalmente Tao puso a andar su bicicleta y tuvo que moverse de prisa para seguirle el paso a Rei, pero en algunos instantes se adelantaron a toda prisa las calles de Tomoeda deteniéndose junto a una casa de la que salía en ese preciso momento, una persona..

Era una bella casa, sencilla y amigable, pero a la vez cálida, aunque no había lujo en su diseño sino más bien un toque familiar y acogedor que no habían logrado cambiar las ampliaciones que se le habían añadido....

- "Buenos días muchachos"

El saludo hizo que ambos chicos detuvieran su paso y saludaran con cortesía, mientras un caballero maduro y afable de rostro gentil y atractivo pero ya peinando numerosas hebras plateadas entre los cabellos castaños saludaba al niño sentado en el regazo de Rei..

- "Buenos días pequeño Yuu.. ¿vas a la escuela con tu hermano esta mañana?"

- "Sí" –asintió el pequeño asintiendo firmemente con la cabeza, con una sonrisa- "buenos días.."

- "Es buenos días, señor Kinomoto" –le corrigió Rei.

- "No te preocupes" –sonrió Fujitaka, complacido ante la sonrisa del niño pero mirando ahora a ambos muchachos- "¿empezando la escuela chicos?"

- "El problema de la escuela señor Kinomoto, es que nunca nos preguntan si queremos ir" –protestó Tao- "en serio... le apuesto que si hicieran esa pregunta se darían cuenta que nadie quiere asistir" –se volvió a su amigo- "y no lo digo por molestarte ¿eh?, mira que con eso que tu papá es el Director.."

- "Pues Yukito disfrutaba mucho de ir a la escuela por lo que recuerdo" –sonrió Fujitaka- "¿sabes que me recuerdas mucho a tu padre en esa bicicleta Rei?, muchas veces lo ví junto con mis hijos cuando se iban a la escuela.."

- "¡Yo lo sabía!" –Tao amplió sus protestas- "esto de la moda "retro" es demasiado.. deberían quitar las bicicletas y las escuelas, ¿quien quiere vivir entre libros toda su vida?"

Rei le lanzó una mirada rápida y Tao se mordió la lengua mientras miraba a Fujitaka con una enorme gota sobre la cabeza..

- "¡Lo siento, lo siento!" –suplicó- "yo no quise... es decir.. yo.."

- "Dedicar la vida a estudiar algo que te agrade y a la enseñanza de otros no es malo joven Tao" –Fujitaka no parecía ofendido sinó lo contrario, aunque Rei miraba a Tao con reprobación- "quizá algún día consideres hacer lo mismo.."

Tao dudó sin saber que decir, pero Rei intervino..

- "¿Crearán la facultad de Arqueología en la Universidad de Tomoeda este año, señor Kinomoto?"

- "Sí muchacho. Finalmente este año la Facultad de Arqueología de la Universidad de Tomoeda abre al fin sus puertas" –suspiró con una satisfacción que no pudo reprimir- "era uno de mis sueños más preciados y me siento feliz de haberlo conseguido antes de terminar mi gestión...."

- "Estoy seguro que no le permitirán dejar el Rectorado de la Universidad Clamp en Tomoeda" –Rei estaba muy serio, como siempre que hablaba de estudios- "ha sido usted quien más empeño le ha puesto a la creación y funcionamiento de la Universidad..."

- "¡Claro!, ¡si hasta que usted se hizo cargo del Rectorado de la Universidad es que todo empezó a funcionar!. Eso hasta un ignorante como yo lo sabe.. bueno, escuché a Eriol comentarlo el otro día pero ¡no me asombraría que ampliaran su gestión por otro año más.. y yo diría más bien que no le dejarán retirarse!"

El comentario entusiasta de Tao hizo sonreír a Fujitaka.

- "Gracias muchachos, son ustedes muy amables.."

- "Decir la verdad no es amabilidad. Es sólo decirla.." –replicó la serena voz del hermano mayor de Yuu.

Fujitaka contempló el hermoso rostro de Rei con afabilidad y después la animada cara de Tao, pensando en lo feliz que era al saber que muchos jóvenes como aquellos podrían seguir estudios universitarios en Tomoeda. Después de todo y pese a la reconstrucción de Tokyo, Tomoeda había adquirido gran importancia como ciudad, aunque sin perder –afortunadamente- su encanto..

- "Espero que la embajada no se mude a Tokyo demasiado pronto Tao... ¿cambiarás de escuela cuando eso ocurra?, ten en cuenta que el Campus Clamp en Tokyo aún está en proceso de reconstrucción y con lo grande que es ese proyecto.."

Tao Hiu negó con la cabeza.

- "No señor. Escuché el otro día que la embajada se quedará en Tomoeda. La verdad es que creo que con los terremotos que destruyeron Tokyo hace años mucha gente no la considera una ciudad muy estable pese al tiempo que ha pasado. Hay varias embajadas que ya funcionan allí pero creo que a los ingleses no les gustan los terremotos ¡ni siquiera la sombra de ellos!, así que nos quedaremos aquí. Afortunadamente la distancia no es mucha y con el nuevo diseño de transporte diplomático.."

- "Tao.." –Rei tosió, temiendo que su amigo se enfrascara otra vez en el asunto del transporte- "bueno señor Kinomoto nosotros ya... tenemos que irnos.."

Un sonido que era algo más que un murmullo desde la residencia indicó un sonoro desacuerdo y Fujitaka amplió su sonrisa despidiéndose de los muchachos y volviendo a entrar en su casa mientras ambos jóvenes volvían a ponerse en camino...

- "¡Vamos!, al señor Kinomoto le espera un desayuno ruidoso... creo" –dudó Tao encogiéndose de hombros, casi imaginando enormes nubes sobre la casa del afable Rector, y apurándose para alcanzar a su amigo- "¡oye viejo, espera!"

Rei ya se perdía en las calles con y no entendía porque.. pero la sensación de deja vú volvía otra vez...

Se encogió de hombros... no era la primera vez, pero seguramente no sería la última...

Los mismos pensamientos motivaban una sonrisa en el rostro hermoso de una joven mujer en la vieja casa donde dejamos a Fujitaka. La misma que cerró una puerta con suavidad y continuó su paso por el vestíbulo del piso superior con paso gentil, descendiendo las escaleras con suavidad y mesura aún sonriendo..

Efectivamente, habían cosas que no cambiaban, ni siquiera en ocho años..

La persona era realmente hermosa, elegante y su mirada azul estaba llena de dulzura. Su figura era delicada, esbelta, y vestía con sencillez pero con un toque de distinción muy peculiar. Tenía los cabellos oscuros pero brillantes, la piel pálida y en sus ojos brillaba una chispa traviesa de quien conoce que está por pasarle algo divertido.

- "Buenos días Tomoyo.." –saludó Fujitaka casi tropezando con ella en el vestíbulo, después de su charla con los muchachos- "me pareció que tenemos nubes que indican tormenta esta mañana.."

- "Así es papá, buenos días" –asintió la aludida con una sonrisita divertida y aún más amplia- "comparto tu opinión.. sólo espero que no se complique más de la cuenta.."

La joven mujer ingresó al comedor con paso suave y todavía alcanzó a notar como los dos comensales se estaban lanzando miradas asesinas, a la vez que rayos y chispas salían de sus ojos..

Tomoyo contuvo la risa.

El paso del tiempo no había cambiado en nada a Touya, ni en carácter, ni en aspecto físico –Tomoyo estaba muy orgullosa del varonil atractivo de su esposo- pero tampoco las relaciones con Sonomi. Si bien la empresaria pasaba muy poco tiempo en el país por sus negocios, ni siquiera la distancia había hecho que ambos dejaran de lado ese antagonismo que se tenían..

Es que eran casi ocho años y Sonomi aún seguía culpando al médico por haberle "arrebatado a su hija" además de murmurar que Tomoyo podía haber encontrado a alguien mejor en Europa o en el mismo Japón, pero no era la única en no cambiar de actitud... normalmente los ácidos comentarios de Touya no eran de ayuda sinó precisamente lo contrario y es que la mordacidad del médico parecía haberse multiplicado en el tiempo transcurrido.. ¿o quizás que él había puesto mucho empeño –y práctica- en lograrlo?.

Tomoyo ingresó conteniendo todavía la risa y ambos –Sonomi y Touya- volvieron toda su atención a su desayuno pues la joven mujer de ojos azules había conseguido ya hace algunos años que su madre y su esposo le prometieran –por supuesto, cada uno por su lado- dejar de lado aquel antagonismo. Y si ambos tenían algo en común, era que amaban a quien era la señora Kinomoto.

- "¿Y como encuentras Japón ahora mamá?"

- "¡Ay querida, mucho mejor que antes, nada como tu propio país!" –alborotó la empresaria, muy contenta, pero lanzando una mirada burlona sobre el esposo de Tomoyo- "aunque como siempre que estoy con mi hija me siento dichosa"

Sonomi había hecho bastante énfasis en el posesivo mientras una vena se dibujaba sobre la frente de Touya.

- "A mí también me alegra verte mamá" –sonrió otra vez Tomoyo, colocándose justo ante la butaca que estaba entre ambos, cada uno mirando recelosamente al otro- "la verdad yo.."

Un brillo sarcástico apareció en los profundos ojos de Touya reflejando una apropiada respuesta para el último comentario de la empresaria –una réplica apropiada- precisamente entonces y sin decir palabra alguna ni moverse de su posición pasó su brazo decididamente por la estrecha cintura de su esposa con una expresión de indefinible triunfo que casi parecía casi afirmar: "ella es mía.. mía, mía.."

La empresaria se puso de pie y salió del comedor con una excusa –a duras penas conteniendo el enfado ante la burla de él- mientras Tomoyo se dejaba atrapar por su esposo sin objeción.

- "¿Porqué hiciste eso?" –sonrió aún de pie ante él, que estaba sentado- "sabes bien que mi madre te hará algún comentario hiriente más tarde.. además habías prometido que no seguirían en esas batallas verbales.."

- "¡Maldición, es que me restriega en la cara que eres SU hija... ¡y me exaspera!!" –se cruzó de brazos, frunciendo el ceño- "y no me vengas con eso, ¡yo no le dije nada!, si se ofendió fue.."

- "Fue que le hiciste el gesto de "ella es mía" ¿verdad?" –le imitó por un instante y su esposo la miró asombrado- "no creas que no sé bien lo que pasa. Ambos son igual de posesivos..." –acarició su mejilla- "pero trata de ser paciente por favor.."

- "¡¿Paciente?!, ¡¿paciente?!" –se sofocó- "¡¿cuando se va a ir de la casa?!"

- "¡Touya!, pero ¡si apenas llegó anoche!"

- "¿En serio?. Será que el tiempo se me hace insoportablemente lento cuando está aquí.. ¡y no precisamente por sus buenas maneras de tratarme!" –dudó con sarcasmo, otra vez - "¡oh, vamos!.. sabes bien que ella sólo nos visita porque quiere arruinarme el hígado o hacerme padecer un ataque de histeria agudo. Y siempre es lo mismo... que si no te merezco, que si soy un posesivo y.."

Tomoyo apenas si pudo contener la risa otra vez.

- "Pues pese a todo, yo creo que mamá y tú llegarán a apreciarse algún día.."

- "Ya podemos compartir una habitación sin insultarnos mutuamente, no pidas demasiado" –le dijo su esposo frunciendo el ceño ante la sonrisa de ella- "y conste que sólo la aguanto porque es tu madre y me lo imploraste y.."

- "Y porque en el fondo la aprecias... Yo lo sé"

- "Claro, la aprecio tanto como un golpe en mitad de mi estómago.." –dijo sarcástico.

Su esposa pareció esforzarse en recordar algo..

- "Sí, por supuesto. Fue por eso que cuando empezó a presentar esos problemas cardíacos te preocupaste de ubicar a los mejores especialistas" –había un brillo de inocencia juguetona en los ojos azules.

- "¡Lo hice porque es tu madre!" –casi saltó.

- "Lo sé, pero eres realmente encantador cuando te preocupas por los demás... aunque no te guste que lo noten" –no pudo evitar otra sonrisita- "... hay que cuidar los.. ¿como la llamaste?: "golpes en mitad del estómago"..."

Touya se enfadó y su ceño enojado se acentuó. No le gustaba que ella le dijera eso... era algo que ambos sabían, pero es que de eso a decirlo no le parecía normal... es decir, soportar a Sonomi ya era demasiado para su sistema nervioso –la madre de su esposa siempre acababa su escasa paciencia en sólo segundos- pero vivir con ella en armonía era como si el mundo se desequilibrara. Por supuesto que había logrado apreciarla un poco –imposible evitarlo cuando ambos adoraban a Tomoyo- pero jamás lo admitiría ante nadie...

Bueno, quizá sí. Ante una sola persona...

La misma a la que volvió a aprisionar en sus brazos mientras buscaba su boca..

- "Ya basta, sabes que detesto que me hagas sentir como un tonto sentimental. Y no quiero charlar ahora..."

Su esposa rió pero justamente cuando iban a besarse Sonomi ingresó haciendo mucho ruido, sobresaltándolos –bueno, especialmente a Touya a quien no le gustaba acariciar a su esposa en público salvo el hecho expreso de que fuera a incomodar a Sonomi- pero lo que detuvo el momento romántico de la pareja en sí fue la persona que ingresó poco después, siguiendo a Fujitaka..

Un niño. Un chiquillo de aproximadamente siete años, con el cabello oscuro y de brillantes destellos castaños como los de Touya, un niño en cuyos hermosos ojos –los mismos ojos azules de Tomoyo- relucía la inteligencia y un fuerte temperamento. Y que estaba preparado para marchar a la escuela pues tenía la mochila escolar lista y en su espalda..

Touya tosió con incomodidad y soltó a su esposa, la misma que se volvió al niño con una dulce sonrisa..

- "¿Ya estás listo Mamoru?"

- "Sí mamá. Sólo pasé a despedirme del retrato de la abuela.. ya había terminado el desayuno" –Fujitaka asintió satisfecho mientras el niño contemplaba la mesa con impaciencia, específicamente un puesto donde aún se veía un desayuno intacto- "no me digas que aún no prueba el suyo.."

- "Ten paciencia querido... seguro que ya baja.."

- "¿No le avisaste que era tarde?" –le preguntó Touya a su esposa- "a lo mejor se le complica el día .."

- "Cualquier complicación que tenga alguien en esta familia seguro que es culpa tuya.." –murmuró una voz femenina desde el lado opuesto de la mesa.

Sonomi empezaba otra vez.

- "Bueno.. ¿no les parece que será un bello día?" –Fujitaka se sentó en el comedor con una sonrisa, tratando de apaciguar los ánimos- "aún no nos has contado como estuvo tu último viaje Sonomi.."

La madura pero aún atractiva mujer murmuró cruzando los brazos con gesto ofendido.

- "Por supuesto que me fue bien, la fusión con la corporación de Norteamérica ha sido tan exitosa como lo esperaba.." –ante la mirada interesada del afable señor empezó a dejar su actitud y a entusiasmarse al hablar de sus empresas- "por supuesto que esto me permite al fin expandirme en otra empresa nueva.."

- "¡Es realmente maravilloso mamá!" –Tomoyo se animó a un nuevo intento por que su esposo se uniera a la felicitación general- "¿no te parece Touya?"

- "Claro" –murmuró él con una sonrisa burlona- "cuanto menos tiempo esté de visita hace ese negocio más y más maravilloso.."

Una gotita surgió sobre las cabezas de Tomoyo y Fujitaka mientras Sonomi y Touya se miraron desde sus esquinas como dos pugilistas.

A ver si Tomoyo no les regañaba por eso.

Aunque en ese momento la señora Kinomoto se dirigía al niño, que parecía impaciente..

- "No te preocupes... ya debe estar al bajar. Pero me preocupa que llegues tarde y más que todo te acostumbres a tu nueva clase... "

- "¡Es cierto Mamoru, hoy empiezas en tu nuevo grado!" –se entusiasmó Sonomi

Tomoyo sonrió satisfecha. La mención a su hijo cambió el tema instantáneamente y su madre y Touya parecieron tener una tregua en su guerra no declarada. Si había otra cosa que hacía que dejaran su antagonismo natural por un rato era por el profundo afecto y orgullo que sentían por Mamoru. El niño había pasado un examen importante y como consecuencia había sido promovido a una clase superior a la que por su edad le correspondía..

- "Aún recuerdo lo talentosa que siempre demostraste ser hija, desde pequeña.." –la mirada de Sonomi era nostálgica al recordarlo- "afortunadamente Mamoru heredó tus cualidades porque me estremezco de pensar que se hubiera parecido a otra persona..."

La mirada de su hija detuvo a Sonomi en seco mientras el médico se enfurruñaba otra vez y preparaba su contrataque..

Igual, ella había empezado..

- "Touya, por favor, ¿porqué no terminas tu desayuno?" –Tomoyo lanzó una mirada suplicante y el médico frunció el ceño pero después de dos segundos de sostener la mirada azul de su esposa, gruñó levemente y volvió su atención a su desayuno- "mamá... ¡realmente luces de maravilla!, me asombré mucho cuando llegaste ayer!" –Fujitaka asintió y Sonomi sonrió satisfecha mientras Touya gruñía otra vez- "recuerda que el año pasado cuando fuiste a mi oficina creyeron que eras mi hermana mayor.."

- "La verdad es que el tiempo no pasa por ti Sonomi.."

La empresaria se sintió más que cómoda con esa frase, como si la elevaran unos metros del suelo...

- "Por supuesto que sí" –la voz de Touya era sarcástica y había en su mirada ese destello burlón clásico en él- "Después de nueve cirugías estéticas lo menos que podía era verse así. Al fin y al cabo no por nada fueron los mejores cirujanos plásticos del mundo.."

¡Ahora sí que a Sonomi le salieron rayos y truenos de la cabeza!

Tomoyo lanzó una mirada que era reprobadora a su esposo pero también a su madre por provocarle y Touya, satisfecho de su venganza –Sonomi estaba sin palabras y Fujitaka suspiraba con resignación- volvió a su desayuno mientras Mamoru se ponía de pie y corría hasta la escalera...

Aquellos duelos verbales disimulados entre su padre y su abuela eran lo normal... lo anormal hubiera sido que se llevaran bien...

