TRADICIONES
EN SALSA ROJA
CELSO VICTOR TORRES
FIGUEROA
Colección:
Tradiciones Caracinas
Editor: Wílfredo
Torres Asurza.
Francia 711 Miraflores
E- MAIL: pepe [email protected].
Derechos del autor:
Biblioteca Nacional
del Perú
Certificado 1501012003-
3636
Segunda edición
Auspiciador: LEBETON
SAC Productos Industrialicos
Caraz, 20 Enero del
2005.
PERÚ - SUD AMERICA
A
REIR:
Te recomienda Pepe Galleta 1973:
SI
FUERAS A CARAZ
DE SU DULZURA GOZARAS
Y ALGUN DIA VOLVERAS
Como dijo el Padre José
DEDICATORIA:
A los torrecianos que
les gusta del chocolate espeso
y el café pasado
CELSO VICTOR TORRES FIGUEROA
1959-1918
PROEMIO
Celso Víctor Torres Figueroa, tradicionista. orador de alto nivel,
parasicólogo. poeta, periodista. Notarlo Publico. Nació
en Caraz (Ancash-Perú) el 28 (le de 1859 y lloró su muerte
el 12 de noviembre de 1918 de solo 59 años de edad. Tuvo amistad
epistolar las cartas lo comprueban, no se conocieron personalmente con
Don Ricardo Palma Soriano nacido en Talavera de la Reyna en Andahuaylas.
No concibo corno una amistad comprobada, pueda eliminarse por el celo
femenino de sus editores o descendientes.
Son atribuidas a Celso Víctor 10 tradiciones que son de innegable
procedencia por sus expresiones. sus términos quechuas. ubicación
geográfica. Las siguientes son las consignadas en "LAS TRADICIONES
PFRUANAS", (le la Edición Espasa de 1966
Torno 1 -Pag 3;Palla
huarcuna
Tomo 2-Pag 406:La Justicia de Bolívar
Torno 3-Pag 28:Orgullo de cacique
Torno 3-Pag. 399 A muerte me huele el godo
Tomo 5-Pag 405 La vida amorosa del Padre Chueca
Tomo 5 Pag 103 La vieja de Bolívar
Tomo 5-Pag 105 las tres etcétera del Libertador
Torno 5-Pag 5 Los coronguinos
Tomo 5-Pag 115 Quien toca el arpa
Torno 5-Pag 149 Un santo varón.
"Los temas salpimentados" son avaladas por las anotaciones de
Palma:"estos apuntes me fueron remitidos de Caraz por Celso V. Torres
julio 1898" y al pie de otra carta - el tradicionista escribió"
varios de éstos relatos me han servido de ternas para escribir
algunas tradiciones" con lo cual no hay reputación y sí
confirmado la fluidez epistolar entre ambos personajes. Resulta sin embargo
que Celso admitió en varias oportunidades haber tenido en sus manos
"un manojito de tradiciones autógrafas de exquisito sabor
pornográfico" que Palma le remitió lo mas probable
como obsequio de cumpleaños
en julio de 1900,Celso contesta de haber devorado cada una de las tradiciones
de prominente punta" a lo que Palma, al pie de dicha misiva se ve
obligado a aclarar el origen de tales narraciones 9a colección
a que se refiere Don Celso es una de las 25 tradiciones pornográficas
titulada "TRADICIONES EN SALSA VERDE",hice sacar de ellas 2
copias obsequiando una a Don Celso y otra a Carlos Basadre, con encargo
de que no considerarán en que se impriman, ni saquen copias de
ellas "Son solo para ser leídas en la intimidad y en ratos
de buen humor. Ricardo Palma en 1900 proscribió éstas tradiciones
de origen caracino, pidió a sus amigos la mayor discreción
sobre su existencia, motivo por el cual se mantuvieron fuera del alcance
del publico durante muchas décadas. La colección que entregó
a Basadre, después de muchas peripecias fue vendida a la Universidad
de Duke- EEUU. Años después y a solicitud del historiador
Basadre, esa Universidad envía un microfilm recortado y corregido
a la Biblioteca Nacional y a la Universidad La Católica con solo
18 narraciones.
PEPE GALLETA comprometido
con el sentir de su abuelo se dedica a promocionar CARAZ y a perennizar
la memoria de su ser querido y dice "quien copió a quien".
