Bio-ovnis, la
teor�a olvidada
por: Marisol
Rold�n & Jos� Antonio Rold�n
Desde que el a�o
1947 se implant� el concepto de ufolog�a moderna, los investigadores
hemos estado preocupados y obcecados con recabar testimonios y pruebas
que estuvieran relacionadas con los ovnis.
Todo ha sido poco para
una b�squeda, que hoy por hoy, sigue siendo est�ril. No por falta de
signos que avalan su existencia (otra cosa es su origen y procedencia),
sino porque ninguno es lo suficientemente contundente para mostrarlo al
mundo como una realidad solucionada. Los ovnis siguen si explicaci�n. El
que piense lo contrario ha incurrido en uno de los "pecados" prohibidos
al investigador, es decir, se ha dejado llevar por lo que �l cree, otros
creen y todos deseamos. Pero en el fondo, contin�an sin dar claridad al
oscurantismo del fen�meno de los No Identificados.
Hemos
tenido medio siglo para engrosar las listas de avistamientos. Los
archivos con casos sin resolver est�n a punto de caer por su propio
peso. Y ni uno, ni uno s�lo de ellos, por mucha publicidad que se le
haya dado o por muchos beneficios que haya dado han sido verificado como
aut�ntico.
No por m�s famoso que se haya hecho un caso en
concreto se ha transformado en una realidad. Que a unos nos gustar�a y
que otros negar�n hasta la saciedad. Seguimos en el punto cero. Los m�s
atrevidos intentan buscar explicaci�n. Se atreven a formular hip�tesis.
Los ovnis pueden ser terrestres, extraterrestres o intraterrestres.
Estos son los tres vientres pre�ados de la madre Ufolog�a. Uno de ellos,
gesta la verdad. Los otros tal vez tambi�n. Y en ese ambiguo camino nos
debemos de mover los estudiosos y los aficionados a este tema. Aunque
los m�s afectados suelen ser los propios protagonistas de las luces y de
los seres que parecen manipularlas.
Si son terrestres,
alguien nos est� enga�ando. �Debemos suponer de que paralela a nuestra
sociedad han coexistido seres de elevada tecnolog�a que siempre nos han
mantenido oculto su poder e intenciones?. �Exist�an militares, proyectos
secretos, prototipos...en la prehistoria? o debemos pensar algo
m�s...
Si son intraterrestres, alguien est� viviendo
absurdamente. Es magn�fico pensar que grandes filosof�as y culturas
viven gracias a un sol interno, en nuestro planeta. Sea cual sea la
leyenda apocal�ptica que les llev� hasta all�. Pero a estas alturas, con
el maravilloso universo que nos rodea y la aparente tecnolog�a que
representan estos ovnis si fueran suyos, �por qu� iban a seguir viviendo
como prisioneros en su propio reino?. En el caso de no querer mezclarse
con nosotros, �por qu� no buscarse otro planeta habitable?. O acaso,
�tanto tiempo bajo tierra les ha hecho ser biol�gicamente adaptados a la
vida interior, es decir, ya no son humanos -tal y como nosotros
entendemos-?. Otra v�a-teor�a inexpugnable.
Si la respuesta est�
m�s all� de nuestro sistema solar, los ovnis, por qu� a veces se dejan
ver como objetos s�lidos y materiales. �Tal vez porque nuestras mentes
a�n no han entendido que viajar en veh�culos por el espacio es inviable
a largas distancias, en la actualidad?. Alguien podr�a rebatir esta
interrogante, mencionando la palabra m�gica...agujero de gusano, pero es
eso...simplemente magia y magia es igual a deseo, por ahora. Adem�s no
es tan sencillo. Existiendo estos portales c�smicos no sabemos c�mo
afectar�an a la materia. Grandes aspiradoras estelares, succionantes de
la materia y de los campos gravitacionales, de la energ�a, en cuyo
interior se desintegrar�a todo �tomo y de haber salida, posiblemente el
elemento engullido no tendr�a que ver nada con el resultante. Es curioso
escuchar en distintos medios, a presuntos expertos que apenas saben de
f�sica m�s all� de lo le�do en un
art�culo, hablar de lo viajes interestelares con tanta facilidad,
atrevi�ndose incluso a dar como veraces teor�as de posibilidad
matem�tica dadas a conocer por sondas espaciales y radiotelescopios de
observaci�n espacial. Que hablan de la posible existencia de agujeros
negros m�s all� de nuestra galaxia. Pero lo que nos est�n diciendo
realmente, a nivel te�rico, es que hay con cada uno la posibilidad que
el cosmos est� transmutando en ese punto en concreto (es decir, que cada
agujero de gusano ser�a una puerta a la nada, roturas de nuestro
universo y lo que entre por �l desaparece, transform�ndose en pura
energ�a que est� preparada para un nuevo proceso big bang a peque�as
escalas). De todas formas, la astronom�a y la astrof�sica humana, como
todo, est� dando sus primeros pasos y parte de pura
teor�a.
