Mi vida con la Abuelita Embustera

Aparecí en sus sueños, enseguida la Abuelita Embustera se acostumbró a que yo fuese su Mascotita Virtual. Yo siempre fui muy buena con ella pero muero con regularidad porque ella, con sus técnicas en el metegol se olvida de cuidarme. Una vez tuvo que resetearme 25 veces en una noche pero yo igual la quiero mucho.
Recuerdo que hace tiempo “El Enzo” y Scotti Pippen nos retaron a un partido de metegol vía “Sueño-Mail”. La Abuelita me dio de comer, me bañó y me entretuvo un rato para que no me muriera en el camino. Empezamos a jugar. El partido estaba parejo pero una jugada embustera de la Abuelita partió el peoncito en 13.000 pedazos pero el partido culminó con 10 goles nuestros.
Pero siempre la pasamos bien y cada dos por tres jugamos algún partidito con alguien y siempre ganamos con esas jugadas embusteras que hace la Abuelita en los sueños.

Autor Gabriel A. Pizzio

 

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