Vivimos en un mundo cada vez más alborotado, con la mayor cantidad de ruidos y de estímulos de toda nuestra historia. Todo esto produce en nosotros intranquilidad, estres, agitación y tantas otras cosas que luego acarreamos a nuestro mundo interior el cual a su vez se llena también de hiperactividad y de ruido innecesario.

Las Meditaciones Silenciosas, a través de una combinación de momentos con Música, lecturas de textos de Maestros y sobretodo del silencio compartido entre todos, generan un ambiente nuevo, de mayor calma y paz tanto exterior como interior, una suerte de “frecuencia natural” en la que el ser vuelve a pulsar y a expresarse con un ritmo más humano, agradable y profundo.

Las Meditaciones Silenciosas son de gran ayuda no sólo para sobrellevar mejor la vida en este mundo desenfrenado y rumoroso, sino una gran herramienta para comenzar un verdadero trabajo de desarrollo interior.