�Qui�n sabe si ciertamente los ovnis, y los que
supuestamente los tripulan, no han logrado controlar esas aspiradoras
c�smicas, de espacio y tiempo?. Y afinando m�s,
�qui�n nos dice que
no vienen del otro lado?.
Pero si intrincado es inclinarse
en la triple elecci�n principal de su procedencia, m�s complicado se
hace entre otras clasificaciones que hacen referencia a las formas de
los objetos, de las luces...Triangulares, circulares, ovalados,
esf�ricos, romboidales, etc, es decir, lo que nuestra geometr�a les
permite variar. Y metam�rficos, metaf�sicos, etc, lo que nuestra
imaginaci�n les puede permitir.
Entre las miles de
descripciones, en pocas ocasiones existen coincidencias totales, lo que
nos puede llevar a pensar que, o bien, sus autores nunca los hacen
iguales o que no son iguales todos sus autores. Implicando distintas
procedencias y posibilidades para el mismo fen�meno o para lo que a los
hombres nos ha parecido que es un mismo fen�meno, que podr�a no
serlo.
Debemos de ser conscientes que la raza humana no
tiene asumido que su l�gica puede no ser la l�gica que reine en el
universo. Y que no ser�a la primera vez, que hemos estado conviviendo
con un misterio al que le hemos creado una leyenda, mientras llegaba el
cient�fico de turno que lo transformaba en ley. El f�sico, astr�nomo,
matem�tico y fil�sofo ingl�s Isaac Newton bautiz� la gravedad, el
astr�nomo polaco Nicol�s Cop�rnico hizo girar la Tierra alrededor del
Sol, el bi�logo y religioso agustino austriaco Gregor Mendel apadrin� la
actual gen�tica, etc...qui�n ser� el que encuentre o se tope con la ley
de los ovnis.
M�s all� de las propias creencias, de las
investigaciones period�sticas, han existido personas que han intentado
encontrar sentido cient�fico a la actuaci�n de estas luces. Jacques
Valle� quiso verle explicaci�n a las oleadas, Antonio Ribera nos mostr�
que cada cual asimila el fen�meno seg�n el prisma de la ciencia que
domina y de la creencia que posee, Juan Jos� Ben�tez nos ense�� que la
tem�tica ovni nos interesaba a todos y desde todos los tiempos,
pensamiento que defiende el suizo Erik von D�niken. Pero, �ciertamente
estamos dispuestos a buscar la verdad...aunque nos defraude? o
�preferimos responder al interrogante ovni con una verdad que nos guste
y complazca a la mayor�a?. Al fin de cuentas, �qui�n no ha dicho eso de
"esto es as�...porque algo dentro de m� me lo
indica"?.