- "¡Apresúrate o llegaremos tarde!" –gritó mirando al piso superior- "¡y más te vale fijarte bien en las escaleras, torpe!"

Un fuerte ruido pareció contestar la aseveración de Mamoru y todos los presentes en el comedor salieron preocupados, para encontrarse con una figurita infantil estrellada a los pies de la escalera..

- "¡Te lo dije, torpe!" –decía Mamoru, burlón, mientras Fujitaka ayudaba a ponerse de pie a la infantil figurita y Sonomi recogía sus útiles escolares del piso- "¿cuando aprenderás a dar siete pasos seguidos sin estrellarte con algo?"

- "¿Se ha hecho daño?"

- "No hijo, descuida.." –respondió Fujitaka- "ella.."

- "Estoy bien papá"

Touya se acercó a la figurita de una hermosa niña de seis años y la revisó rápida pero concienzudamente mientras la pequeña no dejaba de sonreír pese a su caída..

Era una niña realmente hermosa y apenas un año menor que su hermano..

- "A ver si te apuras... que ahora sí que se nos hará tarde" –le increpó Mamoru mientras la niña corría hacia el comedor y murmuró en voz baja- "que aún te quedan algunas estrelladas para el resto del día.. torpe"

- "Ten más cuidado la próxima vez, mi pequeña Nadeshiko"

- "Si abuelo.."

- "Si Nadeshiko, por favor.."

- ‘Si abuela.."

La presencia de la niña hizo que el aspecto bélico del desayuno desapareciera y las nubes de tormenta fueron por fin conjuradas definitivamente, al menos hasta que el reloj les avisó de la hora porque entonces los niños tomaron sus mochilas y salieron apuradísimos –bien, Nadeshiko se dio otro resbalón antes de salir de casa- pero por supuesto que no sin despedirse del retrato de la otra "Nadeshiko" de la que tanto les había hablado el abuelo Fujitaka..

- "Realmente es muy parecida a mi querida Nadeshiko" –murmuró Sonomi mientras los niños se despedían- "hasta en esos pequeños detalles que..."

La niña trastabilló otra vez pero al menos no se cayó al piso –ante el asombro de su hermano- y sobre las cabezas de los adultos apareció una gotita...

Bueno, es que la actual Nadeshiko Kinomoto realmente se parecía mucho a la otra Nadeshiko, la del retrato, hasta en eso. No sólo por que su cabello era del mismo tono exacto o por su dulzura, y aunque sus ojos eran de un tono castaño casi dorado brillaba en ellos la misma ternura y encanto de la recordada esposa de Fujitaka..

- "¿Ahora que olvidaste?" –protestó Mamoru, viendo a su hermana buscar algo en su mochila antes de salir- "¡Ay Nadeshiko!" –murmuró- "tenemos suerte que papá sea doctor porque con la cantidad de venditas que usas cada vez que te caes.."

- "¡Lo tengo!" –la niña sacó un peculiar aparato parecido al audífono pero que tenía unos lentes intercambiables con un tornillo cerca de la oreja izquierda- "¡lo encontré!, ¡ya vamos!"

- "¡Ay!, ¿cuando se te quitarán las ganas de filmar todo lo que ves?"

Tomoyo sonrió divertida mientras Touya pensaba en la enorme cantidad de cintas de hace casi veinte años –propiedad de su esposa- que tenía bien escondidos en el ático, además de la persecución por video que tuvo que pasar antes de casarse -cortesía de Sonomi- y dando un gran suspiro le murmuró a su hijo mayor..

- "Olvídalo... ese vicio es hereditario. Es gracias a mí que tú no lo tienes.."

Los niños se marcharon apuradamente después de despedirse de Kiku, -la pequeña fantasma que también compartía la casa y que en presencia de Sonomi trataba de evitar poner en evidencia su presencia- mientras Touya se apuraba en buscar las llaves del auto porque aún tenía que dejar a su esposa en la editorial antes de pasar por el Hospital Clamp en Tomoeda donde actualmente era Jefe del Area de Rehabilitación.

- "Tranquilo.." –murmuró Tomoyo muy sonriente, mientras Touya se enfrentaba al tráfico mañanero- "estoy segura que Mamoru podrá con el nuevo curso... es muy seguro de sí mismo, y muy decidido. Incluso en la forma que cuida a Nadeshiko.."

- "Lo sé"

- "Se parece mucho a ti. Y elegimos un nombre perfecto para él ¿verdad?" –suspiró recordando la fecha- "pensar que su inocencia y su concepción nos salvaron hace ocho años.. pero él protege a su hermana tanto o más de lo que tú protegías a Sakura..."

Touya sonrió. Efectivamente, si bien su adorada hija tenía el nombre de su madre –y realmente se parecía a la difunta Nadeshiko por su encanto y sus torpezas- Mamoru*** era realmente lo que su nombre indicaba... un protector, el guardián de su adorada hija.

Su hija era su encanto, pero su hijo era su orgullo.

- "¡Condenado tráfico!" –bufó desdeñoso- "si tan sólo no te hubieras opuesto a que dejara de usar este auto... el solar es menos problemático que este.. aunque ya sea de colección"

La señora Kinomoto sonrió traviesamente mientras buscaba una canción entre las emisoras de música del vehículo..

- "¡Que malo eres!, es un auto precioso.. y sabes bien que me gusta mucho más por lo que representa..."

Nee, aishitara……………………………………….. Oye, cuando se ama

daremoga konna kodokuninarumo………………… ¿cualquiera queda así tan solitario?

Nee kurayami yorimo fukai kurishimi ..................... Oye, ¿se abraza una tristeza más profunda

Dakishimeteruno....................................................... que las tinieblas?

Nanimo kamo ga futari kagayaku tame kitto.......... De seguro que es por el brillo total de los dos

La voz de su esposa cantando aquella canción hizo a Touya fruncir el ceño...

- "¡Rayos!, deja de hacer eso.." - protestó.

Kimiwo kimiwo aishiteru......................................... A ti, te amo a ti

Kokorode mistumeteiru .......................................... Te contemplo con mi corazón

Kimiwo kimiwo shinjiteru ....................................... En ti, creo en ti

Samui yorumo ......................................................... También en las noches frías

- "Eres una manipuladora..." –murmuró mientras el ceño en su rostro se borraba lentamente- "no sé como lo haces.."

Nee koishitemo darenimo itsuka owari ga kuruno . Oye, así se ame, ¿para todos llega el final?

Nee ao zora yorimo sunda tokimeki sutete.............. Oye, ¿se olvidan las palpitaciones más limpias

shimauno................................................................... que un cielo despejado?

Kitsetsu kawarimo kaze michi wo hashiru zutto... El viento de fin de estación sopla por el camino

Kimiwo kimiwo aishiteru ...................................... A ti, te amo a ti

Kokorode mistumeteiru ......................................... te contemplo con mi corazón

Kimiwo kimiwo shinjiteru ..................................... En ti, creo en ti

Samui yorumo ........................................................ También en las noches frías

- "No te enfades... ya no la sigo cantando, si quieres cambio de estación de radio.."

El médico apretó las manos sobre el volante y su esposa sonrió mientras la tonada seguía y ella suspiraba suavemente...

Aunque no cambió la música.

- "No quiero que te deshagas del auto donde me besaste por primera vez, aunque yo no lo recuerdo.." –comentó soñadora- "¿realmente te molesta tanto que te mencione eso?.. sabes que esa canción me lo recuerda ¡me sentía tan mal esa noche..!"

Tatoe ashita nakushitemo ............................... Así te pierda mañana

Anata wo ashinattemo .................................... Así te pierda

Deriku kagirino egoa de kagayakitai ............. Quiero brillar con la cara más sonriente que pueda

Namida de ima yobibakeru ............................. Ahora te llamo con lágrimas

Yakusoku nado iranai ..................................... no necesito promesas ni todo eso

Kimiga kureta taisetsuna tsuyosa dakara ....... es por la fuerza importante que tú me diste

- "No, no es eso..." –comentó con una gota sobre su cabeza recordando lo ocurrido entre ellos en la fiesta de despedida de soltera- "sólo que.... bueno, de sólo pensarlo, todavía me siento como un depravado.."

- "¿Porque me robaste un beso cuando yo estaba inconsciente?"

Ella rió nuevamente mientras Touya se fijaba que estarían retenidos en esa calle por el tráfico al menos por diez minutos...

- "¿Sabes una cosa?" –continuó su esposa, descansando su cabeza en el hombro de él - "nunca, nunca en mi vida hubiera pensado cuando ayudaba a Sakura a limpiar la casa, siendo niña, que sería finalmente mi hogar..."

Hitomi ima yobikakeru .......................................... Ahora te llamo con mi mirada

Yakusoku nado iranai ............................................ No necesito promesas ni todo eso

Hitomide ima te wo no basu .................................. ahora te extiendo los brazos con mi mirada

Samui yorumo ....................................................... También en las noches frías

- "Créeme, cuando eras pequeña y venías de visita, a mí tampoco se me había ocurrido esto.." –mas tranquilo por el tráfico se volvió a verla antes de mirarla intensamente y susurrarle- "pero no lo cambiaría por nada.."

- "¿Qué no cambiarías?"

- "Esto.."

Y la besó con la misma pasión, locura y arrebato en el mismo auto. Como si fuera la noche de la despedida de soltera de ocho años atrás..

* * * * * * * * * * *

- "¿Porqué mamá quiere venir a recogerme?" –protestaba Hien en voz alta, mientras corría- "¡todos los padres vendrán seguramente hoy, por ser el primer día!, ¡justamente hoy.. hoy!..."

Se detuvo en la acera para permitir el paso de los vehículos y se cruzó de brazos con enfado. ¿Porqué no había podido convencer a su madre de no venir hoy?, ¡y él que creyó que lo había logrado cuando accedió a no acompañarlo esta mañana!..

- "Soy el hombre de la casa... ¡no puedo dejar que esos papás o encargados de la escuela anden lanzándole miradas a mi mamá!" –pensó molesto- "... como si no hubiera visto la cara de los tipos de la mudanza, de los hombres en el aeropuerto…!¿porqué mamá será tan bonita?!, ¡es un problema tener que cuidarla en este país!"

Pese a sus escasos siete años, Hien no era tonto. Aunque había estado en cama por un problema de salud por mucho tiempo, era lo bastante listo para reconocer la admiración hacia su madre y ciertamente aquel hecho le molestaba mucho. No es que fuera celoso, pero era su mamá... y bueno, las mamás sólo deben pensar en los papás ¿verdad?.. esa era su firme convicción.

Pero no podía correr ningún riesgo... aquel incidente en el aeropuerto había quedado muy claro en su cabeza: todos los hombres mirando embobados a su mamá. Incluso el tipo aquel con el que se chocaron.... estaba algo viejo, pero podía notar que había mirado a su mamá con fijeza...

- "Lamento mucho lo ocurrido señorita.. ¿puedo ayudarla en algo?"

- "No gracias..." –replicó Sakura con cortesía.

- "¡No necesitamos ayuda!" –Hien había protestado cruzándose de brazos, enojado- "yo puedo.."

- "Tal vez tu hermana necesita más ayuda de la que puedes brindarle pequeño..."

- "¡Ella no es mi hermana, es mi mamá!"

Sakura había hecho un gesto para contener al niño mientras musitaba una disculpa por su comportamiento y el caballero había sonreído levemente...

- "No se preocupe... hubiera sido un gusto ayudar a una madre tan joven y a su pequeño..."

¡Rayos!, de solo recordar eso se enfadaba. Tipos como aquel hombre de pelo plateado mirando a su mamá todo el tiempo... ¡no podía descuidarse si quería...!

Parpadeó aturdido.. ¿Dónde estaba ahora?.

Se detuvo por unos instantes confundido y dudando de haber seguido el camino correcto. No conocía el colegio y con lo distraído que era había olvidado preguntarle a su mamá si era una escuela grande o pequeña pero miró al final de la amplia avenida con inquietud. ¿Cómo había acabado allí?, eso no parecía una escuela sinó una ciudad... una ciudad de estudiantes...

Miró de nuevo la dirección.. Parecía ser el lugar, aunque aún debía cruzar esa esquina..

Tal vez... mejor hubiera sido si su madre..

¡No, por supuesto que no!

Para ser honesto, desde que habían empezado a mudarse -dos días atrás- había empezado a lamentar el hecho de que su mamá fuera tan joven y bella. Siendo el hombre de la casa hubiera preferido tener por mamá a alguien que no provocara "esa mirada" en los hombres y la verdad era que los rivales –potenciales o imaginarios- le molestaban mucho.

Su mamá era bella como un ángel, dulce y muy gentil. Desde su más tierna infancia le había narrado incesantemente –y también por su propia petición- todo sobre su papá y el niño se sentía enfadado por no poder evitar que alguien la mirara en este país. Después de todo él había nacido en China y aunque su madre le decía que había visitado Japón al menos un par de veces cuando bebé, no lo recordaba y era para él todo muy extraño y nuevo..

- "¡No!.." –dijo en voz alta, mientras doblaba por una esquina y estiraba su puño, como queriendo golpear a algún admirador imaginario- "¡es mi mamá!"

- "¡Ay, me caigo!"

- "¡Cuidado torpe, que la bicicleta no aguanta tus torpezas!"

Hien hizo una mueca mientras una gotita surgía de su cabeza al notar que su puño había empujado a una niña que viajaba en la parte posterior de una bicicleta –que se cruzó inoportunamente en su camino- conducida por un niño de aproximadamente su edad. La niña había agitado los brazos tratando de mantener el equilibrio pero todo había sido inútil y el esfuerzo que hiciera Hien por ayudarles sólo terminó haciéndole caer junto a los otros dos chicos.

- "¿Quien rayos eres tú?, ¡quítate de encima de nosotros!"

Hien se puso de pie rápidamente y su mano se extendió para ayudarle a la niña a levantarse y mientras los ojos de la pequeña de seis años le miraban con interés, el otro niño luchaba con la bicicleta que le aplastaba antes de ponerse de pie e increparle..

- "¡Oye, tú!, ¡deja de mirar a mi hermana!! ¿porqué la empujaste?"

- "No lo hice porque quisiera, no les había visto..." –se enfrentó al otro niño pero reconoció su descuido- "lo siento mucho y.." –rápidamente notó el uniforme – "¿ustedes van al Campus Clamp?, ¿saben donde es?"

- "O eres un tonto, o no sabes que estamos frente al Campus Clamp.."

- "¡No soy tonto, pero acabo de llegar a este país!" –protestó sin notar que el niño de ojos azules le decía "en frente"- "¡y no te burles de mí! , ¡no lo sé todo!"

- "Más bien diría que no sabes nada.."

- "¿Me vas a decir donde está el Campus o no?"

- "Allí" –intervino la niña.

Hien se volvió hacia donde ella señalaba y contempló pasmado lo que antes había llamado "ciudad de estudiantes" sin poder evitar un "¡Oh!" muy expresivo en su carita infantil..

- "¿Eso es una primaria?" –dudó.

- "El Campus tiene todo... desde primaria hasta Universidad.." –explicó la niña- "mi abuelo es el Rector de la Univer..."

- "Bien, ya tienes lo que quieres... no somos guías turísticos" –el niño de ojos azules miraba aún el hermoso semblante de Hien con desconfianza- "vámonos o llegaremos tarde, torpe"

- "¡Ya no me digas torpe Mamoru....!"

- "¿Quien me hizo caerme de la bicicleta?" –preguntó- "¡ay no!, se arruinó el pedal! ¿cómo arreglaré eso ahora?, ¡ahora sí llegaremos tarde!"

Hien aún miraba asombrado el Campus pero aquella pregunta le sacó de su letargo...

- "Yo les empujo la bicicleta.." –ofreció- "fue todo mi culpa y es lo menos que puedo hacer.."

- " A ver si no me arrojas al piso otra vez.."

Ambos chicos se miraron con desconfianza pero súbitamente y después de mirar a Hien con detenimiento la niña sacó un pequeño aparatito que asombró al niño chino. Especialmente porque lo miraba todo el tiempo..

- "¿Que haces?"

- "Es que eres muy guapo.. ¡quiero grabarte!"

- "¿QUEEE?"

El niño extranjero quedó desconcertado mientras Mamoru suspiraba con resignación.

- "No te hagas ilusiones ¿eh?.. que tiene manía con grabar cosas en ese juguete y eso no significa que seas algo especial" –Hien empezaba a avergonzarse ante el interés de la niña por sus gestos- "ya ha grabado desde profesores, niños y niñas de clase, mariposas, tortugas y hasta orugas.... mi padre dice que es genético y hereditario."

Hien parpadeó azorado pero la pequeña casi pegó un salto..

- "¡Eres un niño muy lindo!"

Cabe destacar que la pequeña tenía mucha razón en lo que acababa de expresar. Aunque niño, el rostro de Hien era realmente encantador. Como consecuencia de una enfermedad de la que acababa de recuperarse tenía la piel muy blanca y pálida, pero contrastaba maravillosamente con su cabello castaño que brillaba cayendo en suaves mechones sobre su carita aquella mañana. Tenía las cejas pobladas y de un tono levemente más oscuro que su cabello confiriéndole una peculiar expresividad y profundidad a su mirada que era muy poco común en un niño; su naricita era recta y casi aristocrática y su boca se curveaba en una mueca desconcertada en ese instante que sólo lo hacía verse más adorable. Si bien sus rasgos ya eran hermosos, sus grandes ojos eran verdes como acuarios y brillaban avergonzados bajo aquella espesa hilera de pestañas largas y oscuras; ciertamente tenía una estatura promedio para sus siete años –el niño de la bicicleta era más alto que él- pero era definitivo que sus facciones eran a la vez armoniosas y finas, como una promesa a que el hermoso niño sería algún día un joven que haría desfallecer a las chicas con su sola presencia. Por supuesto, que en ese momento su cara estaba roja y no decía nada porque temía avergonzarse más...

¿Porqué esa niña le había dicho lindo?, ¡los niños no son lindos!. Eso era cosa de niñas...

Además, sólo su mamá decía que él era lindo.

Los empujones del niño llamado Mamoru hizo que finalmente ingresaran a la amplia y prestigiosa institución dirigiéndose directamente hacia las áreas escolares –que se separaban de las universitarias en el amplio portón principal, si bien cada una tenía su propia área en la ciudadela estudiantil- mismas que dejaron al pequeño recién llegado aún más asombrado...

