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Miss Venezuela

Quieren desplazar a las misses venezolanas del sitial de honor.
India tiene su propia fábrica de reinas.

La Miss Mundo 1999 no es tan natural como parece

Los recientes triunfos de jóvenes indias en Miss Mundo y Miss Universo, no son producto de la suerte, un equipo de expertos las transforma a su antojo.

Caracas.- 'La belleza no nace, se hace', es la frase favorita del archiconocido hacedor de Misses, Osmel Sousa, cuyas tácticas nunca fueron bien copiadas... hasta ahora. La fábrica de muñecas humanas con sonrisas deslumbrantes y contoneo tropical cruzó el océano, y por paradójico que parezca es imitada a la perfección en la tierra del Taj Mahal. La India quiere destronar a Sousa y va en muy buen camino.

La revista India Today develó los rituales que siguen las reinas de su país en un extenso reportaje donde se cita textualmente 'India está lista para reemplazar a Venezuela como una máquina de bellezas internacionales'. Escuchar a la experta en fitness, Ramma Bans, es lo mismo que oír a Sousa: 'una chica sólo necesita una cara atractiva, nosotros le damos lo demás (...) hasta una nueva personalidad, sólo la altura no es negociable'.

En seis años, tres chicas indias se han coronado Miss Mundo, incluyendo a la actual, Yukta Mookhey de 21 años. Al sumar la ganadora de 1966, Reita Faría, el total alcanza cuatro; una menos que Venezuela que mantiene el récord con cinco. En el Miss Universo no se quedan atrás, desde 1990 hasta la fecha todas las beldades indias han llegado a las finales excepto una, y en 1994 lograron las coronas simultáneas del Miss Universo y Miss Mundo con las ahora actrices Sushmita Sen y Aishwarya Rai.

Detrás de las jóvenes existe todo un equipo de nutricionistas, peluqueros, maquilladoras, diseñadores, cirujanos, dentistas, instructores de danza y oradores.

¿Suena conocido? La cosa es casi idéntica a lo que acostumbra Sousa: para perfeccionar el rostro utilizan desde dermabrasión hasta rinoplastia, inyecciones de silicona y retoques en la punta de la nariz. Los ortodoncistas se ocupan de trabajar las encías, alinear y blanquear los dientes, disminuir el tamaño original y trabajar los mentones para cambiar mandíbulas cuadradas o angulares. Liposucción, dietas vegetarianas, y ejercicios moldean el cuerpo y el busto.

La piel de Miss Mundo 1997, Diana Hayden, fue aclarada para lograr un 'look' más occidental. Su sonrisa es el trabajo de dientes reducidos, emparejados y blanqueados, mientras que Sen tuvo que ejercitarse con la máquina del busto para agrandar el tejido de lo que la naturaleza no le dio.

El cambio no se queda en lo físico, la belleza interior (de la que tanto hablan las misses) es ejercitada a través de mantras, yoga y meditación, aprenden a enfocarse en lo que hacen y dicen. La espiritualidad las ayuda con vibraciones positivas y les desarrolla el aura de una ganadora.

El factor cultural podría marcar la gran diferencia con las venezolanas. En el controvertido concurso bolivariano quedó demostrado que las jóvenes locales tienen problemas para coordinar sus ideas frente a un micrófono, no importa que tengan más edad o una carrera universitaria. Peor aún cuando un jurado 'pensante' premia con un segundo lugar a una María Laura Lugo, quien despliega una notable escasez de vocabulario e ideas.

En contraste, la estudiante de economía, Lara Dutta, obtuvo su pasaje a Chipre al Miss Universo al serle preguntado: 'Si la ignorancia es una bendición, ¿por qué vamos en búsqueda del conocimiento? A lo que respondió: 'Es posible que sea una bendición, pero, ¿quisieran ustedes que sus hijos fueran ignorantes?'.

La nueva fábrica de misses podría añadir un nuevo trofeo en mayo para confirmar su éxito.

La pelea es peleando.

'Si ellos dicen que nos van a desplazar, la pelea es peleando', afirma Osmel Sousa. 'Las niñas indias llevan un discurso bien aprendido, hablan de la miseria, hacen su reverencia con las manos en el pecho y los jurados se conmueven'. Sin embargo acepta que las chicas son espirituales, 'algo que cultivan desde pequeñas, pero su tipo de belleza es diferente de la latina'. Y no deja de acotar en medio de risas 'las venezolanas son más bellas que las de allá, el público lo sabe y aunque no ganen, eso es lo que a mí me importa'.

¿Temor a ser desplazado? 'No lo creo, esperemos que no, ya encontraremos nuestra plataforma'.


"India tiene su propia fábrica de reinas",
en El Universal.
Caracas, Domingo 12 de marzo de 2000.




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