No somos
dioses. De nuestra naturaleza humana y de la que nos envuelve no lo
conocemos todo. En realidad, ahora estamos atisbando algunas posibles
respuestas de cosas que nos han preocupado desde la antig�edad: la
inmortalidad, la gen�tica, criptozoolog�a, etc...ya no suenan a
misterio, sino a ciencia. Y eso nos hace pensar que posiblemente a�n
estamos unos lustros llev�ndonos sorpresas. Los peque�os descubrimientos
que acontecen d�a tras d�a y que los medios de comunicaci�n se encargan
de difundir van atando cabos a los enigmas pendientes y los ovnis no se
escapan. Cuando por fin llegamos a asimilar el concepto de relatividad
enunciado por Albert Einstein, vimos la posibilidad de mundos paralelos,
entrelazados en dimensiones, ten�amos casi explicada la premisa del
fen�meno...alguien nos dice que el universo es plano, que la Tierra
posee m�s masa, que nuestro planeta engorda diariamente varias toneladas
gracias al material espacial que le cae, o que en el planeta de la
esquina existen vestigios de que su geolog�a fue habitable. Es el
momento de plantearse nuevas hip�tesis o tal vez de rescatar y revisar
algunas de las antiguas que se guardaron en los cajones del olvido por
parecernos absurdas, poco cientifistas.
Cuando tras el big-ban
inicial se formaron los planetas al nuestro comenzaron a llegar un
bombardeo de asteroides portadores de elementos qu�micos que cambiaron
nuestra atm�sfera y rebajaron el calor del planeta. Entonces, al parecer
se produjeron los oc�anos y se inicio la vida.
�Pudieron llegar
en esos asteroides...seres semicreadores?, que no han perdido su
adecuaci�n gen�tica a los lugares de origen. Lo que les podr�a hacer
adaptables a los medios hostiles que a otros seres vivos se les niega
por constituci�n f�sica.
BIO-OVNIS, �PODR�AN EXISTIR?.
Es
l�gico que antes de empezar a plantearnos la posibilidad de que cierto
n�mero de objetos no identificados pudieran ser definidos c�mo supuestos
bio-ovnis, tengamos claro que queremos decir bajo las siglas de este
t�rmino ufol�gico.
Biovnis ser�an organismo vivos no
identificados que podr�a llevar a confundir lo visionado con algo
inanimado o no. En realidad los ovnis, en el caso de estar tripulados no
dejar�an de ser una suerte de bio-ovnis, una conjunci�n de m�quinas y
organismos vivos. No s�lo porque los tripulantes pudieran ser entes
vivas, sino porque la misma aparente m�quina o luz que los transporta
pudiera estarlo en parte. Nada descabellado para los que se atreven
abrir su mente a las posibilidades. A fin de cuentas ya tenemos, aqu� en
la Tierra, un recien "parido" ordenador capaz de reproducir parte de sus
componentes. O chips de desarrollo biol�gico.
Cuando el
matrimonio de bi�logos brit�nico Ekdman sostuvo entre sus manos un
celacanto reci�n pescado, una pieza del puzzle de nuestros enigmas
volvi� a desencajarse. Un f�sil extinto...en un mercado asi�tico. Cuando
un grupo de cient�ficos se sorprendi� ante la existencia de bacterias
que metabolizaban azufre se hab�an dado cuenta de que la vida se hab�a
desarrollado al margen de nuestra ciencia, pero no por ello se pod�a
negar la evidencia. Pero claro, era muy sencillo hacerlo cuando ya
estaba en el objetivo del microscopio. Y �si parte del fen�meno ovni
tuviera un origen biol�gico y terrestre desconocido hasta ahora por
nosotros?.
�Podr�an existir seres conviviendo con nosotros, seres
invisibles, salvo contadas excepciones en las que son vistos y tal vez
confundidos por objetos no identificados?. Nos referimos a tipo de vida
cuya vibraci�n energ�tica no es igual que la nuestra y de la que
desconocemos cualquier caracter�stica vital.
Los
ocean�grafos Baisfield y Lebland son dos de los cient�ficos que m�s
aportaciones han dado sobre especies desconocidas en las aguas marinas.
Escribieron en su libro Cadborosaurus: supervivientes de las
profundidades, acerca de saurios y reptiles que se cre�an no extintos
sino imposible, debido a que no son m�s que saurios "ya evolucionados"
en el medio marino, su h�bitat.
Olvid�monos de la biolog�a f�sica
y abramos nuestras mentes en un intento de escrutar esta antigua
hip�tesis ufol�gica, a
una aut�ntica f�rmula vital. En la que se entienden los seres vivos, no
s�lo como cuerpo, sino como un campo energ�tico, en un aparato
inmunol�gico, etc...Y por otra parte, atrev�monos a pensar a que los
lugares que se creen no habitados de nuestro planeta pudieran estarlo.
