Páginas WEB multimedia diseñadas por Pere-Enric Barreda, cronista oficial de la Vila de Benassal

El municipio de Benassal, creado en 1239 por el leridano Berenguer de Carratalà y unos cincuenta pobladores de las comarcas catalanas centrales, forma parte del Reino de València y de la Setena o Tinença de Culla desde su fundación. En el aspecto geográfico, se halla a unos 800 m. de altura media sobre el nivel del mar, en el centro de la comarca de l'Alt Maestrat. Cuenta con dos núcleos urbanos diferenciados, la propia villa de Benassal y el balneario de la Font d'en Segures. Las características geológicas de su término municipal resultan del máximo predominio de la roca caliza, cuya disolución forman numerosas cuevas, como la Cova d'en Tabusco, y sobre todo fuentes, destacando la reconocida Font d'en Segures. El agua de la misma -gracias a sus propiedades minero-medicinales, indicadas para las afecciones del riñón- ha dado justa fama a su balneario, donde durante los meses del verano podemos disfrutar de un excelente clima, propiciado por la altitud a que se encuentra (casi 1.000 m.). Se comercializa en distintos envases, que pueden adquirirse en todo el litoral mediterráneo, especialmente en València y Barcelona.

 

---

Historia

Posiblemente los orígenes de Benassal se remontan a la época musulmana (su nombre significa -según A. Saboya, arzobispo de Beirut- el "hijo del mielero"). Más tarde el castillo de Culla, del que forma parte Benassal, será ocupado, a la fuerza o mediante convenio, por D. Blasco de Alagón, a quien lo cede Jaime I en 1235. D. Blasco otorgá luego a Benassal la carta puebla el 3 de enero de 1239. Bajo el dominio de la Orden de Montesa, formará parte de la Encomienda y Setena de Culla. Dicha orden rodeará la villa de murallas y la dominará hasta 1592, en que el Maestrazgo se incorpora a la corona. Benassal más tarde tuvo un importante papel durante las guerras de Sucesión y las Carlistas, pues en ambas fue plaza fuerte y centro comarcal. A fines del siglo XIX e inicios del XX cobró gran importancia en arquitectura el Modernismo, que ha dejado valiosos testimonios en Benassal, a pesar de que durante la última guerra civil se destruyó una gran parte de su patrimonio monumental, cultural y artístico.

Recorrido urbano

Entre los elementos urbanos que podemos encontrar en Benassal destacamos el conjunto del castillo-iglesia de Sant Agustí de la Mola (s. XIII), núcleo primitivo de la población, donde se encontraba la antigua escuela, y todavía podemos ver un lienzo de murallas de origen Templario y un portal de acceso al recinto con un arco rebajado que sólo en apariencia es de tradición árabe (l'Arc de la Mola). Esta antigua sala capitular hoy es la sede del Museu Arqueològic de l'Alt Maestrat, que expone elementos locales que abarcan desde el Epipaleolítico (8.000-5.000 a.C.), hasta la época andalusí (ss. IX-XIII). También junto a una de las calles de acceso a este primitivo recinto encontramos el edificio del Forn de Dalt (Horno de Arriba), gótico del XIV reformado en 1780.

La Mola da paso al casco urbano medieval, denominado els Carrerons, conformado por estrechas callejuelas con algunas de las casas más antiguas de la villa. Cerca de este pintoresco entramado de calles se encuentra la iglesia de l'Assumpta o Asunción, construida a fines del siglo XVII y ampliada a finales del XVIII. Aunque quedó muy dañada a causa de un bombardeo durante la guerra civil, conserva una buena portada barroca (de 1677) y el campanario, rematado en 1700. En el tesoro parroquial se expone una importantísima colección de ornamentos religiosos góticos y platerescos, así como de orfebrería. En la capilla debe visitarse la Última Cena que realizó en hierro el escultor turolense José Gozalbo.

También puede encontrar el visitante en Benassal interesantes casonas, entre las que destacan la de los Sánchez de Cotanda (s. XVIII), con dos buenas portadas barrocas -la de la capilla, con dos columnas salomónicas exentas perfectamente conservadas-, la de los Grau y la reformada de los Matutano; y descubrir sus antiguas murallas: varios lienzos y las torres -de la Presó, d'en Garcés o del Planet y Redona o del Mur-. También tiene Benassal su ensanche modernista, en las calles de València y la plaza de Balasc d'Alagó, con bellas construcciones que harán que el paseo por su casco urbano suponga un grato reencuentro con las diferentes etapas de la historia.

1. La Mola	7. Torre de la Presó
2. Forn de Dalt	8. Torre d'en Garcés
3. Iglesia	9. Torre Redona o del Mur
4. Casa de Sánchez de Cotanda	*. Capelles
5. Casa de Matutano	*. Els Carrerons
6. Casa de Grau	*. Vista panorámica

Parajes de interés

El término de Benassal se encuentra salpicado por numerosos puntos de interés que sin duda atraerán al viajero. De visita obligada es el balneario de la Font d'en Segures, donde podermos beber sus buenas aguas, y descubrir, entre las sombras de sus árboles, bellos ejemplos de la arquitectura modernista. A poca distancia del balneario encontramos la Nevera, torre bajomedieval donde se conservaba la nieve hasta la llegada del verano, y el Rivet, paraje natural poblado de frondosos robles y encinas, de propiedad municipal, que dispone de una zona de acampada y de una piscina pública.

Otro paraje muy interesante es el que confroma el río Montlleó a su paso por estas tierras, pues a espectaculares acantilados se unen antiguos molinos, batanes, herrerías y fuentes, que denotan una ancestral presencia del hombre en estas tierras, como lo atestiguan en especial las pinturas rupestres del Racó de Nando. En Benassal la presencia árabe ha dejado su impronta en lugares como la Casassa, antigua alquería islámica que se halla en Foies, cerca de la fuente de l'Ombria; en el castillo de Corbó; o en los restos de los asentamientos cercanos a la fuente del mas de Forés. Junto a ellos encontramos edificaciones cristianas como la ermita de Sant Cristòfol (s. XIV, con reformas del XVIII), en la cima del Montcàtil -desde donde se divisa una extensa panorámica-, la ermita de Sant Roc (s. XVI), o la modernista capilla de la Magdalena (s. XX), de curiosa forma y dimensiones.

---

---

Gastronomía y artesanía

Debido a las características climáticas de la zona, la cocina tradicional de Benassal se ha basado en las carnes y productos propios del secano; por ello resultan unos platos fuertes, tanto en sabor como en contenido alimenticio. Entre el amplio recetario destacamos el tombet (guiso de carne con caracoles de monte), la olla, las pilotes (bolos de jamón y raladura de pan y queso), las albóndigas de carne, el ajo arriero, el jamón curado y en general los productos deriavdos de la matanza del cerdo, costumbre muy arraigada en esta villa.