Sri Sankarâchârya (S. VIII): DRIGDRISYAVIVEKA
1.
Se
percibe una forma-objeto, pero es el ojo el que percibe. Esto último es percibido
por la mente. La cual se convierte en sujeto perceptor. Finalmente, la mente,
con sus modificaciones, es percibida por el Pensador-Espectador, el cual no
puede ser objeto de percepción.
2.
Debido a distinciones
como: azul, amarillo, denso o sutil, corto o largo, el ojo, como unidad, percibe
la variedad de las formas.
3.
El ojo (la vista)
es penetrante, nublada, o bien, ciega; y estas características pueden ser
percibidas porque la mente es una unidad. Esto se aplica también (a todos
los otros órganos): oreja, piel, etc.
4.
La Consciencia ilumina
al deseo, a la decisión y a la inseguridad, a la fe y a la incredulidad, ala
perseverancia y a la inconstancia, a la humildad, la comprensión, el temor,
etc. porque (“Ella”) es una unidad.
5.
Esta onsciencia no
tiene nacimiento, crecimiento ni muerte. Ella es siempre autoresplandeciente
y, sin la ayuda de nadie ilumina todas las cosas[1].
6.
Un reflejo de Consciencia
pura impregna la buddhi[2]
dándole inteligencia. La buddhi
se revela en su doble naturaleza; como factor egoico y como mente.
7.
El Sabio considera
proporcionalmente equivalentes el reflejo de la consciencia y el sentido del
ego al fuego y al trozo de hierro candente. El cuerpo, identificándose con
el ego, toma consciencia de sí.
8.
El sentido del ego
puede identificarse de tres modos: con el reflejo de la consciencia, con el
cuerpo y con el Testigo (Atman).
La primera identificación es natural, la segunda se debe a su karma anterior, y la tercera a la ignorancia.
9.
La identificación
recíproca y natural (del ego y del reflejo de la consciencia) persiste mientras
se la considera real; las otras dos identificaciones se desvanecerán cuando
terminen los efectos del karma y
cuando surja la iluminación.
10.
En el estado de sueño
profundo (prajna), cuando el ego
desaparece, el cuerpo mismo se despoja de consciencia. En el estado de sueño
con sueños (taijasa) solo hay un
semi-emerger del ego, mientras que en el estado de vigilia (vaishwanara) el ego es plenamente consciente.
11.
El órgano interno,
que es una modificación, identificándose con el reflejo de la consciencia,
imagina ideas mientras sueña. Después, en el estado de vigilia y en relación
con los órganos sensoriales imagina objetos externos.
12.
El insensible cuerpo
sutil, causa material del manas y del sentido del ego, es una unidad; él pasa
progresivamente a través de los tres estados (vigilia, onírico y sueño profundo)
y está sujeto a nacimiento y muerte.
13.
Ciertamente, maya tiene dos poderes: el proyectivo (viksepa-sakti) y el velador (avriti sakti). Desde el cuerpo sutil hasta
el cuerpo denso, todo es creado por el poder proyectivo.
14.
En Sat-cit-ananda (Ser, Consciencia, Beatitud), naturaleza de Brahma, el mundo de los nombres y de las
formas se manifiesta de la misma manera que las olas y gotitas que emergen
del océano; a este acontecimiento se lo llama manifestación.
15.
El otro poder de la
maya (el “velador”) oculta la distinción
entre quien ve y lo que es visto, situados en el interior (del cuerpo), y
la distinción entre Brahma y el
mundo de las apariencias, percibido fuera (del cuerpo). Este poder es la causa
del universo feneménico.
16.
En la proximidad del
Testigo (Atman), el misterioso cuerpo
sutil (linga sharira) –identificado
con el cuerpo denso- se ilumina, y el ser vivificado por el reflejo de la
Consciencia pura, se convierte en individualidad operante.
17.
Éste, que es la naturaleza
del jiva, aparece como efecto de
una superposición ilusoria en el Saksin-Testigo.
Cuando el poder velador de la maya desaparece, entonces se puede notar claramente
la diferencia y, como consecuencia ella (la individualidad) desaparece.
18.