- "¿Quién es tu nuevo amigo Mamoru?" –preguntó una niña de cabello negro y dos trenzas, que lucía una gran sonrisa al acercárseles- "nunca te había visto... ¿eres nuevo?"

- "Sí, soy..."

- "Ante todo, no es mi amigo..." –interrumpió Mamoru- "sólo se tropezó con Nadeshiko, imagina la cantidad de gente que tendría que llamar "amigo" si fuera por eso...."

Hien le miró con expresión ofendida pero al siguiente segundo se avergonzó...

La niña llamada Nadeshiko seguía grabándole.

- "Esta es una gran escuela.." –dudó con una gran gota sobre la cabeza.

- "Por supuesto que lo es... " –asintió la niña que acababa de llegar, la de la sonrisa- "es una escuela muy famosa y que se especializa en tener estudiantes brillantes. ¿Sabes que aquí hacemos experimentos científicos?" –dijo tratando de parecer confidencial- "estuve tratando de cruzar un pingüino volador con una comadreja y.."

- "¡¿Hay pingüinos voladores en Japón??!"

- ‘Por supuesto que los hay. Siempre los ha habido" –su sonrisa se amplió mientras Mamoru lanzaba un suspiro y alejaba a su hermanita Nadeshiko del pobre Hien y sin despedirse, aprovechando la locuacidad de la niña que hablaba- "... pero es secreto ¿sabes?, me dijo mi papá que hay sitios donde veneran a estos pingüinos voladores que en verdad vinieron del planeta de los pingüinos y.."

- "¡Oh!, ¡pingüinos voladores extraterrestres!"

Hien contempló el alto e imponente edificio mientras ahora un niño que pasaba arrastraba a la parlanchina niña lejos de él...

Y se quedó solo.

En su infantil ingenuidad la idea le había parecido maravillosa y en su mente casi los había "visto" pero cuando súbitamente volvió a la realidad notó azorado que estaba solo. Es decir, aquellos niños que le habían hablado se habían marchado y los grandes grupos de desconocidos a su alrededor le hicieron sentirse súbitamente tímido y vulnerable.

- "¡¡¿Dónde se fueron?!!"

Sus ojos se abrieron aún más con nerviosismo mientras se sentía confundido. Excesivamente pequeño en una escuela tan grande. Desconocido, ignorado y extranjero..

¡Y ni siquiera sabía los nombres de esos niños salvo que uno de ellos se llamaba "Mamoru" y que la otra niña que le grababa se llamaba "Nadeshiko"!

Que curioso... el mismo nombre de la mamá de su mamá.

Suspiró y sus hermosos ojos verdes parecieron dudar mientras su nerviosismo se leía en ellos claramente. Intentó preguntar a algunos niños y grupos que pasaban pero todos parecían demasiado apurados. Quizá porque la señal de ingreso a clase había sonado hace casi cinco minutos..

- "¿Necesitas ayuda?" –un niño un poco mayor que él le miró con amabilidad- "¿eres nuevo verdad?"

Hien asintió, mientras el viento agitaba el cabello castaño rojizo del niño amable que le preguntaba ahora..

- "¿Puedo ayudarte en algo?"

- "Sí. Por favor" -dijo con cortesía mientras se reprochaba haber parecido demasiado confundido.. era el único hijo de Shaoran Li, ¡No podía verse aturdido ni tonto!- "¿serías tan amable de indicarme el despacho del Director?"

- "Supongo que te refieres a la Directora de la Primaria..."

Hien negó suavemente.

- "Me refiero al Director General del Colegio... ¿hay más de uno?"

El otro chico pareció confundido.

- "Aquí hay una Directora de Primaria, que también es responsable de los niños de pre-primaria, por supuesto que el Director General del Colegio es el Director de la Secundaria y Preparatoria... porque la otra área, de la Universidad, tiene Rector y es totalmente diferente.."

Ahora Hien estaba confundido también, de modo que le mostró al otro niño una tarjeta que su madre le había alcanzado antes que se marchara -¡que suerte!- y después de una leve mirada asombrada de su guía, fue conducido finalmente a las oficinas del Director del Colegio...

- "Pasa Kia" –le indicó la secretaria- "El Director te atenderá con mucho gusto. ¿Te pasa algo?"

- "Gracias señora Takada. Por favor... ¿podría avisarle a mi madre que hay un niño que desea verla aquí?" –la secretaria asintió y Hien llamó la atención de su guía, que se volvió a verle- "¿pasa algo?"

- "Por favor superior" –repuso Hien con cortesía reconociendo que el niño que lo guiaba debía estar al menos un grado superior a él en la escuela- "¿dijiste tu mamá?"

- "¡Oh si!, por favor, discúlpame... lo que sucede es que mi mamá es la Directora de la Primaria aunque trabajó por mucho tiempo en el área de Secundaria, además ni siquiera te he dicho mi nombre. Soy Kioji Monouhi"

Hien se inclinó con perfecta cortesía..

- "Soy Hien Li, superior Monouhi.."

- "Todos me dicen Kia" –sonrió el otro niño, mientras el amplio pasillo que conducía al despacho del Director terminaba- "era el nombre de mi papá y a mi madre le agrada llamarme así. Me alegra conocerte Hien"

- "Gracias superior Kia"

- "Adelante.."

La amplia y enorme puerta del despacho del Director se abrió, y Hien se sintió amedrentado y nervioso. Después de todo, sólo tenía siete años y bien, tenía motivos para ponerse inquieto. Un enorme escritorio estaba en su campo inmediato de visión y la figura del Director estaba oculta entre...

¿Gigantescas e incontables bolsas de bocadillos?.

Un gigantesco signo de interrogación apareció sobre su cabeza..

- "¡Que agradable sorpresa Kia!" –dijo una voz detrás de las bolsas, desde el escritorio- "¿A que debo tu visita?, ¿sucede algo?"

- "No señor. Sólo que este niño es nuevo y quería verle aunque es de la Primaria. A decir verdad, la nota que tiene indica que tiene que verlo a usted y a mi madre, así que le pedí a la señora Takada que le avisara a ella.."

- "¿Un niño de primaria quiere verme?"

Hien hubiera retrocedido de buena gana pero no tuvo fuerzas de hacerlo.. una mano pálida había abierto un camino a su visibilidad en medio del bosque de bocadillos y súbitamente se encontró mirando el rostro asombrado de un hombre que debía rodear los treinta años –más o menos- cuyos ojos, protegidos por el cristal de unas gafas parecían examinar su figura con asombro y ¿alegría?..

- "¡No puede ser!" –el Director casi saltó de gusto al reconocer en el rostro del niño el parecido asombroso que tenía con otro que conoció cuando iba en la preparatoria y una gran sonrisa se formó en su rostro gentil y comprensivo- "¡es imposible!"

- "¿Se siente bien Director Tsukishiro?" –dudó Kioji Monouhi.

- "¡ES LI!" –Yukito se acercó al niño sonriéndole otra vez y apretando la mano infantil, como si creyera que era un fantasma- "... claro, claro... eres el pequeño Li" –su mirada bondadosa contempló los bellos ojos verdosos de Hien y pareció emocionado- "¡eres el pequeño Li!"

Hien empezaba a estar más que confundido.

A estas alturas se preguntaba como es que el Director sabía su apellido pues aún no se había presentado pero en ese momento se anunció la llegada de la Directora de la Primaria Clamp y la atractiva y melancólica figura de Kaho Monouhi ingresó al lugar quedando anonadada al verle.

- "¡Es imposible!, ¿Li?" –murmuró la madre de Kioji.

¡Ahora sí que Hien estaba asustado!.. ambos, el Director General y la Directora le miraban con asombro, casi como si no pudieran creer que fuera una personita real.. como si vieran a un fantasma en él. Kioji –o Kia, como efectivamente le llamaba su madre- estaba igual de aturdido y confuso que el pequeño chino pero ambas autoridades le recordaron sus clases y el pobrecito Hien se quedó allí entre ambos adultos, notando azorado como ambos Directores le miraban felices e incrédulos, mucho más después que les dijera su nombre completo..

- "Lo siento mucho Yukito.. temo que no revisé bien todos los expedientes de los ingresantes.. ¡a sido toda una sorpresa!"

- "¡Oh, no!.. ¡van a echarme del colegio!.. ¡debí dejar que mamá viniera conmigo!.. ¿porqué es tan complicado?"

- "Olvídalo Kaho.. la verdad es que todavía no puedo creerlo.. aunque me asombra que no nos haya avisado.. ¡porque si él está aquí significa que..!"

- "Disculpen.. ¿me van a echar del colegio?"

Ambos contemplaron el semblante decidido del pequeño –por supuesto que ignoraban que estaba muy asustado, pues lo disimulaba- y sonrieron, como si su sola expresión les trajera muchos recuerdos...

- "Por supuesto que no" –le tranquilizó el director Tsukishiro- "sólo que nos sorprendiste... dime pequeño Hien, ¿No ha venido tu madre contigo?"

- "No sabía fuera grave que yo viniera solo señor. Aunque ella me dijo que vendría a recogerme.."

- "¡Oh, eso es realmente perfecto!" –el Director parecía feliz- "¡es maravilloso!"

Sólo la intuición de Kaho le permitió observar que el niño empezaba a asustarse –la verdad era que tenía mucho rato asustado- y finalmente le asignó un aula a donde tomar sus clases, misma a donde Hien se dirigió lo más de prisa que pudo...

¡No fueran a cambiar de opinión y echarlo!.. aunque no entendía que había hecho mal..

- "Tal vez tiene que ver con los experimentos de los pingüinos voladores.." –pensó mientras ingresaba a su salón de clase- "sólo espero que no me llamen la atención por estar tan retrasado.. ¿porqué me preguntarían por mi mamá?"

En ese mismo momento Sakura estornudó.

La habitación estaba inundada de sol cuando ingresó y como de costumbre, sonrió divertida al contemplar algunas cosas aún sin desempacar. Ciertamente no hace mucho que habían llegado a Tomoeda y Hien había estado enfermo –por eso estaba retrasado un año en la escuela- pero nada podía disfrazar el hecho que su hijo era un poquito desordenado.

¡Y encima había olvidado su almuerzo!

Sonrió. ¡Hien era tan distraído!. Bien, quizás tenía algo de ella, aunque cada vez que lo veía le recordaba más y más a su padre. Suspiró levemente y su mirada verde se encontró súbitamente con aquella figura de felpa que descansaba en la cama de su hijo mientras su mente viajó al pasado recordando aquella vez que –siendo todavía una niña- Shaoran se lo había entregado. Su mano blanca tocó entonces la mesita al lado de la cama de su hijo al acercarse y el pequeño pero potente equipo estereofónico se encendió ante su contacto, mientras ella aún contemplaba el oscuro osito..

La música se escuchó… suave, pero dulcemente, dejando fluir sus pensamientos…

Ima anatano koega kikoeru…..................… Ahora puedo escuchar tu voz,

kokoni oidito………………............................ que dice "ven aquí"

samishisani makesoona watashini......... y sentir la soledad de haberte perdido

La mente de Sakura estaba llena de recuerdos..

Aquel oso de felpa…. la primera vez que se dijeron adiós. ¡Cuantas cosas habían pasado desde entonces!; muchos recuerdos, felices y dolorosos pasaron por su mente y suspiró contemplando el juguete con cariño. Aquel oso de felpa había estado guardado en su cajón desde que se reencontrara con Kero poco antes de la aparición del último card captor… había permanecido oculto durante la angustiosa espera a la batalla del preámbulo y la terrible noche en la torre de Tokyo, pero la joven se lo había obsequiado a Hien en cuanto el niño tuvo edad para entender lo que significaba…

Ima anatano sugataga mieru ……................. Ahora puedo ver tu silueta

aruite kuru ……………………….................... que viene caminando

mewo tojite matteiru watashini…................ y te espero con los ojos cerrados

Y Hien realmente atesoraba el osito, como todo lo que fuera referente a Shaoran.

Su padre. A quien se parecía tanto..

¡Tanto!

Kinoomade namidade kumotteta…............. Hasta ayer, las lágrimas me cegaban

korokowa ima…………………................. pero ahora el corazón…

Sus pasos se dirigieron hacia la pequeña figura de felpa, imaginando el tiempo y el trabajo que le había costado preparar el oso, recordando las dudas y temores infantiles de aquel entonces…. pensando en su imagen cuando se volvieron a ver en Hong Kong, la lucha contra el último card captor, la primera vez que las Protection Cards se manifestaron, la primera vez que se besaron en el hospital y cuando él le confesó otra vez que la amaba….

Y esta vez ya no eran niños...

Oboete imasuka me to me ga atta tokiwo ........¿Recuerdas cuando nuestras miradas se comprendían?

Oboete imasuka te to te ga fureattatoki ...........¿Recuerdas cuando nuestras manos se tocaban?

Sorewa hajimeteno ...........................................y después comenzó

Ai no tabidachi deshita .....................................nuestro viaje de amor

I love you so .....................................................¡te amo tanto!

La hermosa sensación de ser su novia. Las peleas de él con Kero y Touya que nunca los dejaban en paz, la llegada de la abuela, el primer combate en la Torre de Tokyo donde Mai Tsi murió. La angustia, las dudas….

La noche de la despedida de soltera en la Mansión Li.

Ima anatano shinsenkanjiru ...............................Ahora puedo sentir tu mirada

Hanaretemo .......................................................que no se aparta de mi

Karada yunga atatakaku naruno .......................un calor empieza a recorrer mi cuerpo

Aquella noche…. Sus besos, su ternura. La sensación de haber sido uno…

La noche en que Hien había empezado a existir dentro de ella..

Ima anatano ai shinjimasu ................................Ahora creo en tu amor

Doozo watashiwo ..............................................y yo le pido por favor

Tooku kara mimamottekudasai ........................que desde lejos lo cuide

La noche que bailaron juntos, cuando él le pidió que fuera su esposa. ¡Era todo tan claro, casi podía ver nuevamente el lugar, su propio vestido!!

Y él.

El, en la torre de Tokyo esa noche horrible, con su traje ceremonial ensangrentado…

Kinoomade namidade kumotteta .....................Hasta ayer las lágrimas me cegaban

Sekaiwa ima .....................................................pero ahora el mundo..

- "Tú nunca estarás sola Sakura. Siempre, siempre estaré contigo…"

Oboete imasuka me to me ga atta tokiwo......... ¿Recuerdas cuando nuestras miradas se comprendían?

Oboete imasuka te to te ga fureattatoki ............¿Recuerdas cuando nuestras manos se tocaban?

Sorewa hajimeteno ............................................y después comenzó

Ai no tabidachi deshita ......................................nuestro viaje de amor

I love you so ......................................................¡te amo tanto!

Súbitamente y sin una palabra abrazó a la inanimada figura de felpa en ese instante, como si quisiera atrapar los recuerdos en aquel gesto, cerrando los ojos…

Moo hitori bocchijanai ........................................ya no estaré sola

Anataga irukara .................................................ahora que tú estás aquí….

- "¡No quiero estar sola!, ¿Acaso no puedo salvarte?!"

- "Eres lo que más amo en el mundo… y más allá"

Oboete imasuka me to me ga atta tokiwo ...........¿Recuerdas cuando nuestras miradas se comprendían?

Oboete imasuka te to te ga fureattatoki ..............¿Recuerdas cuando nuestras manos se tocaban?

Sorewa hajimeteno .............................................y después comenzó

Ai no tabidachi deshita .......................................nuestro viaje de amor

I love you so ......................................................¡te amo tanto!

Abrió los ojos y volvió a ver el oso. Pero ahora notó también en la mesa de su hijo, su propia imagen, años atrás. Un retrato… una imagen donde estaban los dos, juntos..

Moo hitori bocchijanai .........................................ya no estaré sola

Anataga irukara ..................................................ahora que tú estás aquí….

Era la fotografía favorita de Hien, realmente la que más le gustaba. Su recordada Byakko había tomado muchas antes de la Batalla del Preámbulo, pero aquella era la favorita de su Hien. Rodeados por un amplio follaje, su propia imagen con una gran sonrisa, la mirada soñadora y aquel vestido azul celeste que la hacían verse casi infantil… y Shaoran a su lado, rodeándola con un brazo, casi como protegiéndola, con su mirada brillante y decidida….

¿Cómo no se dio cuenta en ese entonces de que iba a defenderla aún a cualquier precio?.

Moo hitori bocchijanai ........................................ya no estaré sola

Anataga irukara .................................................ahora que tú estás aquí….

- "Como quiero estar contigo Shaoran.." –susurró.

- "Señorita Sakura.." – llamó Wei cortésmente a la puerta en ese instante, sacándola de sus recuerdos y pensamientos, igual que esa misma mañana- "temo que tenemos un pequeño problema.."

- "¿Problema?" –parpadeó aturdida.

El rostro del anciano era casi hermético.

- "Sí. Acaban de traer para usted un envío de rosas rojas… aunque no tienen remitente"

La antigua card captor quedó perpleja por unos instantes casi incrédula, y después de besar suavemente el osito de felpa que ahora cuidaba los sueños de su hijo, se dirigió hacia el salón principal…

Donde efectivamente incontables rosas rojas continuaban llegando incesantemente…

- "¿Qué significa esto?" –murmuró azorada, casi moviendo sus brazos exageradamente- " ¡debe ser un error!, ¡esto es un disparate!".

- "Bien… Dama Sakura es muy modesta" –cuchicheó la chica del servicio doméstico, muy divertida ante la reacción de su señora- "¿acaso no puede creer que sean para ella?"

- "¡Lin Yi!" –se escandalizó el muchacho que había salido de la biblioteca, muy agotado después de ordenar los libros según las exigencias de Wei- "¿Cómo se te ocurre?, ¿sabes lo que pasaría en el Clan si se supiera que alguien le envió rosas a la Dama Sakura?"

- "Pues no me sorprende para nada. Nuestra señora es demasiado linda, ya viste que en aeropuerto la gente pensaba que era hermana mayor del señorito Hien.. ¡los hombres no le quitaban los ojos de encima!"

- "¡Por favor, no sigan dejando esas flores aquí!, ¡yo no puedo aceptar rosas!, ¡no puedo!" – decía Sakura, aún sin creer lo que ocurría.

- "Lo único bueno de todo esto.." –murmuraban los chicos del servicio doméstico con un brillo en los ojos- "es que el señorito Hien no está aquí.."