Con "LA SALSA VERDE" sirve para darnos cuenta cual era el otro
lenguaje de los libertadores, tan conocedor de esto era Celso, ya que
Bolívar y su ejercito permaneció 2 años en el Callejón
de Huaylas. La Parroquia de San Ildefonso de Caraz ayudó con 25
mil onzas de oro y plata para el pago del ejercito Libertador, antes a
las campañas de Junin y Ayacucho.
"LAS TRADICIONES
EN SALSA VERDE" son las siguientes:
1.-La P .... de Bolívar
2.-El carajo de Sucre
3,-Un desmemoriado
4.-La maldición de Miller
5.-El clarin de Canterac
6.-La consigna de Lara
7.-Tajo o Tejo
8.-El clavel disciplinado
9.-Otra improvisación del Ciego de La Merced"
10-De bueno a bueno
1 1.-El lechero del convento
12.-La cena del Capitán
13.- Una chanza de inocentes
14.- Una misa al escape
15.-Matricula de Colegio
16.-Fatuidad humana
17.-La cosa de la mujer
18.-Un calembourg
19.-Pato con arroz
20.-Los inocentes
21.-La moza de gobierno.
Finalmente-para sellar
la obra de Celso Víctor me permito presentar a Uds. "LAS TRADICIONES
EN SALSA ROJA".
En Lima el 28 de julio del 2005 en la Iglesia De la Encarnación,
cuadra 17 de la Brasil, a los 144 años de su nacimiento y a los
85 de su muerte,^ su nieto mando' celebrar una misa solemne muy concurrida
y se regala a la salida como recuerdo '1AS TRADICIONES EN SALSA ROJA"
un librito rojo, con letras doradas, en estuche rojo, donde contienen
las siete tradiciones caracinas que confirma que "la moral no reside
en la epidermis".
De ésta manera -hago justicia, tengo el permiso expreso para su
presentación, entre abuelo y nieto hay eterna coincidencia, sobre
todo el cariño a su tierra: Caraz. Tienen una alquimia que los
une como vasos comunicantes donde fluye la misma sangre, " RH positivo".
En esa misa se invitó a todos, por tarjeta y por periódico,
así asistieron 122 amigos.
Sé que fue un lleno en el plano astral, porque Celso tuvo convocatoria
en su Barrio de Yanachaca y sigue teniendo en el mundo astral. He aquí
las tradiciones del gracejo amical, muy caracino, en voz baja, entre amigos,
en tertulias de luces mortecinas, tomando un oloroso humeante
cafecito pasado o al levantar al ultimo una copa o calambuco de pisco
de Moro o Motocache o simplemente recordando los requiebros de la fulana
y que huye de los chispeantes galanteos o lo mas acertado sería
para disipar el estrés del mal humor o para cuidar las arrugas.
Mi querido lector con ésta salsa que Celso guardó para nosotros
los caracinos solo queremos que le despierte la chispa de un alegre vivir,
que es nuestro mejor deseo.
Los
editores
LA
P.... DE BOLÍVAR
En enero de 1879,
don Camilo Landavery, llamó a don Femando Ángeles y Castillo,
que pasaba de "buen horticultor para que le formara una huerta en
Condormarca, goteras de -la ciudad de Cara
Don Femando aceptó el compromiso y entraron a tratar sobre el precio
y estimó su trabajo en 100 pesos, nada de soles, y don Camilo creyó
muy alto el precio y le obligó que le rebajara
Son Femando lució su látigo financiero:
-Oiga U. don Camilo
no todo ha de ser plata; porque lo que vale plata, plata es:
U. tiene ricos quesos
que se comen con cuchara; también recibo.
U. tiene ricas papas
que se parecen yemas de huevo; también recibo.
U. tiene ricos chanchos
calatos que con poca cosa engordan; también recibo .
U. tiene trigo barba
negra que cada saco es de 20 a 25 pesos de pan; también recibo
U. tiene vacas que
cada ubre da un balde de luche, también recibo,
U. tiene ricos carneros
que cada criadilla cabe una olla; también recibo o
Don Mariano Landavery,
hermano de don Camilo, que impaciente escuchaba la factura, se levantó
airado y ensañando los puños a don Femando, le dijo:
-¡So carajo , no ¿quisiera U. la pinga de Bolívar?.
