Pierre Menard, autor de Bolaño Soberón,
Fabián |
Mi función se redujo a preparar bebidas,
consultar algunos
libros, y discutir, con él y con
el fantasma cada día más vivo de Pierre Menard,
la validez de muchos párrafos
repetidos.
Roberto Bolaño
1
La narrativa de Roberto Bolaño puede concentrarse en una
expresión: Todo lo real es literatura [i](o
puede convertirse en literatura) y toda la literatura puede influir en la vida.
Creo que esta fórmula doble condensa sus operaciones narrativas.
Esta primera nota sobre Bolaño nos adelanta el centro de su
poética. Recuerdo las palabras de Auxilio Lacouture en Los detectives
salvajes: “Y estaba sentada en el wáter, con las polleras arremangadas,
como dice el poema o la canción, leyendo esas poesías tan delicadas de Pedro
Garfias, que ya llevaba un año muerto, Don Pedro tan melancólico, tan triste de
España y del mundo en general, qué se iba a imaginar que yo lo iba a estar
leyendo en el baño justo en el momento en que los granaderos conchudos entraron
en la universidad”
Auxilio Lacouture es la madre de todos los poetas mexicanos[ii]
y lee la poesía de Pedro Garfias en el baño, en el centro del torbellino de
Tlatelolco. Creo que esta escena es la cifra de las combinaciones fluctuantes
entre vida y literatura en la narrativa de Bolaño. Es decir: toda la literatura
influye en la vida y todo lo real puede convertirse en literatura.
2
Las
ciudades de Bolaño[iii] (México,
Santiago de Chile, Barcelona, París) no festejan lo maravilloso, no cantan la
alegría de la selva o el exotismo del mundo primitivo. La ciudad para Bolaño es
el escenario del exceso, de la lujuria, pero también del asesinato, del golpe
de Estado, de la tristeza colectiva, de la muerte colectiva, del sexo en el
centro de la desesperación y del desasosiego.
Bolaño escribe un elogio de la ciudad y del fracaso en la
ciudad.
3
Piglia dice que Roberto Arlt es el mejor escritor político
porque no busca reflejar ingenuamente la realidad política[iv].
Eso que Piglia dice sobre Arlt se podría decir de Roberto Bolaño.
Bolaño parte del supuesto desde el que parte Piglia (aunque no
lo diga): no hay realismo ingenuo, no es posible el realismo ingenuo. El
escritor realista y el escritor “esteticista” escriben ficciones cuando quieren
“copiar” lo real. Todo relato es una ficción. La mejor manera de escribir sobre
política es no hablar nunca, de manera explícita, sobre política.
4
Menard[v]
es, ante todo, un lector. Es un lector “simbolista” contemporáneo de William
James y de Bertrand Russell. Lee el Don Quijote en los inicios del siglo XX.
Debido a la historia, madre de la verdad, Menard no puede leer
(escribir) el Don Quijote como lo hiciera Cervantes en el siglo XVII. Menard
está condenado por la historia a leer otro Quijote.
Algo fundamental es que Menard, como lector, ha seleccionado
algunos fragmentos del Don Quijote de Cervantes. La lectura es, para Menard,
una operación de escritura. Escribir es un modo de leer. Leer, seleccionar
fragmentos, es un modo de la invención literaria. Menard inventa otro Quijote
por la condena de la historia. Es decir, como lector del siglo XX, está
condenado a inventar, a ser el otro autor del Don Quijote.
Bolaño, lector de “Pierre Menard, autor del Quijote”, inventa
otro Pierre Menard por la condena de la historia.
Pierre Menard es el autor de Bolaño, o mejor sería decir,
Bolaño es el autor de Pierre Menard. Pierre Menard, la teoría de Borges[vi]
llamada Pierre Menard, ha influido de tal manera en Bolaño (en la idea que
Bolaño tiene de la literatura) que éste ha terminado escribiendo como un lector
de Pierre Menard. Una de las claves de Los detectives salvajes está en su bovarismo de Pierre Menard.
5
Los antecedentes de Bolaño: Plutarco, Giorgio Vasari[vii],
Marcel Schwob[viii], Borges.
Bolaño es una especie de Borges que está escribiendo Pierre Menard, después de
leer una versión de Hemingway de las vidas imaginarias de Schwob.
6
Carmen Boullosa[ix]
sugiere que la narrativa de Bolaño entrecruza dos tradiciones: la literatura
fantástica de Silvina Ocampo y Bioy Casares con el realismo de Vargas Llosa.
