1. Un policía estatal fue
quien asesinó al menor en Atenco
Video acusador: El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro presentó el 10 de mayo una grabación con entrevistas a tres integrantes de la policía del Estado de México que participaron en la operación en San Salvador Atenco, y dieron cuenta de la represión y saqueos por parte de las fuerzas estatales y federales : "Los uniformados entraron a los domicilios apuntando a la gente; las armas las ocultaban en el pantalón o en la camiseta", relataron.
Los tres agentes -cuya identidad se mantuvo en el anonimato- revelan que en el operativo policiaco del 4 de mayo pasado, ''algunos elementos portaban armas como R-15, escopetas calibre 38 y 9 milímetros; recibimos orden de golpear a todo lo que se moviera, siempre que no nos vieran los medios (de comunicación), y que entráramos a las casas a sacar a la gente que se pudiera''.
Al mando de la operación estaba ''el ex comisionado de la Policía Federal Preventiva en el sexenio de Ernesto Zedillo, y vicealmirante de la Armada, Wilfrido Robledo Madrid'', quien como comisionado de la PFP dirigió el desalojo de la Preparatoria 3 y la toma de Ciudad Universitaria, esta última ocurrida el 3 de febrero de 2000.
''Eramos más de 3 mil 500 elementos policiacos en el operativo, sólo de los policías estatales, aparte los de la PFP. Al mando de nuestro grupo estaba el comandante David Pintado Espinoza; su clave es Zafiro. Estaba toda la comandancia ''Además estaban todos los comandantes de la región, comandantes de agrupamientos y subdirectores de Tlalnepantla, Ecatepec, Nezahualcóyotl, Chalco, Amecameca. Ahí estaban de todas las regiones del estado de México, de los sectores que se derivan. Todos los comandantes que se juntan.''
-¿Cuántos cuerpos participaron en el operativo de los
estatales? -preguntó el Centro Pro.
-Los sectores, el FAR, Saetas, Caninos, Ases, que es el
grupo especial; son los que vimos entrando a los domicilios apuntando a la
gente, porque sí traían armas. Ellos siempre andan armados, traen granadas.
-¿Cuál es el grupo de choque?
-El agrupamiento de tránsito.
-¿Hubo policías estatales que iban armados? ¿Qué tipo de
armas llevaban?
-Siempre que venimos a los servicios nunca nos da tiempo de
desarmarnos. Nada más nos dicen, apúrense, que vamos a un servicio, y venimos
siempre armados; el arma la ocultamos en el pantalón y la camiseta para que la
gente no se dé cuenta que venimos armados. Cargamos armas R-15, escopetas y 38,
es el armamento con el que cuenta la dirección, pero también hay pocas armas 9
milímetros. En esta ocasión había gente armada.
-Cuando ya entran a San Salvador, ¿cuál fue la
instrucción?, ¿por quién iban?
-Primera, era disolver a la gente que estaba ahí y que no
dejaba entrar a todo el personal a la plaza principal. Después ya viene la
orden, salió del gobierno, de los comandos que tenían que entrar a las casas;
nosotros era entrar y dispersar a la gente.
-¿A los que se encontraban en la plaza?
-Sí, en las entradas. Pero nunca existe un control de lo que
se llega a hacer a los domicilios; a veces en los desalojos todo el personal
llega a saquear, busca qué encuentra: dinero, una joya, todo lo que se pueda
echar al pantalón y no se perciba. En este caso, la federal entró y empezó a
saquear, así con otro personal de la del estado, no nada más la federal.
-¿Quiénes fueron los que entraron a hacer los cateos?
-La policía del estado.
-¿Cómo sabían a qué casa llegar?
-Hubo habitantes del pueblo que fueron señalando los
domicilios donde se percataron que entraron estudiantes a esconderse. También
fueron señalando a los líderes, a personas del grupo; además, con ayuda de
helicópteros se nos iba diciendo más o menos dónde se escondía la gente.
-¿La instrucción era detener a la gente que había
participado con los líderes?
-No, a todo lo que se moviera. Porque inclusive se detuvo a mucha
gente que no tenía nada que ver. Algunos iban a trabajar, otros estaban en sus
bicicletas nada más viendo; también se les subió. A toda la gente que se
encontraba en la calle y a los que fueron sacados de sus domicilios.