Don Femando un tanto reincorporado de la primera sorpresa, le contestó:
-"Siendo a buen precio, también recibo No se moleste U, don
Mariano, porque hablando se entienden las cosas.
Caraz Julio 12 de 1898
DON PANCHO Y DO ANSELMO
Don Francisco San
Bartolomé, pertenecía a una linajuda familia caracina, falleció
en octubre de 1895. Fue hasta, -entonces Oráculo de Delfos en la
ciudad de Caraz; quién no consultaba con él en asuntos jurídicos,
pues era rábula, no se metía tan fácil a un pleito,
entendido que don Pancho era el hombre más moral, calmoso y noble
que dio la naturaleza creadora.
En octubre de 1868, fue actuario de un juicio de división de bienes,
ubicado en el valle de Yanahuara-, los mismos colindaban con las propiedades
de don Anselmo Alvares y dividido por un cerco de pencas.
Don Anselmo habría preferido no hablar en quechua, por decir que
era castellanero hasta la médula y no era tal
Don Pancho, perito común nombrado, andaba con su cordel, observando
las reglas de la agrimensura y haciendo sus trazos; y como el sitio no
se prestase para la. facilidad de sus labores saltó entre péncales
limítrofes.
Don Anselmo que estaba en sus propiedades con tramojo en mano lo detuvo,
diciéndole:
-Sepa U., don Pancho que esta pinga es de mis cojones, y no puede entrar
en la partición de bienes ajeno?. Quería -decir don Anselmo
que la penca era de sus mojones.
Don Pancho se quedó lelo; mientras el Juez, si escribano y circundantes
se tendieron de risas. Con la sorpresa, -había creído que
don Anselmo no se refería a. los linderos, -sino a las bragas,
porque en este acto terció el poncho al hombro y se puso en facha
de pugilato y en tono altanero que parecía estar beodo.
Caraz,
agosto 5 de 1898
AGUANTE,
PUJANTE Y REMPUJANTE
En el año de 1850, había en los arrabales de Pueblo Libre
una especie de mosquita, de lo cual eran moradores un -Manuel Vergara
(a) "Soko Loro", insigne violinista, su mujer Manuela Pacheco
(a) Aguante. y su hija Toribia Echevarría (A) pujante: rematando
el cuaderno, una nieta de la. Pacheco conocida por la Reg1pujante
La mosquita era la
más apropiada para los bodrios y jolgorios. Los barrios aquellos
eran una verdadera feria; y no podía ser menos, porque la Pujante
tenía atractivos seductores; y nadie pasaba sin admirar los encantos
do la maltona siempre que por casualidad la veía o Llegó
a tal extremo la forma de su singular donaire, que todos los adalides
hacían sus aprestos bélicos, desde los pueblos más
remotos, para dar una puntería errada o certera, pero era condición
sinequa non, que todos tenían que concertar con la Aguante alguna
entrevista, con la Pujante; y como tanto va el cántaro -por agua
hasta volver sin asa, las malas noches y la bebendurria dieron en atacar
la Aguante con un fuerte costado pulmonar. La nieta Rempujante, tuvo que
verse con el doctor Lucas Mongarás, quien para orientarse del estado
de la enferma y ver si esputaba Sangre, le preguntó: -¿y
esputa? -No, señor, nunca ha sido puta sino sólo alcahueta
de la hija.
Caraz, octubre 14 de 1898
AVENTURAS DE PAVITA
Ha pasado a la tradición
el nombre de Víctor Caballero (a) Pavita, por sus aventuras obscenas
que terminaron cuando falleció en 1888.
Son aquellos años
era mucha aventura para una maltona -salir de su casa a solas, sea de
día o de noche. Pavita era ubicuo; pues en todas partes se oía
el ¡Ay1 desesperado de ellas que gritaban por huir de sus garras.
A cada rato se presentaba el cuadro vivo del rapto de Proserpina por Plutón
No le importaba a
Pavita que la. mujer fuera casada, viuda o impúber.