El pobrecito de Hien tenía una gran gota sobre la cabeza en se mismo momento..

- "Supongo que por ser primer día, te excusaré la tardanza.." –decía su profesora mecánicamente, antes de volverse a verlo- "pero realmente espero que no se te haga costumb.."

La maestra parpadeó y sus anteojos casi se le caen por el asombro…

- "¿Qué?" –balbuceó.

- "Lamento mucho la tardanza…"

Naoko permaneció dubitativa y buscó los documentos del pequeño recién llegado antes de murmurar muy bajo..

- "¡Vaya!,… Hien Li y llegando tarde… ¿porqué no me sorprende?"

- "¡Esto es horrible!" –pensó el niño- "nunca más volveré a quedarme dormido y menos a perderme… ¿acaso soy el estudiante más retrasado en todo el colegio?"

De hecho, la única persona más retrasada en ingresar a clase en todo el Campus Clamp de Tomoeda se encontraba en ese mismo instante en la secundaria y provocando un gesto de incomodidad en su mejor amigo..

- "Igual… todos los días es lo mismo. Corremos y llegamos a tiempo pero.. ¿porqué siempre soy el último en llegar?" –murmuró Tao en voz baja mientras dejaba su maletín escolar en su pupitre- "esto no es justo"

- "Si no perdieras el tiempo hablando con todo el mundo en lugar de ingresar a clases directamente, te evitarías esto" –murmuró Rei desde su lugar- "además, si me hubieras avisado que te notificaron que estabas de servicio te hubiera apurado más..".

Tao suspiró y se dispuso a cumplir sus deberes. ¿Cómo mencionarle a Rei algo que él había olvidado?, ¡que día!. Justamente su mirada gris se perdió por la ventana una vez más y por un instante pensó en lo que estaría pensando Eriol en ese momento..

- "Al final este resulta ser también un día difícil para mí.."

* * * * * * * * * * *

La colina estaba bañada por el viento y el cielo azul parecía extrañamente límpido. El camino a la colina estaba totalmente despejado y aún se podía apreciar hermosas flores en el sendero pero la mente de Eriol vagaba incesantemente desde aquella mañana preguntándose en lo que hubiese ocurrido si aquel instante hubiera sido diferente..

Si las cosas hubieran sido diferentes…

No podía evitar pensarlo…

Ocho años. Parecían mucho tiempo, pero a la vez sentía que no eran suficientes. La vida en la embajada no era aburrida pero los amplios salones y el lujo que le rodeaba empezaba a hastiarle y ciertamente no tenía ganas de volver a un lugar que no se diferenciaba demasiado de un hotel perfectamente organizado, pero impersonal y frío..

No había una sonrisa cálida, ni regañinas, ni aquellos enormes ojos grises llenando todo con su presencia. Se había negado a llevar la misma vida de Clow y sin embargo allí estaba: una persona solitaria unido a una dama aristocrática, muy del gusto del ambiente donde había sido educado pero que no le decía nada a su sensibilidad… Salones y recepciones. Fríos silencios sintiéndose extraño en su propia casa.

Todo el tiempo sonriendo, cuando se sentía vacío…

Fingiendo…

Acaso era lo que le quedaba.. ¿fingir?

Su mente voló y la pregunta estalló nuevamente en él..

¿Y si todo hubiera sido diferente?. Aquel instante… aquel segundo en las puertas de la eternidad… Tsu Chin arrastrándola… sus ojos grises llenos de lágrimas…

Aquella vida vacía, aquel dolor que ningún viaje o diversión podía acallar…

Suavemente y con un leve toque nostálgico pudo escuchar una voz suave..

Daisuki datta ano uta ......................... Mi canción favorita...

furui TAPE no naka .......................... está en una vieja cinta

ohiisana kizui iro aseta TITLE.......... un poco raída y con el título

ninjinda yoake.................................... de colores marchitados

soshite mata kyou ga kuru ................ Veo la salida del sol borrosa y el día empieza

natsu no kaze o tsurete ..................... Me siento sola de repente...

Aquella melodía en su mente borró los ocho años transcurridos en milésimas de segundos. Ya no era Eriol Hiragizawa, Secretario de Cultura de la Embajada Inglesa en Japón sinó otra vez sólo un joven de veinte años olvidando ya que era la reencarnación de Clow, escondido entre unos arbustos mientras una figurita pequeña y blanca se perdía entre las sombras del atardecer del jardín de la Mansión Li, cantado aquella canción..

nareteiku hibi no katsumide............... Mientras me acostumbro a mi nueva vida

futo kodoku......................................... con la brisa del verano

jiten shade ......................................... Montada en mi bicicleta

dokomademo ..................................... yendo a alguna parte de aquí

kaze o keru hayasa wasurenai ......... nunca olvidándome cómo pasa rápido el viento

Sus manos apretaron casi convulsivamente el ramillete de rosas blancas que tenía mientras casi podía ver el cabello larguísimo y ondeado de la chica agitándose en una espesa cortina brillante.. ¡tan cerca!..

Como si el tiempo no hubiese pasado…

La la la la utaou sora o miagete......... La La la la cantando una canción, admiro el cielo

La la la la IT'S MY LIFE.................. La La la la es mi vida

aruite yukoo...................................... que quiero guardar en este sendero

watashino chikana de susumu ......... Es el camino interminable exclusivo en que paseo

hateshinai kono michio .................... totalmente solitaria

La placa le había importado un ardite aquella tarde y ya ni siquiera recordaba porqué estaba en el jardín de la Mansión Li: sólo existía aquella sensación, aquel incontenible deseo de abrazar a aquella muchachita que había cantado suavemente que estaba preparada para estar sola...

Soledad…

ikutsu mono kousaten ..................... En las incontable travesías

itsumo mayoukedo .......................... siempre me pierdo

nagasaretari oikosaretari.................. manejo sorteando los arroyos

shite ima mo ikiteru........................ de las personas que siguen delante mí

butsukaru koto ................................ No me olvidaré

mitumeru koto ................................ lo importante que es encontrarse con otros

otona ni hattemo wasurenai ............ y aceptarlos como son ellos para crecer

La la la la utaou sora o miagete ….. La La la la cantando una canción, admiro el cielo

La la la la IT'S MY LIFE................. La La la la es mi vida

aruite yukoo..................................... que quiero guardar en este sendero

Su canción favorita..

Todavía podía verla ya ante las sombras nocturnas, con su vestido resaltando en la noche y la luna asomándose débilmente.. inclinada sobre el estanque que reflejaba su mirada…

Su decisión…

¿Qué hubiera pasado si…?

watashi dake no mono dakara ...... Estoy segura que ésta es la manera de ir adelante

jishin motte iiyone.......................... porque es mi propia decisión

Umereta machide yume mitekita... El sueño que tuve, en la casa de mi pueblo

kujikeru tabini omoidasu .............. es lo que recuerdo cuando me siento nostálgica

ano uta no youni............................ simplemente me gusta lo que dice la canción

ima dekiru kotowa sukoshi............ Todo lo que puedo hacer ahora

demo maeni fumidasu koto........... es dar un paso, poco a poco,

En el camino bañado por la luz del día Eriol volvió al presente y se estremeció sin poder evitarlo… no, no quería pensar así…

¡Era espantoso!

La la la la utaou sora o miagete ... La La la la cantando una canción, admiro el cielo

La la la la IT'S MY LIFE.............. La La la la es mi vida

aruite yukoo................................... que quiero guardar en este sendero

La la la la utaou sora o miagete…. La La la la cantando una canción, admiro el cielo

La la la la IT'S MY LIFE ............. La La la la es mi vida

aruite yukoo................................... que quiero guardar en este sendero

Apretó las flores otra vez en sus manos y sin pensarlo poco ni mucho casi corrió hacia la cima de la colina, súbitamente tenía mucho miedo, un miedo terrible e inexplicable, una opresión en el pecho y el temor súbito…

Lo que más había amado…

watashino chikana de susumu ..... Es el camino interminable exclusivo en que paseo

hateshinai kono michio................. totalmente solitaria... sola.

¡Si, lo que más amaba!

Sus brazos rodearon la cintura estrecha de la persona que estaba rezando ante la blanca tumba y sin importarle nada ni nadie, la estrechó contra su cuerpo con fuerza, aspirando el perfume de su cabello casi con desesperación, como si temiera que se perdiera en un espejismo… un espejismo que le arrojaría a la horrenda visión de un futuro que no quería, cuyo sólo pensamiento le había llenado de miedo. No le importó que las flores se arrugaran, o que algunas de las espinas se clavaran en sus manos. Hubiera sido capaz de retenerla allí, en sus brazos por siempre, de no dejarla escapar nunca…

Nunca…

Todavía estaba en su mente aquel instante en que la había retenido en sus brazos con fuerza mientras las lágrimas se deslizaban, amargas por su rostro, aún sin creer en lo que pasaba. Mirando aquel rostro pálido y contraído por el dolor pues en el medio del cuerpo de la chiquilla una mancha carmesí se extendía, más veloz a cada segundo, tan rápidamente que parecía imposible. El momento en que había recibido aquella hoz en su cuerpo… por él.

- "¡Eriol me estas asfixiando!"

La suave voz intentó volverle a la realidad pero no pudo lograrlo, de hecho el hijo de Hajime Hiragizawa no la soltó hasta besarla profundamente, dejándola aturdida y tan colorada como una cereza antes de que aquellos almendrados ojos grises buscaran los azules casi con inquietud..

- "¿Qué sucede?, ¿qué pasa?"

- "Tuve una visión horrible de lo que hubiera pasado si te hubiera perdido hace ocho años…" –murmuró, aún reteniéndola contra sí- "fue tan sólo una idea, pero no me gustó… ¡fue espantoso!" –tomó su barbilla con delicadeza obligándola a mirarlo- "además… esa canción: sé que es tu favorita, pero me recuerda tanto esa noche…"

Yoko abrazó suavemente a su esposo, sintiéndolo temblar junto a ella..

- "Creí que te gustaba también la canción… tú y Tao se la pasaron comentando eso anoche y bien que te reíste… ¡pensar que ese pillo de Tao te había estado viendo en el jardín detrás de mi todo el tiempo, mientras yo hacía mi brillante confesión aquella vez!"

Aquel recuerdo hizo sonreír a Eriol.

- "Bien, hay algo que debemos reconocer… Tao tenía mucho talento para hacerte hablar de lo que no querías cuando tenía cinco años. Además no es la canción lo que me molesta…."

Ambos empezaron a reír pero fue entonces que Yoko Hiragizawa notó con inquietud las gotas de sangre en las manos de su esposo producidas por las espinas de las rosas que había llevado hasta la colina y que aún sostenía..

- "¡Eriol, mira tus manos!"

- "¡Bah!, no es para tanto.." –rió complacido al ver la inquietud de ella- "además la idea que trajera rosas blancas fue tuya…"

Su esposa hizo un mohín de disgusto en su rostro bonito.

- "Que las trajeras en son de paz. No que te lastimaras.." –pidió mientras limpiaba las heridas con su pañuelo- "y no lo digo por las flores.." –le atajó antes que él saliera con una de sus bromas- "lo digo por tus manos… bastante trabajo me tomó hacer que a las mías se les quitaran esas marcas de quemaduras y cicatrices como para ahora tener que preocuparme por que se te arruinen las tuyas con sangre.."

- "Mejor mi sangre y no la tuya.."

- "Totalmente de acuerdo.."

Un gesto de contrariedad se dibujó en el rostro apuesto de Eriol mientras Yoko volvía el rostro hacia el fantasma que acababa de presentarse y le sonreía con gratitud…

- "Me alegra que hayas venido.." –saludó pese a la incomodidad de su esposo- "justamente empezaba a preocuparme… incluso la traje aquí, sólo que se quedó dormida.."

- "Gracias Yoko"

- "No, gracias a ti. Si no fuera porque tú moriste por nosotros esa noche no hubiera vivido para ser feliz ahora y mucho menos para tener todo lo que tengo" –se volvió hacia Eriol, como pidiéndole paciencia- "iré a traerla…"

La hermosa figura de mujer de Yoko descendió un poco por la colina, buscando algo entre los arbustos y flores mientras el fantasma de Tsu Chin y Eriol se quedaban mirándose en súbito silencio…

- "Me alegra ver que es feliz.." –murmuró el fantasma, mirando la figura de quien fuera su mortal enemigo con calma- "aunque me asombra que estés aquí."

Eriol se encogió de hombros. Aquel era un día muy pesado para él cada año aunque…

- "Ella tiene razón. Si no te hubieras arrojado a la puerta que separa la vida de la muerte en lugar de pelear como esperábamos, las cosas hubieran sido diferentes… justamente pensaba en eso mientras subía hasta aquí. Todavía me pregunto porqué no intentaste matarme en ese lugar… ni siquiera Tao es capaz de comprender porqué lo hiciste. Habías llegado demasiado lejos para destruirme y prácticamente moriste por nosotros, usando tu escaso poder para darnos las fuerzas suficientes para aferrarnos a la vida.."

- "Supongo que es irónico que haya podido al fin lograr manejar la magia blanca y negra en el momento de mi muerte" –filosofó el fantasma- "pero entendí lo que mi encarnación anterior nunca aprendió. No se puede manejar ambos si tienes el alma llena de sentimientos negativos. Yo ya tenía magia negra pero manejar ambos tipos de magia requiere un desprendimiento que no poseía Soté De Danann. Además tu sabes muy bien porqué lo hice"

Eriol asintió mientras en sus ojos azules chispeaba la respuesta..

- "Hubieras hecho lo mismo de haber estado en mi lugar.. ¿verdad?" –preguntó Tsu Chin.

- "Sí, pero nunca quise romper el equilibrio de la magia del mundo para ayudar al Kamui Oscuro y debes comprender que era lo menos que esperábamos de ti"

El fantasma no respondió. Sólo miraba a lo lejos como Yoko sostenía a algo pequeño y gracioso en sus brazos…

- "Supongo que sí" –respondió el espíritu de Tsu Chin con un gran suspiro resignado- "pero tal y como dije esa noche, hubiera sido capaz de destruir a todo el mundo por acabarte… menos a ella. Y tú sabes que por eso lo hice. ¿O pensaste que quise salvarte a ti?"

Eriol sonrió con leve ironía..

- "Claro que no"

- "Ya me habías vencido" –aceptó Tsu Chin sin molestarse- "y finalmente mi poder no tenía nada que hacer con el tuyo pero Yoko siempre tuvo razón en el hecho que había que cambiar lo que en el pasado estuvo mal. El problema era que no podía matarte después de saber que ella te amaba porque eso la hubiera hecho sufrir"

- "Tampoco pensaba dejarme matar.."

- "Por supuesto que lo noté pero ella te protegió sin importarle su propia vida y cualquier intento de matarte era sinónimo de matarla a ella… créeme, no me hubiera importado morir por matarte pese a que no me quedaba poder, pero contra ella no puedo... es lo único que me hizo detenerme por algo... o hacer algo que nunca creí que haría"

- "Genial.. ya somos dos" –murmuró pensando en lo mucho que su esposa le había implorado estar allí ¡charlando con quien quiso asesinarlos!.

Pero ya habían pasado ocho años..

- "Matarte a ti era lo que quería, pero la mataba a ella" –continuó el espíritu- "Y matarla a ella era matarte a ti, pero no podía sacrificarla… por eso preferí morir yo en su lugar. Tu no podías hacerlo.."

- "Sabes bien que estaba dispuesto a hacerlo o seguirla hasta la misma muerte… pero ese acto de desprendimiento te dio oportunidad de redimirte... ¿no?. Tal vez no eras tan perverso como nosotros creíamos..."

- "Supongo que no... No lo sé. Pero ella siempre fue lo único importante para mí y parte de mi odio contra ti siempre tuvo que ver con eso. Te sonará ridículo, pero pese a todo yo la amé desde la primera vez que la vi.." –suspiró y Eriol se sintió profundamente incómodo porque ese fantasma hablaba de su esposa- "es absurdo que alguien como yo hubiera amado a primera vista pero no negaré que me sorprendió que un chico mimado como tú estuviera dispuesto a seguirla hasta el más allá" -quedó pensativo y había cierto dejo de resignación en su voz- "sin embargo ya no me teme y su gratitud es suficiente para mí.. ¿acaso no hubieras hecho lo mismo?" –repitió.

Eriol asintió en silencio… sí, efectivamente, si las cosas hubieran sido diferentes hubiera sido él quien hubiera muerto, lo que sea para que ella no muriera, pese a que la muchacha había recibido aquella mortal herida por protegerlo. Sin embargo aún no podía entender porqué Tsu Chin les había ayudado en el último segundo. No por él, eso era seguro. A él no le había importado vivir si ella no sobrevivía pero el siamés la había salvado a ella, le había implorado que rezara por él antes de dejarse caer a la puerta de la vida y la muerte..

Y en último conjuro, pasarles a ambos las últimas fuerzas que le quedaban…

Tsu Chin le había ayudado pese a que le odiaba, pero por ella… después de todo, ella no hubiera podido soportar que él, Eriol, muriera en ese combate. Lo había probado al protegerlo con su vida ¿no?. Para Tsu Chin no había opción… si realmente quería salvarla, tenía que morir por ella, y a la vez ayudar a la persona que más odiaba.

- "¿Cómo puede la muerte salvar a alguien?" –había dicho entonces Eriol con profunda tristeza.

Es que era extraño. En aquel momento había sentido autentica piedad por el siamés. Yoko había llorado, pero Eriol no había podido comprender lo que ahora era patente, porque aún para alguien que ha tenido tanta oscuridad en el alma… si hay una chispa, algún sentimiento realmente bueno.. aquel sentimiento puede salvarte.

O brindarte la oportunidad de redimirte, y eso ya lo entendía.

Aunque por supuesto, eso no le quitaba la incomodidad presente… ¡ese fantasma seguía enamorado de su esposa!. Y como si pudiera sentir su molestia el espíritu dejó de mirar a la señora Hiragizawa y contempló a Eriol con irritación.

- "Tienes que hacerla feliz ¿te quedó claro?" –replicó casi como una amenaza, pues el pensar en la joven china en los brazos del inglés no contribuía a mejorar las simpatías entre Eriol y él- "puede que tengas de tu lado a ese pillo de su hermano pero si le haces daño, si la haces llorar aunque sea sólo un espíritu ¡yo te juro que....!"