Los fondos de los oc�anos, las grandes fosas marinas, son una buena
muestra de enclaves que pens�bamos imposibles de morar y han resultado
estar totalmente poblados, eso si, por formas desconocidas de vida,
desconcertantes aptitudes y actitudes, producto de la necesaria
adaptaci�n al medio. Desde el g�nesis de nuestro planeta, los propios
hombres hemos variado, nos hemos adaptado, sobrevivido y
reproducido...�no pudieron otras especies haber hecho lo propio en
lugares como la estratosfera, hidrosfera, etc...?. Metabolismos sutiles
y cambiantes seg�n la necesidad del medio.
Ivan T. Sanderson en su
pol�mico libro Residentes invisibles hablaba de razas anteriores a los
hombres, descendientes directos de las primeras formas de vida marina,
que podr�an haber logrado una evoluci�n intelectual igual o superior a
la humana. Que saldr�an de cuando en cuando a la superficie, top�ndose
con testigos anecd�ticos.
Si tom�ramos un vaso vac�o y lo
pusi�ramos boca abajo en una mesa, en condiciones normales, nosotros no
ver�amos nada...excepto aire. Desde peque�os nos han ense�ado que el
aire eran elementos de hidr�geno, de ox�geno y otros gases. Pero,
cohabitando invisibles entre ellos min�sculas formas de vida evolucionan
y se reproducen igual que hacemos los hombres. Y aunque no les echemos
cuenta, est�n ah� y forman parte de nuestra vida. Eso s�, para verlos
necesitamos cambiar o modificar el medio, es decir, aprender a verlos.
Hoy en d�a, el mundo microsc�pico se nos hace m�s real. Muchas
enfermedades transmitidas por estos habitantes del micromundo fueron
tomadas ayer, entre los creyentes de la raza humana, como castigos de
entidades superiores.
Leviat�n, el se�or de los mares,
conocedor de todas las lenguas del planeta, con un aspecto monstruoso y
gigantesco. Las leyendas hebreas lo describen capaz de vomitar fuego,
producir humo en sus fosas nasales. Dejando en su vagar marino una
estela plateada detr�s de si.
El Talmud cuenta que dos
sabios rabinos hac�an una traves�a marina cuando vieron brillar una luz
sobre las aguas. Creyeron ver los ojos de Leviat�n.
Leviat�n era
una creaci�n divina, un ser deforme, pero sabio. Impuesto para cuidar a
los hombres o castigarles. Capaz de volar hacia su creador. Guardian de
tesoros y lugares m�gicos. Al que adem�s la leyenda atribuye muchos
casos de secuestros de hombres sabios o de buscadores de sus "enigma" a
las que "engull�a en su luz o fuego".
Entre las d�cadas de los 70
y 80 muchos estudiosos de lo inexplicable examinaron concienzudamente el
fen�meno ovni desde todos los campos del saber posibles. Apoyados por
estudios tecnol�gicos novedosos como el l�ser empezaron a postular sobre
la existencia de la mism�sima antimateria como algo real en el universo.
Las mentes instruidas empezaron a ver enlaces incre�bles entre el campo
de las energ�as y los fen�menos ufol�gicos.
La tensi�n tect�nica
o teor�a de la TTT se formul� hace 20 a�os por Derry Persinger y
pretend�an encontrar explicaci�n a los ovnis con fen�menos naturales.
Seg�n esta teor�a la tensi�n tect�nica de los volcanes podr�a producir
liberaci�n de bolsas energ�ticas o gases, a veces, luminiscentes que
podr�an resultar la explicaci�n de muchos casos ovnis, sobretodo en
zonas marinas como Canarias.
De todas formas las Canarias es un
ejemplo peculiar digno de observaci�n, pues al parecer estas islas no se
cortan donde el mar parece delimitarlas, sino que se extienden miles de
kil�metros por debajo del mar, lo que podr�a propiciar la existencia de
una forma desconocida de vida y por qu� no...anfibia.
