En el punto correspondiente a este grado en la primera parte, está explicado lo que se persigue y para lo que el espíritu consigue esta facultad.
Una vez que ya contáis con el buen instrumento, que vela, registra y os comunica lo que le habéis impuesto y ha trasmitido e inspirado vuestro querer, lo completáis en sesión teniendo en cuenta lo que os rodea y disipado lo que estorbe; entonces, imprimir la potencia de los dos y hacer que sienta el atacado vuestras corrientes vibrando sobre él y hacerle saber que se le impone.
Este ejercicio tan importante, no puede ir exento del sexto grado (desdoblamiento) pero aún aquí, no lo sabe el discípulo, pero sí el maestro; es decir, no lo sabe el sonámbulo discípulo, pero sí debe saberlo el magnetizador maestro, si es verdadero discípulo del "Método Supremo".
Aquí, en este grado, podéis hacer maravillas en la transmisión de órdenes y curaciones prodigiosas (1) con seres queridos, o con aquellos que os acompañan. Para vuestro contentamiento, procurar comprobarlo; para lo cual podéis tomar por el sonámbulo, la filiación y dirección, y una vez que veáis en vuestro discípulo clarividencia y conciencia, entrad para completar su educación en la siguiente lección.
(1) Hemos dicho "Curaciones Prodigiosas", pero no hemos dicho milagrosas, porque el milagro no lo hizo ni lo hará nadie.
La curación magnética es del todo científica y no será nunca sin medicina, pues el magnetismo, en sí mismo, es medicina, ya que él es, átomos de vida.