De modo parecido,
bajo la influencia del poder velador que oculta toda distinción entre el universo
de las apariencias y Brahma. Este
último parece poseer los atributos
del cambio de aquel.
19.
También en este caso,
la distinción entre Brahma y el
mundo fenoménico puede comprenderse solo cuando el poder “velador” de maya, ha sido eliminado. De modo que el
cambio puede ser percibido en lo manifestado y nunca en Brahma.
20.
La Existencia (Sat), la Consciencia resplandeciente (citt), la Beatitud (ananda), y el nombre y la forma, son las cinco características universales;
las tres primeras se refieren a Brahma, las otras dos al universo fenoménico, o sea, al reflejo.
21.
La Existencia pura
(Sat), la Consciencia pura (cit) y la Beatitud pura (ananda) son comunes no solo al éter (akasha), al aire, al fuego, al agua y a
la tierra, sino también a los Dioses, a los hombres y a los animales; sólo los nombres y las formas (creados por la facultad
mental) hacen que un ser sea distinto de otro.
22.
Cuando uno se vuelve
indiferente al mundo de los nombres y las formas y se consagra al Sat-citt-ananda, debe practicar ininterrumpidamente
la Contemplación (samadhi) sobre
el centro del corazón o sobre un pensamiento-semilla externo.
23.
En el centro del Corazón
pueden practicarse dos géneros de samadhi:
uno, en el que están presentes las ideas (savikalpa),
y otro, en el que las ideas están ausentes (nirvikalpa).
A su vez, el primero es susceptible de distinciones: puede asociarse con un
objeto de percepción, o bien en un sonido (como objeto).
24.
Los deseos, etc. centrados
en la mente, son objetos (del conocimiento). Es necesario meditar sobre la
consciencia citt como Testigo de
tales modificaciones mentales. Este estado se llama savikalpa-samadhi asociado con un objeto (del conocimiento).
25.
Soy Sat-citt-ananda independiente, autorresplandeciente,
libre de la dualidad. Esto se conoce como (el segundo género de) savikalpa-samadhi
asociado con el sonido (subjetivo).
26.
En cambio, el nirvikalpa-samadhi es aquel en el que la
mente, como la llama resguardada de los vientos, se mantiene estable, y en
el que el discípulo permanece indiferente y quieto no sólo frente a todos
los objetos externos de la meditación, sino también ante los objetos internos
asociados con el sonido, porque se absorbe completamente en la Beatitud de
Brahma.
27.
El primer género de
samadhi (savikalpa) es posible a través de un objeto, tanto interno (subjetivo)
como externo (objetivo). En este último samadhi, el mundo de los nombres y de las formas (nama-rupa)
se disocia de la Existencia pura.
28.
La Entidad (Brahma), permanece siempre en su misma
naturaleza incondicionada e impregnada de Sat-citt-ananda.
La contemplación ininterrumpida de ese estado se llama reflejo medio.
29.
El precedente estado
de quietud mental es considerado por su beatitud, como la tercera fase del
samadhi. Es necesario realizar incesantemente
estos seis géneros de samadhi.
30.
Desidentificándose
del cuerpo y realizando el Atman
supremo, por más que la mente pueda dirigirse hacia cualquier objeto, se experimenta
el nirvikalpa-samadhi.
31.
Cuando las cadenas
del deseo han sido despedazadas, todas las dudas disipadas, y los diversos
tipos de karma disueltos, se realiza “Aquel” que, al mismo tiempo está arriba
y abajo. Aquél que, a la vez, es trascendente e inmanente[3].
32.
Hay tres especies
(conceptos) sobre el jiva: el limitado,
el falsamente presentado y el imaginado en sueños.
33.
La limitación es ilusoria,
pero lo que parece limitado es real. El estado del jiva se debe a las superposiciones de los
atributos del Atman, pero Éste es
de la misma naturaleza que Brahma.
34.
Las grandes sentencias
védicas como Tat tvam asi (Tu eres
Aquel)[4],
expresa la Identidad del jiva con
Brahman sin partes. Esta Identidad se aplica
al jiva limitado[5]
y no se concibe con los otros dos jivas.
35.