Lo que
llamaba m�s la atenci�n de estos objetos desconocidos era esa "extra�a
luz" que describen los testigos y que suelen envolver al objeto o salir
del mismo. Las declaraciones de los observadores repiten insistentemente
esta constante lum�nica, incluso en los casos en los que no aseguraban
que hubieran visto un objeto s�lido.
Las extra�as luces con o sin
relleno tangible y s�lido variaban en su intensidad y color, pero
guardaban en com�n el hecho de no ser molestas al ojo humano, pese a que
por las dimensiones de sus focos en muchas ocasiones debieron haber
provocado deslumbramiento o ceguera moment�nea entre los observadores.
Hecho que indica que se trata de un tipo de luz especial, de un espectro
o gama desconocida...Lo que podr�amos llamar energ�a fr�a...pero, �qu�
tipo de energ�a produce fr�o?. Desde luego no hablamos de energ�a
el�ctrica ni de combusti�n de ning�n tipo, en ambos casos hay una
p�rdida calor�fica. Y por el contrario pruebas realizadas por
investigadores ufol�gicos demostraron que tras la presencia de un ovni,
los term�metros instrumentales m�s sutiles no mostraban incremento en
sus �ndices, m�s bien suced�a lo contrario. Algo similar a lo que sucede
en la paraciencia cuando se registran presencias "extra�as". �Hablamos
pues de energ�as que absorven calor?, es posible. Tal vez sea una
explicaci�n l�gica y prudente pare entender el porqu� los casos de ovnis
lum�nicos m�s espectaculares han sido registrados en zonas de clima
tropical o templado, pero tambi�n se han dado casos en lugares de fr�o
externo como en la estepa rusa o en Noruega, a este respecto podr�amos
buscar la explicaci�n en la nieve. Una especie de acumulador natural del
calor solar (algo parecido a placas solares o espejos). Claro que todo
puede ser coincidencias.
Otra curiosidad que ofrecen las lueces
es su frecuente parpadeo o destello. Algunos como el contactado italiano
Siragusa, lo describ�an como latidos, porque dan la sensaci�n de seguir
una constante. Los latidos del coraz�n de los seres vivos producen un
ritmo similar (s�stole y di�stole), pero eso no ser�a un detalle
suficiente para probar que los ovnis -alguna parte de ellos- son seres
biol�gicos, pues las m�quinas creadas por los hombres (el motor)
reproducen estos movimientos.
Y �si lo que se llega a deducir es que
se trata de un lenguaje similar al de animales el�ctrico como la
�nguila?, debemos de pensar que el parpadeo no es constante, sino con
variantes perceptibles lo suficiente para la construcci�n de un idioma.
Pero, �cu�l?. �Se tratar� de un sistema b�sico como el binario empleado
en nuestro planeta o c�mo el empleado en telegraf�a?. Tal
vez.
Quiz�s la misma funci�n tenga ese sonido s�til que presentan
casi todos los ovnis observados por los testigos a poca distancia.
Muchos afirman haber percibido un d�bil zumbido m�s similar al provocado
por el vuelo de una abeja que al de una m�quina con motor. Un zumbido
cuya intensidad variaba seg�n la propia luz expelida por el No
Identificado.
La tercera peculiaridad que a estas alturas del
fen�meno ovni no pasa desapercibida nos viene se�alada por su
movimiento. Casi siempre zig-zag, pero tambi�n por su extra�a capacidad
de pasar de estar inerte a adquirir grandes velocidades. No
import�ndoles lo sentidos arriba y abajo, derecha o izquierda y su
capacidad para realizar maniobras increibles. Solo aptas para seres
invertebrados o exentos de engranajes. Y cambios de sentido imposibles,
al menos para m�quinas humanas.
Los calamares gigantes como los
"pescados" en las �ltimas fechas (Canarias y la Ant�rtida, por ejemplo)
y que forman parte de la leyenda de dichas zonas son enormes ( y no
tanto) seres tentaculares, cuyo nado vertical o rectil�neo nada tiene
que ver con un pez. Visto desde la superficie podr�a dar la impresi�n de
una bola submarina de enormes dimensiones pues pueden llegar a medir 20
metros (Architenthis Dux) que adem�s pueden provacar el efecto �ptico de
luminosidad y que suele crear una estelas con su defensiva expulsi�n de
tinta. En el museo de Naturales de Tenerife se puede observar un calamar
de 10 metros. Igualmente resulta curioso que precisamente en esta zona
de la pen�nsula se den constantes avistamientos osnis.
