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El Apando (1975) |
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Indice de Pel�culas |
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Manuel Ojeda en El Apando |
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El Apando
Producci�n (1975): Conacine I
Direcci�n: Felipe Cazals
Argumento: sobre la novela hom�nima de Jos� Revueltas; adaptaci�n: Jos� Revueltas y Jos� Agust�n.
Fotograf�a: Alex Phillips Jr.
Sonido: Manuel Topete.
Escenograf�a: Salvador Lozano.
Edici�n: Rafael Castanedo.
Filmada del 22 de septiembre al 30 de octubre de 1975 en los estudios Churubusco y en locaciones del Distrito Federal.
Int�rpretes: Salvador S�nchez (Albino), Jos� Carlos Ruiz (El Carajo), Manuel Ojeda (Polonio), Delia Casanova (La Chata), Mar�a Rojo (Meche), Luz Cort�zar (madre del Carajo), �lvaro Carca�o (teniente), Gerardo del Castillo (polic�a), Ana Ofelia Murgu�a (celadora), Guillermo Gil (preso), Max Kerlow (preso del su�ter amarillo),Tom�s P�rez Turrent (preso de la fajina), Carlos Card�n (cantante entrevistado en la televisi�n), Sergio Calder�n (oficial), C�sar Sobrevals (celador de �defensores�), Adriana Rojo, Roberto Rivero, Mar�a Luisa Garza, Jorge Feg�n (preso), Samuel Moreno (polic�a), Pedro Monta�o, Mar�a Eugenia Barber. |
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Mar�a Rojo y Ana Ofelia Murgu�a en El Apando |
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Sinopsis: En la c�rcel de Lecumberri est�n �apandados� los amigos Albino y Polonio, viciosos que fueron aprehendidos por traficar con droga. Con ellos est� El Carajo, tuerto y repulsivo, que no puede vivir sin la droga y que no vacila en cortarse las venas para ingresa a la enfermer�a. El d�a de visita esperan la llegada de sus mujeres, Meche y La Chata, y de la madre del Carajo, que meter�n droga al penal para ellos. Mediante flasbacks se desarrolla la acci�n de c�mo concibieron el plan para meter la droga. Polonio visita al Carajo en la enfermer�a, a donde a ingresado despu�s de cortarse las venas, le vende veinte �baros� de �papel�, mismos que El Carajo se �mete� al instante, y le propone un plan para meter droga al penal, para el cual necesitan la ayuda de su madre. El d�a de visita, en el �cuarto de defensores�, El Carajo pide a su madre que coopere con ellos para introducir la droga. La se�ora acepta y Albino, Polonio y sus respectivas mujeres le explican que deber� poner en su sexo la droga y as� introducirla al penal, pues a La Chata y a Meche las registran del todo. Para celebrar que la madre del Carajo ha aceptado ayudarles, todos celebran inhalando droga y Albino ense�a su abdomen desnudo, tatuado con la figura de un coito. Son sorprendidos y los presos son registrados y encerrados en el apando, celda de castigo, y las mujeres sacadas del penal. El siguiente d�a de visita llegan Meche, La Chata y la madre del Carajo. Las j�venes arman un esc�ndalo frente al apando exigiendo que saquen a sus hombres, mientras Albino, asomado por la ventanilla del apando, le exige a la se�ora le de la droga, pero ella insiste en ver antes a su hijo. Los otros presos se contagian con la griter�a de las mujeres y tambi�n gritan. Un polic�a vestido de civil les dice a las mujeres que sacar�n a sus hombres para que los vean, pero que la calmen. Los polic�as abren el apando y se llevan a los presos y a sus mujeres, pero en el trayecto unas rejas se cierran para cercar a los tres hombres y a varios polic�as en donde ambos pelean violentamente, quedando ensagrentados. Los polic�as que han quedado fuera introducen a trav�s de las rejas unos tubos de acero para inmovilizar a los presos. El Carajo denuncia a su madre diciendo donde oculta la droga. |
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Delia Casanova, Mar�a Rojo, Luz Cort�zar y Salvador S�nchez en El Apando |
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Manuel Ojeda en El Apando |
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Comentario (Jes�s Ibarra): El apando, cinta impactante, repulsiva, violenta, pero magn�fica. Felipe Cazals, basado en el relato que hizo Jos� Revueltas cuando estuvo preso, logr� un retrato magn�fico y realista del sistema carcelario en M�xico. La pel�cula abre con un shot de la cabeza de Manuel Ojeda, asomado por la ventanilla del apando, una cabeza que parece no tener cuerpo, con una mirada brutal, siniestra, llena de odio y coraje. Despu�s la acci�n pasa a un polic�a (Gustavo del Castillo) que se quita el uniforme y se viste de ranchero. Llega a su casa en un barrio bajo de la ciudad, mientras es observado por unos vagos que dice �mira, ese es tira�. Dentro de la casa, los ni�os, hijos del polic�a le destapan la cerveza, mientras la mujer plancha. El hombre saca de su bolsillo unos billetes arrugados, desde luego no fruto de su salario, sino de mordidas que recibe de los propios presos, y se los da a su mujer, mientras le acaricia la nalga. La corrupci�n y la sumisi�n sale del penal con el polic�a y entra a la casa del ciudadano. Salvador S�nchez y Manuel Ojeda, sencillamente grandiosos en sus actuaciones. S�nchez tiene tatuado en el abdomen una figura de un coito, misma que ense�a y mueve ante sus compa�eros durante una visita. Para aprender a mover la �panza� Salvador S�nchez tuvo que viajar a Acapulco y pedirle a los chicos de all� que le ense�aran. Mar�a Rojo es revisada en sus partes �ntimas por una terrible celador (Ana Ofelia Murgu�a). Mientras es explorada, Mar�a se imagina que est� haciendo el amor con Salvador S�nchez, que muestra de nuevo el abdomen tatuado, en la escena m�s er�tica y grotesca a la vez que se recuerde en el cine mexicano. Jos� Carlos Ruiz, estupendo como el tuerto, repulsivo Carajo, una especie de Edipo mexicano. La mujer que caracteriz� a la madre del Carajo, no era una actriz profesional, sino una se�ora que vend�a hierbas detr�s de un cine en la colonia Inguar�n. Era el rostro exacto de la madre mexicana, imp�vido, casi inexpresivo, con esa mirada entre triste y perdida, resignada. El apando fue enviada al Festival de San Sebasti�n para representar a M�xico. La presidenta del jurado era Dolores del R�o. Durante la exhibici�n de la cinta, Dolores se levant� de su asiento y abndon� el palco, diciendo que se rehusaba a seguir viendo �una porquer�a de tal magnitud arropada en el l�baro patrio�, por lo que la cinta de Cazals perdi� toda oportunidad de llevarse alg�n premio en el festival, pero eso no lo impidi� a esta magn�fica y revolucionaria pel�cula seguir vigente hasta la fecha. |
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Jos� Carlos Ruiz en El Apando |
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