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El Combate Más Difícil: El Luchador vs. La Balanza
Problemas Relacionados con la Deshidratación en Lucha
Los luchadores emprenden a menudo reducciones de peso que implican mucho más que restricciones alimenticias, utilizando métodos, que por lo general incluyen disminución en la ingesta de líquidos o su eliminación excesiva con la consiguiente deshidratación.
Los efectos de éstas prácticas se asocian con:
- Alteraciones en el funcionamiento cardíaco aún en condiciones de trabajo submáximo.
- Menor consumo de oxígeno.
- Deterioro de los procesos termorreguladores.
- Disminución del flujo sanguíneo renal.
- Agotamiento de las reservas hepáticas de glucógeno.
- Pérdida aumentada de electrolitos.
- Reducción de la fuerza muscular.
- Disminución del tiempo de ejercicio.
Es posible eliminar el riesgo que significa para la salud la deshidratación que utilizan los luchadores para “entrar en peso”, a través de diversas medidas:
- Evaluar la composición corporal de cada luchador varias semanas antes de la temporada de competencias, de tal manera que aquellos individuos con una cantidad de grasa inferior al 5% de su peso corporal (mínimo permitido) deban obtener una autorización médica antes de que se les permita competir.
- Destacar que el requerimiento calórico diario de los luchadores debe provenir de una dieta equilibrada, determinada sobre la base de la edad, la superficie corporal, el crecimiento y el nivel de actividad desarrollada. Este requerimiento calórico será no inferior a las 1200 kcal/día, siendo los entrenadores, los funcionarios de las organizaciones deportivas, los médicos y los padres los responsables de no fomentar la incorporación de cantidades de energía inferiores a las necesidades mínimas recomendadas, salvo indicación médica.
- No fomentar la práctica de la privación y/o de la pérdida excesiva de líquidos, lo cual se puede lograr:
o Educando a los luchadores y entrenadores sobre las consecuencias fisiológicas que pueden originar tales prácticas.
o Prohibiendo el empleo de trajes de goma, cuartos de vapor, saunas, laxantes y diuréticos para “entrar en peso”
o Programando los pesajes inmediatamente antes de las competencias, y
o Programando un mayor número de pesajes oficiales en los intervalos de los encuentros entre los equipos.
- Estandarizar las reglamentaciones con respecto a las reglas de selección para los torneos, de tal modo que los luchadores sólo puedan participar en aquellas categorías de peso en las cuales tuvieron las mayores frecuencias de encuentros durante toda la temporada.
- Alentar a las organizaciones deportivas para que reúnan sistemáticamente datos sobre el estado de hidratación de los luchadores y su relación con el crecimiento y el desarrollo.
Médico
e-mail: [email protected]
Matricula Profesional : 81.953
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