Era costumbre, el grito atronador dado en las calles de un beodo ¡huaaaaJullé
! Este grito daba Pavita par;-. acompañar y confundir al que daban
la desgraciada, aprisionada en sus garras; de manera, que cual maullidos
del gato en coito era ya conocida la interjección en dúo
de Pavich, diminutivo de su epíteto
Si pescaba a la maltona
en alguna huerta. o solar ajenas, se hacia pasar como el dueño
y aparentaba pescar in fraganti al ladrón de sus sementeras, a
quién había asechado por largos años. Sacaba de su
faltriquera unos papeluchos que nunca la faltaba: ellos habían
las veces de ordenes Judiciales para la captura del malandrín que
causaba daños en su hacienda o Tras este preámbulo, estaba
lista la victima para el holocausto
Si el arrastre era
en la noche, se hacía coherente de los juzgados; y con sus consabidos
papelitos de órdenes Judiciales, hacia la captura ipso tacto; y
una vez que la-maltona le daba, el nombre, le aseguraba que en la. orden
rezaba su nombre entre las complicadas en hurtos domésticos, que
a la sazón se había consumado
De suerte, no había
excusa a favor de la desdichada; y unos tunos sacaron la siguiente copla:
"Ama pakaspa
puricunquichhu
Víctor Pavahuan tincumunquimán;
Kenticachecar lancarishunqui
Unchicacharir catashunquitsm"
Traducción
:
"No andes pues
en las horas de la noche Quizás te
encuentres con Víctor Pava;
Retorciéndose te va a tocar
I agachándose te va a cargar
Con esta conseja o
aviso poético, caían a la trampa sólo las incautas
forasteras que siempre los sábados y domingos vienen a la especie
de feria semanal que hay en la Plaza de Abastos de Caraz.
Una maltona vivía en los arrabales de la ciudad y había
cerrado la puerta de su casa hasta con piedras, porque Pavish le dirigió
un piropo en plena Plaza; y para baluarte suyo, la supra dicha, se había
llevado un muchacho de 10 a 12 años. Pavish llamó a la puerta,
y como no se le abriese, abrevió la entrada escalando la casa.
La maltona había escapado por la puerta y Pavich, creyendo que
el muchacho fuese la presa acometió, no embargante los gritos y
lamentos lo acometió.
Dada la puntería para la descarga eléctrica, el muchacho
tras los fruncimientos, cruzó las piernas, dentro de las cuales
quedó el pene como cafla en trapiche; -Pavish contento de haber
asertado la mira, hizo su descarga.; el muchacho decía -gritando:
¡Soy hombre! -No te salva en cambiar innomine tu sexo; y adentro
fieles y afuera cascabeles, se consumó pues un pecado nefando que
la. religión no califica ni de moroso -ni de sodomita, sino declara
simplemente la efusión seminal que raya en molicie.
Pavish salió a contar su triunfo a dos amigos que le esperaban
para entrar de reserva en el combate; y tras el brincó el desgraciado
muchacho que acababa de ser blanco de la -descarga cerrada, enseñando
la mano chorreada y lleno de gluten, que cada vez más crecía
en sobrecogimiento el exhibir en ella (la mano) todo el licor seminal,
que aún no conocía por inexperto o Por momentos olía
y ratos refregaba ya en el pantalón, ya en el saco; y correteaba
invocando a los santos del calendario.
Caraz octubre 31 de 1898
UN TETUDO
En el primer gobierno del General Castilla, se nombró Subprefecto
de la provincia del Santa a un pega, uno de esos que no tienen con que
limpiarse las manos sucias y tienen uñas de gavilán.
Uno de los negros esclavos que abundaban en la Costa del departamento
de Ancash, encontró dos zurrones de plata goda y no sólo
afectando honradez, sino embebido de fanatismo, llevó el par de
zurrones al Subprefecto de la provincia, con todo lo que contenía
sin guardarse ni medio real,
El hallazgo no pudo ser mejor para, el famélico Subprefecto. Inmediatamente
hizo llamar a buen recaudo al negro y ordenó que a calzón
pelado se le diera cincuenta rónzalazos, orden que en cerrar y
abrir los ojos ejecuto .
Es de suponer que el negro no sólo quedó molido sino derrengado;
y puesto en libertad, se dirigió a la. Subprefectura demandando
audiencia y encartándose al Subprefecto, le dijo:
-" Señor, el hallar una fortuna de procedencia desconocida
y entregar a la autoridad, creo que no envuelve ningún crimen y
lejos do eso es diario de "gratificación.
-Bellaco, debes callarte y no venir con interpelaciones, contestó
el Subprefecto.