Por un instante pareció que el fantasma realmente esperaba sólo una excusa para volverse contra el inglés, pese a la amplia diferencia de poderes..

- "Lo siento mucho" –la llegada de Yoko interrumpió la charla- "pero se quedó dormida.. ¿no te molesta?"

- "Quizá sea lo mejor" –murmuró el fantasma- "no quiero asustarla.."

La señora Hiragizawa sonrió y su esposo la ayudó con un gesto divertido en su rostro cargando en sus brazos a una encantadora niña de seis años que lucía un brillante y ondeado cabello oscuro, mientras Tsu Chin lo contempló con un dejo de envidia …

Pero Yoko era feliz, y eso era lo único que le importaba.

- "Se parece mucho a ti Yoko. Es hermosa.."

- "¿En serio te parece?" –sonrió la aludida- "si todos dicen que Miriel se parece más a Eriol…."

El fantasma y su antiguo enemigo se miraron fijamente antes que el espíritu suspirara..

- "Realmente preferiría que se pareciera a ti Yoko"

La joven mujer sonrió y su mirada gris contempló a Tsu Chin con gratitud antes de ofrecerle despertar a la niña –el fantasma había pedido conocerla- pero el espíritu se despidió con una leve sonrisa y murmuró que tenía que volver a cumplir su expiación…

- "Gracias otra vez, por rezar por mí este día del año.." –le dijo a ella a modo de despedida- "tus oraciones y gratitud han sido muy importantes …"

El espíritu se desvaneció dejando a un Eriol mucho más contento y satisfecho que en lo que iba del día pero Yoko pareció dubitativa por largos instantes antes de volverse a la alta figura de su esposo con una leve sonrisa..

- "Esta vez se fue muy pronto y casi me arrepiento de haberlos dejado solos tanto rato.¿De qué hablaron?"

- "De ti. ¿Qué otra cosa más podemos hacer?" –suspiró- "pero fue culpa tuya.. mira que dejarnos solos tanto rato y sabiendo que no soy de las personas favoritas de ese fantasma."

Aunque había una sonrisa en sus labios al decirlo.

- "Lo siento, es que realmente sería bueno que ustedes dos dejaran de mirarse como si aún fueran enemigos mortales Eriol, yo le estoy muy agradecida por lo que hizo"

Su esposo rodeó su talle con una sonrisa teniendo cuidado de no despertar a la niña mientras pensaba en lo horrible que había sido imaginar su vida sin su esposa y todo lo que ella había cambiado en él. Es decir, seguía siendo el mismo –al punto que Yoko se la pasaba siempre regañándole para que tomara las cosas más en serio aunque a él le divertía mucho mortificarla- pero finalmente se sentía completo y satisfecho, más realizado de lo que nunca se había sentido en el pasado, como si hubiese encontrado aquella parte de sí que faltaba. Aquellos enormes ojos grises, llenándolo todo con su presencia y ni que decir de su única hija. Tan parecida a él, pero también a Yoko.

- "Supongo que Jeff se enfadará conmigo por haber hecho que se fuera tan pronto" –rió súbitamente feliz- "¿crees que deba enviarle alguna revista para adultos a modo de disculpa?... de esas que ya están agotadas. Tal vez pueda sacar algunas de la habitación de Tao"

- "Por favor, no me digas que Tao aún no ordena su habitación… ¡necesito un mapa para ingresar allí!" –rió ella- "de no ser por Rei, dudo que pudiera llegar a la escuela antes de que la última clase terminara.." –miró a su esposo, divertida- "realmente creo que debes llamar a Jeff… aunque el hecho que Tsu Chin se halla marchado no significa que vuelva a aparecerse ante nuestro amigo.."

Eriol sonrió risueño mientras pensaba divertido en la gran ironía del destino. Tsu Chin, ahora fantasma, tenía que hacer buenas obras durante veinticinco años antes de ser aceptado en el mundo de los espíritus –de los buenos, es decir- salvo el día de su muerte que podía hacer lo que quisiera y que ocupaba en visitar a Yoko; aunque lo más irónico era que tenía que pasar aquellos años ayudando a alguien que perteneciera a la casta de su encarnación anterior -puesto que muchos de sus crímenes tuvieron que ver con su obsesión con el Druida Negro e incluso había sido poseído brevemente cuando casi apuñaló a Yoko con esas hoces de oro- ya que su casta, la familia Chin de Siam se había extinguido. Por eso tenía que ayudar a alguien que poseyera sangre druida pura para alcanzar la paz consigo mismo como Tsu Chin, y ayudando a alguien del mismo origen que Soté De Danann.

E irónicamente esa persona, había resultado ser Jeff O’ Neill.

Después de todo y aunque no era practicante de la religión de su familia, el padre de Jeff había sido Gran Maestre de los Druidas.

¡Eso sí era gracioso!

Eriol contuvo la risa a duras penas mientras descendía lentamente la colina con su familia pero su esposa tenía otras cosas en mente..

- "¿Qué imaginaste que hubieras hecho si yo hubiera muerto?"

- "¡Oh Yoko, olvídalo!... fue sólo imaginación, pero fue desagradable.."

- "¿Te imaginaste casado?"

El hijo de Hajime Hiragizawa soltó una divertida carcajada.

- "¿Qué dirías si te digo que me imaginé con el mismo puesto en la embajada que tengo pero casado con una aristocrática mujer, fría y sólo pendiente de la etiqueta?... ¿te enfadarías?"

- "¿Lo hiciste?"

- "Eh…" –empezó a sudar- "es una pena que Miriel haya perdido su primer día de escuela por las peticiones de este fantasma… ¿y si la llevamos a recoger a Tao cuando terminen las clases?"

- "¡Eriol, no me has contestado!"

- "Mira, mejor dejemos a la niña en su habitación y vamos a dar una vuelta por allí…"

Su esposa le miró fijamente…

- "No me cambies el tema…además, ¿a qué lugar "iríamos a dar una vuelta" según tú?" –se cruzó de brazos no enfadada, pero si dispuesta a poner en apuros a su atractivo marido- "sabes muy bien que a mí no puedes engañarme…. ¿te arrepentiste o no de que Tsu Chin hubiera muerto por salvarnos a ambos?"

Eriol sonrió con inocencia. Una réplica de sus sonrisas infantiles que siempre escondían mil maquinaciones...

- "Si me ayudas a dejar a la niña en su habitación.." –le guiñó el ojo con picardía- "podemos encerrarnos en la nuestra y ya verás si estoy arrepentido o no de que estés conmigo.."

Pese a que llevaban casi siete años de casados el rostro de Yoko se puso como el carmín pero su esposo la tomó de la cintura antes que se le escapara inmediatamente después de que dejaron a la niña en su habitación…

- "¡Pero Eriol!.. ¿y si el embajador pregunta por ti?, ¡tienes que bajar al despacho de su Excelencia!, ¡ya deberías estar allí y yo también y..!"

- "¡Bah, olvídalo!" –la empujaba ya hacia su aposento- "si pregunta por nosotros lo hechizo y punto…"

- "¡Eriol, no debes volver a hechizar a tu jefe!"

- "¿Y porqué no?.. ¿no querías tú saber si estaba o no arrepentido de haberme casado contigo?"

Yoko protestó ahogadamente antes que los labios de su esposo le impusieran silencio, cerrando la puerta de su habitación tras de sí….

* * * * * * * * * *

- "¿Acaso te parece gracioso?"

La risa de Mei Ling se escuchó muy claramente por el auricular pese a que llamaba desde China y a Sakura le surgió una gotita sobre la cabeza…

- "¡Por favor Sakura!, ¡pero es que es muy gracioso!"

- "A mí no me lo parece" –dudó la antigua card captor- "mira que tener todo el salón lleno de rosas ¡y sin saber quien me las envía!.. ¿te imaginas lo que hubiera pasado?"

- "El pequeño Hien se hubiera indignado de haberlo sabido" –Mei Ling se reía- "pero.. ¿de qué te asombras?.. quizá sean de algún admirador…"

- "¡Mei Ling!, ¡yo no tengo admiradores!" –se sofocó- ¡.. sabes muy bien que Shaoran siempre será el único hombre de mi vida!"

- "Eso ya lo sé" –asintió sin asombrarse- "pero si…"

- "¡Mei Ling por favor!"

Al sonido de la otra voz cerca al auricular, Sakura suspiró aliviada. Después de algunas risitas burlonas de Mei Ling y algunos murmullos se sintió mucho más tranquila al escuchar la siempre serena y pausada voz de Hin Lu por el teléfono…

- "Investigaré en este mismo instante ese asunto de las rosas.." –dijo con su acostumbrada eficiencia, como si estuviera a un paso de ella y no desde China- "sólo dile a Wei que me haga llegar la tarjeta por la señal del Concilio y me encargaré de todo. A todo esto Sakura, no hay ningún problema allí ¿verdad?..... porque de lo contrario puedo enviarte una escolta y.."

- "No Hin Lu, no te preocupes…. Sólo estoy de regreso en el lugar donde pasé mi infancia.. ¿Qué podría estar mal?" –rió.

- " Lo que pasa es que mi esposo tiene malos recuerdos de Japón y sabes que siempre se lo toma todo muy en serio" –rió Mei Ling, arrebatando el auricular a Hin Lu, que protestó ahogadamente por eso- "¿y donde está Hien que no saluda a su tía?, mira que Kei Lang lo extraña mucho…"

Kei Lang –Kei para sus amigos- era el hijo mayor de los tres que tenían Mei Ling y Hin Lu. Un niño alto y vivaz de seis años, que ciertamente se veía como si tuviera siete u ocho por su notable vivacidad.

- "Mei Ling por favor" –suplicó Hin Lu, recuperando el auricular- "dime Sakura... ¿está todo bien ¿verdad?"

- "Si, en serio. Descuida. Sólo que eso de las rosas me puso nerviosa… pero" –su voz se tornó levemente inquieta- "¿Y cómo está todo en el Concilio?"

- "Tal y como lo esperábamos… hay cierta resistencia en pasar la sede a Japón Sakura, pero descuida. Todo será como estaba programado… "

La joven sonrió levemente sintiéndose satisfecha al saber que todo iba como lo esperaba. El asunto del traslado de la sede del Concilio había tomado años pero finalmente estaba de vuelta y con Mei Ling y Hin Lu ultimando los detalles, todo estaría bien y muy pronto…

- "¡Nos vemos pronto Sakura!" –se despidió Mei Ling, tan risueña como siempre provocando una leve sonrisa en la joven.

La risa que escuchó en el auricular antes que la comunicación terminara la hizo volver a pensar en Mei Ling y su esposo. Hin Lu era ahora consejero y Guardián del Clan por derecho propio y ciertamente nadie hubiera sospechado que uno de sus brazos era una sofisticada prótesis pues la textura era realmente piel. Es verdad que el joven había temido que los sentimientos de Mei Ling por él se volvieran compasión por la terrible consecuencia de la Batalla del Preámbulo pero la joven china le había hecho entender lo mucho que lo amaba sin dejarle dudar más. Si a eso añadimos que por las acciones de Hin Lu no sólo se habían casado sin oposición del Clan sinó que incluso el Concilio le devolvió al secretario el apellido Li, y la posición que ganara por fidelidad y sangre era suya sin discusión, además de línea familiar.

Suspiró levemente e intentó realizar otra llamada telefónica pero la línea estaba ocupada, así que decidió finalmente hacer saber a su familia y amigos que había regresado...

- "Ojalá a Hien le vaya bien en la escuela... ¡seguro que Yukito estuvo feliz de verlo!, me pregunto si habrá encontrado a alguien más que yo conociera allí…"

* * * * * * * * * *

- "La comida aquí es muy buena.." –asintió Hien con una sonrisa algo forzada- "aunque me pregunto que me habían enviado en el almuerzo..."

- "¿Verdad que sí?.. ¡ay!"

La hermosa niña se estrelló nuevamente en el piso sin que ninguno de los niños que acompañaban a Hien moviera un solo músculo, mientras el pequeño niño chino elevó a nueve mentalmente las estrelladas de Nadeshiko..

- "Oye... justamente quería preguntarte algo" –dijo ayudándola a levantarse- "la profesora Yanawa te llamó Kinomoto y mi mamá se llamaba así antes de..."

- "La profesora Yanawa conoce a la familia de Nadeshiko y a la mía hace mucho tiempo" –asintió la misma niña de las trenzas de la mañana, la de los pingüinos voladores- "al igual que a los papás de Otaru, ¿no es cierto?"

- "Sí, y por eso siempre me castigan a mí cada vez que tú dices mentiras Misa" –protestó Otaru Terada, con una expresión curiosamente madura en su carita- "¡que día!... como la vez que te pusiste a decir en clase la mentirota aquella de los pingüinos voladores y.."

Hien se detuvo y miró a Otaru en seco..

- "¿Era mentira?"

- "Sí" –suspiró resignadamente el otro- "Misa siempre cuenta en la escuela las mentiras más grandes del mundo... mi mamá dice que su papá siempre hacía lo mismo.."

Misa Yamazaki le dio al hijo de Rika e Idomu Terada un gran pellizco y el niño se quejó, mientras Nadeshiko reía..

- "La profesora Naoko también ha sido compañera de escuela de mi mamá" –dijo la hermana de Mamoru- "el año pasado que tuvo a su bebé mi mamá le regaló el ajuar más lindo que yo haya visto. Mi mamá tiene una revista infantil y hace moda para niños, mi papá es médico... ¿eso querías saber?"

- "No, yo me refería a que la profesora Yanawa se rió mucho cuando me vió y me miraba como si me conociera lo mismo que el Director General y la Directora, además tú te llamas Kinomoto y ese es... ¡cuidado!"

Es que por prestarle atención a Hien, Nadeshiko dio un mal paso y resbaló pero el niño chino esta vez fue más rápido. Como un acto reflejo sostuvo a la niña por la cintura antes que se cayera...

- "¡Uy, que listo eres!, ¡evitaste que se cayera otra vez!"

- "Eso es muy bueno... y de caballeros" –murmuró el pequeño Terada.

- "¿Verdad que sí?"- murmuró Nadeshiko.

Hien estaba sudando. Tenía a la niña aún por la cintura y a medio camino del piso, ¡pero nadie parecía ayudarle!..

- "Oigan.."

- "Miriel es la mejor amiga de Nadeshiko y siempre y trata de evitar que se lastime pero al menos ya cuenta con ayuda extra..."

- "Aunque Miriel no vino hoy a la escuela..."

- "Pero no podemos olvidar también a..."

- "¡Oigan, ¿se van a quedar mirando?!, ¿no me van a ayudar?!"

- "¡TU!, ¡¡¡¡¡DEJA DE TOCAR A MI HERMANA!!!!!"

Hien casi pega un salto del susto pero afortunadamente no soltó a Nadeshiko porque de lo contrario ella se hubiera caído al piso…

- "Ya lo sabía" –murmuró Otaru Terada- "siempre se las arregla para aparecerse cuando hay un niño cerca de Nadeshiko… ¡al menos no la toma contra mí!"

- "En un hermano posesivo.." –repuso Misa Yamazaki.

Casi salido de la nada Mamoru surgió de entre los grupos de niños que salían de sus clases con una expresión netamente beligerante en su cara mientras Hien no entendía nada y Nadeshiko saludaba a su hermano con mucha naturalidad...

Aún con Hien sosteniéndola..

- "¡¿QUE CREES QUE HACES NIÑO NUEVO?!"

- "¡No es mi culpa, se está cayendo!"

- "¡Se cae todo el tiempo, así que no te aproveches de eso!"

- "¡No me grites!"

El enfado de Hien le hizo soltar a la niña, la que fue efectivamente a estrellarse en el piso mientras al pequeño chino le surgía una gran gota sobre la cabeza...

¡¡Plaff!!

- "Yo... oye... lo siento..." –le dijo ayudándola a levantarse, pese a la expresión de indignado asombro de Mamoru y la tranquilidad de los demás, que parecían muy acostumbrados a eso- "no quise soltarte..."

- "¿COMO QUE NO QUISISTE SOLTAR A MI HERMANA?"

- "¡No la hubiera soltado si no me hubieras gritado!"

- "¿Así que quieres pelea? ¡por mí está bien!"

- "¡Por mí también!"

- "¿Que sucede?" –una voz masculina e irónica sonó a espaldas de Hien mientras a Nadeshiko se le iluminaba la cara con una gran sonrisa- "sabes bien que a tu madre no le gustan las artes marciales Mamoru, además que ¿escuché bien o vas a pelearte?"

- "¡PAPA!"

Nadeshiko brincó a los brazos de la alta figura varonil que bloqueaba al sol sobre Hien, mientras Mamoru bufaba protestando y cruzándose de brazos.

- "Esta bien, pero sabes bien que yo no soy de pelearme papá, sólo que este niño nuevo estaba abrazando a mi hermana y.."

- "¿QUEEEEEE?" –casi gritó Touya.

- "Yo no la abrazaba señor.." –muy dignamente Hien se volvió hacia la altísima figura del padre de Mamoru y Nadeshiko, no con gesto asustado pero sí dispuesto a aclarar el malentendido- "ella sólo iba a caerse y mi no quería que se hiciera daño.."

Touya miró al niño ante sí con asombro y casi creyendo volver a ser un estudiante de preparatoria la misma tarde en que se saltó la reja de su escuela y casi pelea con... ¿Li?

- "Tampoco iba a quedarme mirando mientras ella se caía ¿no?" –murmuraba aún Hien con los ojos verdes más abiertos que nunca.

Los ojos oscuros del médico parpadearon ante aquella luz verde... sí... ¿era posible?.

- "¡Hermano!"

Touya parpadeó por unos instantes, casi tan confundido como los niños a su alrededor. ¿Cómo fue que no había podido sentir la presencia de su hermana acercándose?, porque la que estaba a su lado con una enorme sonrisa era.. ¡Sakura!, su propia hermana, la misma que estaba acompañada de Tomoyo, quien parecía francamente divertida ante la expresión asombrada de su esposo…

- "¡¿Sakura?!" –repitió pasmado y tocándola por los hombros, como si creyera que era un espectro, para después enfadarse- " ¿Cómo se te ocurre aparecerte así?, ¿Cuándo llegaste?, ¿porqué no me avisaste para buscarte?, ¿hace cuanto que estás aquí?"

