Estaba en la habitación 705 del Hotel Meliá Montevideo cuando atendió el teléfono. "Estoy feliz. Obtuve una corona internacional y para mí este triunfo es muy importante". Habla Norkys Batista, la nueva Miss Atlántico Internacional. "Cuando llegué a Punta del Este (balneario en el que se celebró el concurso) me sentí muy bien. Compartí con un grupo de muchachas que se convirtieron en mis amigas, casi mis hermanas". Y recordó que en más de una oportunidad le tocó servir de peluquera y maquilladora para sus compañeras "porque todas acuden a la venezolana porque es la más preparada. A Miss Italia le presté un vestido; a la chica de Colombia, un collar".

Ayer, en horas de la tarde, Batista se reuniría con los organizadores del evento para definir los objetivos a seguir al frente del reinado, que el año pasado ocupó Miss Chile.

En relación con la situación que vive la Organización Miss Venezuela y la elección de una nueva candidata que irá al Miss Universo, dijo que "me he enterado de todo a través de la prensa y por lo que me ha contado mi mamá. El Miss Universo era mi sueño, pero me tengo que resignar y llenarme de fuerzas. Me he hecho la idea de que nunca existió la posibilidad de ir al concurso".

Afirmó que respeta la decisión de Osmel Sousa de no enviarla al Miss Universo, pero "me parece muy injusto. Estoy decepcionada, pero me llena la corona que acabo de obtener aquí en Uruguay. Lo único que exijo es una explicación a la Organización Miss Venezuela".

No cree en el grupo de las mejores y las veteranas que se disputarán el Miss República Bolivariana. "¿Para qué entonces nos preparamos tanto nosotras durante el Miss Venezuela?" Aseguró que no se arrepiente de nada de lo que ha dicho en todo este tiempo. "He tratado de llegarle a la gente de la manera más sincera posible. Si he cometido imprudencias, pido excusas pero no creo que haya hecho nada poco conveniente".

El único responsable.

Que no se confunda el asunto: el Miss Universo no es el responsable de que Martina Thorogood no asista a la máxima cita de la belleza mundial. No es la organización que preside Donald Trump la que haya puesto obstáculos a la primera finalista del Miss Mundo y actual Miss Venezuela, para que no pueda ver coronada su ilusión de concursar en el certamen más importante del mundo. No. En aclaratoria vía fax, la Organización Miss Venezuela, presidida por Osmel Sousa, prefiere sacar al certamen internacional de esta engorrosa polémica: "En virtud de la privilegiada posición que obtuvo en el pasado certamen del Miss Mundo la señorita Martina Thorogood, y tomando en cuenta la posición de primera finalista que ostenta, nos vemos obligados a estar preparados y pendientes para recibir la Corona de dicho certamen (el Miss Mundo) ante cualquier eventualidad que impida seguir en sus funciones a la actual Miss Mundo, y por ello informamos que se optó por llevar a cabo el primer certamen de belleza venezolano del nuevo milenio, el próximo 26 de febrero, en el cual se elegirá a la primera Miss República Bolivariana de Venezuela".

No más confusiones. El Miss Venezuela asume la responsabilidad completa de la decisión. La aclaratoria parece ir dirigida contra la misma Thorogood, que en pasadas declaraciones a la prensa, advirtió que ha revisado el reglamento del Miss Universo y no ha conseguido por ningún lado que exista un impedimento especial para una primera finalista del Miss Mundo. De manera que siguen abiertas las interrogantes sobre el asunto: ¿cuál es la verdadera razón para que el Miss Venezuela haya descartado tanto a Thorogood como a Batista para el Miss Universo de mayo. La actual Miss Venezuela lo dijo hace unos días: es un asunto económico, en el que estuvo en juego la franquicia del certamen internacional e incluso otros aspectos de orden político. Thorogood, para molestia de muchos, parece saber demasiado.

"Una miss decepcionada. Norkys Batista: "Todo es injusto"",
en El Nacional.
Caracas, Martes 1 de Febrero de 2000.