-Cuando ya habían tomado control de la plaza y empiezan a
entrar a los domicilios, ¿cuál es el papel del grupo de choque?
-El grupo de choque siempre repliega a la gente, es lo único
que siempre hace. En este caso la consigna ya era entrar a los domicilios y
sacar a la gente que se pudiera. Inclusive nos tocó sacar gente que aún se
encontrabadurmiendo. Jóvenes que estaban dormidos, los agarrabas y los sacabas.
Esa era la orden. Asegurar a todo tipo de gente y asegurarla, ya no importaba
si eran líderes o no, ya no buscaban quién la hizo sino quién la pagara. De
hecho, ni nosotros conocemos a los líderes. Yo creo que por eso hay tanta gente
asegurada.
-¿Cómo se llevaban a cabo los cateos?
-Rompiendo chapas, forzándolas, y entrábamos al domicilio a
sacar a las personas, a golpear, a agarrarlas a toletazos, patadas, asegurarlas
y subirlas a las pick up. En algunos domicilios se les apuntó a las personas y
les dijimos que no se movieran. Las señoras son las que más querían defender a
sus esposos y a sus hijos; en algunos domicilios hubo disparos.
-¿Les autorizaron a usar las armas?
-La autorización en sí, no; simplemente nos dejaron las
armas y si corrían peligro nuestras vidas, pues sí, sí las podíamos usar, que
las usáramos. En este caso fue para amedrentar a la gente que no quería dejar
que nos lleváramos a sus familiares. Esta gente no estaba armada, nosotros sí
entrábamos con armas.
-¿Y el niño que murió?
-Fue por un impacto de 38 especial.
-¿Y esa arma quién la utiliza?
-Nosotros, la policía estatal, y fue un compañero el que
disparó.
-¿Le disparó al menor al calor de los hechos o fue de
manera directa?
-De manera directa. Ya que el niño lo estaba descubriendo
que estaba escondido; dijo que había un policía estatal y éste sacó el arma y
le disparó.
-¿Qué orden les dieron para iniciar el operativo en
Atenco?
-El comandante nos recoge de los servicios que estábamos
cubriendo. Nos dice que teníamos que ir a apoyar al personal que se encontraba
en el servicio. Estábamos esperando órdenes para ver si entrábamos en la tarde
(del día 3) o en la noche.
-¿Cuál fue la instrucción para avanzar hacia San
Salvador?
-Nada más nos estaban moviendo, no nos habían dado la
información, qué problema, en qué consistiría el operativo. Hasta en la noche
nos enteramos que era por unos comerciantes de Chapingo.
-¿Cuando avanzan qué orden les dan?
-Nos quitaron de Chapingo, nos llevaron a otro punto, porque
nos dijeron que ya estábamos muy vistos; nos dice el comandante 'ya estamos muy
vistos, vamos a quitarnos y a escondernos'. Se salió de la carretera como a 10
minutos por un lado de la región de Texcoco, más allá del Limón. Ahí todo el
personal se reunió y esperamos a que llegara más personal de Toluca y otras
subdirecciones.
-¿Cuándo avanzan?
-Ibamos a entrar en la madrugada, que fue cuando llegó casi
todo el personal de Toluca con varios camiones y unidades, pero como ya era de
noche y empezó a llover lo suspendieron para entrar en la mañana del día 4. La
orden era entrar al cuarto para las seis, pero en lo que se juntó el personal y
nos empezamos a reunir, entramos a las seis.
En la larga entrevista los policías dicen que quisieran decirle a la gente que ''me indigna, me da vergüenza todo lo que sucedió. Ya viendo todo en la televisión, la verdad sí es indignante lo que vi, lo que se hizo a ese pueblo, ya que después de todo también somos seres humanos. Hay muchos excesos que no deberían haber pasado. Que la gente esté consciente de que son órdenes de los mandos de arriba. A nosotros nos obligan a hacer ese tipo de trabajo. Al gobierno le quisiéramos decir que ya no es la forma de gobernar, de reprimir a la gente. Que nos den capacitación, pero profesional''.
FUENTE: La Jornada, 11 de mayo de 2006, Víctor Ballinas y
Jesús Ramírez Cuevas. Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro. *******