Tomoyo Kinomoto contuvo la risa nuevamente..

- "¡Por favor, no me digas que tú ya lo sabías!"

- "Me enteré en la oficina.." –se defendió la señora Kinomoto con una dulce sonrisa- "papá me llamó por teléfono y me pidió que nos viéramos aquí… ha sido una sorpresa para todos"

- "Ya veo. Por eso me llamaste para que viniera.."

Sakura contenía las carcajadas ante lo rápido que Tomoyo logró desaparecer el ceño de Touya… ¡realmente sí que sabía como tratarlo!.

- "¡No has cambiado nada hermano!" –sonrió la antigua card captor- "¡nada!"

Touya no dijo nada y pensó entonces en lo poderosa que se había vuelto Sakura, al punto de poder enmascarar su presencia y poder por propia voluntad, aunque ciertamente él había estado demasiado sorprendido por el pequeño de ojos verdes en los momentos previos a la llegada de su hermana. Ciertamente el asombro que había sentido sólo se comparaba a la confusión que tenían los niños, que estaban absolutamente perplejos por todo lo que pasaba. Efectivamente los signos de interrogación de varios colores y tamaños rodeaban los rostros infantiles hasta que Tomoyo se fijó en el ceño de su hijo y la desconcertada carita de Hien y las presentaciones fueron bastante rápidas.

Ya el niño chino había visto varias fotografías de sus tíos y primos, pero francamente no se le había ocurrido asociarlas a los niños que había conocido aquella mañana y lo mismo había ocurrido con Nadeshiko y Mamoru, quien pese a todo miró a su recién conocido "primo" con un suspiro de resignación al notar que Misa Yamazaki empezaba con sus mentiras otra vez y Hien la miraba casi creyéndoselas..

- "Como si no fuera suficiente tener una hermana torpe" –murmuró el niño.

- "¡Sakura, Sakura!" –saludó Yukito llegando casi corriendo al ver a la señora Li- " ¡Pero que gusto me dá que estés de regreso!.. me asombré mucho cuando ví a Hien, ¡te estaba esperando con impaciencia!"

- "Sí, ese mocoso tiene la misma cara de…" –bufó Touya.

Los adultos empezaron a charlar animadamente y a Sakura le dio muchísimo gusto ser presentada a los pequeños Misa Yamazaki y Otaru Terada pero justamente ambos niños partieron a avisarle a Naoko Yanawa y a Kaho Monouhi mientras Hien empezaba a comprender…

- "¡Todo el mundo conoce a mi mamá aquí!, ¡con razón me miraban así!"

La antigua card captor iba a preguntar a Yukito precisamente por una persona pero la frase se quedó a medio decir cuando una voz juvenil pero muy seria intervino con correcta cortesía..

- "Buenas tardes señores Kinomoto, señora" –se inclinó Rei ante todos-"padre ¿porqué me pediste que te viera aquí?.. salimos temprano de clases por eso.."

- "Je, je… hola" –saludó Tao, que empujaba aún su bicicleta antes de susurrarle a su mejor amigo en voz baja- "cállate, deja de quejarte… algo de bueno debe de tener que tu papá sea el Director y encima tú protestando por tener clases…"

Sakura contempló asombrada al joven Rei y por supuesto felicitó ampliamente a Yukito cuando pudo ver a su hijito, la menuda réplica del Director del Campus que se llamaba Yuu. Sin embargo fue notable la tranquilidad que sintió al ver la familiaridad con que el joven Tao trataba a Rei y aunque nunca tuvo dudas de que Yukito cuidaría bien del antiguo guardián se sintió más satisfecha que nunca al ver todo lo que tenía. Una familia, una vida propia y gente a quien quería, protegía y padres que cuidaban de él. Quizá Rei no la reconociera como su antigua dueña pero Yue ahora era Rei, si bien no tenía recuerdos de su poder mágico…

Suspiró pensando en su queridísimo Kero…

- "¡Vaya vaya!, ¡mira eso!" –cuchicheaba Tao a Rei, con gran incomodidad de éste- "como si no fuera bastante tener a la preciosa señora Kinomoto de visita ahora mira esa belleza de ojazos verdes, me parece algo conocida pero no sé..., aunque ¡mira a ese mocoso que tiene!. ¡Diablos!, si no fuera una mamá respetable, con lo guapa que es la invitaba a salir.."

Hien frunció el ceño pues Tao hablaba así de su mamá mientras Rei miraba a su mejor amigo con desaprobación..

- "Seguramente que tu hermana no te lo hubiera permitido y dudo que a la dama no le hubiera parecido ridícula una cita contigo. Menudo ejemplo que le das a tu sobrina" –murmuró muy serio- "además deja de hablar así de la señora Kinomoto que el doctor te destroza con una sola mirada..".

- "Si pues, que suerte tiene ese tipo" –bufó Tao antes de advertir a su mejor amigo- "además que no te engañe Miriel ¿oíste?, esa niña aparenta ser muy buenita y dulce siempre que estás cerca, pero es un verdadero huracán ¡y nadie lo creería con esa sonrisita de "yo soy un ángel" que tiene!"

- "No la ví esta mañana" –repuso Rei, inexpresivamente recordando la frase que dejara a medias temprano- "¿está enferma?"

- "No, son cosas de mi hermana.. hoy es un día difícil para Eriol pero mi hermana siempre cumple su palabra"

Rei no entendió.

Sakura continuaba charlando con los demás –Touya había dirigido un par de miradas muy feas a Tao, y Yukito hablaba hasta por los codos compartiendo la alegría de Tomoyo- pero la antigua card captor sonrió al notar que Nadeshiko estaba grabando a Hien -¡que recuerdos!- precisamente iba a preguntar por Eriol y Yoko cuando Nadeshiko se entusiasmó al notar el automóvil de lujo deteniéndose junto al auto de su padre..

Que esta vez sí era el moderno auto solar de Touya.

- "¡Es Miriel! ¡es Miriel!" –gritó contenta la niña- "¡tengo tanto que contarle!"

Pero su entusiasmo le llevó a correr e inevitablemente a estrellarse en el piso…

- "Once.." –suspiró Hien mientras a todos los presentes les surgía una gota sobre la cabeza y Mamoru Kinomoto empezaba a decir "torpe" a su hermana por enésima vez..

- "¡Viva, al fin vinieron a recogerme en un rolls royce!" –Tao pasó por encima de la niña caída y se alborotó casi besando el vehículo antes de mirar a Rei- "¡al fin!, tu preocupándote por tu hermano, mi sobrina, por todo.. ¿qué Miriel ni que cosa?, ¡aún sigo diciendo que un perro hubiera sido mejor que esa niña!"

¡Plaff!

La puerta del lujoso vehículo le dio justo en medio de la cara y Tao empezó a soltar quejidos mientras una pequeña niña de seis años le miraba al salir del vehículo, con una expresión de perfecta inocencia desmentida por el brillo de sus ojos azules...

- "Te lo ganaste" –dijo conteniendo la risa- "mira que decir que un perro sería mejor que yo.. ¡malo!" –inmediatamente sus ojos notaron la mirada serena y clara de Rei y los otros, pero la niña bajó los ojos pudorosamente ante la mirada del adolescente y se sonrojó si bien hizo una perfecta reverencia- "buenas tardes señores…."

Precisamente sus padres bajaban también del vehículo y los saludos se hicieron más y más efusivos mientras la recién llegada de China estaba más emocionada que nunca. ¡Yukito había llamado a Eriol por teléfono al saber que vendría por Hien!, al menos la sorpresa había funcionado con su hermano, su padre –que estaba esperándolos en su oficina de la Universidad Clamp- y la misma Tomoyo..

- "Me avisaron que llegaste justo cuando estaba pasando un buen rato" –murmuró Eriol con una sonrisa divertida mientras Yoko le hacía un gesto y su cara se ponía roja- "pero me alegra mucho saber que finalmente ese circunspecto Concilio se pone razonable... ¿entonces?, ¿finalmente tendrán la sede en Japón?"

- "Al menos por los próximos tres años Eriol.." –asintió Sakura.

- "¡Que bien!, eso sí que es algo que merece celebrarse.."

Sakura volvió a sonreír mientras contemplaba a todos...

Touya asentía distraídamente mirando a su hermana y a su esposa de reojo y fijándose que los transeúntes no las contemplaran demasiado mientras Mamoru hacía lo mismo con Nadeshiko. Por su parte Miriel charlaba la niña Kinomoto y miraba de soslayo y con la cara colorada al joven Rei, tan sereno y frío como de costumbre pese a la animación de los adultos a su alrededor –las recién llegadas Kaho y Naoko- y a que Yuu estaba bostezando…

Hien estaba confundido por las mentiras de Misa Yamazaki y los suspiros de resignación de Otaru Terada.

Por su parte Eriol y Tao murmuraban muy bajo para que Yoko no se diera cuenta...

- "¡Claro! como si no te conociera Eriol.." –protestaba la reencarnación del Hechicero de las Aguas - "bien que querías hacer una fiesta pero mi hermana no te dejaba sin una buena razón.."

La hermosa mujer de ojos verdes sonrió. Todos sus amigos y familia estaban bien y parecían satisfechos....

Pero su corazón se sentía aún incompleto...

- "Creo que pido demasiado de la vida.." –pensó sintiendo una punzada en el corazón.

* * * * * * * * * * *

Hien estaba cambiándose en su habitación cuando Sakura se decidió a arreglarse. La noche estaba ya avanzada y los pensamientos cruzaban fugaces por su mente mientras la melancolía volvía a extender su manto sobre la joven señora Li al pensar en todo lo que había perdido en una noche igual a esa, hace ocho años…

Atravesó el vestibulo e ingresó a su habitación en penumbras pensando incesantemente en esa misma noche hace ocho años. ¡Todo era tan diferente ahora!... ciertamente Eriol había insistido mucho en hacer una reunión elegante y al pensar en ello, Sakura volvió a suspirar…

Todos estaban juntos…

Se lo habían ganado, pero ella estaba sola.

¡Como dolía estar sola!

Dareka ga machi no dokoka de ………… En algún lugar de la ciudad, hay

Hitori, naiteru .………………………….. alguien sola, llorando

Dareka ga machi no dokoka de ………… En algún lugar de la ciudad, hay

Yoruga, tsurai…………………………… alguien con noches de dolor

Koi wo suru tabi ni ………………..…… es fácil ser herida

Kizutsukiyasuku ………………….…… cada vez que una se enamora

La habitación en penumbras parecía girar a su alrededor, incesantemente… con nostalgias…

- "Pero no estoy sola… Hien está conmigo.." –se dijo.

Daiji ni mamori sugita,……………….. Lo sobreprotegí demasiado

nakusu mono mo aru no ne ………..… y por ello lo perdí

unata no sono jiyuu no……………….. soy yo la que estuvo

ubatte ita watashi yo…………………. robando tu libertad

itoshisawa setsunasa ni ……………… lamento mucho haber convertido

Karachi o kaete riguretto …………….. el amor en incapacidad

Deawanakya yokatta no ……………… hubiese sido mejor no conocerte

If no arashi …………………………… y no tener esta tormenta

- "Si tan solo… si hubiera.."

Dareka ga machi no dokoka de ……… En algún lugar de la ciudad, hay

Ima wa, samishiku…………………… alguien ahora desolada

Dareka ga machi no dokoka de……… En algún lugar de la ciudad, hay

Mune wo, itame ……………………… alguien con dolor en su corazón

Dareka ga machi no dokoka de ……… En algún lugar de la ciudad, hay

Hitori, naiteru .……………………….. alguien sola, llorando

Dareka ga machi no dokoka de ……… En algún lugar de la ciudad, hay

Yoruga, tsurai………………………… alguien con noches de dolor

Koi wo suru tabi ni ………………..…… es fácil ser herida

Kizutsukiyasuku ………………….…… cada vez que una se enamora

- "Soy una tonta, una tonta ridícula.." –continuó mentalmente- "sin embargo no puedo evitarlo.."

Ryo wo te ni kakaekirenai………….. sin dejar de tener las manos en mi rostro

Ryosen yoku mitad ni ……………… parece mucho un dilema

Anata no eien made Motomete ita batsuta wa .. Hasta tu eternidad en una amplitud, que pedí

Kanashimi wo itsu datte …………… la tristeza en cualquier momento

Yotsuzen yanaku crescendo……….. sin intermitencia creciendo

Tameiki no yokokuni no kizukanakute .. sin cambiar los suspiros, las predicciones

Watashi ni mite iru dareka ga ………. Alguien me está mirando

Mado ni, motarete………………….. se halla allí en la ventana

Watashi ni mite iru dareka ga ……… alguien me está mirando

Sora wo (sora wo) miague………….. alza la vista (alza la vista) al cielo

Bien, el amor es un poco egoísta, eso lo sabía y no podía culpar a nadie por eso. Además…. ¿cómo olvidar que el día siguiente era la fecha de su cumpleaños?..

Watashi ni mite iru dareka ga anata .... la persona que me ha estado mirando

hitotsu no……………………………… es una

Watashi ni mite iru dareka ga………. .. la persona que me mira

hoshi wo, sagasu ……………………….. está buscando las estrellas

Koi wo suru tabi ni ………………..…… es fácil ser herida

Kizutsukiyasuku ………………….…… cada vez que una se enamora

Dareka ga machi no dokoka de ……… En algún lugar de la ciudad, hay

Ima wa, samishiku…………………… alguien ahora desolada

Dareka ga machi no dokoka de……… En algún lugar de la ciudad, hay

Mune wo, itame ……………………… alguien con dolor en su corazón

Dareka ga machi no dokoka de ……… En algún lugar de la ciudad, hay

Hitori, naiteru .……………………….. alguien sola, llorando

Dareka ga machi no dokoka de ……… En algún lugar de la ciudad, hay

Yoruga, tsurai………………………… alguien con noches de dolor

Koi wo suru tabi ni ………………..…… es fácil ser herida

Kizutsukiyasuku ………………….…… cada vez que una se enamora

Watashi ni mite iru dareka ga ………. Alguien me está mirando

Mado ni, motarete………………….. se halla allí en la ventana

Watashi ni mite iru dareka ga ……… alguien me está mirando

Sora wo (sora wo) miague………….. alza la vista (alza la vista) al cielo

Watashi ni mite iru dareka ga anata… la persona que me está viendo

- "Shaoran.."

Hitotsu no…….. es una

La señora Li suspiró profundamente antes de tratar de coordinar sus ideas. No podía defraudar a sus amigos y a su familia ¡todos habían sido tan amables!, además también iba a ver a Yamazaki, Chiharu, Rika y su esposo, a quienes no había podido saludar todavía. Justamente su padre había comentado lo bien que le haría sentirse en un lugar tan importante y especial para ella como era Tomoeda, el lugar donde todo había empezado…

Aunque no todos estuvieran allí ahora.

- "Me pregunto si el joven Kamui Shirou se sintió solo y por eso desapareció cuando terminó la batalla por el "Día Prometido", supongo que quiso empezar una nueva vida y dejar todo atrás…. Ojalá lo logre" –murmuró en voz baja- "aunque olvidar es tan difícil cuando son cosas tan dolorosas.."

Hubiera deseado que los otros Dragones hubieran sobrevivido, pero sabía bien que no había sido así. Apenas dos de ellos lo lograron, si bien los otros habían sucumbido con la satisfacción de cumplir su destino y también sus anhelos. El joven Sorata Arisugawa había logrado conquistar el sereno corazón de Arashi Kishuu y vivir plenamente sus sentimientos con ella antes de que ambos partieran hacia la muerte, juntos. Los otros habían hecho también lo mejor que pudieron: Karen Kasumi, Seiichiro Aoki.. que lograron darle a la ciudad y a las familias un futuro. La pequeña Yuzuriha Nekoi… tan joven y alegre, sin embargo su puro espíritu ya no estaba en este mundo.

Pero había logrado enamorarse, que era lo que más quería.

- "Enamorarse…."

¿Y que sería de Subaru Sumeragi?, se habían enterado antes de abandonar Tokyo hace ocho años que él había matado con su propia mano a ese hombre, Seishirou Sakurazuka –y Touya y Tomoyo habían suspirado aliviados al saber de la muerte del Sakurazukamori- pero Sakura no ignoraba que aquello había sido involuntario pues Tomoyo le había comentado –preocupada y entristecida- que para el médium Sumeragi el asesino era lo más importante del mundo, más que el mundo mismo…

¡Perder lo que más amas!

Y lo peor era vivir con eso… vivir, vivir y vivir….

Ojalá pudiera hallar la paz algún día.

Kamui Shirou y Subaru Sumeragi… ¿volverían a verlos o saber de ellos algún día?.

¿Quién puede saberlo?.

La habitación a oscuras le dijo que el futuro debía ser asumido y forjado, no temido. De modo que espantando ya aquellas ideas se dispuso a buscar un vestido apropiado cuando sus ojos se encontraron con aquel traje que sólo se había puesto una vez…

La noche que Shaoran le había propuesto matrimonio.

La noche que bailaron juntos, las rosas…

El aroma de las rosas que decoraban el lugar esa noche que para ella fue de ensueño..

Su habitación casi olía a rosas…

Rosas rojas…

This rose is our destiny.…………. Esta rosa es nuestro destino
Michibikare.................................... nos ha llevado hasta aquí

Futari wa ima Mou ichido deau... Nos encontramos de nuevo como la primera vez
Donna toki mo ano yakusoku...... Lo que en la vida sucede ahora no se olvida la promesa

Wasurenaide Yatto....................... lo que nos hicimos nosotros

koko made kita yo....................… ahora que nosotros hemos venido para esto

Su mano resbaló por el vestido y lo sostuvo contra su figura con nostalgia.. jamás se lo había puesto otra vez…

Habían bailado juntos como en una nube esa noche….

Sólo pendientes uno del otro……

Toki ni ai wa tsuyoku hito no........... A veces el amor herirá

kokoro o kizutsu kemosuru keredo.. a la fiera dentro de una persona fuerte pero...
(Aa) Yume o ata e  Yuuki no........... Su sueño se hará realidad

naka ni itsumo hikari kagayaite..... con tal de que la luz dentro de su valor todavía brille
Ai  wa tsuyoku hito no kokoro ....... El amor tocará

o ugokashite yuku........................... a la fiera dentro de una persona fuerte
Dakara futari de iru....................... ni ciertamente..