Sin
embargo, los seres vivos m�s �giles que las m�quinas podr�an lograr ese
efectos, suponiendo claro que pudieran las especies nadar, volar, bucear y dominar los espacios
conocidos, todo a un mismo tiempo, como parecen hacerlo estas
luminiscencias desconocidas o tal vez, �nos confundimos?.
En
Canad�, donde frecuentemente se producen avistamientos y denuncias ovni,
existe un elevado porcentaje de los que se mueven exactamente bajo el
mar costero (OSNIS). Curiosamente es all� tambi�n (bah�as como la de
Cadboro) donde se cuentan leyendas de serpientes marinas
luminosas.
Este punto nos tiene muy divididos a los que buscamos
una explicaci�n a los ovnis. La gran mayor�a tras revisar la caus�stica
mundial (cada d�a se reportan m�s de 300 ovnis a nivel mundial como
media) creen que si, es decir, un ovni tiene la extra�a capacidad de
dominar los medios y los elementos que conocemos: el aire, el fuego, el
agua, la tierra...m�s que dominar tienen la aparente facultad de
desenvolverse y desplazarse en todos.
Para un reducido grupo de
investigaci�n empiezan a abrirse nuevas posibilidades con el estudio de
los diferentes medios y los ovnis caracter�sticos que se muestran en
cada uno en concreto.
- O.V.N.I: ser�an los conocidos objetos
voladores no identificados (medio aire).
- O.S.N.I: objetos
submarinos no identificados (medio interior marino).
- O.F.N.I:
objetos flotantes no identificados (medio superficie marinas o c�mulos
de agua).
- O.E.N.I: objetos extraplanetarios no identificados
(observados fuera de nuestro planeta).
- O.S.B.N.I: objetos
subterr�neos no identificados (medio tierra).
- Foo-fighter: bolas de
fuego no identificas (medio aire).
Durante la I Guerra Mundial
los foo-fighters fueron observados por pilotos de la contienda de ambos
bandos implicados. A�os despu�s lo afirmar�an, as� como el que no hab�an
hablado pues cre�an que eran armas secretas del
enemigo.
Pero la historia, ya nos habl� de carros de fuego,
de dragones escupidores de bolas de fuego o de dioses lanzadores de las
mismas.
Por supuesto que nuestros antiguos ten�an m�s facilidad
en relacionar este tipo de fen�menos con animales y dioses, su mente
m�tica no es nuestra actual inteligencia tecnol�gica. Nosotros buscamos
explicaciones m�s complicadas a los fen�menos ufol�gicos, como el caso
de los foo-fighters, la definici�n de m�quina voladora no es m�s
tentadora que la del drag�n...Pero no olvidemos que tambi�n somos m�s
imaginativos y que nuestros ancestros explicaban las cosas que ve�an, a
su manera, pero vi�ndolas. Porque no hablaron de "artefactos o
aparatos", sino de descripciones biol�gicas como animales...�tal vez
porque eran m�s parecidos a algo vivo que no a un objeto tecnol�gico?
(ejem: Leviat�n).
En este punto tendr�an sentido seres
mitol�gicos como los propios �ngeles "alados" o las sirenas, por citar
ejemplos. Y sin duda, m�s cercano nos queda el mundo de los
dragones...de gran parecido con los saurios, que en su forma alada o en
su versi�n acu�tica (plesiosaurios), pudieron en peque�as cantidades
haber sobrevivido a la extinci�n de los grandes saurios. Eso enlazar�a
el misterio de los ovnis con otros, como el de los animales lacustres,
que pudieran ser no ya f�siles de los saurios vivos, sino evoluciones
adaptadas al medio. Alg�n d�a, quiz�s, nosotros tambi�n nos convirtamos
en bio-ovnis.