La maya proyectiva y veladora reposa en Brahman. Ella, cubriendo la naturaleza indivisible de Brahman, imagina el universo (jagat) y al jiva.
36.
La falaz presentación
de la conciencia en el buddhi, que
efectúa diversas acciones y recoge los frutos, se llama jiva. A su vez, lo que consiste en elementos, con sus respectivos
productos que son de la naturaleza del goce, se llama universo (jagat).
37.
Estos (jiva y jagat), que no tienen comienzo, sólo existen para quien todavía no
obtuvo la Liberación (moksha). Por
lo tanto, ambos son fenoménicos.
38.
Asociado con una errónea
presentación de la consciencia, el sueño-torpor, que participa de la proyección
y del oscurecimiento, comienza a recubrir (en el estado de vigilia) al jiva
y al universo percibido, después (durante el sueño) imagina aún otros universos-objetos.
39.
Ellos (el sujeto y
el objeto de la percepción) son ambos ilusorios porque existen solamente mientras
dura la experiencia del sueño. En realidad, ningún jiva que sueñe, una vez de vuelta ene el estado de vigilia, vuelve
a ver a aquellos mismos objetos en otro sueño.
40.
El jiva, mientras sueña, considera real al universo soñado, pero el jiva empírico (en el estado de vigilia)
lo considera irreal.
41.
El jiva objetivo (visva) considera,
además, a este mundo de vigilia como real, pero el verdadero jiva (el Atman) comprende que ese mundo real no lo es.
42.
El jiva verdadero reconoce que su identidad con Brahma es Real, y no ve nada que no sea Identidad. Todo el resto lo
considera ilusorio.
43-44
Así como el sabor,
la frescura y la fluidez, atributos del agua, parecen pertenecer a las olas
y luego a la espuma (de la que las olas son el substrato), de igual modo la
Existencia, la Consciencia y la Beatitud absolutas (que son el Testigo), parecen
pertenecer al jiva de la experiencia
vigil y onírica.
45.
Cuando
las aspersiones de espuma vuelven a ser olas, la fluidez, la frescura, etc.,
se disuelven en las olas, y estas, a su vez, se disuelven en el océano.
46.
Cuando el jiva de la experiencia
onírica se reabsorbe en el de la vigilia, la existencia, la consciencia y
la beatitud del jiva nocturno se disuelven en el estado
de vigilia. Cuando el jiva de la
experiencia de vigilia termina reabsorbieéndose en el Espectador-Testigo (Atman), también sus reflejos de existencia,
consciencia y beatitud se disuelven en Él.
[1] Se lee asímismo en el Katha Upanishad, II,V,15: “En Él (Atman) no resplandece el sol, ni la luna o las estrellas, no fulguran los relámpagos, ni siquiera este fuego nuestro; todo este universo resplandece con su propia luz”. Y en el Mundaka Upanishad, II,II,10: “En la envoltura aurea y gloriosa mora el puro e indivisible Brahma; Él es lo resplandeciente, luz de luces, es el único al que los conocederes del Atman conocen”,
[2]
Buddhi es el intelecto transcendente,
de orden universal, la más alta facultad del ser humano al que no hay que
confundir con la mente racional (manas),
de la cual es un determinante. Es asimilable al nous de los pitagóricos y neoplatónicos. Sobre la distinción entre
manas, buddhi, ahamkara y citta, que juntos constituyen el antahkarana, véase el estudio de Ernesto
Ballesteros , Anthakarana. Sobre
la distinción entre buddhi y manas
véase René Guénon, El hombre y su devenir según el Vedanta.
[3]
“Se corta el nudo del deseo, se disuelven
todas las dudas, y desaparece el karma cuando se ve Aquél que es trascendente
y, al mismo tiempo, inmanente”. Mundaka upanishad, II, 3, 9
[4] Aparte de la ya mencionada, en el Veda, hay cuatro sentencias (mantras) que afirman la Identidad del jiva con Brahman. Ayam âtmâ Brahma (Este atmâ es Brahma), Aham brahmasmi (yo soy Brahman) y Prajnanam brahma (La Conciencia pura es Brahman). Sobre el significado de las grandes sentencias védicas, véase el Vakyavritti de Shankara.