¿Qué
es un arma? En su sentido más amplio y según la definición que
podemos encontrar en el diccionario un arma es todo objeto o
instrumento destinado a atacar y defender. La división básica entre
los tipos de arma se establece entre las armas blancas y las armas de
fuego, con características diferenciales bien claras.
Clasificación
de las armas
Las armas blancas pueden dividirse
entre aquellas que se utilizan sin soltarlas del brazo asiéndoles por
una empuñadura y aquellas otras que se lanzan o arrojan con el único
impulso del brazo para herir a mayor distancia aunque siempre con
menor precisión.
Se denominan armas de proyección aquellas que mediante una
fuerza mecánica proporcionada por la elasticidad de materiales o bien
por efecto de una reacción química permiten arrojar un proyectil
quedando siempre el mecanismo de proyección en manos del cazador o
tirador. Podemos subdividirlas en:
Armas de Propulsión mecánica: como la cervatana que aprovecha
el impulso del aire acumulado por el cazador en sus pulmones, el arco
y la ballesta con sus flechas, que aprovecha la elasticidad de ciertos
materiales y la carabina de aire compromido.
Armas de propulsión química:
como son todas las armas de fuego donde el proyectil, bien bala o bien
perdigones son proyectados merced a los gases generados en la reacción
de una sustancia química
Partes y
piezas de un arma larga
Las armas largas de caza y tiro son básicamente las escopetas
o armas de cañón liso y los rifles o armas de cañón rayado.
La escopeta es un arma cuya función es lanzar los perdigones
de los cartuchos a una velocidad determinada, así como conseguir que
éstos se dispersen de forma adecuada. Para esta función el interior
del cañón no tiene por qué estar estriado, como es el caso de los
rifles, y por ello, cuando nos referimos a las escopetas hablamos
generalmente de armas de cañón liso o de ánima lisa (interior desde
la recámara hasta la boca), aunque existen también en la actualidad
algunas escopetas cuya ánima no es lisa.
Dentro de lo considerado como armas rayadas entrarían todos
los rifles y algunas escopetas y armas especiales. El arma rayada, por
definición, es aquella arma de fuego cuyo ánima es rayada o
estriada. Este estriado son simplemente unos pequeños surcos o
hendiduras, de aproximadamente una décima de milímetro de
profundidad, que se desplazan por el ánima de forma helicoidal y que
sirven para que el proyectil, al tomar esta especie de senda, salga
girando sobre su eje y mejore su estabilidad durante el vuelo,
beneficiando el alcance y precisión del disparo.
Las armas largas están
constituidas por una serie de elementos básicos:
Cañón Recámara Culata Mecanismos Choke
Calibre
Cañon
De su calidad depende mucho la bondad del arma. Esta pieza está
realizada en acero forjado, confiriéndole su fabricación cierta
elasticidad. Su labor es principalmente la de dirigir el disparo hacia
el punto deseado.
La mayoría de escopetas de un calibre medio como es el 12 están
dotadas de cañones de unos 70 ó 71 centímetros. En el tiro
deportivo es usual la utilización de cañones más largos (76 a 81
cm).
Recámara
Es el extremo del cañón donde se aloja el cartucho. Sus
medidas están controladas por la CIP (Comission International
Permanent pour l'epreuve des armes portatives et leurs munitions) en
muchos países o por SAAMI en Estados Unidos.
La recámara tiene que soportar la presión de la vaina del
cartucho en el momento del disparo y por tanto es una pieza
especialmente diseñada para soportar enormes esfuerzos.
Culata
La culata sirve para adaptar el arma al cazador. Están
fabricadas en distintos tipos de plásticos y maderas, aunque la mayoría
están realizadas en nogal madera fuerte y resistente. Existen tres
tipos de culatas, según la caza a desarrollar y las preferencias
propias de cada cazador:
Culata inglesa: rectas y equipadas en escopetas yuxtapuestas o
superpuestas. Permiten mayor velocidad en el disparo y muy
aconsejables para escopetas con doble disparador.