Creo que esa genealogía es errada. La obra de Bolaño,
especialmente Los detectives salvajes, combina en una trama inextricable
el realismo (el caso de Kafka o de Hemingway es paradigmático) con el
esteticismo de Borges y no con la literatura fantástica.
Bolaño constata a Pierre Menard. Lee a Borges como Pierre
Menard leía a Cervantes. Sin embargo, Bolaño es un Menard que no sólo
selecciona fragmentos de la literatura de Borges sino que además, desplaza su influencia.
Como Carlos Argentino Daneri, como el personaje de Borges, Ulises Lima y Arturo
Belano son lectores y escritores. Sin embargo, como los personajes de Kafka o
de Hemingway, sus destinos están unidos a un aciago mundo de aventuras. Los
poetas “malditos” de Bolaño viven y sienten de manera inapelable la fugacidad y
el sin sentido de la vida.
7
Para Platón, Verdad, Bien y Belleza son una tríada que
conforman una unidad. Bolaño es un antiplatónico. Ruiz Tagle, Lima y Belano no
cumplen el dictamen de Platón. Son escritores que no creen que la belleza se
identifique con el bien.
El problema del mal, uno de los grandes problemas éticos,
asalta continuamente a sus personajes. La droga, el crimen, la traición son las
diferentes formas del mal. Y los poetas o los lectores de poesía viven inmersos
en disyuntivas éticas.
Bolaño problematiza en sus relatos y novelas las relaciones
entre poesía y maldad. Ruiz Tagle, Lima, Belano son artesanos malditos, son
esteticistas y, al mismo tiempo, grandes violadores del orden establecido.
Como Kafka, Bolaño mantiene una apasionada relación con la
literatura. Sin embargo, el chileno cuestiona irónicamente el sistema de la
literatura. Revela el lado oscuro de la máquina: revela los premios y los castigos
del mundo de la literatura.
8
El físico danés Niels Bohr formuló el principio de
complementariedad. El principio, en una versión breve, reza: dos realidades o
dos aspectos de una realidad que han sido considerados como opuestos en la
física clásica, son complementarios para la física cuántica.
Si pensamos en una analogía a partir del principio de
complementariedad, se puede decir que lo que eran rasgos diferentes o poéticas
opuestas para la anterior literatura latinoamericana (la crítica consideraba
como opuestos a la tendencia realista y a la literatura
fantástica-esteticista), en la narrativa de Roberto Bolaño son complementarios.
El esteticismo de Borges y el realismo narrativo no son opuestos para el
chileno sino complementarios.
Entonces digo: Bohr, Borges, Bolaño. Según una lectura atenta
de Borges, según el principio de Niels Bohr, Bolaño ha reformulado las poéticas
de la última narrativa en Latinoamérica.
Bibliografía
·
Cervantes, Miguel de.
2004. Don Quijote de la Mancha, Planeta: Barcelona.
·
Kafka, Franz. 1998. El
proceso, Alianza: Buenos Aires.
·
Platón. 1996. La
república, Altaya: Buenos Aires.
·
Schrödinger, Erwin.
2003. Ciencia y humanismo, Ed. Tusquets: Barcelona.
·
Vasari, Giorgio.
1996. Vidas de pintores, Ed. Sudamericana: Buenos Aires.
Notas
[i]“Mi manera de vivir está organizada únicamente en función de escribir”, le dijo Kafka a Felice Bauer. Bolaño le debe a Borges lo que Borges le debe a Kafka: la afirmación absoluta y pasional de que todo es literatura o de que todo puede convertirse en literatura.
[ii] Roberto Bolaño, Los detectives salvajes, Ed. Anagrama, Barcelona, 2004.
[iii] “A veces sueño que estoy en una ciudad que es México pero que al mismo tiempo no es México”, confiesa Joaquín Font en Los detectives salvajes.
[iv] Ricardo
Piglia, Crítica y ficción, Ed. Seix Barral, Bs. As., 2001
[v] Jorge Luis
Borges, Ficciones, Obras Completas, Tomo 1, Ed. Emecé, Bs. As., 1994.
[vi]
“Decir que estoy en
deuda permanente con la obra de Borges
y Cortázar es una obviedad”, escribió Roberto Bolaño.
[vii] Giorgio Vasari, Vidas de pintores, Ed. Sudamericana, Bs. As., 1996.
[viii]
Marcel Schwob, Vidas imaginarias, Ed. Emecé, Bs. As., 1998.
[ix]
Celina Manzoni (Compiladora), Roberto Bolaño. La escritura
como tauromaquia, Ed. Corregidor, Bs. As., 2002.