-"Señor de cualquier lado que se mire, creo que no ha habido
razón para dejarme tan mal parado con castigo tan inmerecido; y
desearía porque su señoría me ha mandado flagelar,
replicó el negro"
-Por qué? .... ¡Por tetudo!. No debes haberme entregado este
dinero, ni tan poco a persona alguna.. Con lo que contiene ambos zurrones
debes haberte libertado de la esclavitud y quedar caballero, con el consiguiente
don, é ¡dote a Lima a vivir de la opulencia, como lo haré
yo, y diciendo esto, despidió al negro, que desde entonces se le
conoció por El Negro Teluto"
Caraz,
abril 5 de 1899
UNA PATACABRA EN ANDALUCIA
Una
guapa doncella a quien perseguía un mozalbete de tromba y trueno,
cual cumple a todo tenorio, en obsérvemela a las costumbres lugareñas,
se dirigió al campo a coger ramas de -retama; pero el enamorado
que le seguía le. pista le hechó la zapa,. ¡Cataplum
.... la violó sobre el mullido césped y -dentro del precioso
follaje de las retamas. La doncellica de momentos antes, y si desflorada,
se dirigió a su casa, azar -citada, llevando sobre la cabeza una
buena porción de retama., La casualidad hizo que a pocos pasos
del bosque encuitado, la andalucita se encontraba con unos. Camaradas
suya, quién dirigiéndose a ésta la saludó;
-¿Qué florida vienes?, y la chica creyendo que le decía
que jodida vienes, contestó:"-Qué quieres que haga,
ese pícaro mancebo me trajo en tierra y arremangándome los
fastanes sacó dentro de la bragueta una patacabra (uña partida)
y me bruñó el ombligo, que casi me la revienta por su dureza
y por su modo de operar con rapidez, pero felizmente dio con la madera
a donde introdujo la patita. Así es como he escapado de estar despanzurrada,
y aunque dolía mucho, tal asunto se hizo mas llevadero.
Caraz,
enero 28 de 1900
EL AS DE OROS Y LA CONFUSIÓN
En las postrimerías de la guerra con Chile y cuando en lares del
Callejón de Huaylas había, profunda inquietud por la guerra
civil, vivía el indígena Manuel Matienso muy metido a gente,
pero malcriado y burdo, solterón entonces que sólo a la
muerte de un obispo encontraba una mujer para la cópula.
Una mañana entró a pedirle un poco de perejil una vecina
suya a la huerta de hortalizas que tenía junto a su casa o La echó
mano, y no obstante sus esfuerzos la llevó a la cama; y puesta
la mujer, sólo en el borde, la arremangó la pollera y la
alzó las piernas, y en vez de puntearla por la vía húmeda,
le clavó el tarugo por el as de oros, sin duda porque la colocó
mal en la cama- y alzó el punto y la mujer gritó:
-Mañuco , ¡no seas bárbaro i no es por ahí¡,
te has equivocado .
-Yo sé más que tú, so imbécil, contestó
Manuel; y luego se despachó por donde había empezado.
No había pasado una hora cuando se le presentó una viejecita
Eufracia, que llevaba ínfulas de beata y mostrándole un
par de aretes le dice:
-Don Manonguito vengo con una súplica hágame el favor de
prestarme un sol en prenda de esta alhajita.
-Manongo, sin pensar o si pensó,-daba lo mismo romper que desarrugar"-
la agarró y la arrastró al cuarto y principió. -igual
función que la anterior,
La vieja que de suyo era beata y ya jubilada, gritó: -i Dios le
confunda!!
I Manuel creyendo que quizá se trataba de la confusión de
momentos antes, contestó: "-Qué confusión ni
confusión. Hoy he acertado al punto" , y consumó el
golpe. I ahí quedó eso, no le dio ni un centavo;, ni en
remuneración, ni prestada y la despidió de su casa.
Caraz
setiembre 2 de 1900
APÉNDICE
En Caraz su remozada
Plaza de Armas nos trae recuerdos, saber que aquí paseo gente distinguida
y de los otros.' Tal vez importante o también enamorados' cargando
sus cuitas de amor, sino preguntamos a Manuelita Madroño, la amiguita
de Bolívar, saber que los años 1824- y '1825 Simón
Bolívar dio prestancia a la Plaza porque en la casa solariega de
Melchor Gutiérrez, delegado de España, funcionó su
estado Mayor del Ejercito Libertador de aquí manejo el Perú,
preparo el ejercito para la campaña de Junín y Ayacucho,
pensar que de esa casa solamente queda un terreno de 5x5 y una placa de
bronce.