Kitto sekai o kaeru tame................ es la oportunidad que nosotros tenemos, esto somos

Soshite subete wa............................ y todo lo que nosotros tenemos

Hitotsu no chikara ni naru............. se volverá una fuente del destino

Su cercanía, su contacto… era casi como si estuviera allí..

Pero era imposible.

- "¿Te casarías conmigo Sakura?"

- "Sí, si quiero" –susurró.

Toki ni ai wa tsuyoku hito no........... A veces el amor herirá

kokoro o kizutsu kemosuru keredo.. a la fiera dentro de una persona fuerte pero...
(Aa) Yume o ata e  Yuuki no........... Su sueño se hará realidad

naka ni itsumo hikari kagayaite..... con tal de que la luz dentro de su valor todavía brille
Ai  wa tsuyoku hito no kokoro ....... El amor tocará

o ugokashite yuku........................... a la fiera dentro de una persona fuerte
Dakara futari de iru....................... ni ciertamente..

Kitto sekai o kaeru tame................ es la oportunidad que nosotros tenemos, esto somos

Soshite subete wa............................ y todo lo que nosotros tenemos

Hitotsu no chikara ni naru............. se volverá una fuente del destino

- "Me alegra que diga que sí señora Li…" –una voz masculina y cálida suspiró en sus oídos- "siempre es un gusto saber que volverías a aceptarme como tu esposo Sakura.."

- "¡SHAORAN!, ¡¡¡OH SHAORAN!!!"

La joven señora Li se volvió casi dando un salto y con los ojos verdes más brillantes que nunca abrazó a su esposo con todas sus fuerzas mientras Shaoran sonreía muy divertido pero también la estrechaba contra su cuerpo con frenesí..

- "¡Creí que no estarías aquí!" –casi sollozó Sakura- "no pude ubicarte en todo el día y.."

- "Lo siento mi amor, pero la línea estaba bloqueada. Además quería darte una sorpresa adelantando mi regreso este mes…."

- "¡Dos meses!, ¡has estado lejos de mí dos meses y te he extrañado muchísimo!"

Ambos continuaron abrazados uno al otro casi saboreando ese momento, mientras la antigua card captor notaba que tenía efectivamente toda la habitación llena de rosas, el equipo estereofónico estaba encendido y la música que ella había creído producto de su imaginación era efectivamente real…

- "¡Las rosas!" –murmuró espantada.

- "Las rosas las envié yo" –sonrió su esposo- "sé que tal vez lo más apropiado para tí serían flores de cerezo pero estas flores me recuerdan la noche que te pedí matrimonio.... además, ¿creíste que Wei dejaría que vieras algo que te enviara algún tipo de admirador?"

- "Pero.. ¡no tenían remitente!"

- "Soy su admirador secreto señora Li.. ¿acaso pensó en otro?"

- "!Por supuesto que no!" –se defendió, sin soltarlo- "pero si me hubieras puesto que eran tuyas no hubiera ordenado que sacaran de la casa las que enviaron esta mañana… ¡con lo lindas que eran!, pero no podía aceptarlas siquiera al creer que eran de un extraño."

Shaoran rió levemente.

- "Sakura… las rosas de la mañana son éstas. Wei sabía que debía ordenar que las trajeran aquí en cuanto salieras… porque acaban de traer más para los salones.."

Un signo de interrogación apareció sobre la cabeza de Sakura.

- "Yo comenté algo de las flores por teléfono con Mei Ling y Hin Lu y ella se rió pero.."

- "Mei Ling no puede evitar ese gesto. Al menos Hin Lu es bueno guardando secretos.."

- "¿Ellos lo sabían?"

- "Sí. Al igual que Wei y Lin Yi, y también Jin Qua" –rió al mencionar a los miembros del servicio doméstico- "claro que tuve suerte que Hien no las viera porque él no sabía nada y podía haberlas arrojado en mitad de la calle…."

La señora Li sonrió brillantemente reprochándose ser tan despistada. Pero justamente entonces se fijó en el impecable traje de etiqueta que lucía su esposo quien por cierto se veía más apuesto que nunca con aquel atuendo..

Pero no muy cómodo que se diga..

- "Antes que me preguntes, mejor apúrate.." –le pidió él con un suspiro- "si llegamos tarde a la fiesta me van a echar a mí la culpa…"

- "¿Cómo sabes de la fiesta?"

- "Eriol me llamó por teléfono… yo ya tenía planeado adelantar mi regreso para hoy o mañana temprano pero me dijo de la fiesta en su casa y por supuesto que no podía dejarte sola… no más tiempo"

- "¡Pero si tu teléfono..!"

- "Eriol usó la línea diplomática.. ya sabes que él tiene ese acceso.." –repuso Shaoran con una gran gota sobre la cabeza- "e incluso me dijo que me bajara del avión ya listo y de traje… ¡nunca cambia!"

Sakura empezó a reir.

- "Dos meses sin verte.. fueron demasiados" –suspiró antes de abrazarlo y besarlo otra vez- "pero será la última vez ¿no?"

- "La primera y última vez que estaremos separados.." -le tranquilizó acariciando su mejilla- "sabes bien que no podíamos solucionar los conflictos entre los magos de la India, Mongolia y Siberia y a la vez ultimar los detalles del cambio de sede del Concilio, aunque seguramente que eso ya lo lograste ¿verdad?"

Su esposa asintió.

- "Sí. Ya todo está listo. Los detalles los dejé para Hin Lu, pero todo está a punto aunque Hien te ha extrañado mucho… ¡y ha cumplido su palabra en cuidarme y ser el hombrecito de la casa!"

Ambos empezaron a reir.

- "Bien, le veré en cuanto estés lista. Mejor lo saludo lo antes que pueda porque ví una fotografía mía por allí y eso que salude a una foto como si fuera yo me pone nervioso, ¡no me he muerto!" –agregó orgulloso-"Aunque no me sorprende que lograras lo del Concilio porque no sólo eres una esposa encantadora y una hermosa madre… siempre me ayudas en todo"

- "¿Es todo lo que soy?"

- "No. Lo más importante es que…. eres mi amor"

* * * * * * * * * *

La fiesta estaba más animada que nunca y los saludos y buenos deseos parecían rodear casi todo Tomoeda aquella noche. Ya los últimos reencuentros se habían llevado a cabo –el relativo a los esposos Yamazaki y Terada- pero Sakura contempló pensativamente la ciudad desde uno de los amplios balcones de la embajada inglesa muy feliz y apretada en los brazos de su esposo…

- "El hijo de Kaho es un niño muy amable… y ayudó mucho a Hien esta mañana" –comentó contemplando el cielo cubierto de brillantes estrellas- "además que es seguro que será un médium notable si Kaho se lo permite.. ¿sabes que me dijo que el espíritu de Kia los visita a él y su madre en el templo Tsukimine?"

- "Sí, Kaho me lo dijo, fue una de las consecuencias de la muerte de ese hombre… Sakurazuka. Con su final muchos espíritus del túmulo del parque Ueno fueron liberados. ¿Es por eso que estás triste?"

- "No, no lo entiendes, no estoy triste. Pienso en las personas que están aquí con nosotros, las familias que ahora tenemos, nuestros amigos y el futuro ante nosotros… pero no puedo dejar de pensar en aquellos que quedaron atrás hace ocho años.."

- "¿Te refieres a los que murieron, los Dragones o a nuestros guardianes?"

- "Nuestros queridos guardianes.." –suspiró- "todas las bestias de los sellos duermen ahora y los guardianes tienen vidas nuevas…. aunque me hubiera gustado que mi querido Kero conociera a Hien.."

- "Sabes que todos quedaron en mala condición y nosotros tampoco teníamos fuerzas suficientes como para curarlos... un sueño prolongado fué lo único que pudimos hacer para salvarlos en ese instante, aunque después dispusiéramos su situación. El mismo Eriol no pudo curar a ninguno de sus guardianes porque también estaba muy mal cuando todo terminó"

- "Sí pero…"

- "Ellos estarán bien Sakura" –la tranquilizó- "Los tres libros de Cards están seguros y quizá pasen siglos antes de que vuelvan a despertar…. Yue, Tsuki y Ruby Moon ya no tienen una vida que gire alrededor de proteger a sus dueños sinó que tienen ocasión de vivir para sí mismos, mientras Kerberos, Byakko y Spinel Sun duermen. Sólo el tiempo dirá las aventuras que aún les quedan a ellos por vivir, cuando alguien despierte alguno de los libros de cards.."

- "Lo sé. Supongo que a Kero le sería difícil aceptar que ahora no soy una joven estudiante.."

- "Y no digamos que le costó mucho aceptar que ya no eras niña hace ocho años, ¡menuda guerra que me dio!" –protestó.

Sakura sonrió. Shaoran era un hombre apuesto y adulto, pero seguía teniendo aquellos mismos gestos de cuando era niño..

- "A veces me provoca averiguar un poco del futuro y ver quién será su próximo dueño o dueña, como lo hizo Clow" –comentó ella- "Pero tienes razón…. Ellos también tienen el derecho de vivir una nueva vida.. un nuevo futuro.."

- "¡Oigan ustedes dos!" –bufó Touya abriendo la puerta del balcón- "que la fiesta es de ustedes y encima que llegan tarde.."

- "¿Porqué no nos dejas algo de privacía?" –murmuró Shaoran.

Touya frunció el ceño.

Sakura sonrió antes que Tomoyo apareciera a llevarse a su esposo a bailar. Ambas sabían que si bien era cierto que ambos hombres habían llegado a apreciarse ninguno iba a ser el primero en aceptar o reconocer alguna virtud en el otro…

Hay cosas que no cambian…

La terquedad masculina estaba entre estas.

A lo lejos Sakura contempló a Kiku, jugueteando con Mamoru y Kioji Monouhi mientras los demás niños husmeaban los hermosos libros de estampas que Yuu Tsukishiro había traído de su casa..

- "¡Libros!, ¡una antigüedad!" – bufaba Tao Hiu volviéndose a Rei- "¡oye viejo, nos trajeron de niñeras!, aunque ahora que lo recuerdo hay una chica preciosa que trabaja en la biblioteca pública que está…"

- "Seguramente que es mayor que tú así que olvídalo" –replicó el joven Tsukishiro sin mover un músculo de su bello rostro- "a veces me pregunto si no tienes la cabeza llena de agua.."

- "¿Porqué dices eso?" –protestó Tao.

Efectivamente, en ese mismo momento, en la biblioteca Pública de Tomoeda una hermosa mujer estaba muy ocupada en cerrar el lugar pese a la admiración que causaba entre sus compañeros de trabajo, que hacían mil comentarios..

- "La señorita Megumi Togakutsuki es realmente encantadora… aunque toma su trabajo muy en serio.. ¡adora los libros!"

- "Sí, eso lo sé, ojalá acepte salir a tomar un té conmigo. Aunque ¿es cierto que perdió la memoria?"

- "Si, bueno.. parece que estuvo en Tokyo hace ocho años.. tu sabes, con todos los desastres de ese tiempo ella salió con vida, pero con amnesia. Sólo recuerda su nombre, aunque eso no la hace menos encantadora y gentil. Lo único es esa manía casi obsesiva con la limpieza pero tiene muchos amigos y parece muy contenta con el trabajo en la biblioteca.. se mudó aquí a Tomoeda hace muy poco, trayendo un grupo de libros donados por la nueva biblioteca de Tokyo…"

Sakura pensaba en libros también, especialmente al contemplar a Yuu Tsukishiro y sus libros de estampas..

- "¿Sabes qué Shaoran?.. me pregunto donde estará la persona que tiene los poderes de Ruby Moon.. Eriol no nos lo ha dicho hasta ahora.."

- "Posiblemente esté en China" –murmuró pensativo- "no olvides que él autorizó que el libro de las Loire Cards fuera conservado en la biblioteca del Concilio y las Sakura Cards las guarda Yukito. Lo bueno es que como ni él, su esposa o el pequeño Yuu tienen magia no hay posibilidades de que alguien encuentre las Sakura Cards en mucho tiempo.."

- "Supongo que sí"

- "Y en cuanto a Byakko y Tsuki… bueno, nunca entendí porque preferiste dejar las Protection Cards en la biblioteca de Tokyo.."

Sakura sonrió.

- "Sé cuanto te costaron hacerlas y sabes muy bien que no las desdeñé sinó lo contrario. Pero tú y yo nos conocimos gracias al azar que me llevó a mí a descubrir el libro de las Clow Cards y es justo dejar abierta la posibilidad para que cualquier persona pueda hallar un camino a través de la magia, los sueños y su propia voluntad… y para dejar abierta esa posibilidad a todas las personas anónimas lo más justo era dejar el libro en una biblioteca pública. Igual, es muy probable que como tu dices que pase mucho tiempo antes que Byakko sea despertada"

Shaoran asintió. Sí.. el azar, el destino… los sueños..

Eriol contempló a sus amigos que estaban en el balcón desde el salón principal de la embajada y sonrió pensando en su pequeño secreto. Sí, ciertamente ante los ojos del mundo "Nakuru Akizuki" su querida "prima" había "muerto" en los desastres de Tokyo de hace ocho años pero él sabía que su antigua guardiana estaba muy bien…

Viviendo una vida para sí, adolescente y bulliciosa otra vez….

Y cerca al libro de las Loire Cards..

- "¿No se los dirás nunca?" –preguntó Yoko, interpretando el silencio de su esposo- "quizá sea bueno que lo sepan.."

- "No Yoko. Ruby Moon tiene derecho a vivir por su cuenta y aunque ya no sea Nakuru debes admitir que es divertido que su nueva identidad esté en el mismo clan Li.."

- "Pero ni Sakura o Shaoran lo saben y como todos tienen poderes en esa familia es difícil que lo noten a menos que Spinel Sun sea despertado.. ¿y quien sabe cuanto tiempo pasará para ello?"

- "Por eso es mejor que el anonimato proteja a mi guardiana… sabes bien como es su carácter y posiblemente volvería loco de nervios a Sakura o Shaoran si lo supieran.."

Yoko contuvo la risa..

- "Tú si que no cambias. Siempre te gusta tener algo para sorprender a los demás.."

La reencarnación de Lead Clow sonrió enigmáticamente mientras todos los demás estaban ocupados en sus propios asuntos. Allí estaba Sonomi, discutiendo con Touya en voz baja cada vez que Tomoyo se distraía, Fujitaka charlando con Hien y Nadeshiko filmándolo todavía, para honda mortificación del médico, que ya empezaba a preocuparse por su hija…

- "¡No me gusta ese mocoso!, ¿porqué tiene que filmarlo?"

- "Pero Touya.."

- "Ese es el resultado de haberte casado con un troglodita querida mía" –murmuró Sonomi antes de comentar con la evidente intención de molestar al doctor- "además ¿qué importa?, el pequeño Hien es un niño adorable y quizá… bueno, tu sabes, quizá lleguen a gustarse. Nadeshiko está impactada con él.."

- "¿QUEEE?, ¡eso es absurdo!, ¡es ridículo!... ¡las parejas de niños que se gustan jamás llegan a algo serio o se casan!"

Sakura y Shaoran llegaron en ese momento y a Touya le surgió una gota sobre la cabeza ya que esos dos eran una prueba justamente de lo que acababa de negar..

- "¡Con un demonio, no importa que esté impactada con él, la gente que se enamora a primera vista no llega a nada y..!"

- "Ah… hijo, no quisiera contradecirte pero.." – murmuró Fujitaka.

Sakura sonrió levemente mientras Nadeshiko, Hien y Mamoru no entendían los motivos de la gruesa vena que había surgido sobre la cabeza del doctor Kinomoto..

- "¡Rayos, son primos y..!"

El mismo Touya se detuvo en seco mientras Tomoyo contenía la risa a duras penas, pero finalmente la señora Kinomoto dio un gran suspiro y le suplicó a su madre que dejara aquellos sarcasmos contra su esposo o iba a acabar con su escasa paciencia…

- "¡Oh, mira Hien… Yuu se vé lindo con tantos libros antiguos, lo voy a filmar!"

- "Bien, lo que sea, pero no me filmes más a mí.."

Nadeshiko entonces corrió a filmar al hermanito de Rei y Tomoyo aprovechó para tranquilizar a su aún exaltado marido. Al fin y al cabo, Nadeshiko siempre filmaba todo lo nuevo y bonito que veía, además que la forma en que trataba a Hien era fraternal. Y cualquiera podía notarlo, hasta Mamoru.

Bueno, cualquiera que no fuera un papá muy celoso..

- "Vamos, amigo.. cálmate" –Yukito estaba apoyando a Tomoyo, mientras Ayame ayudaba a los niños a ordenar los libros de estampas junto con Rei y Tao- "ya ves que sólo era una broma de la señora Sonomi.."

- "Menuda broma.."

Sakura y Shaoran habían disimulado una sonrisa ante la situación pero Shaoran aún notaba cierta melancolía en ella...

- "Porqué esa expresión… ¿es por alguien en particular?"

- "No. Pero pienso en Kia, la abuela y todas las personas que murieron en los desastres del fin de los tiempos… nuestra propia batalla donde casi creí que te perdería.." –se estremeció y lo abrazó- "estos meses sin ti han sido un tormento pero de sólo pensar en el resto de mi vida sola, creo que hubiera sido una pesadilla…"

Los ojos de Shaoran brillaron comprendiendo algo...

- "No Sakura, la vida es un ciclo y la muerte también es parte de este mismo ciclo, y lo sabes. También ambos sabemos porque es que sobreviví"

Ella escondió su rostro en su pecho…

- "¿Se lo diremos algún día?"

- "A su tiempo… a su tiempo. No olvides que si bien nadie puede entender como es que sobreviví con esas heridas… todos dijeron que fué un milagro, pero los milagros a veces llegan en obsequios hermosos.."

- "Cuando Touya nos encontró casi no podía creer que aún vivías.."

- "Es porque era imposible. Mi cuerpo había llegado al límite pero tú y Hien me dieron mucho de su fuerza para sobrevivir; incluso Tomoyo pudo ver aquel destello de luz blanca que era la sincronía de tu poder con el de nuestro hijo cubriéndonos justo cuando yo ya era arrastrado al mundo de los espíritus, lejos de ti y de él.."

- "Al final, él nos salvó"

Shaoran sonrió.