La medicina afirma que el hombre podr�a adaptarse,
en mente y cuerpo, a un h�bitat marino. En la investigaci�n actual, ya
se experimenta con la posibilidad de que el hombre pueda adaptarse a los
medios marinos y espaciales. Donde los problemas m�s graves a reducir
ser�an la oxigenaci�n sangu�nea y la presi�n atmosf�rica, que influye
sobre la misma y el riego cerebral. Jean Costeau, ya so�aba con esos
adelantos. Y, �si los anteriores moradores del planeta se hubieran
adelantado, bien por v�a natural de selecci�n o gen�tica?.
Si vivieron y sobrevivieron en las profundidades
ocultos, necesariamente hubieran desarrollado, por las leyes de
adaptaci�n biol�gica evolutiva de las especies, particularidades como la
de la luz (caso como los peces de las grandes fosas abismales ya las
presentan) e igual ocurrir�a si la adaptaci�n vital se hubiera dado por
encima de la estratosfera, donde la presi�n atmosf�rica y la luz
escasean...y la misma opci�n habr�an sufrido los que hubieran terminado
morando en las grutas internas del planeta.
En el caso de ser
posible la existencia de formas de vida desconocida en nuestros cielos o
mares, y suponiendo que tengan relaci�n con la actual ufolog�a
casu�stica. Debe subrayarse que deber�an por su comportamiento de ser
seres individualistas, pues se muestran en poco n�mero como norma
general. Aunque podr�an vivir en manadas de 7 a 9 miembros, n�mero
m�ximo de ovnis avistados...y que podr�an tener enclaves preferidos para
su reproducci�n. Lo que explicar�a su presencia m�xima en lugares como
las Bermudas, donde generalmente barcos y aviones han desaparecido
hall�ndose d�cadas despu�s parte de sus despojos. Justamente los
bio-ovnis se comportar�an como cualquier otra especie ante un ser
desconocido como el hombre nos observar�an, pero s�lo nos atacar�an
cuando directamente lo hici�ramos nosotros o cuando se sintieran
amenazados ellos o sus familiares.
Hoy por hoy, la ciencia se ve
a diario sorprendida por las posibilidades de vida que aparecen en los
lugares m�s insospechados. Algunos destinados para el desarrollo
biol�gico como eran los interiores de volcanes o los planetas de alta
radioactividad como Marte o J�piter.
Dentro de
un cr�ter en 1998 se hallaron unas esporas de bacteria que utilizaban
para vivir bases de azufre y no de carbono como era habitual en los
seres desconocidos. Marte nos trajo hace milenios unos meteoritos en
cuyo interior se encontraron bases para vida microbiana. J�piter (y
algunos de sus sat�lites naturales)ha mostrado a los radiotelescopios de
nuestra ciencia grandes cantidades de agua helada que posibilitan la
existencia, al menos de los elementos necesarios para la vida.
Y
la sorpresa lleg� al mundo de los bi�logos precisamente de la mano de un
saurio encontrado en Dakota del Sur (USA). Exactamente de su coraz�n
fosilizado que demostr� al mundo que ten�a cuatro cavidades y que hab�a
producido sangre caliente para el gran Thescelosaurus
"Willo".
Cualquier de estas ideas hubiera resultado absurda hace
unos a�os, pero no lo han sido tal vez por la misma ecuaci�n de
posibilidades. Las teor�as de que, sino los ovnis, si cierta partes de
los que se dejan ver ante los
asombrados testigos pudieran tener su origen en una forma biol�gica
desconocida.
Al igual que los delfines sienten afinidad y
curiosidad por el hombre, estos bio-ovnis podr�an ser tentados con los
objetos voladores como aviones que entran en sus territorios, desde hace
apenas un siglo, que bajan a sus aguas desde hace tambi�n poco m�s de
una centuria y que en cuyo caso la novedad no ser�an ellos, sino
nosotros que nos atrevemos a introducirnos en su dominios.
Quiz�s
todo lo que apunta a la existencia de bio-ovnis defini�ndolos no como
artefactos, sino como "seres vivos", parezca ante los ojos de los
aficionados a la ufolog�a restar importancia al fen�meno ovni. Sin
embargo, no es as�. Ya que se enriquece las posibilidades y dar�a la
explicaci�n a parte del Misterio.
Caso OVNI