Algunos, los que estiman que Murphy es un "pesimista", pretenderán encontrar algo de esa bronca oculta que muchos llevamos a flor de piel a raíz del sistema de cosas; otros, los que advierten en Murphy un sagaz y drástico "realista", hallarán alguna perspicacia y un abundante y pretendido sentido del humor cordobés (bueno, al menos esto último es lo que creo me ayuda a impulsarme).

Los primeros serán detractores (siempre los hay), en ellos identificaremos a esos clásicos personajes conservadores, escépticos, sofistas, rancios, circunspectos, serios vestidos de traje, de mente adulta a más no poder, intolerantes, ambiciosos y por supuesto temerosos de Dios.
Los segundos, sé que se divertirán y espero se sumen a la cruzada.

De Este último (Dios) no temo la menor represalia porque seguramente chequeará la página mensualmente para ver las novedades y recordar, con cierta melancolía, que Murphy con su clásica intuición, con sus juicios irónicos y su ética impecable que pone en evidencia cierta dudosa "moral globalizada" que nos invade, actua implacablemente desde el inicio de los tiempos.

Considerará entonces que la solución que dió para el affaire Sodoma y Gomorra no funcionó en el tiempo; que el diluvio fué un gasto de agua al divino botón; que los Diez Mandamientos todavía están para cumplirse y que la humanidad -si tenía que salir mal, saldría mal-.
Lo único que nos falta es que con todo esto llegue a recapacitar (Dios) y decida no volver por sus fueros tal como prometió. Parafraseando a Bart Simpson, si esto llega a suceder..., ¡Yo no fuí, nadie me vió y no podrán acusarme!.

Pero que no todo sea broma.
Nuestro Colegio, después de largo tiempo, todavía no tiene una página Web en la red (la tuvo pero ya no la tiene). Debería volver a tenerla, y bien completa y bonita como correspondería a un Colegio de Arquitectos de primera línea, con arbotantes, molduras y alguna que otra buña. Lugar este donde concurrir a buscar resoluciones, información sobre concursos, vencimientos, festejos, bases de datos útiles y de las otras, acceso a nuestro expediente personal, control de conducciones técnicas, ordenanzas municipales, anuncios de nuestros patrocinadores, posibilidad de opinar, emitir sugerencias, conectarse con otras regionales, promocionar la obra cordobesa en el mundo y, porque no, mandarle un mail a César Pelli o al Gringo Melli (¡Que tal Gringo!) que suena tan parecido, a todos los colegas de la matrícula, que deberían volver a tener su correo gratuito (sin que medie la bochornosa circunstancia de tener que estar al día con la bendita habilitación) y, a nuestros comitentes, brindarles la posibilidad de verificar si su arquitecto no es trucho..., hay tanto garca dando vueltas. etc.,etc.,etc.
     Esta página "del Murphy" de paso viene, inevitablemente, a primerear dicha ausencia. Nadie espere ver en ella pisos entarugados ni mármoles de Carrara, sino tan solo un fondo de rústico revoque y la posibilidad de expresarse sencilla, rápida, libre y democráticamente.
     La página está abierta a todo el "gremio" sin distinción de títulos, rangos o números de matrícula. Si interesa prosperará y sino, habrá sido un buen ejercicio. ("Time is gold, but not here")
Architect N.N. Murphy

Nota:Todas las imágenes de los encabezados tienen como fuente Internet.
Se desconoce a los autores de las mismas, pero se les agradece tanta belleza urbana retratada.