Culata semipistolet: de tipo artesanal con empuñadura veteada.
Culata pistolet: permite un mejor
agarre del arma. Suele utilizarse en escopetas de tiro deportivo, de
un solo disparador.
El cazador o tirador debe elegir
la culata con la que se sienta más cómodo a la hora de disparar. Las
culatas deben adaptarse en forma, curvatura y longitud a cada tirador,
siendo éste un aspecto fundamental para la comodidad y eficacia en el
uso del arma.
Mecanismos
Según el tipo de arma estarían incluidos el sistema de
percusión, sistema de expulsión y, ocasionalmente, el sistema de
alimentación.
Varían notablemente de un arma a otra, existiendo numerosos
sistemas y calidades.
Choke
En las escopetas existe un elemento básico específico que se
denomina choke. Se trata de una reducción interna o estrechamiento
del ánima del cañón en su extremo próximo a la boca del mismo.
Esta reducción del diámetro interno produce un aumento de la
velocidad de los perdigones y un mayor agrupamiento del plomeo.
Las diferencias en décimas de milímetro entre el diámetro
interno del ánima del cañón y el diámetro del estrechamiento
determina el tipo de choke.
Los valores se expresan en décimas de milímetro, letras,
cruces o estrellas según los países o fabricantes que han producido
las armas.
Cuanto mayor sea el choke (cuanto más cerrado sea), el plomeo
tendrá un círculo menor, aunque el disparo ganará en velocidad y
distancia efectiva. Para un cazador novel se aconsejan cañones con
chokes poco cerrados, por ejemplo, las escopetas de ¼ choke, que no
exigen una gran precisión en el tiro y son además igual de eficaces
en la caza a corta distancia en bosques. Los distintos tipos de choke
son:
Cilíndrico Mejorado
¼ Choke
½ Choke
¾ Choke
Full Choke
Hay que tener en cuenta que las
escopetas tienen generalmente un tipo de choke para cada cañón,
siendo la más común la de ¼ de choke en uno y ¾ en otro.
El efecto del choke sobre el plomeo o perdigonada es muy
importante ya que el máximo estrechamiento o "full choke"
produce un huso esférico o nube de perdigones más estrecho que
conducirá a un plomeo más compacto y eficiente a largas distancias.
Por contra un cañón sin modificar o cilíndrico produciría un
plomeo más disperso.
La elección de uno u otro tipo de choke depende del tipo de
tiro a realizar, distancia de interceptación, tipo de cartucho y
también del tirador.
Para un tirador rápido sería recomendable un medio choke para
el primer cañón, mientras que para un tirador más lento sería
preciso un tres cuartos de choke.
El segundo cañón debería ser siempre "full ckoke"
independientemente de las características del tirador.
El diseño del choke no está estandarizado como sus
dimensiones por lo que cada fabricante tiene un perfil distinto en la
búsqueda de un mejor plomeo.
Existen accesorios denominados chokes variables que se adaptan
a los cañones del arma permitiendo variar el estrechamiento y
consiguientemente las aplicaciones del arma para los distintos tipos
de caza.
El choke roscado dentro del cañón, fácilmente adaptable al
arma.
El choke montado en el exterior del cañón. Menos estético
que el anterior, aunque más cómodo a la hora de su limpieza, que
debe de hacerse necesarioamente tras cada jornada de caza, para evitar
su oxidación.
Tipos
de armas de caza y tiro
Armas de ánima lisa
Armas de ánima rayada
Armas combinadas
Escopeta de un solo cañón y único disparo
Se trata del arma más sencilla y de menor peso. En muchos
casos sin choke o como máximo con ¼ de choke. Es el arma utilizada
por los aficionados que se inician o personas de edad.