- "No Sakura. Fueron ambos los que me salvaron a mí porque sin la fuerza de tu propia esperanza y tu amor jamás hubieras logrado armonizar con el poder de nuestro niño que aún no nacía…. Fueron ambos, tú y él. Tú hiciste el trabajo que yo ni Eriol podíamos ya hacer, y sin eso todos hubiéramos muerto: hacer el traslado de la dimensión alterna a la realidad… y Eriol también lo sabe. Si no lo hubieras hecho, todos los que estábamos allí, en la dimensión habríamos estallado junto con ella.... Los salvaste a todos y esa fuerza que tuviste por proteger tu deseo despertó toda tu capacidad y si bien la ayuda de nuestro niño fue decisiva, fue ayuda la que él te dió. Porque fuiste tú y tu deseo lo que me tienen aquí"

- "Sí pero ¿y los otros? ¿volveremos a ver a Kero, Spinel o Byakko o quizá a Kamui Shirou y Subaru Sumeragi?"

Shaoran sonrió ante las preguntas de Sakura, ¡se veía casi como una niña!.

- "Sólo el tiempo dirá lo que vá a ocurrir Sakura" –repuso sereno pero gentil, la misma madurez de siempre pese a su gallarda y joven figura masculina- "El mundo y todos nosotros hemos empezado otra vez y así como no sabemos lo que pueda pasar con los libros de cards…"

- "¿Para ellos también? ¿para Kamui Shirou y Sumeragi?"

- "Sí. Y realmente espero que hallen la paz… aunque quizá nunca volvamos a verlos si ellos y el destino así no lo quieren"

En una calle en la ciudad nueva de Tokyo, la figura de un hombre joven y apuesto de brillantes y tristes ojos violetas se perdía en las calles sombrías aún buscando una vida nueva y tratando de dejar atrás el dolor de la Batalla final, mientras en la misma ciudad y en el parque Ueno, otra persona con un ojo verde contemplaba con profundo dolor los árboles de cerezo…

Sakurazukamori…

Pero Shaoran o Sakura les deseaban lo mejor… y quizá.. ¿volverían a verse?

- "No importa lo que suceda, todo estará bien.. ¿verdad Shaoran?"

- "Sí Sakura. Mientras pongamos todo de nuestra parte y con esperanza y fé.. todo estará bien.."

It’s all right ………………………………... Todo está bien

daijobu daijobu daijobu……………………. Todo está bien, todo está bien, todo está bien

kiseki datte okoseru……………………….. pero con el despertar del milagro

here were go ikouyo ikouyo ikouyo……….. aquí vamos, aquí vamos

tsubasa hiroge……………………………… abriendo las alas

kitto nanikaga nanikaga………………….. de seguro algo, algo en algún

dokokade…………………………………... lugar

deaeru hi wo matteru……………………… está esperando a ser descubierto

¡Do! ¡Do! ¡Do! ¡dreaming!, ¡dreaming! .... ¡hazlo, hazlo!, ¡soñando, soñando!

soshite tobiraga……………………………. Entonces la puerta

Hirakuyo…………………………………... se abrirá

En China, en la mansión Li para ser más específica, una hermosa y vivaz adolescente revolvía las incesantes cartas de amor que había recibido…

- "Bien, este chico me gusta… este también. Aunque quiero conquistar al que se me hace difícil.."

- "¡May May!" –se asombró una mujer mayor pero guapa- "no cambias nunca hija mía.. rompes los corazones de los chicos por montones, me recuerdas mucho a mi abuela y no porque lleves su nombre. Es una lástima que muriera cuando eras pequeña y ya no la recuerdes.."

- "Sí, pero yo también casi muero de esa enfermedad que me dio cuando tenía cinco años.."

- "¡Menudo susto que me diste!, si desde que te recuperaste pareces otra querida mía, más vivaz y excéntrica y a tu papá lo estás volviendo loco aunque él tampoco es muy serio que digamos. Al paso que vas te acabaremos enviando a vivir con mi hermano y su esposa, con el Jefe del Clan sí tendrás que ser un poquito más seria.. ¡Shaoran es de miedo cuando se enfada!"

- "¡Vamos!... al final que tía Mei Ling también opina que si soy bonita, tengo que divertirme, ¡y con lo guapo que es tu hermano Shaoran mamá!, realmente las fotografías que he visto no le hacen justicia y no parece papá de un niño de siete, ¡cuando lo ví de lejos en la última reunión de todo el Clan me sentí orgullosa!.. es como si tuviera veinticinco años y está devastadoramente guapo, ¿en serio es tu hermano?, ¡es mucho más joven que tu!" –se rió.

- "¡Ay jovencita!"

Iza to naru to………………………… Cuando me animas

nanimo ienai………………………… no puedo hablar

shaberitai no ni koe mo……………… a pesar de que quiero hablar

kikitakute……………………………. y escucharte

kokoro ga ne awateteru……………… mi corazón se descontrola

aoi sora n hikoki gumo……………… esa nube en forma de avión

tsunaida te ni………………………... que está en el cielo azul

waite kuru power……………………. tomados de la mano usemos su hirviente poder

doko date yute soudayo…………….. y podríamos ir a cualquier lugar

kaze ni notte…………………………. montando el viento

Eriol y Yoko parecían divertirse en medio del alboroto. Touya se escabullía ya con Tomoyo tratando de escapar a los sarcasmos de Sonomi o quizá de contraatacar a la madre de su esposa, mientras Kaho sonreía pensando en todo lo que le contaría al fantasma de Kia en su próxima visita. Chiharu regañaba a Misa y a Takashi Yamazaki por el asunto de las mentiras y a la vez Rika le seguía pidiendo a su hijo Otaru que cuidara de la hija de su socio y amigo. Idomu Terada sonreía al ver la carita de resignación de su hijo mientras Rika continuaba y Miriel Hiragizawa charlaba sobre música con Rei –bien, el joven sólo decía monosílabos- con una expresión casi angelical desmentida por el brillo de sus ojos azules que no engañaban al siempre parlanchín Tao.

It’s all right ………………………………... Todo está bien

daijobu daijobu daijobu……………………. Todo está bien, todo está bien, todo está bien

kiseki datte okoseru……………………….. pero con el despertar del milagro

here were go ikouyo ikouyo ikouyo……….. aquí vamos, aquí vamos

tsubasa hiroge……………………………… abriendo las alas

kitto nanikaga nanikaga…………………… de seguro algo, algo en algún

dokokade…………………………………... lugar

deaeru hi wo matteru…………………….… está esperando a ser descubierto

¡Do! ¡Do! ¡Do! ¡dreaming!, ¡dreaming! ….. ¡hazlo, hazlo!, ¡soñando, soñando!

soshite tobiraga……………………………. Entonces la puerta

Hirakuyo…………………………………... se abrirá

Yukito había empezado a comer y Ayame le servía con una gran sonrisa. Naoko y su esposo se preocupaban porque a su hijo de casi un año no rompiera nada de la embajada mientras Fujitaka sonreía mientras Kioji Monouhi y Mamoru aún seguían jugando con la pequeña fantasma llamada Kiku y Hien, Nadeshiko y Yuu revolvían todavía los libros de estampas que el pequeño Tsukishiro había traído de su casa..

Nandemo nai ko ishi de sae …………….. Aunque no tenga un

fushigi dayone hoseki ni………………… misterioso poder para convertir piedras

kawaru…………………………………… en joyas

issho ni ne miteru dakede……………….. si las veo estando a tu lado

minna hikaru…………………………….. todas brillarán

- "Adoro los libros de estampas que tienes!" –rió Nadeshiko junto a Yuu y Hien- "son viejos pero lindos!"

- "Se parecen a los libros de mi papá" –murmuró Hien casi hurgando entre ellos.

Mamoru, Kioji y Kiku también se acercaron a ver los libros y hasta Rei y Miriel parecieron interesarse…

- "Dejen de perder el tiempo en esas antiguallas…" –bufó Tao- "como si ahora no tuviéramos cosas mejores que ver libros ¡hay más postre en la cocina!"

- "Co…. mi…da…" –rió Yuu en su media lengua infantil de niño de tres años.

Top secret dai sukina dai……………….. Mi máximo secreto, te amo, te amo

Sukina dai supina ………………………. te amo, te amo

Shunkan ga fuete yuku…………………. Hagamos más largo

Tottemo chiisana chiisana……………… este gran momento

Chiisana kaze ni natte………………….. Si fuera una pequeña semilla

Kitto kokoro no dokokade……………… De seguro en alguna parte del corazón

Okina hana ga saki……………………... Florecería como una gran

Hajimeteru……………………………... flor en principio

¡Do! ¡do! ¡do! ¡dreaming! ¡dreaming!..... ¡Hazlo, hazlo!, ¡soñando, soñando!

Soshite sekai wa hiraku…………………Entonces el mundo se abrirá

Las estrellas brillaban más que nunca esa noche…

- "Si, lo sé" –decía Sakura- "Lo sé… el futuro es nuestro ¿verdad..?"

It’s all right ………………………………... Todo está bien

daijobu daijobu daijobu……………………. Todo está bien, todo está bien, todo está bien

kiseki datte okoseru……………………….. pero con el despertar del milagro

here were go ikouyo ikouyo ikouyo……….. aquí vamos, aquí vamos

tsubasa hiroge……………………………… abriendo las alas

kitto nanikaga nanikaga…………………… de seguro algo, algo en algún

dokokade…………………………………... lugar

deaeru hi wo matteru…………………….… está esperando a ser descubierto

¡Do! ¡Do! ¡Do! ¡dreaming!, ¡dreaming! … ¡hazlo, hazlo!, ¡soñando, soñando!

soshite tobiraga……………………………. Entonces la puerta

Hirakuyo…………………………………... se abrirá

- "Confiar, esperar y quien sabe cuando o para quienes empiece la aventura de las cards otra vez… ¿no lo crees Shaoran?"

- "Nadie puede saberlo mi querida Sakura. Hasta que alguien con poderes mágicos pueda estar cerca de los libros podrían pasar años o siglos para que la aventura pueda empezar de nuevo y para alguien diferente a nosotros.."

Entre los libros de estampas de Yuu Tsukishiro asomaba uno de dolor rosa y oro, donde se vislumbraba la imagen de una especie de león alado y con la palabra "Sakura"…

- "¡Todo estará bien!" –rieron finalmente Sakura y Shaoran, marchando a reunirse con los demás.

FIN?

Y fueron felices...¿para siempre?

VOCABULARIO:

* Rolls royce: modelo de automóvil de lujo ahora, y de mayor lujo (supongo) en el futuro (hay gente que desde ahora ya los colecciona).

** Concorde: modelo de avión actual, muy veloz y de lujo (por ser de colección) en el futuro.

*** Mamoru: significa literalmente "Protector".

SOBRE CANCIONES:

- La primera canción que puse mientras Tomoyo y Touya iban en su auto es: ""Yakusoku wa iranai" o "No necesito promesas" tema de la serie "Tenkuu no Escaflowne" o "Visión de Escaflowne" que ya había usado antes en el cap IX "Hombres al borde de un ataque de nervios", justamente en los hechos que Tomoyo recordaba.. ^_^.

- La segunda canción que Sakura escuchóó en la habitación de Hien, cuando encontró el osito de felpa se titula "¿Ai oboete Imasuka?" o "¿recuerdas el amor?" y forma parte de la música del clásico de anime: "Macross: La película".

- La tercera canción que Yoko cantó en la tumba de Tsu Chin es ""Tooi Kono Machi de" o "Sólo en un lejano pueblo" también conocida como "It’ my life" (esta es mi vida) original de la primera película de Card Captor Sakura, que también ya la había usado antes, en el cap XVI, "El enfado de Nakuru".

- La cuarta canción se llama "Koi woo suru tabi ni kizutsukiyasuku" o "Es fácil ser herida cada vez que una se enamora", ya la había usado (una parte) en un capítulo previo, pero esta vez la incluí completa ^^, pertenece a la serie anime de TV "Nurse Angel Ririka".

- La quinta canción es "Toki ni Ai wwa" o "a veces el amor" seguro que ya a reconocieron pues la usé en el cap X "La noche del Sábado" justamente en el momento de la petición matrimonial de Sakura; esta canción pertenece a la música de la película "Utena, adolescencia apocalíptica"

- La última canción es "Tobira wo akkete" y es ¡el segundo opening de la serie de Card captor Sakura! … iba con el final ¿no? ^_______________________^.

¡Uf, disculpen, creo que me emocioné demasiado con las canciones!! ^____^’

NOTAS DE LA AUTORA: ¿Y bien?, ¡finalmente terminé! ^__________^. Y no niego que ha sido todo un gusto y un placer escribir y compartir esta historia con todos y cada uno de mis lectores. Todos ustedes han sido parte importante de la misma y con su cariño y comunicación han influído mucho en mis escritos, gracias otra vez por su constante paciencia con mis tardanzas en entregar capítulos, por soportar estos mismos y extensos textos, mi fanart y por sufrir, reír, llorar, cantar y emocionarse con este relato. Justamente a aquellos que tenían dudas sobre la historia "X" que mencioné en aquí, pues justamente es en lo que termina con sólo Kamui Shirou y Subaru como sobrevivientes en la versión televisiva de esa apocaliptica historia y lamento mucho los spoliers pero conste que es la version tv, porque el manga aún no acaba –¡no me culpen, eso es cosa de las Clamp!- pero si bien la nuestra siempre fue de Sakura y sus amigos tampoco podía dejar de mencionar lo sucedido con los dragones del Cielo y su batalla. ¡Y digo "nuestra historia" porque esta es una historia no mía sinó también de ustedes!, ¡de todos los lectores y fans de card captor Sakura! sin embargo como todo ha empezado así mismo debe terminar y me deja un gran vacío en el corazón que creo todos pueden entender…

Este es el momento de agradecer a todos mis amigos: chibineko, Chris, Carla-chan, Omar, Pablo, Carlos, Merlín, Nomar, Artax, Silverstar, Rosa María, Shougo Amakusa, Melissa, Marlene, Alicel, Amarilis, Dana, Amelia, Antonia, Ellis, Fuu, Eneri Henro, Ydalbi, Saku_luna, Taiz, Francisco, Hector Manuel, Hibari, Marianita, Raiza, Renata (Rei), Rodolfo (Coyote), Itze, Javi, Carmen, Sinichi Kudoh, Kiki, Loreto, Maria Luz, Mei-chan, Nabiki, Nataliaperezcameo, P-chan, Rei Li, Patty, Hermione, Paula, Sandy, Lili Q, Lizett, Alex, Debbie, Seika, Sorasaku, Marisol, Miguel Angel, Gwaihir, Gipsy, Rinita, Vanesa, Vanya, Dulce, Sebastián, Diana, Jessie, Isabel, Jackie, Miyuki; muchos de los mencionados también estupendos escritores y por favor, a los que no he podido mencionar discúlpenme.. ¡han sido tan amables todos y son tan buenos que quisiera escribirlos a todos pero me sale un capítulo de agradecimientos! ^_^’ … pero todos ustedes saben quienes son, y están siempre en mi corazón, con su ayuda, apoyo y consejo.. ¡y proyectos y sugerencias de fics!.

Y un agradecimiento especial para C.M. Santos <[email protected]>, que se ha tomado la gran molestia y me ha hecho el honor de traducir mi historia "El último card captor" al portugués! (¡Me siento multilinguible!, Mikki_chan en portugués ^______^, ¡cosa mais grande du mundo!). Otra nota especial la merecen mis amigos webmasters, sin cuyo apoyo y gentileza jamás hubiera podido tener la dicha de llegar hasta ustedes, y que además han soportado mis kilométricas historias en sus servidores y estupendas páginas, ¡gracias mil Asuka, Shougo, Alicel, Nary, Dana Bra, Vejibra, Fuu, Sandra y a todos los que deseen publicar mi historia!. Gracias otra vez por hacerlo y más que todo por respetar mi autoría siempre solicitándome las cosas, siempre poniendo mi nombre como autora, ¡gracias a ustedes no perderé la confianza que en la red hay gente maravillosa!..

Mucho de mí ha quedado en esta historia y en la anterior, que me brindó la oportunidad de salvar distancias y conocerlos. No me llamaré ahora escritora novata como al final de "el último card captor" sinó una persona "afortunada" por haber tenido la dicha de lectores como ustedes que me apoyaron aún cuando consideré dejar la historia inconclusa por problemas en la misma red, que siempre me escribieron pese a que muchas veces mi horario no me permitía contestar tan de prisa los correos que recibía (y aún debo muchos, por favor, paciencia!).. ¡gracias mil y hasta siempre!, pero si bien ya había considerado el final de la historia en este nuestro capítulo final XXI…..

¡VA A HABER EPILOGOS!... ¿acaso creían que se iban a librar de mí tan facil?.. (y no hagan trampa, lean los agradecimientos pues, así si se enteran..)

Sí, sí.. voy a incluir algunos epílogos, más que todo para que puedan reirse un poquito con las cosas que pasaron entre el tiempo trascurrido del capítulo XX al XXI ya que posiblemente quedaron algunos cabos sueltos por allí ^_^'; aunque estos epílogos que son casi sidestories son influencia de alguien que considero una maestra en escribir fanfics y que ha sido toda una inspiración para mi y todo el que haya leído un poco de ella: me refiero a Alys Avalos o Mercurio, que con su historia "Reencuentro en el vórtice" (que es de "Candy Candy" y muy buena) empezó una nueva corriente de superación y ganas de hacer algo, al menos a mi persona.

Bien mis amigos, tienen de mí por un rato más en lo que sigue que justamente forma parte de "En la Torre de Tokyo" y son más que todo un tributo a ustedes, a todo el apoyo y cariño que he podido sentir de mis lectores . y aunque seguro que quieren matarme a estas alturas ¿no? ^___^ ''

PROXIMAMENTE EN LOS EPILOGOS: "y fueron felices... ¿para siempre?"

NOTA IMPORTANTE: "Card Captor Sakura" y "X" son obras del Grupo Clamp, Kodansha y Asuka Comics, esta es una historia escrita de un fan para fans sin fines de lucro.. ¡no me demandes!.

Comentarios, sugerencias, tomatazos, bombas, maldiciones, petardos, virus, mails explosivos y ¿alguna florecita perdida por allí? a [email protected]

 

 

 

<<Menú

Hosted by www.Geocities.ws

1