Viernes 28 de marzo de 1952
Médium Virginia - Escritura
Cuántas frases inútiles se pronuncian... palabrería vana y hueca que no significa nada efectivo.
Si pudierais ser concisos, contundentes, claros y justos en vuestras expresiones, no os veríais embrollados por vuestras frases equívocas, ambiguas. Hay que acostumbrarse a usar un lenguaje correcto que exprese con exactitud el pensamiento, la acción de un racionalista, así se evitarán malas interpretaciones, máxime, cuando os estéis dirigiendo a esos falsos sabios que con sus preguntas especiosas tratan de entorpecer vuestra exposición y no se esfuerzan por comprender lo que deseáis decir, sino por poneros en ridículo.
Debéis estudiar constantemente sin en verdad vais a defender y a propagar esta doctrina; cada uno en su grado debe entender que el progreso es la demostración necesaria de la convicción de que hacéis alarde.
Estad alerta, pues, con vuestra forma de manejar el idioma que, por su riqueza y bella sonoridad, merece que lo utilicéis con gracia, donaire y efectivos resultados. Expresaos conscientemente y así no habrá lugar a rectificaciones penosas. Claro que os costará trabajo, pues no se os dará nada de regalo, mas hacedlo y estaréis satisfechos de vuestro esfuerzo.
Espero vuestra obra.
Joaquín Trincado.
Viernes 5 de abril 1952
Médium Virginia - Escritura
Os saludo y vengo a unir mi gozo al vuestro.
Que se eleve y resuene nuestro canto, y vibren las conciencias adormecidas y recuerden la promesa que ante el tribunal del Padre hicieron los morosos; y los que se juramentaron en la fecha que hoy celebramos, apresuren el cumplimiento de lo que les toca desempeñar en la obra que, para regenerar a la humanidad, emprendieron veintinueve misioneros.
María, llena de amor, está presente y os cubre con su ternura y os exhorta a mirar en cada uno de vuestros hermanos la obra de Eloí, y si en verdad amáis esta Escuela, fortalecedla, hacedla conocer de todos los hombres, hablad sin temores, que la hora ha llegado de proclamar el reinado del amor entre los hombres.
Sin aspavientos ni escándalos la justicia va cumpliendo los planes de los Consejos superiores, y veréis cómo caerá lo que ahora parece reavivar su auge, que es el postrer esfuerzo cuando se reconoce la proximidad de la justicia.
Cuanto más os parezca que cobra bríos la falacia, es que aun faltan algunos rezagados a quienes es preciso hacer ver la falacia religiosa para que, por propio escarmiento, arrojen de sí la nauseabunda venda y caminen a plena luz.
Gloria a los misioneros valientes y esforzados.
Loor a los amados maestros que ayudaron con su fuerza a consumar la epopeya feliz.
Hosanna a Eloí, Padre de infinito amor, que al darnos la vida nos ha dado también el germen de su sabiduría.
Bendito mil veces el día en que pudimos llegar y pedir al Padre lo que nos correspondía después de tan arduos trabajos.
Ahora pasa desapercibida, pasa la vida como si nadie recordara absolutamente nada, mas llegará el tiempo en que se celebre no tan sólo el día, la fecha, sino hasta el mes en que ocurrió tan solemne acontecimiento.
Ahora la lucha absorbe el tiempo que necesitáis para entonar la mente y reuniros con placidez a celebrar esta fiesta; os faltan muchas cosas que desearíais en este día consumar, en cambio, gran entusiasmo, mucho valor y, sobre todo, un grande y puro amor hacia los que ignoran las verdades que vosotros conocéis y que, por ignorarlas, padecen dobles sufrimientos, pues es duro sufrir sin saber con certeza porqué o por quién y vivir sin esperanza cierta de un porvenir mejor.
Sigamos, pues, hermanos, en esta bella obra; edifiquemos el futuro de la humanidad y cuando la obra ya esté dando el servicio que esperamos, con cuánto embeleso hemos de recordar las peripepcias que ahora lamentamos.
Adelante y que el Universo que está dentro de nuestro propio ser se expanda y acreciente la creación, os lo desea vuestro hermano.
Joaquín Trincado.