Escopeta paralela
Se trata del arma tradicional de caza que está formada por dos
cañones paralelos o yuxtapuestos. Es un arma muy adecuada para el
tiro de caza horizontal y al suelo. No es apropiada para el tiro al
plato. La calidad del arma reside en sus elementos básicos, cañones,
culata y mecanismos o báscula. La báscula define la calidad del
arma: platina entera o media platina. La primera tiene un mecanismo más
complejo, preciso y caro.
Escopeta superpuesta
Es el arma más utilizada para el tiro al plato por su fácil
encare y mejor campo visual. Tiene dos cañones superpuestos el uno
sobre el otro y unidos de diversos modos: macizo y ventilado. Las
culatas suelen ser de tipo "pistolet". Por su amplio campo
visual es adecuada para tiros verticales y sesgados.
Escopeta semiautomática
Es un arma de un solo cañón que permite el disparo de varios
cartuchos sin recargar (hasta tres son los permitidos por la legislación).
Se ha convertido en un arma muy popular para la caza y también para
el tiro. Suelen estar adaptadas para el uso de polichokes o chokes
variables. El funcionamiento del sistema de expulsión y alimentación
se realiza gracias a la presión de los gases del primer disparo.
Tienen un menor retroceso que las armas paralelas o superpuestas.
Escopeta corredera o "pump
action"
Es un arma de un solo cañón de báscula similar a las
semiautomáticas. En este caso la expulsión y alimentación del arma
se realiza mecánicamente por accionamiento manual por parte del
cazador o tirador. Requiere que el cazador se familiarice con el arma
y su mecanismo y es apta para todo tipo de caza.
Calibre
Una de las características para distinguir las armas es el
calibre. El calibre varía según se trate de armas de ánima lisa
(escopetas), de ánima rayada larga (rifles o carabinas) o de arma
rayada corta (pistolas y revólveres).
En las escopetas, la denominación
de cada calibre corresponde al número de bolas de plomo perfectamente
esféricas que pueden fabricarse con una libra de plomo. Así, el diámetro
del calibre 12 corresponde al diámetro de una de las 12 bolas que
pueden fabricarse con 1 libra de plomo.
Cuanto más baja sea la numeración
del calibre (calibres grandes), mayor será el diámetro del cañón
de la escopeta y mayor será la carga de plomos que acepte ésta. La
elección del calibre de la escopeta dependerá, como no, del tipo de
caza que se quiera practicar con ella, y para ello, es necesario
conocer los calibres más utilizados, además de sus características
generales para la caza:
Calibre 12: Es el más
polivalente. Puede ser utilizado en cualquier modalidad de caza y
tiro.
Calibre 16: Escopetas muy
manejables y ligeras aunque con inferiores cualidades balísticas que
las del calibre 12.
Calibre 20: Lógicamente la carga
de plomos es menor comparado con un calibre 12, y por tanto sus
cualidades balísticas son inferiores a un arma de ese calibre. No
obstante, estas armas son fácilmente manejables y ligeras, muy
adecuadas para la caza de becadas, aunque totalmente ineficaces en la
caza mayor.
Llegado este punto comenzaremos a
hablar de los calibres pequeños, armas muy ligeras pensadas básicamente
para la caza menor, y para el uso único de cazadores expertos.
Calibre 24: Arma eficaz para caza
en llano a distancia media, aunque actualmente en desuso.
Calibre 28: los 21 gramos de
plomo que alberga este cartucho son suficientes para abatir pequeñas
pieza a distancias de 30-35 metros con total limpieza.
Calibre 410: su número está
expresado en pulgadas según el sistema utilizado en EEUU. Calibre que
no consigue tanta efectividad como el 28, aunque es correcto a
distancias de tiro de hasta 25 metros. Su retroceso y peso son mínimos.
Además de éstos son muchos más
los calibres en escopetas existentes, aunque los citados son los más
usados y conocidos en nuestro país.
En las armas rayadas el calibre
es muy variado, encontrándose diversas nomenclaturas par Europa y América.
Muchos fabricantes han diseñado sus propias armas con calibres y
longitudes de recámara diferentes, lo que hace muy difícil
establecer un criterio único.