Lo mas representativo de Caraz es su Plaza y de la Plaza es el Kiosco,
como dice Carlos E. Zavaleta, en "LA PRIMERA MUJER .... por esos
tiempos (1955)en Caraz no se imprimían periódicos, de ningún
tipo, los periódicos limeños llegaban por correo después
de una semana. ..No había radios, la única radio del pueblo
estaba prendida del kiosco de la Plaza que enorgullecía a Caraz,
donde resonaban las noticias de la BBC de Londres, la hora del tango de
Tito Morales, el Gardel Peruano, el flaco llegado para curarse de la tisis
Todas las noches se encendía la radio, que los niños no
escuchaban, pero los domingos era otra cosa, había retreta, oíamos
la banda y la radio alternadamente, en medio la ojerosa y tristona voz
de Mister Flaco. La gente se quedaba hasta muy de noche dando vueltas
a la Plaza, las familias enteras saludándose, los hombres mirando
reflexivamente, en especial a las mujeres ". En el publico habían
solamente 12 extranjeros: alemanes: Neuburger y Sra., un inglés:
Morris, 4 japoneses: Nishiyama, Nakamura, Chikan y Cam, y 5- chinos: Akim,
Chi, Acuy y Achoy Yor un sentido circulaba la pareja de alemanes, en sentido
opuesto el inglés Morris,. ".Me olvidaba del elegante Simon
Chang
Los domingos a las 7 PM llegaba la Banda Municipal con su Director Cesha
Escudero indiscutible udista, juntamente que Chin Chin, Maurinsho y Lolo
Vallejos, para hacernos escuchar los últimos valses, tangos o huaynos.
De todas maneras había que escuchar el Reporter ESSO. con las noticias
mundiales o para chequear la hora en los longines de aquellos tiempos.
También han
revivido los 4- pilancones de agua potable, que era el sitio obligado
para recoger agua para el consumo humano y de la cocina, con sus aguateros
oficiales Ponte y Collas que con balanceantes latas y espontáneas
expresiones eran muy queridos por niños y adultos. Pero la llegada
de la noche transformaba la Plaza de -Armas, se hacia presente la luna
juguetona, salían las coquetas maltonas ( juveniles cholitas domesticas)
a llevar agua en sus balde para la cocina, provocativas ellas en la noche,
pero tenían que pasar por el billar de Duque, lugar de reunión
de los colegiales había que burlar a los policías Torcho
Cámara y Tenaz y otros porque había que jugar y conseguir
taco para jugar una gallada, de lo contrario uno podía deleitarse
viendo el taco fino de Marino Alegre o Fushi Gavino. A la nueve empezaban
los jugadores de casino o golpeado, por unos centavos o un pisquito fiado
de Chipillo o una mulita de capitán Ya corría la noche,.
algunos sufridos galanes ya orquestaban una serenata para un cumpleaños
o raptar alguna fulana que había llegado. Ayudados por la complicidad
de los ficus y la luz mortecina de los focos de esos tiempos merodeaban
varones, en 1880 el famoso PAVITA, versión andina de Casanova,
era el actor principal y sucedía lo que tenia que suceder los años
pasan, luego en 1950 se hace presente el sucesor de Pavita: MATRACA que
al grito de "arrastre "conmovía el gallinero y as¡
el mundo sigue dando vueltas y la historia se repite mientras viva Julia
Dora,
Caraz, julio 28 del 2005
PEPE
GALLETA
ÍNDICE
Dedicatoria................................................Pág.
5
Celso V.Torres, fotografia ...........................Pág. 6
Proemio.....................................................Pág.
7
La P....de Bolívar........................................Pág.
11
Don Pancho y Don Anselmo........................Pág. 12
Aguante, Pujante y rempujante....................Pág. 13
Aventuras de Pavita ...................................Pág. 14
Un tetudo...................................................Pág.
17
Una patacabra en Andalucía........................Pág. 18
El as de oros y la confusión........................Pág.
19
Apéndice ..................................................Pág.
20
|