Podemos decir que los calibres
europeos se expresan por dos cifras separadas por el signo
"X". La primera es el diámetro de la bala en milímetros
mientras que la segunda es la longitud de la vaina.
Para los calibres americanos se
utilizan las milésimas o centésimas de pulgada y el nombre del
fabricante.
Limpieza de
las armas de fuego
Necesidad de la limpieza
Las armas deben guardarse perfectamente limpias, libres de
corrosión, suciedad o humedad que podrían deteriorarlas y provocar
un acidente en futuras jornadas de caza o tiro.
Se debe desmontar periódiamente el arma para detectar posibles
corrosiones que pueden afectar gravemente a su funcionamiento, sobre
todo en zonas húmedas.
Las armas deben limpiarse exteriormente del agua, barro, polvo
u objetos extraños que hayan podido entrar en la misma. Por otro
lado, el propio disparo genera gases y residuos que van a quedar en la
recámara y en el ánima del cañón.
Según el tipo de arma: de cañón liso o estriado y el tipo de
cartucho utilizado se pueden producir mayor o menor cantidad de
residuos y depósitos de plomo en el ánima del cañón.
Estos residuos deben ser eliminados, pues en caso contrario
llegarían a inutilizar el arma, mediante una adecuada operación
rutinaria de limpieza después de cada jornada. Hay que prestar
especial atención a los mecanismos de alimentación del arma pues
suelen introducirse pequeños objetos del campo que llegarían a dañarlo.
Útiles de limpieza
Deben ser de buena calidad y adaptados al calibre del arma que
intentemos limpiar, y son básicamente:
Baqueta
Cepillos
Soportes para trapos
Trapos
Disolventes
Lubricantes
Baqueta
Debe ser de acero o latón recubierto de un polímero y
adaptada al calibre y la longitud del cañón. Hay que evitar los
roces de la baqueta con las estrías o la boca del cañón y realizar
todas las operaciones sin brusquedad.
Cepillos
Se aconseja utilizar siempre los adecuados al calibre que se
pretende limpiar. Pueden ser de cerdas o materiales plásticos y de
latón. No utilizar otros materiales metálicos en esta operación.
Soportes para trapos Se utilizan de dos tipos:
"gratas" diseñados para cada calibre y muy eficaces y
"de ojal" con mayor tolerancia dimensional y empleados para
la introducción de líquidos de limpieza.
Trapos
Los más prácticos son los parches de algodón que se adaptan
a los empujadores o gratas y permiten realizar una excelente limpieza.
Disolventes
Suelen ser productos derivados del petróleo que eliminan los
restos de pólvora.
Lubricantes
Son aceites de orígenes variados (orgánico, mineral o sintético)
que sirven para limpiar y proteger a las armas de la corrosión.
Procedimiento de limpieza
Descargar el arma, extraer la munición que pudiera haber en su
interior o en el depósito.
Desmontar el arma retirando el cerrojo, desarmando la báscula
y separando el cañón.
Eliminar la suciedad y humedad exterior con un paño suave.
Limpiar con un cepillo de dientes los mecanismos y los rincones
que han quedado visibles.
Pasar una decena de veces la baqueta con un cepillo por el ánima
cuidando sacar siempre el cepillo por la boca.
Limpiar con varios parches de algodón utilizando un soporte
empujador.
Introducir un lubricante con el último parche.
Mantenimiento de la madera
Hay que tener cuidado con los disolventes utilizados para la
limpieza pues pueden afectar dañando la madera de la culata o del
guardamanos.
Utilizar un aceite adecuado para la limpieza y mantenimiento de
la culata y del guardamanos.
Custodia de las armas
Las armas deben guardarse siempre desmontadas y/o cargadas, en
armarios cerrados y fuera del alcance de los niños.
Algunas armas (largas rayadas) deben guardarse en armarios metálicos,
especialmente diseñados para este fin y homologados.
|